viernes, 22 de septiembre de 2017

La Comprensión Humana


Es evidente que el mundo en el que habitamos es complejo y se hace presente la incertidumbre, el cambio, usos y costumbres, la pluralidad social y cultural, política, económica, inseguridad, pobreza, marginación, el crecimiento vertiginoso de las redes sociales, la forma de comunicarnos y aproximarnos con los demás, de convivir, de actuar, de pensar, de sentir y así mismo, la manera de percibir y vivir los diferentes acontecimientos de nuestro entorno afecta continuamente nuestra vida cotidiana y nuestra historia.

Ante este entorno complejo así como sus estructuras subordinadas que lo conforman y cómo todo ello construyen y transforman el conocimiento humano y la forma de desarrollo individual y colectivamente es una manifestación relativamente nueva dentro del esquema del pensamiento contemporáneo.

La incertidumbre surge con las siguientes preguntas ¿Qué clase de ser humano se esta formando en este siglo XXI? ¿Qué significa ser humano? y ¿Qué es la comprensión humana? Edgar Morin (2001:23), en su texto titulado Los siete saberes necesarios para la educación del futuro menciona que la enseñanza de la comprensión humana es una relación de empatía que intenta ver en la subjetividad del otro.

Sin embargo, qué ironía, desarrollamos conocimientos científicos, se habla de economía, política etc., y que por algún motivo, esto no se aplica a la relación entre los seres humanos y su entorno natural para construir un mundo de paz y armonía. Difícilmente nos damos el permiso de ser el primero quien tome la iniciativa de romper el espacio de silencio para entablar un diálogo o más aún, para pedir una disculpa o aceptar alguna sugerencia del otro.

Si no propiciamos el diálogo no puede haber entendimiento, esto es un problema social. Aprendemos, conocemos por medio del entendimiento de la observación, vivimos en un mundo que emerge en la dinámica de nuestro comportamiento como seres humanos. Debemos entender en vez de dominar, aceptar al otro en la convivencia implica no exigir y la exigencia es anular la legitimidad de la otra persona para que actúe con responsabilidad.

Humberto Maturana (1996:28), en su obra denominada El sentido de lo humano, sostiene que "las cosas no pasan afuera de  los seres, sino adentro de ellos", es decir que el propio individuo con su historia, educación, cultura, pensamiento es el responsable de construir un mundo más habitable usando como arma ideológica su capacidad de diálogo y educarse para la comprensión humana entre las personas como condición y garante de la solidaridad y del bienestar de la humanidad.



jueves, 21 de septiembre de 2017

Saber Y Quizás Comprender


Estudiar la evolución humana es una lente a través de la cual los estudiantes, y la gente en general, puede ver cómo estamos conectados con el mundo. Somos primates, igual que los animales que llamamos simios y monos, aunque nuestro propio camino evolutivo nos recompensó haciendo que camináramos sobre dos piernas y teniendo un cerebro realmente grande. La evolución no es direccional; no se esfuerza para mejor. 

Los animales que están mejor adaptados a su ambiente sobreviven el tiempo suficiente para reproducirse y dejar sus genes a su descendencia. Los rasgos únicos que nos definen como humanos no nos hacen mejores que nuestros parientes primates— simplemente nos hacen diferentes. Los chimpancés están bien adaptados a los ambientes en los que viven y prosperan; de ninguna manera son “menos evolucionados” que nosotros. Es cierto que los seres humanos hemos dominado y alterado el mundo que nos rodea, pero si entendemos nuestro lugar evolutivo en el mundo, se hace más difícil justificar la idea de que somos mejores que los organismos con los que compartimos el planeta. De este modo, el estudio de la evolución humana nos enseña humildad, y hoy en día, todos necesitamos un poco de humildad.

Nos enfrentamos a un cambio climático de una escala sin precedentes a causa de nuestras acciones, poniendo en riesgo la Tierra tanto para nosotros como para el resto de plantas y animales que viven aquí. Debemos empezar a utilizar bien nuestros grandes cerebros para detener los cambios que podrían significar el fin de nuestro camino en este planeta. Hubo especies de homínidos, 
como Australopithecus afarensis, que vivieron durante unos 900.000 años, casi cuatro veces más de lo que hemos existido nosotros, pero finalmente se extinguieron. 

Estos ejemplos enseñan a los estudiantes que nuestra especie no es el sine qua non de la evolución humana. No somos inmunes a las fuerzas que pueden causar la extinción. Ahora podemos ver lo vulnerables que somos a enfermedades epidémicas como el ébola, el VIH, e incluso la gripe común.

Los desastres naturales —en aumento debido al cambio climático— pueden dejarnos indefensos y vulnerables. La tecnología nos puede ayudar, pero no podemos dar por sentado que nos salvará.

Tenemos el deber de enseñar a la próxima generación de dónde viene, evolutivamente hablando, y luchar contra la idea de que somos de alguna forma invencibles y omnipotentes. Los estudiantes deben comprender cuál es nuestro lugar biológico en el mundo. 

La enseñanza de la evolución humana es demasiado importante como para eludirla por miedo a la controversia que la rodea. He visto el momento en el que un estudiante comienza a entender la imagen general de dónde venimos, y es increíble contemplarlo. 

Tenemos que darles más oportunidades para que vivan momentos como este, que pueden cambiar su perspectiva y mostrarles una nueva forma de pensar. Sólo cuando eso suceda será cuando esta generación vea lo precario que es nuestro lugar en este mundo, quizás esto les motivará para hacer todo lo que pueda por evitar que el cambio climático cauce estragos en el único lugar que nosotros, y el resto de la vida en la Tierra, llamamos hogar.



Aptitud


La vida es el conjunto de cosas que nos pasan. Así expresado puede dar la sensación de que podemos ejercer poco control sobre esas cosas y sin embargo ese control puede ser extremadamente grande, pues podemos en gran parte elegir nuestro destino cada instante de nuestra vida. Ahora, puede el lector elegir entre seguir leyendo o no, entre hacer una cosa u otra. La vida está llena de decisiones.

Pero además de controlar esas múltiples decisiones, también podemos modificar nuestra percepción de esas “cosas que nos pasan”. Decía el filósofo estoico que llegó a ser emperador romano Marco Aurelio (121-180), en su obra “Pensamientos”, que “si te sientes dolido por las cosas externas, no son éstas las que te molestan, sino tu propio juicio acerca de ellas. Y está en tu poder el cambiar este juicio ahora mismo”.

Por tanto, podemos modificar la primera frase para adaptarla más a la realidad: la vida es nuestro personal sentimiento de las cosas que nos pasan, estando éstas supeditadas a nuestras actitudes y decisiones. Esas actitudes, esas decisiones y esos sentimientos hacia las cosas que nos pasan forjarán nuestro éxito en la vida Pero este éxito no sólo es medido desde el punto de vista social o profesional, sino también y principalmente desde el punto de vista personal.

En este artículo se proponen un elenco de actitudes que son una guía para alcanzar el éxito personal y la felicidad y disfrutar de nuestra breve existencia en este Mundo. También se hablaremos sobre la llamada “Inteligencia Emocional”, su importancia y cómo aplicarla para resolver problemas de carácter general, y unas reflexiones sobre la felicidad, máximo exponente del éxito en la vida. Como conclusión de esto se enumeran un conjunto de reglas prácticas de actuación a nivel global.

La importancia del optimismo ha sido demostrada, por ejemplo, a partir de pruebas efectuadas por el psicólogo C.R. Snyder de la Universidad de Kansas, entre alumnos universitarios de Estados Unidos. En ese estudio se concluyó que el rendimiento académico universitario de un alumno depende más de la actitud de éste que de su Coeficiente Intelectual (C.I.). Así, vieron que unos buenos resultados académicos eran obtenidos más por alumnos con una actitud positiva y optimista (evaluados a través de test especiales) que por alumnos con una buena nota en el S.A.T., un test con una elevada correlación con el Coeficiente Intelectual. 

El S.A.T. (Scholastic Aptitude Test) es el examen de aptitud escolar que realizan los estudiantes estadounidenses que acceden a la Universidad (el equivalente a la prueba de Selectividad en España).
Según Snyder, “los estudiantes con un alto nivel de expectativas se proponen objetivos elevados y saben lo que deben hacer para alcanzarlos. El único factor responsable del distinto rendimiento académico de estudiantes con similar aptitud intelectual parece ser su nivel de expectativas”.

Goleman añade que el optimismo y la esperanza impiden caer en la apatía, la desesperación o la depresión frente a las adversidades. Los pesimistas consideran que los contratiempos constituyen algo irremediable y reaccionan ante la adversidad asumiendo que no hay nada que ellos puedan hacer para que las cosas salgan mejor y, por tanto, no hacen nada para cambiar el problema. 

Los pesimistas y pusilánimes deberían tener en cuenta que esa actitud no es algo con lo que se nace y por lo que no se puede hacer nada, sino que es una actitud que podemos cambiar a cualquier edad. Uno mismo es responsable de sus propias actitudes y, aunque puede no ser fácil, pueden cambiarse. Uno debe estar siempre dispuesto a mejorarse a sí mismo.


La Imagen Que Irradiamos


“Cuando irradiamos lo que somos, preguntándonos a cada instante si lo que hacemos es lo que deseamos hacer y haciéndolo sólo cuando la respuesta es afirmativa, nuestra actitud rechaza automáticamente a quienes nada tienen que aprender de lo que somos y atrae a quienes sí tienen algo que aprender, que son los mismos de quienes nosotros a la vez aprendemos”

Cuando somos verdaderamente nosotros mismos, resplandecemos. Cuando hablamos y actuamos a partir de una convicción profunda, el entusiasmo que nos habita contagia a los demás. Una palabra cálida genera como por arte de magia una sonrisa en el rostro. El aliento o un elogio dan alas. La generosidad invita a la generosidad, es un antídoto contra la amargura y el negativismo.

El contagio se opera también en nosotros. Las cualidades que descubrimos amplían nuestra propia autoestima. Aumentan nuestra solidez personal. La experiencia de un éxito desarrolla confianza. 

Llegamos a ser más creativos. Unas buenas relaciones nos impulsan a ser más nosotros mismos, en otras relaciones. Cada paso hacia una vida auténtica da el gusto de volver a ello y nos provoca el avance. Esto es el crecimiento.

Esta dinámica de crecimiento nos hace integrar nuestros talentos y nos incita a desplegarlos más eficazmente. Nuestra vida está más equilibrada, más feliz. Nos sentimos más libres y hacemos más fácilmente unas opciones ajustadas. Y es contagioso. La autenticidad llama a la autenticidad. La vida invita a la vida. La solidez interior incita a la solidez.

Irradiar la vida pone a las personas en movimiento y contribuye a construir un mundo más humano


miércoles, 20 de septiembre de 2017

La Luz De La Vida


No dudes jamás de que la vida tiene miles de oportunidades para ti…

Los momentos difíciles que enfrentamos en la vida, nos hacen perder la fe, nos vuelven duros y nos distancian de la esperanza, no se trata de madurar o de dejar de vivir de ilusiones, se trata de tener la certeza de que en la vida la ley es una y única, se trata de amor y todos los seres humanos tenemos la capacidad de salir adelante frente a las adversidades, de luchar por lo que deseamos y de siempre seguir soñando.

“Acepta los riesgos, toda la vida no es sino una oportunidad. El hombre que llega más lejos es, generalmente, el que quiere y se atreve a serlo”
Dale Carnegie

La vida nos invita constantemente a seguir adelante, prácticamente nos obliga, pues queramos o no siempre hay un nuevo amanecer, los días pasan, los años transcurren y las vivencias se van presentando una tras otra y esto no lo podemos detener, por el contrario, debemos tener el optimismo de que la vida siempre nos brinda oportunidades, debemos estar atentos para recibirlas y aprovecharlas, porque el universo fluye constantemente y debemos fluir con el.

En muchas ocasiones caeremos, llegará la tristeza y de seguro pasaremos algunos tragos amargos, pero la vida continúa, para cada ser de este mundo, el amor permanece y se renueva constantemente, se expande y nos enseña día a día nuevos caminos, nos enamoramos mil veces, amamos profundamente, nos apasionamos por lo que hacemos, tenemos hijos, amamos a nuestra familia y sufrimos por sus pesares.

La esperanza en la luz propia de la vida, en su belleza y en la oportunidad misma de existir, es el mejor aliciente para levantarnos día a día y emprender nuevos rumbos, para guiar a nuestros hijos, para alentar a nuestros amigos y solidarizarnos con las personas, no podemos perderla, no podemos abandonarnos a la nostalgia y a la negatividad de las penas, entregarnos a los pesares y a las tristezas, porque todo es pasajero y vivir en el sufrimiento no tiene sentido alguno.

La única persona capaz de tener una influencia directa sobre ti mismos eres tu, de transformar tus pensamientos, de inspirarte y de alcanzar metas, de hacer borrón y cuenta nueva, de vivir en armonía y siempre mirando hacia delante, descubriendo horizontes y develando capacidades, no olvides que nadie es perfecto en el mundo, somos seres humanos, y errar es parte de nuestra naturaleza, pero de allí a pensar que por cada caída somos menos merecedores de las oportunidades de la vida, puede llegar a ser el error más serio que cometamos.

Debemos aprovechar la vida, vivirla a plenitud, creer en las oportunidades, verlas, palparlas y esperar que se presenten, con nuestra apertura y disposición, podremos visualizar lo que se presenta, por el contrario, cuando terminamos arrastrados por las angustias y la negatividad, todo suele nublarse y quedar poco claro ante nuestros ojos, llegando a desperdiciar las oportunidades más maravillosas que la vida nos presenta, por sencillas que parezcan, las cosas más hermosas se aprecian en lo más simple y sencillo.

No te niegues a las oportunidades, ábrete a la esperanza y a la luz, quita toda oscuridad de tu camino, tú tienes ese poder.


Tomar Las Riendas


La opinión de otro es solo eso, la opinión de otra mente que no es la nuestra, con otras experiencias e intereses que no son los nuestros. Todos en nuestro entorno convivimos con personas a las que les gusta opinar, juzgar y proyectar su vida y experiencias en los demás. Creen que sus límites son los nuestros, y que el camino que ellos tomaron fue el mejor y que lo demás es desviarse de lo correcto.

A menudo, estas personas nos intentarán hacer sentir que valemos menos y que no somos lo suficientemente buenos. Pero, responsabilizar a otros de la no resolución de los problemas propios y sentirse responsable de los problemas ajenos son dos formas de no tener el control de nuestra propia vida.

Es posible que en alguna ocasión hayamos pertenecido a uno de los dos grupos o incluso a los dos. No esperes a que los demás hagan las cosas por ti. ¿Si no lo haces tú por ti mismo, cómo esperas que lo hagan otros por ti? Tomar la decisión de manejar nuestra mente y nuestra vida, sin esperar a que los demás respondan es la decisión más madura e inteligente que podemos tomar.
“Dice más de una persona hacia dónde va qué dónde está o de dónde viene”

En la cultura de la inmediatez, los primeros afectados son el esfuerzo y la perseverancia. Queremos muchas cosas y las queremos ya. Sin de planificación, sin tiempo de reposo. Piensa que es en la capacidad para posponer recompensas y gratificaciones donde se diferencian los sueños de los caprichos. Perseverar es hacer lo necesario el tiempo necesario.

Para que nosotros seamos nuestro plan A, tenemos que vivir por nosotros mismos dejando a un lado lo que puedan llegar a decir de nuestro comportamiento. Si tomamos en cuenta todas las opiniones de los demás nunca escucharemos la opinión realmente importante, la nuestra.

No se trata tomar una postura arrogante, sino de no dejar que los demás nos condicionen con sus comentarios o comportamientos. Tomar las riendas de nuestra vida implica autoconocimiento personal y un gran convencimiento de que tenemos que seguir a nuestros propios intereses, intentando en la medida de lo posible dañar los de los demás en el caso de ser lícitos. Piensa que si vives la vida de otros por complacer, las posibilidades de éxito serán más bajas.

“A menudo las personas dicen que aún no se han encontrado a sí mismas. Pero el sí mismo no es algo que uno encuentra, sino algo que uno crea”

-Thomas Szasz-

Libertad De Expresión


El derecho a la libre expresión es uno de los más fundamentales, ya que es esencial a la lucha para el respeto y promoción de todos los derechos humanos. Sin la habilidad de opinar libremente, de denunciar injusticias y clamar cambios - el hombre está condenado a la opresión.

Por estas mismas razones, el derecho a la libre expresión es uno de los más amenazados, tanto por gobiernos represores que quieren impedir cambios, como por personas individuales que quieren imponer su ideología o valores personales, callando los otros.

La lucha por la libertad de expresión nos corresponde a todos, ya que es la lucha por la libertad de expresar nuestro propio individualismo. Respetar la libertad de los demás a decir cualquier cosa, por más ofensiva que la consideremos, es respetar nuestra propia libertad de palabra.

Derechos Human Rights está comprometido con la lucha por la libertad de expresión definida en los términos más amplios. Esta página está concebida como un lugar donde encontrar información básica sobre que significa la libertad de expresión. Recién se inicia, así que apreciamos su colaboración con información, artículos y enlaces que agregar.

El derecho a la libre expresión, y más específicamente la liberta de prensa, están de vez en cuando en pugna con otros derechos. Este es el caso con el derecho a la réplica. Una parte fundamental del derecho a la libre expresión es el derecho a no ser obligado a expresar algo contrario a la propia conciencia. Por lo tanto, el derecho a la réplica - el derecho a contestar a través del mismo medio acusaciones ofensivas - es una limitación clara del derecho a no decir lo que uno no quiere. 

El derecho a la réplica es parte de la Convención Americana por los Derechos Humanos, pero va en contra del derecho constitucional a la libertad de expresión en varios países.

No hay otro límite a la libertad de expresión que la ley. Si no fuera así, y llevado al extremo, cada ciudadano podría imponer sus propias reglas en función de sus valores. Y en ese magma estaríamos expuestos a que la arbitrariedad del poder político decidiera sobre ese derecho fundamental. 

La libertad de expresión, aunque no es absoluta, debe ser entendida de la forma más generosa posible porque la democracia consiste en permitir que hablen los que no piensan como nosotros e incluso reconocer su derecho a molestarnos.