jueves, 7 de noviembre de 2019

El Camino Al Éxito


Verdaderamente quieres éxito en tu vida?

¿Estás dispuesto a emprender el camino que te lleve a ser un gran exitoso y a vivir la vida que anhelas?
Hay muchas personas que precisamente no saben lo que quieren en la vida… No saben cuál es el camino que en realidad quieren transitar.

Algunos simplemente se pasan los años tomando diferentes rumbos, transitando cada camino que se encuentran… Nunca tienen una meta fija y un verdadero plan para conseguirla. Aquellas personas precisamente, son las que no alcanzan el éxito en la vida.

Pero, del otro lado, estás tú, alguien que sí quiere alcanzar el éxito.

Necesitas desear tu éxito desde lo más profundo de tu ser. Muchos se conforman con la vida que viven, muchos son felices con las limitaciones que les impone un jefe, con un sueldo cada mes y con ver pasar sus días yendo del trabajo a la casa, y de la casa al trabajo… Tú debes ser diferente, 

¡Debes anhelar tu éxito, anhelar más!

Tener Mente Positiva
¡Cambiar tu mentalidad es clave en el camino para alcanzar el éxito! Deja de quejarte, deja de pensar que es “mejor poquito pero seguro”… Atrévete a soñar en grande y a mirar nuevos horizontes.

Aprende a tener una mente positiva a pesar de todo.

"Locura es hacer las mismas cosas una y otra vez esperando obtener diferentes resultados"
— Albert Einstein

No dejes para mañana empezar a correr la carrera en busca del éxito… Mientras más rápido empieces, más rápido llegarás.


Confiar En Los Otros


La permeabilidad es una característica innata en todos nosotros, nacemos como un papel en blanco delante de un escritor, predispuestos a ser cubiertos con palabras interesantes.

En el momento que escriben en nuestro papel y sentimos que esa tinta nos impregna, optamos en muchas ocasiones por una actitud inmovilista que no permite borrar ni añadir nada a nuestro escrito que no tenga que ver con lo que ya hay plasmado dentro.

Se nos olvida que esta sociedad evoluciona, cambia, y resulta interesante en cada una de nuestras vivencias, es obvio que la vida tiene un carácter sumativo, todo lo vivido ya forma parte de nuestra “mochila” pero recurrir a esto para no permitirnos a nosotros mismos crecer, aprender y escuchar a otros es un error.

Las emociones son etéreas, tienen esa capacidad de entrar y salir de nosotros independientemente de las capas que pongamos para que no perturben nuestra “calma”, y en este intento de no sufrir o no dejar que otro pueda influir en nosotros, como si lo que ya somos no fuera precisamente fruto de muchos otros que ya pasaron por nuestra vida cuando aún había hueco en nuestro papel para escribir, nos convertimos impermeables a nuevas ideas.

Muchas veces mi imaginación me permite observar como algunas personas inician conversaciones, da igual lo que se digan, como lo digan… no se van a convencer ninguno de nada porque parten de una actitud rígida e inmovilista, muchas veces ni siquiera se escuchan el uno al otro, sólo hablan y piensan en que seguir argumentando.

Puede que sea miedo a que “muevan cimientos” que siempre habían creído imperturbables, o que traten de ocultar inseguridad, como cuando un profesional se cierra ante alguien usando de parapeto su profesión, quizás por miedo a no parecer tan capaz, o más triste aun, por considerar que su título le da potestad para ningunear las ideas de quien no son de su gremio o no tienen estudios, como si pensar estuviese solo limitado a aquellos que han estudiado.

Cuando viene a mi mente esta hipótesis siento tristeza, lamento que no estén predispuestos a aprender de todo lo que se encuentran y de todas las personas con las que tienen la oportunidad de coincidir en la vida, da igual no estar de acuerdo con quien tenemos delante, lo que ya pensamos y sentimos debería ser un filtro para cuestionar si lo que llega nuevo merece un hueco en nuestro rincón de las ideas o simplemente debe ser obviado.

Es habitual fijarnos en lo que hace la otra persona que no nos gusta. Incluso se lo hacemos saber, no siempre de buenas maneras. Pero, ¿qué pasa con todo lo positivo que nos aportan los demás? La realidad es que, cuando se trata de hacer cumplidos, no estamos tan predispuestos a comunicárselos a quienes nos rodean.


¿Esto por qué pasa? El caso es que este hecho puede tener diferentes orígenes. Por un lado puede deberse a que nos dé vergüenza. Tal vez consideramos que la otra persona ya sabe lo que nos gusta de ella y no es necesario decírselo. O puede que no sepamos muy bien cómo transmitírselo sin que nos resulte forzado


Heridas Y Cicatrices


Casi todo lo que escribo son diálogos interiores.
Esos que uno mantiene dentro de sí y que no salen nunca.
A veces, como ahora, ese "nunca" se rompe como una sandía.
Todo sale desordenadamente como en una explosión,
sin otro fin que liberar la pulpa: el corazón.
Es como un círculo cerrado, pero no vicioso, que pretende, exclusivamente,
salir al aire fresco.
Un poco como irse uno mismo...lejos...
Y te llega el aire, tan fresco como el de esta noche de enero.

De toda caída, se sale.
Se acaba saliendo aunque remendado.
Hay cosas que no tienen reparación, y lo sabemos,
pero eso mismo ya es una manera de empezar a salir.
Somos nuestras cicatrices. 

Al final tenemos que seguir cada vez más solos
recomponiendo el alma que son el corazón de la sandía:
Miguitas de pan esponjoso de rojo sangre; 
Chispitas del fuego de una chimenea con piñas secas
y cáscara de naranja junto al tarugo de encina.

Si pudieras acercar la nariz en la explosión
sólo notarías el aroma de la esencia que persiste
más allá del tiempo.
Hay gente que no cree en esas cosas.
Incluso yo lo sé y por eso es un diálogo interior y
salta aquello en palabras sin mayor importancia.

Misterio es para mí que un corazón roto siga latiendo
como un ave que bate sus alas después del impacto;
Como que se pueda vivir sin él, o sin alma,
y lo he visto mucho...y con gran éxito,
es para mi misterio. 

"De poco sirve nada.
De poco sirve todo.
Todo, para nada"

losescritosdegatofenix.blogspot.com/2017


miércoles, 6 de noviembre de 2019

Adiós A Las Condiciones

Hoy ha sido sin duda un gran día

Un día de despedidas, de decir adiós a una parte del camino para poder abrazar otro, con plenitud y confianza.

Y como por “casualidad” de esas que no existen, mis pasos me han llevado hasta una sala donde daban una conferencia de tema improvisado.

Y resulta que el tema ha sido caer en la cuenta de que nos pasamos la vida entera intentando que nos sucedan las cosas que nosotros queremos, lo que pensamos que es lo bueno o lo correcto para nosotros y la mayor parte de ellas nunca suceden o tal vez suceden al revés.

Y entonces ha surgido la gran pregunta, ¿qué condiciones le pones a la vida?
Nos pasamos la vida poniendo condiciones a la propia vida, sin saber que solo podemos fluir si vivimos sin condiciones, confiando plenamente en que lo que sucede es la única cosa que podía suceder y ya es perfecta por si misma.

Amamos con condiciones, trabajamos con condiciones, proyectamos una felicidad que nunca termina de llegar porque hay demasiadas condiciones para poder ser felices.

Y nos pasamos demasiado tiempo con ese….cuando tenga esto, cuando logre lo otro, cuando alguien me quiera, cuando esto cambie….entonces seré feliz.

Y nos volvemos esclavos de nuestras condiciones.

Hace tiempo leí una gran frase: “sin expectativas soy libre”

Dejarse llevar por la magia de la vida, vivir y sentir lo que trae cada instante, lo bueno y lo menos bueno y reconocer que mi vida es ahora, en total rendición, que todo es perfecto, que lo que me sucede aunque no lo entienda es lo mejor para mí.

Construir desde la quietud y el desapego a los resultados.

Si tu haces tu parte, el Universo hace el resto.

Y si no llega lo que esperabas confiar que es porque algo infinitamente mejor va a llegar, mecerte y dejarte llevar por la sabiduría de la vida y por la certeza de que cada nuevo dia vamos construyendo camino.

Y disfrutar de cada paso, con independencia de los resultados pues siempre son perfectos si me rindo a la vida sin condiciones.

Y tú?¿ Que condiciones le pones a la vida?


El Servicio Voluntario


¿Por qué es importante servir a los demás?

Porque tú tienes una misión especial en este mundo, posees ciertos talentos fascinantes que el mundo necesita que explotes de buena manera para ponerlos al servicio de los demás, lo que al mismo tiempo te servirá para servirte a ti mismo.

El mundo está diseñado a la perfección, porque cada persona tiene la opción de trabajar para alcanzar la autorrealización y encontrar un espacio satisfactorio para todos.

Cuando alguien encuentra su pasión y pone todo su interés en profundizar en esa labor, llegará un momento en que ese deseo traspasa los límites conscientes y son otras fuerzas las que dirigen el camino, así se dan resultados fuera de lo común y el mundo obtiene grandes ganancias con ello.

Lograr el éxito siempre será producto de servir a los demás, por eso debes esforzarte con todo tu ser en cumplir tus sueños, se enfatiza en la importancia de crear una atadura mental positiva en relación con las metas que te has propuesto, esto se logra creando la mayor cantidad de argumentos favorables a tus emprendimientos, entre muchos la idea que éxito es sinónimo de responsabilidad y servicio a los demás.

¿De qué forma puedes aumentar la consciencia para el servicio a los demás?
Una buena estrategia está en saber que el poder de Dios está en tus manos, se te ha otorgado libertad para realizar un trabajo. El conformismo, pereza y apatía son síntomas que no entiendes la importancia de tu labor, entre mayor empeño pongas a tus ideales te sentirás mucho mejor.

Cuando te sientes útil experimentarás mucha satisfacción, esto solo es posible con el servicio a los demás. Puedes dedicarte a una labor con mucho contacto con la gente como el caso de un maestro, también podrías estar alejado como un investigador, pero en ambos casos se realiza una tarea que siempre beneficiará a la humanidad.

La calidad del servicio a los demás siempre retornará a ti: Algunos lo llaman el karma, otros la ley de la atracción, etc. Pero la verdad es que tu mundo es un solo campo de energía y lo que entregas siempre retornará a ti de una manera u otra, si das un mal servicio tú mismo te dices “no me importa la gente”, esto traerá repercusiones en tu vida, porque no estarás a la altura de los grandes éxitos.

Usa tu capacidad de visualizar para crear en tu mente el mejor producto o servicio posible, lo conseguirás por etapas, al inicio es normal que no sepas como hacerlo bien, pero con la experiencia, ensayos y errores, tienes que encontrar la forma adecuada de realizar tu labor con eficiencia.


El servicio a los demás en un principio que debes abrazar, si lo tienes muy claro en tu pensamiento, llegarás muy alto, recibirás respeto y admiración, porque te entregarás como persona a tus proyectos.


Dichos Populares

*Los dichos populares están siempre presentes.
*”Hay gato encerrado”, “a caballo regalado no se le miran los dientes”, entre otras, dónde nacieron y qué significan.

Un remate, una frase, un resumen en pocas palabras. La mayoría las escuchó en boca de abuelas y padres y muchos las usan cotidianamente para sintetizar o simplemente intentar sacarle una sonrisa al otro. A pesar de que todos entienden lo que significan poco se sabe del origen de las frases más utilizadas hoy en día.

Uno de los más comunes es hay gato encerrado” y suele utilizarse para decir que hay una causa o razón oculta. Su origen se remonta al Siglo de Oro español donde era habitual la utilización de la piel de gatos como bolsas para ocultar dinero de origen desconocido.

 “A caballo regalado no se le miran los dientes”, es otra de los dichos populares más usados. La parte final de la locución proviene de una antigua costumbre de revisar la dentadura de los caballos para comprobar el estado de salud del animal.

Alguna vez cuando se quiere decir que no hay ni una cosa ni la otra es casi una costumbre escuchar, “ni chicha ni limonada”. La chicha es una bebida alcohólica que surge de la fermentación del maíz con agua azucarada, de este licor, nace el dicho, es decir, que no hay ni bebida alcohólica ni bebida refrescante.

Mientras tanto en plena organización de una fiesta o evento, en la que se planifican grandes gastos es habitual que se diga hay que “tirar la casa por la  ventana”. Esta frase nace en la costumbre que existía en el siglo XIX de tirar, literalmente, por la ventana todos los objetos de una casa cuando alguien ganaba la lotería nacional española.

"No hay tu tía", pero sí explicación

Cuando un problema no tiene solución o alguien se enfrenta a un obstáculo al cual no se le puede encontrar salida es normal el famoso dicho “no hay tu Tía”. Su origen proviene de un medicamento llamado la "atutía" o "tuthía”  que utilizaban los árabes para curar todos los males. El dicho deriva de "no hay atutía" y se empleaba para indicar que una enfermedad no tenía remedio ni aplicando ese preparado.

También, es muy frecuente oír decir a las abuelas “a falta de pan buenas, son las tortas” cuando se quiere expresar que hay que conformarse con algo de menos valor al no poder alcanzar el ideal. La expresión se remonta a la antigüedad cuando no había pan recién salido en las panaderías, la gente se tenía que conformar llevándose tortas.

Otra frase,“andar de capa caída”, se dice cuando se quiere hacer notar que alguien esta desanimado, abatido. En la época en que los hombres usaban capa, tenerla caída hacia un costado, era síntoma de mal gusto.

En cambio, se acostumbra usar “está armado hasta los dientes” cuando alguien tiene, desde ya, armas por demás; esto se remonta a los antiguos piratas quienes llevaban cuchillos en los dientes cuando abordaban las naves enemigas para tener las manos libres.

Seguro que cuando estos piratas llegaban a la nave enemiga, no faltaría quien gritara “se armó el Tole Tole”.  El origen de esta expresión sería el desorden provocado por los judíos ante Poncio Pilatos, pidiéndole que crucificara a Jesús, gritando "¡Tolle, tolle, crucifige eum!"("¡Quítalo, quítalo, crucifícalo"!).

Otro de los dichos populares más comunes es “a rey muerto, rey puesto”, que significa que nadie es imprescindible y que todo aquel que se fue puede ser remplazado. Su origen proviene de la realeza, en donde cada vez que muere un rey inmediatamente es elegido su sucesor

Complementos


El hombre y la mujer se complementan físicamente: para poder ser fecundos y engendrar hijos; el hombre tiene por lo general, más fuerza física que la mujer, pero la mujer suele ser más resistente a las enfermedades y al dolor.

Hemos llegado a un momento en que la técnica nos ha permitido estudiar el cerebro masculino y el femenino, y comprobar que son muy distintos, desde el tamaño, hasta la manera de funcionar y el tipo y cantidad de conexiones entre los dos hemisferios que los conforman.

Nos complementamos psicológicamente: porque pensamos y actuamos diferente, por ejemplo, la mujer habla mucho y el hombre no, la mujer tiene muy desarrollada la intuición y el hombre es analítico y concreto. También percibimos de manera distinta las cosas.

Nos complementamos espiritualmente porque la mujer es más espiritual que el hombre y tiene que ayudarle a crecer en este aspecto, porque a él le cuesta mucho, ya que ellos son muy prácticos y les gusta “hacer” cosas.

 Estos son sólo algunos de los principales modos en que somos distintos, sin que esto signifique que así tenga que ser, pero es como se dan las diferencias por lo general o el la mayoría de los casos.

La complementariedad no sólo se da en la pareja o en la familia, sino que en todas las actividades humanas: también en la vida profesional y social, si se comparten las actividades entre hombres y mujeres, van a funcionar mejor, pues se ven puntos de vista diferentes y se enriquecen todos.
El hombre y la mujer se complementan físicamente: para poder ser fecundos y engendrar hijos; el hombre tiene por lo general, más fuerza física que la mujer, pero la mujer suele ser más resistente a las enfermedades y al dolor.

Hemos llegado a un momento en que la técnica nos ha permitido estudiar el cerebro masculino y el femenino, y comprobar que son muy distintos, desde el tamaño, hasta la manera de funcionar y el tipo y cantidad de conexiones entre los dos hemisferios que los conforman.

Nos complementamos psicológicamente: porque pensamos y actuamos diferente, por ejemplo, la mujer habla mucho y el hombre no, la mujer tiene muy desarrollada la intuición y el hombre es analítico y concreto. También percibimos de manera distinta las cosas.

Nos complementamos espiritualmente porque la mujer es más espiritual que el hombre y tiene que ayudarle a crecer en este aspecto, porque a él le cuesta mucho, ya que ellos son muy prácticos y les gusta “hacer” cosas.

 Estos son sólo algunos de los principales modos en que somos distintos, sin que esto signifique que así tenga que ser, pero es como se dan las diferencias por lo general o el la mayoría de los casos.

La complementariedad no sólo se da en la pareja o en la familia, sino que en todas las actividades humanas: también en la vida profesional y social, si se comparten las actividades entre hombres y mujeres, van a funcionar mejor, pues se ven puntos de vista diferentes y se enriquecen todos.


La Identidad Personal

Para tener un criterio de identidad personal es necesario desarrollar el concepto de intimidad, el cual se adquiere en la infancia cuando poco a poco el niño aprende a distinguir entre la idea de yo y los demás. Cuando se consolida la noción del yo, la persona ya puede empezar a comprender quién es. Pensamos y observamos lo que nos rodea externamente y paralelamente estamos en un cuerpo, con unos sentimientos e ideas en relación con nuestro interior. Es una especie de diálogo íntimo y este rasgo es una parte de nuestra identidad personal.

Cada ser humano es único en medio de semejantes que no son idénticos entre sí “En este mundo cada persona representa algo nuevo, algo que nunca ha existido todavía, algo único y original. Es deber de cada uno el saber... que nunca ha existido en el mundo nadie semejante a él, porque si hubiese existido alguien semejante a él, ya no sería necesaria su existencia. Cada persona en el mundo, es una cosa nueva y está llamada a realizar su peculiaridad. Y eso es, precisamente, lo que cada persona tiene que defender de sí misma.

La cultura es otro elemento esencial que compone la identidad personal de una persona, ya que a través de ella, las demás personas logran conocer al individuo por sus actos, e identificarlo por las tradiciones que éste práctica, si se encuentra en otro país, aunque hay personas que independientemente cual sea su tradición, opta por adoptar las de otro país, sin embargo aun así se distingue cuál es su lugar de procedencia.

La identidad colectiva es aquella que el ser humano crea por si solo y que trae por nacimiento como el habla y la familia, pero somos nosotros los que creamos nuestra misma identidad ya que somos nosotros solos los que tomamos nuestras decisiones individualmente, por ejemplo; a qué partido político pertenecer , en que creer, ya que nadie nos obliga a creer en lo que creemos…Por lo tanto creemos que la identidad colectiva es aquella por la cual te das a conocer ante la sociedad o ante el mundo exterior exponiendo todo tu potencial ósea que la identidad colectiva es todo aquello a lo que tu perteneces y lo que los demás ven en tu persona seas buena o mala,.. Te reconocen por lo que eres.

A veces damos importancia a todo lo que la gente dice de nosotros como persona, a veces aciertan, a veces no, tanto que esto afecta nuestra identidad personal especialmente nuestra autoestima, la identidad colectiva no se trata de cómo te tilde la gente sino de cómo aportas a la sociedad o como te haces un ser sociable o en que participas para darte a conocer ante ella, eres la persona que la sociedad hace o crea dependiendo de los grupos a los cuales perteneces.

La identidad es lo que permite que alguien se reconozca a sí mismo. En consecuencia, la identidad personal es todo aquello que nos define como individuos. Tenemos conciencia de la identidad porque tenemos memoria, sin ella sería imposible nuestro propio reconocimiento. De hecho, cuando alguien pierde la memoria pierde el elemento esencial de sí mismo.

Aunque estemos permanentemente cambiando desde un punto de vista físico y cognitivo, es evidente que en el proceso de transformación hay algo que se mantiene inalterable: la convicción de que somos la misma persona en todo momento. Es una idea algo paradójica, ya que cambiamos cada día y al mismo tiempo no cambiamos.

martes, 5 de noviembre de 2019

Perezosos

“Todas las personas hemos conocido la pereza.

Quizá haya sido compañera en tu vida durante un largo periodo de tiempo.
Quizá sólo apareció en ocasiones y después desapareció, sin dejar huella”

La pereza es amiga de la comodidad, de lo conocido, de no arriesgarse.
Cuando nos acompaña, sólo queremos permanecer con ella, en soledad, sin hacer nada, sin movernos, sin investigarY no es casualidad, que precisamente cuando viene a visitarnos la pereza, es cuando más necesitaríamos salir, arriesgar, probar cosas nuevas…Se trata de una “errónea estrategia emocional y mental”, que aparentemente nos protege de todo aquello que nos desborda, que nos hace sentirnos mal, que nos da miedo…

Por eso, la pereza aparece en nuestras vidas, precisamente, cuando estamos desbordados, cuando los problemas son demasiados, cuando todo nos hace daño, y no sabemos qué hacer, o no queremos hacer nada…

La pereza, nos protege de cualquier movimiento, porque dispone a todo nuestro cuerpo y a nuestra mente al “descanso”.
Pero, ¿realmente descansamos, estamos tranquilos? Sólo el recuerdo de la pereza, ya despierta en nosotros una sensación incómoda, de malestar…sabemos que “algo debemos hacer”, pero como no sabemos ni por dónde empezar, seguimos ahí… tirados en el sofá, dejando pasar los días, sin tomar decisiones, sin dar pasos, sin arriesgar nada, sin hacer deporte, sin buscar trabajo, sin estudiar, sin dejar de fumar…

Si su compañía no es agradable, nos irá mejor sin ella.Lo que sucede es que ahora, después de un tiempo “perezoso”, no es fácil.

Te propongo hacer un plan, en primer lugar, algo sencillo, no muy arriesgado ni atrevido, con el fin de comenzar a moverte, a salir… para caminar hacia algún destino sencillo.

Y en segundo lugar, imponte a ti mismo cumplirlo, cada día, sin excepción.Esto generará satisfacción y movimiento, y el movimiento genera más movimiento, que es el motor que necesitamos para dejar atrás la pereza.

Si en tu casa, un día entró la pereza, déjala sola, sal de allí, proponte un plan y cúmplelo. Invita en cambio a tu fuerza de voluntad, con ella conseguirás caminar, realizar planes, motivarte hacia el cambio…

Cultivar la fuerza de voluntad
La fuerza de voluntad hay que cultivarla, hay que invitarla y cuidarla, para que se quede contigo. Lo único que necesitas es tener la “voluntad”, es decir, “querer” dejar la pereza, y retomar tu vida .Para ello, emplea todas “tus fuerzas”, ésas que existen dentro de ti cuando algo te importa mucho y vas a por ello. En la medida que sacas esa “fuerza interior”, sentirás que más tienes, que eres fuerte, y que si te lo propones, nada ni nadie puede pararte, ni volverte a encerrar en la pereza, porque puedes conseguir lo que quieras.

Y lo mágico de éste descubrimiento, es que aunque en un principio, te costó un esfuerzo, te lo tuviste que imponer, poco a poco, vas reconociendo, que la fuerza de voluntad nace sola, porque son muchas las cosas que te motivan y te ponen en movimiento, y sin necesidad de ningún esfuerzo, lo haces.


Por eso, el regalo de éste comienzo “forzado”, es la satisfacción y la motivación de “ponerse en acción”, que te hará sentirse muy bien contigo mismo.



Nuestro Aporte

Todas las experiencias son una oportunidad para crecer


Cada persona lleva su propia carga, según la filosofía china toda persona tiene 89 problemas, estos los tiene que resolver en el transcurso de su existencia en la tierra. Son precisamente estos problemas y situaciones difíciles las que dan sabor y sazón a la vida. Es muy difícil querer vivir la vida de otros, 
cada quien tiene exactamente los medios para poder salir adelante con sus posibilidades. 

Por más que escuchamos problemas dolorosos de otras personas, al final del día no queremos, ni podríamos vivir con estos. Aprender a tomar todo lo bueno y lo malo de las experiencias que nos toca es una receta que no falla para poder vivir en paz con uno mismo.

No existen las coincidencias, ni los accidentes; lo que tienes y lo que te pasa es justamente lo que necesitas para crecer y ser mejor.

La grandeza de la persona se logra solo con el trabajo personal y consiente de quererse superar diariamente.

Tú tienes lo que necesitas para ser grandioso en tu entornoCada persona nace, en el tiempo, el lugar, la familia y las circunstancias que necesita para poder desarrollar sus capacidades y lograr una gran vida. Todo es parte del plan.

Cada quien tiene su propio destino, misión y propósitoNo hay que envidiar ni desear la vida de otros. En lugar de ver y comparar lo que no se tiene; es importante agradecer y valorar lo que si se tiene, de esta manera, crece la apreciación y el verdadero amor a la vida.

Cada uno tiene que vivir bajo su propio estándar. No se trata de tener más sino de ser mejor cada día. El entorno y las situaciones de cada quien, son tan solo pruebas que se presentan para poder crecer y desarrollar el carácter y las potencialidades. Donde lo único que importa son los logros, el crecimiento y el aprendizaje.

La vida es un gran bufet donde cada uno elige qué quiere: imagina una larga mesa donde en lugar de comida hay actitudes, emociones, sentimientos, valores y responsabilidades... Escoger cada una de ellas está en ti; solo tú tienes el poder de tomarlas.

Habrá mucha gente que te sugiera qué tomar de ese bufet, pero quien hace la decisión final eres tú.
Este gran bufet nos ofrece: alegrías, tristezas, desafíos, éxitos, fracasos, responsabilidades, compromiso, lealtad, enojo, fe, amor, tiempo, malos hábitos, buenos hábitos, perseverancia, constancia, actitud, rencor, perdón, armonía, disciplina, enfoque, visión, sueños, pensamientos negativos, determinación, oportunidades, respeto, confianza, autoestima, optimismo, paciencia, tolerancia, pasión, pensamientos positivos, creencias, etcétera... pero la única persona responsable de los resultados de acuerdo a tu elección siempre serás tú, no puedes culpar a los demás de tus resultados.

Yo te invito a reflexionar sobre qué papel estás jugando, al final, todos estamos aquí de paso y nuestra misión es dejar un mundo mejor, y eso se logrará poniendo cada uno de nuestra parte y sembrando una semilla que con el tiempo dará frutos.


Nuestra Mente


La mente humana es un verdadero crisol de enigmas. Aún con todos los avances que ha tenido la cienecia, son muchas más las preguntas que las respuestas en torno a la forma de funcionar nuestro cerebro y a todo el partido que le podemos llegar a sacar.

Aunque parezca imposible de creer, la mayor parte de las cosas que hacemos con nuestra mente todavía no tienen una explicación definitiva. La ciencia ignora los detalles de por qué y cómo soñamos, cómo se forman exactamente los recuerdos y qué mecanismos hacen posible el desarrollo y el cambio de las emociones, entre otros.

“La mente se estira por una nueva idea o sensación, y nunca se contrae de nuevo a sus antiguas dimensiones”
-Oliver Wendell Holmes-

Cada día se realizan innumerables experimentos en el mundo, todos con el objetivo de desentrañar los hilos ocultos que mueven nuestra mente. Y así mismo, constantemente aparecen nuevos datos, que nunca dejan de maravillarnos. Estos son 9 de esos datos curiosos.

Mecanismos ocultos de la mente
A continuación te presentamos algunos mecanismos ocultos de la mente:
Se ha comprobado que las personas logran establecer una mayor empatía con quienes les tocan el antebrazo y/o les hablan por el oído derecho, durante una conversación. Así mismo, que cuando las personas imaginan o inventan una respuesta, tienden a mirar hacia arriba y a la derecha.

Si verdaderamente tratan de recordar algo, mirarán hacia abajo y a la izquierda. También se sabe que las personas tienen más posibilidades de conseguir un empleo profesional si se presentan con gafas a la entrevista. Los anteojos se interpretan inconscientemente como una señal de especialización e inteligencia.

l tiempo promedio que tarda una persona “normal” en olvidar un gran amor es de 17 meses y 26 días. De la misma manera, una investigación estableció que al sufrir una quemadura se activan determinadas redes cerebrales. Lo curioso es que la misma red se activa cuando sufrimos un rechazo amoroso.

Las personas deprimidas tienen un volumen tres veces mayor de sueños, que el de las personas que no están tristes. Y en cuanto al dolor físico, el mirar una fotografía de la persona amada puede reducir un dolor físico hasta en un 44%. El efecto es casi idéntico al de un analgésico común.

Curiosidades del cerebro
El cerebro nunca dejará de sorprendernos, algunas características curiosas relacionadas con este órgano son:
El cerebro de los niños que han sido expuestos a violencia familiar tiene los mismos patrones de actividad que el de los soldados que han combatido en una guerra. La verdad es que cada pensamiento es, literalmente, una vía física que se construye dentro del cerebro. 

Cuantas más veces tengas ese pensamiento, más profunda es la huella que deja esa vía y más fácil que vuelva a llegar a la mente. Por eso es bueno tener pensamientos alentadores continuamente.
Los videojuegos pueden generar una adicción tan fuerte como la de la heroína. 

Seguramente esto tiene que ver con los mecanismos que activan la voluntad, porque, la fuerza de voluntad depende en gran medida de la cantidad de oxígeno y glucosa en tu cerebro. Cuando estás fatigado, o tienes hambre, te será más difícil decir “no” o perseverar en algún objetivo.

Y hablando de fatiga, se estima que una persona promedio pierde la concentración después de 90 minutos continuos de estar enfocada en algo. De ahí la importancia de las pausas.

En nuestros cerebros las neuronas se conectan de muy diferentes formas. Más exactamente 10 veces elevadas a un millón. Y es que si el cerebro fuera un disco duro, estaría en capacidad de almacenar hasta 4 terabytes de información. De hecho, cada uno de nosotros tiene alrededor de 70 mil pensamientos al día, aunque varios de ellos se repiten.

No por nada el cerebro pesa tan solo 1.5 kilogramos en promedio, pero consume el 20% de la energía y del aire que emplea el organismo.

En un estudio llevado a cabo en los Estados Unidos, se comprobó que quienes se alimentan con comida sin conservantes ni colorantes artificiales, lograban obtener puntuaciones en los test de inteligencia un 14% más altas. Por lo tanto, lo que comemos sí afecta la forma en la que nuestro cerebro opera y se configura


Rumiando


¿Eres de las personas que piensa todo a fondo, antes de actuar? Entonces quizás es momento de dejar a tu cerebro en paz. No es que pensar sea malo, todo lo contrario, pero pensar demasiado puede ser un obstáculo en el camino para alcanzar lo que deseas.

 Resulta ser que nuestro cerebro es capaz de operar a nivel inconsciente con una gran efectividad. Esto es posible porque aprende con rapidez y luego es capaz de ejecutar acciones “en automático”. Es lo que el neurocientífico David Eagleman llama “los programas impresos en el sistema”. 

Con ello quiere decir que una vez que nuestro cerebro aprende a hacer algo ya no le dedica tanta energía a repetir esa acción, y lo mejor, es capaz de mejorar el desempeño a medida que avanza en la práctica.

Tu clase de yoga. Las primeras sesiones obligan al cerebro a aprender una cantidad de poses, un ritmo de respiración, y de paso, a concentrarse en el presente. Nada fácil. Pero a medida que avanzas en la práctica se desarrolla una memoria que mueve al cuerpo sin necesidad de pensar en cada detalle. Así llega el momento cuando vas de una pose a otra simplemente porque el cerebro sabe lo que tiene que hacer. Lo mismo sucede con el tenis o el manejo de un auto. Así se desarrolla lo que en artes marciales se llama munshi no shin o “mente sin mente”. Es acción sin intervención del pensamiento racional y consciente.

Lo que sucede a partir de ese instante es que comienzas a fluir con la acción y tu conciencia es capaz de entrar en terrenos más sutiles y enfocarse en la profundidad del presente. Paul Zehr, profesor de neurociencia y autor de Black Belt Brain, sugiere que no se trata de no usar el cerebro, al contrario, la idea es usarlo de manera más efectiva y eficiente. Para ello hace falta dejar que nuestro sistema nervioso trabaje libremente en ciertas acciones sin estar intentando hacer las cosas a propósito y tras mucho pensar.

 Otro ejemplo: cuando los deportistas caen en un bajón suelen decir “es que estoy pensando demasiado en lo que hago mal”. Con esto se refieren a que están tan pendientes de sus movimientos que no dejan espacio a la sabiduría del cuerpo. Y acá es donde viene una aclaratoria importante: este estado de fluidez en el presente, que permite la acción del inconsciente, es posible luego de haber hecho el esfuerzo de aprender y practicar mucho. No cae del cielo.

 Lo que nos trae de vuelta a la costumbre de pensar mucho las cosas antes de actuar. Porque si bien la conciencia de nuestras acciones y la atención que surge de la mente racional es vital para desenvolvernos en el presente, no podemos estar constantemente “metiéndonos en el camino” de nuestro cerebro. 

¿La razón? Este órgano maravilloso es más complejo y profundo que nuestros pensamientos. Estos son, a fin de cuentas, una manifestación de la mente, pero no lo son todo. Nuestro cerebro está conectado de forma más integral a nuestro cuerpo y alma (si crees en ella).

¿Le dedicarías unos minutos a pensar en esto? No lo pienses demasiado y prueba. Déjate fluir, abriéndole la puerta a tu intuición y sabiduría interna, y lo más importante, disfruta el paseo.


 ¿O acaso eres también de esas personas que van rumiando pensamientos cuando navegan río abajo?


La Manía De Mentir


La mentira es algo que se da naturalmente: los animales, por ejemplo, usan el camuflaje para esconderse de los cazadores o capturar a su presa, representando así una estrategia para que las circunstancias giren a su favor. En el caso de nosotros, los seres humanos, la mentira se emplea recurrentemente; pero cuando se llega a practicar de manera exagerada se conoce como mitomanía.

Si se acostumbran a hacerlo, dichas personas ni siquiera lo piensan, únicamente buscan inventar y contar historias destinadas a proyectar una mejor imagen de sí mismas. Esto implica un abuso de poder, ya que al inducir una idea falsa se ponen como meta obtener alguna ventaja.

Se ha establecido que detrás de este fenómeno se halla la inseguridad y los deseos de sobresalir, pues las personas que mienten creen que si se presentan como son nunca alcanzarán sus objetivos. “Son seres con baja autoestima que tratan de compensarse. Si creen que no tienen lo suficiente deben crearlo a base de engaños”

Pero aquí la interrogante es: ¿Cómo reconocerlos? Aunque no lo crean, es simple. Para contar falacias es necesario sustentarlas en otra afirmación, y así sucesivamente. Quienes inventan demasiado les resulta imposible no olvidar sus argumentos en algún momento y, por consiguiente, contradecirse. Adicional a esto, para relatar algo que nunca pasó debe considerarse que el otro sea incapaz de darse cuenta.

“Nos pueden engañar una, dos o tres veces, pero tras una serie de embustes es fácil detectarlos”, opinó Mercado Corona.

Esto hace que quienes padecen mitomanía tengan una vida inestable, ya que no persisten en sus empleos y sus relaciones interpersonales no son duraderas. “Nos desagrada tratar con un mentiroso; nos generan incertidumbre. Por lo tanto, ellos se crean problemas y si no son buenos al elaborar sus artificios experimentan ansiedad y miedo de que se descubra lo endeble de sus historias”

Además, se sienten incómodos con quienes son y potencian ficciones de ellos para sentirse bien con y ante los demás. Ya concretadas estas acciones, sobre todo si llevan haciéndolo durante mucho tiempo, les cuesta mucho aceptar que no han dicho la verdad y prefieren seguir en la falsedad.

Ante ello ¿Qué podemos hacer ante un mentiroso patológico? Lo primero sería confrontar las contradicciones, lo segundo sería alejarse de la persona. La investigadora agregó que lo incongruente es que establecen una imagen ficticia a fin de no ser rechazados; y si son descubiertos generan repulsión hacia sus similares.


Por lo anterior, es fundamental tratar la mitomanía. La académica abundó que el tratamiento recomendado incluye una psicoterapia enfocada en la cognición (para alejarse de este mal hábito) y trabajar en los aspectos emocionales, pues quizás actúe como el detonador de la mitomanía.