viernes, 19 de junio de 2020

La Interacción


El experto en transformación digital Marc Vidal cree que en la relación entre humanos y robots hay aspectos culturales que, de momento, no se han podido salvar, como la "sensación de rareza" que esta interacción produce en las personas o que "el desconocimiento de la verdadera inteligencia de un 'cobot'" sea motivo de inseguridad.

"La empresa Rethink experimentó con bocas sonrientes en sus robots para hacerlos más humanos pero el resultado fue un fracaso total. Las personas veían sonrisas falsas y desconfiaban del bicho en cuestión", pone como ejemplo
.
Para definir esta nueva tendencia, el director del Área de Fabricación Avanzada del centro tecnológico Tecnalia, Rikardo Bueno, prefiere hablar de una robótica más autónoma y flexible.

Autónoma en el sentido de que los robots son capaces de percibir el entorno, adaptarse al mismo, tomar decisiones y ejecutar acciones en un entorno cambiante.

Y flexible, porque, frente a los que hay ahora en las fábricas, "enjaulados, haciendo siempre lo mismo y que hay que reprogramar por completo para que hagan algo diferente", los nuevos robots son más sencillos de programar cuando se les asigna una nueva función.

Reconoce, no obstante, que esa nueva robótica aún está en sus inicios y que pueden pasar entre 10 y 15 años hasta que se implante de forma generalizada.

En su implantación, añade Iglesias, influyen los cambios en los hábitos de los consumidores, que reclaman productos cada vez más personalizados y plazos de entrega más cortos, lo que obliga a series más cortas y flexibles de fabricación.

Por sectores, el aeronáutico, donde hay mucha operación manual que requiere de mayor flexibilidad en las tareas productivas, es uno de los más adelantados en incorporar este tipo de soluciones, campo donde Tecnalia ha trabajado, por ejemplo, con Airbus.

Otro terreno pionero de aplicación es la intralogística, es decir, la circulación de mercancías dentro de las propias fábricas, "donde al final vemos cada vez más vehículos autónomos que son capaces de ir de punto a punto evitando obstáculos", señala Bueno.

"También los veremos en exteriores, en puertos. Podremos ver portacontenedores robotizados o grúas robotizadas", añade Bueno.

Frente a ese número creciente de actividades que pueden ser asumidas por robots, Vidal cree que "no peligra el empleo" en general, sino "el empleo actual", y "el desafío es entender en qué consistirá el nuevo".

"Tu trabajo no te lo quitará un robot, en todo caso te lo quitará una persona que se lleve mejor que tú con un robot", afirma el experto, para quien es "fundamental" aprender a relacionarse con "automatismos colaborativos".

En ello coincide la analista de IDC Marta Muñoz, para quien "el robot no va a desplazar al ser humano por completo", sino que, "durante muchos años" van a convivir robots y humanos y unos y otros tendrán que aprender a trabajar juntos.

Para el director del Área de Fabricación Avanzada de Tecnalia, los humanos seguirán siendo esenciales por "su mayor destreza", su intuición y su capacidad "para resolver problemas, anticiparse e improvisar".

"Los humanos se tendrán que dedicar a actividades de mayor valor. De ahí la necesidad de formarnos mejor", concluye.


El Pensar Es Positivo

“Hay consecuencias en nosotros mismos respecto a las emociones que tenemos cuando generamos pensamientos negativos hacia alguien o cuando tratamos de evitarlo; el entrenamiento nos ayuda a dejarlo ir”, afirma Hooria Jazaieri, investigadora en el Greater Good Science Center en la Universidad de California en Berkeley, quien enseña el entrenamiento en compasión en Stanford y es la autora principal del estudio.

Aquí hay algunas sugerencias para utilizar algunas de las enseñanzas del programa CCT en casa:

No suprimas tus pensamientos. La investigación muestra que la supresión de pensamientos activa la amígdala cerebral, donde yace la respuesta de lucha o huida del cuerpo. La supresión de pensamientos te vuelve más ansioso a largo plazo y tiene efectos dañinos en tu salud física. Además, te hará pensar más en aquella persona sobre la cual estás tratando de dejar de pensar. En un estudio clásico en el cual se solicitó a los participantes no pensar sobre un oso blanco, el oso se tomó sus pensamientos. Si en tus pensamientos emerge un recuerdo o el nombre de la persona difícil, intenta prestar atención brevemente y luego deja que tus pensamientos se muevan hacia otra cosa.

Reconoce que tu también puedes ser difícil. La doctora Jazaieri llama a esto la regla del “tal como yo”: recuerda que tal como esta persona es difícil para ti, tu puedes ser la persona difícil para alguien más. “Quizá no he hecho tantas cosas malas, pero he dicho cosas que no son ciertas o he herido a otras personas y recordar esto puede ayudarnos a mantener la humildad”.

Sé curioso. Por un momento, imagina cómo es la vida de esa persona. Recuerda que él o ella también tienen sueños y esperanzas, él también es un padre o un hijo, una madre o una hija de alguien. Al imaginar sus dificultades, serás capaz de soltar parte de tu ansiedad o tu ira, lo cual tendrá un efecto mental y físico positivo en ti. Nuevamente, Jazaieri afirma que no necesitas perdonar a la persona. El objetivo es disminuir la reactividad emocional que te hace daño.

Sintonízate con tu cuerpo. Nota cualquier cambio fisiológico que observes cuando piensas o hablas sobre aquella persona difícil —respiración corta, hombros tensos, palmas sudorosas—y ve si puedes hacer algunos ajustes. Toma una respiración profunda y relaja los músculos. Esto cambiará la forma en que reaccionas.


Practica, practica, practica. Es fácil tener buenos pensamientos hacia algún conocido o alguien a quien no conozcas mucho. Pero ¿puedes generarlos hacia personas que te irritan? si puedes, has alcanzado un nivel más alto de resiliencia emocional. Y recuerda que es natural que todo esto sea difícil. “Piensa en ti mismo como un atleta”, dice la Dra. Jazaieri. Debes practicar cuando no es el tiempo de jugar el partido. 

Así, cuando sea la hora del partido y te encuentres con esa persona, puedes utilizar estas habilidades”.



Conocer Y saber


Otro atributo que el conocimiento da, es el de hacer poderosas a las naciones: el país que promueve a sus inteligencias y las dota con el acopio suficiente de conocimientos, llega a alcanzar un enorme poder, pues la inteligencia y el conocimiento provocan el surgimiento de un avance hacia el progreso casi sin límites y no precisamente un poder bélico, sino propicio para tener un pueblo bien alimentado y mejor vestido, con un hogar cómodo, y una familia satisfecha, con buenas perspectivas para los hijos y para una vejez digna, que contribuyó, a su vez, en el progreso de su nación, lo cual  vaticina un devenir sin mayores sobresaltos.

Tenemos el ejemplo de Japón, nación que no posee arma atómica y que sólo con sus inteligencias y el acervo de conocimientos que atesora ha alcanzado un poder económico inmenso. Aún la bomba atómica que fue creada por la mente del hombre dotado de conocimientos bastos, es obra de la inteligencia, pero esa energía, bien utilizada y bien manejada en todos sus aspectos podría dar buenos frutos, sin peligro. Aquí es donde interviene la aplicación de la  ética, de la moral, del control de las ambiciones y del amor a la humanidad.

Otro ejemplo sería la nación estadounidense,  poderosa no por su arma atómica, sino por sus inteligencias que le han dado un brillo singular.

¿Quiénes crearon la electricidad, el telégrafo, el teléfono, la computadora, la imprenta, la penicilina, etc. sino las inteligencias que bebieron  de la fuente: del conocimiento?

Esto demuestra que la inteligencia sin conocimiento es nula.

¿Quién puede negar el valor supremo del conocimiento que es la base del avance de las inteligencias y por lo tanto de los pueblos del mundo?

Hombres esforzados, que no perdieron el tiempo y que sus sociedades de alguna manera les abrieron el camino, creando las condiciones idóneas para que lograran todas sus aspiraciones, aspiraciones que son las mismas que las de todo el género humano.

De ahí que, reitero, el conocimiento eleva a un país ayudando a la solución  de sus problemas complejos y también dotándolo de bienestar y satisfacción.


Las necesidades del ser humano y de la sociedad, han promovido la búsqueda del conocimiento para ser creativo. Los países que desarrollan la ciencia, la cultura y el arte están a la vanguardia. Los pueblos que no se han preocupado por darle mayor importancia a la preparación de la inteligencia de sus ciudadanos,  quedan rezagados. 

Los pueblos avanzados lo son, porque sus políticas van encaminadas  a  apoyar en todos sentidos  a sus ciudadanos, sobre todo, les brindan el acceso a las fuentes del conocimiento para hacer realidad la formación de personalidades eficientes.  Por las anteriores razones pongo a consideración que  Bacón no estuvo equivocado en afirmar en su frase célebre que le hizo inmortal: 
“El conocimiento es poder”.


Las Dimensiones


 Las dimensiones del ser humano comprenden todos aquellos ámbitos que encierran las potencialidades propias de los hombres y mujeres. El desarrollo de dichas potencialidades se traduce en el crecimiento personal, integral y completo del ser humano.

La naturaleza del ser humano encierra los ámbitos biológico, psicológico y social, por ello, se considera que el ser humano es un ser biopsicosocial.

Lo ideal es que el ser humano pueda desarrollarse cabalmente en todas sus dimensiones, lo que le permitirá un crecimiento integral individual e, incluso, fomentará el desarrollo global de la especie, dado que se promoverá el progreso.

El desenvolvimiento de los seres está enmarcado en estos tres aspectos (biológico, psicológico y social), existiendo distintos elementos que forman parte de la esencia del ser humano y que le permiten desarrollarse y progresar en todos esos ámbitos.


Dentro de la naturaleza biopsicosocial del ser humano, pueden encontrarse otras dimensiones que corroboran la predisposición que tienen los hombres y mujeres para enfrentarse a distintas situaciones.


Algunas de éstas son las dimensiones física, social, espiritual, cognitiva, comunicativa, estética, emocional y ética.


Cuando se habla de dimensión social se toma en cuenta al ser humano como parte de un grupo, y se consideran las relaciones que existen entre los integrantes de dicho grupo.

A pesar de que el ser humano sea, por definición, un ser individual, también es esencialmente un ser social, debido a que tiene una predisposición por relacionarse con otros seres humanos, generar lazos afectivos, e incluso organizarse en sociedades.

Continuar Aprendiendo


Los retos empresariales de hoy en día requieren personas proactivas, motivadas y siempre en búsqueda de conocimiento que les permiten mantenerse al tanto del desarrollo de su industria y de manera personal, generando crecimiento individual.

¿Qué es el aprendizaje continuo?

Es la capacidad de capitalizar la experiencia de otros, la propia y la del entorno; buscando herramientas, medios y motivos para estar al día y aplicar los conocimientos en el puesto de trabajo.

Es la competencia relacionada con el crecimiento personal y el fortalecimiento de las capacidades personales. Capacidad para aprovechar las oportunidades de aprender de la propia experiencia o de la de otros o de lo que se realiza en el entorno.

Las personas exitosas aprenden, cambian, crecen y adquieren nuevas habilidades todos los días, acciones que sin duda te llevan al camino del liderazgo y del éxito en tu área profesional.

Busca y filtra la información:
Hoy día es muy fácil encontrar información y mantenerte al día. Sin embargo, en un mundo lleno de información es necesario tener filtros para seleccionar la información más valiosa para ti, evalúa las fuentes seleccionadas y su veracidad.

Personaliza el conocimiento:
Los líderes exitosos son una fuente de inspiración para quienes los rodean, cuando personalizas tu conocimiento y logras que otros lo pongan en práctica no solamente te permite demostrar todas tus habilidades, sino que además fortalece el trabajo de tus equipos.

Comparte tus conocimientos:
Compartir conocimiento incluye intercambiar ideas, recursos, experiencias, material de valor a tus colaboradores. El aprendizaje continuo te ayuda a ser un gran líder porque todo lo que aprendes influye sobre los demás.

Incorporar el aprendizaje continuo en las actividades cotidianas:
Esfuérzate por aprender, a generar nuevas ideas, obtener nuevas perspectivas y desarrollar sus habilidades se pierden en el tiempo y pierden su competitividad en el entorno laboral.

La Adversidad Fortalece


La vida nos pone muchas veces a prueba… incluso cuando no lo hace, una de las cosas que mayor miedo nos da es pensar ¿Cómo reaccionaría ante esto? ¡Seguro que si me pasara me moriría!… pero, en realidad somos mucho más fuertes de lo que pensamos y es que todos llevamos dentro a un valiente que se crece ante las adversidades.

Por eso no podemos vivir con miedo, pensando y pensando, ¿Si pierdo el trabajo… y si pierdo este amor… y si pierdo a este ser querido y si enfermo?

Porque, aunque no lo creas, “después de la tormenta siempre llega la calma”. Así, aunque los primeros momentos son realmente difíciles, cuando ya no nos quedan lágrimas y hemos aceptado que la vida hoy fue ingrata con nosotros… aparece una fuerza interior (resiliencia) que nos protege, nos ayuda y que nos hace crecer como personas…

Todo lo malo que nos ocurre tiene una parte positiva aunque no seamos capaces de verla.

Incluso, puede que en este momento te esté ocurriendo a ti, querido lector y pienses que no lo vas a superar, que esto no lo vas a poder sobrellevar o que siempre vas a vivir “con esa mala suerte que te persigue”, pero…

La vida son etapas, son momentos, buenos y malos, alegres y tristes… porque así es este viaje y así tenemos que entenderlo: si un día está nublado, incluso dos o tres, ten por seguro que el sol tiene que volver a salir

Algunas veces este astro es un poco perezoso y pone a prueba nuestra paciencia, otras veces nos sorprende con su luz radiante después de una buena tormenta y otras tantas que lo dislumbramos desde lejos, muy pequeñito… al final va acercándose poco a poco a nosotros hasta inundarnos con su luz.

Recuerda que cuando reflexiones sobre aquello tan tremendo que te ocurrió, piensa que no solo sobreviviste sino que le pusiste garra y fuerza, entonces te sentirás feliz contigo.


Te sentirás como aquel aspirante a guerrero a final consiguió ganarse su armadura y su casco… y que ahora ya no tiene miedo… porque sabe que ya le ha plantado cara una vez al sufrimiento y ha sabido defenderse.


Entes Abiertas


¿Qué significa tener una mente abierta? Es comprender que las diferentes ideologías y creencias son parte de la belleza de la diversidad del universo. Tener una mente abierta es aceptar que el conocimiento avanza y que ciertas ideas se vuelven obsoletas con el tiempo.

Se considera que una persona tiene mente abierta cuando está libre de prejuicios y cree que cualquier idea posee el derecho de ser analizada y evaluada a fin de determinar su veracidad y utilidad.

¿Cuántas personas se encierran en dogmas o directrices que ni siquiera han analizado? Son millones de personas, y ¿por qué sucede eso? Es porque tener una mente abierta requiere un esfuerzo, hay que leer, estudiar, investigar, comprobar, buscar y hacer un fuerte trabajo para conocer ciertas cosas. 

Al hacerlo se tienen mayores argumentos para consolidar el desarrollo personal.

El solo hecho de escuchar una idea diferente a lo aprendido puede ser una carga mental terrible para muchas personas. Si hablas de un tema polémico con alguna persona y comienzas a sacar una evidencia diferente, quizás esta persona salga corriendo porque no quiere escuchar algo contrario a lo tradicional.

Pensemos en algunos paradigmas del pasado, como suponer que la tierra era el centro del universo, creer que la tierra era plana, pensar que el uso de la pólvora estaba asociado con la brujería, etcétera. 

Los que tuvieron la mente abierta para cuestionar esas ideas fueron tildados como locos, sin embargo la evidencia de hoy en día puede mostrar que aquellas ideas estaban equivocadas, pero se tuvo que ir más allá de la capacidad intelectual del momento y crear nuevos conceptos.

Hoy podemos explicar diversos fenómenos naturales a través de diversas leyes que los científicos han investigado por siglos, pero no sabemos si dentro de 20, 50 o 100 años ciertos principios quedarán obsoletos, porque simplemente habrá un nuevo conocimiento que hará una explicación aún más detallada. 

Tener la mente abierta te permite explorar esas opciones y por ello no se debe desestimar una idea sin que antes se analice y siempre preguntarse sobre la posibilidad de su veracidad.

Tu mapa mental se va estructurando de acuerdo a los valores, orientaciones y conocimientos de tu familia y el entorno en el cual te formaste. Por ejemplo existe una gran diferencia en las prácticas espirituales entre una persona que nació en Egipto, otra en La India y alguien que pertenece a una tribu de las amazonas en Brasil, pero ¿qué es lo correcto? La verdad es que todos están en lo correcto, porque son formas diferentes de experimentar la espiritualidad. 

Al igual que el mango, banano y manzana son frutas. Pero muchas personas no estarán de acuerdo y dirán que ellos son los dueños de la única verdad ¿por qué? 

Simplemente se dan razones a sí mismo que han elegido con sabiduría. Una característica del cerebro, es que una vez que se elige algo, se buscan justificaciones de cualquier tipo para mantenerse ahí, en especial las de tipo cultural. 

Por eso la apertura mental es difícil, pero puede hacerse, evalúa las diferentes ideas, quédate con algunas y desecha otras.


jueves, 18 de junio de 2020

La Innovación


Las ideas son la materia prima que necesitamos para innovar. Nacen, crecen, se reproducen y mueren a partir de las relaciones entre las persona. Su entorno vital es muy lábil, si los vínculos se rompen, una buena idea puede fracasar o morir… Las organizaciones orientadas hacia la innovación, deberán entonces cultivar cuidadosamente este jardín ¿Tu organización tiene jardineros capacitados para esta tarea?

La dependencia que se genera entra una idea y los vínculos entre las personas que la rondan, son la base para que la innovación opere. Para ser efectivo, el tándem idea-vínculo-innovación requiere de una organización que lo soporte. Organización en un sentido amplio, independiente de su formalidad o duración en el tiempo.

En este análisis vamos a considerar como organización, aquellas que están institucionalizadas (con sello, con estructura, funciones, cargos, etc.) como a las informales; las duraderas o las efímeras. Sea cual fuese el caso, analizar el tipo de organización para promover cambios nos permitirá entender que tan propicio es el espacio para cultivar ideas que florezcan en innovaciones.

La importancia que se le asigne a la forma de la organización como condición para su funcionamiento, será un punto clave en el análisis. Si el centro de atención de la organización se concentra en la forma, es probable que las energías vitales de sus componentes terminen orientándose hacia la estructura, quedando adormecidos los mecanismos que propician las interacciones. Cuando esto ocurre, se debilita el entorno vital en el que germinan y se mantienen vivas las ideas que sostendrán las innovaciones. Y muchas veces, cuando el poder se transforma en un valor en la organización, si a pesar del control llega a nacer una idea… la misma se transforma en un botín a ser conquistado y controlado… ¡no vaya a ser que peligre la estructura!

Las ideas nacen de la conectividad, de las conversaciones entre las personas. Una vez que han nacido su éxito o fracaso depende de elementos culturales y organizativos. Si una organización que tiene como misión propiciar las innovaciones sufre el síndrome de la estructura, estará poniendo en jaque la disponibilidad de ideas como recurso básico para ese cometido.

Estará afectando su propia capacidad estratégica para la misión que se propuso. Si ésta es la situación, poder identificarla se convierte en la oportunidad para mejorar la efectividad. La tarea implicará luego reconectar bien los cables y hacer que la energía vuelva a fluir desde las formas, hacia a los vínculos y conversaciones entre los integrantes.

¿Cómo podemos adecuar nuestra organización para que más ideas se conviertan en innovaciones?

Las estructuras organizativas tradicionales jerárquicas no sirven para sostener ideas y propiciar innovaciones. Ellas fueron creadas para una lógica donde la prioridad es delimitar funciones y permitir estructura de mandos para el control. Funcionan bien para una factoría en serie, pero no para propiciar el desarrollo. Formatear una organización para crea ideas y potenciar innovaciones, implica poner en el centro de atención las conexiones entre las personas. Potenciar la inteligencia colectiva y el liderazgo distribuido y nómade.

Tenemos dos potentes razones para que cualquier organización destinada a la innovación, tome la forma que mejor propicie la conexión entre personas: 1 las ideas y 2 la innovación: ambas residen en la conectividad.

Las ideas nacen, crecen, se reproducen y mueren a partir de las relaciones entre las personas, y la innovación ocurre como producto de los sistemas de información y conocimientos que las personas construimos cuando compartimos un ideal.


La Voluntad


Filosofía
La Voluntad Humana
Voluntad (del latín “voluntas”, derivado de “volo”, “yo quiero”) Deseo consciente que lleva al hombre a realizar determinadas acciones.

El idealismo considera, de manera errónea, la voluntad como una propiedad independiente de influjos y circunstancias exteriores, desligada de toda necesidad objetiva, y ve las acciones y la conducta del hombre como una manifestación de la voluntad “libre”, a la que concibe con un criterio idealista.

En realidad, la fuente de la actividad volitiva del hombre dirigida hacia un fin, radica en el mundo objetivo. Reflejado a través del prisma de las condiciones interiores del sujeto (necesidades, intereses, deseos, conocimientos, &c.), el mundo objetivo ofrece al hombre la posibilidad de plantearse fines diversos, de tomar resoluciones, de actuar de tal o cual modo.

No es libre la voluntad que elige partiendo sólo de los deseos del sujeto (voluntarismo, existencialismo), sino la que elige con acierto, en consonancia con la necesidad objetiva. 

Según palabras de Engels, el libre albedrío no significa otra cosa que la facultad de tomar una resolución con conocimiento de causa.

El carácter volitivo de una acción o de un acto de conducta aparece con máxima claridad en los casos en que el hombre, para alcanzar un objetivo, ha de vencer obstáculos exteriores o interiores.

El eslabón inicial del acto volitivo consiste en el establecimiento y en la comprensión del fin; luego, en tomar la decisión de actuar, en elegir los procedimientos más adecuados para dar cumplimiento a la acción. 

Lo decisivo para caracterizar como volitiva una acción dada es que la decisión tomada se haya cumplido
.

El hombre no posee por naturaleza la fuerza de voluntad. La destreza y la capacidad para elegir un objetivo, tomar resoluciones acertadas y cumplirlas, para llevar hasta el fin la empresa iniciada, son fruto del saber, de la experiencia, de la educación y de la autoformación.


Nuestra Actitud


“Una hija se quejaba con su padre acerca de la vida y se lamentaba de que las cosas no le salían bien.

No sabía cómo hacer para seguir adelante pues sentía desfallecer y se iba a dar por vencida.

Estaba cansada de luchar y luchar, sin obtener ningún resultado.

Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro.

Su padre, un chef de cocina, la llevó al lugar de trabajo. Allí tomó tres ollas con agua y las colocó en el fuego.

Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo. En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir.
Sin decir una palabra, sólo miraba y le sonreía a su hija mientras esperaban.

La hija se impacientaba, preguntándose que estaría haciendo su padre.
A los 20 minutos el padre apagó el fuego. Sacó los huevos y los colocó en un recipiente, sacó las zanahorias y las puso en un plato y finalmente, colocó el café en un tazón.

Mirando a su hija le dijo: Querida ¿Qué ves?
“Huevos, zanahorias y café” fue su respuesta.

La hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias, ella lo hizo y notó que estaban blandas.
Luego,  le pidió que tomara un huevo y lo rompiera, después de quitarle la cáscara, observó que el huevo estaba duro.
Luego le pidió que probara el café, ella sonrió mientras disfrutaba de una exquisita taza de la deliciosa bebida.

Sorprendida e intrigada la hija preguntó: ¿Qué significa todo esto, padre?

Él le explicó que los tres elementos habían enfrentado la misma adversidad: ¡agua hirviendo!

Sólo que habían reaccionado en forma diferente.
La zanahoria llegó al agua fuerte, dura; pero después de pasar por el agua hirviendo se había hecho blanda y fácil de deshacer.
Los huevos habían llegado al agua frágiles, su cáscara fina protegía su interior líquido; pero después de estar en el agua hirviendo, se había endurecido.
Los granos de café, sin embargo eran únicos: después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.

-¿Cuál de los tres elementos eres tú?
 -Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿Cómo respondes?
Le preguntó a su hija.

-¿Eres una zanahoria que parece fuerte pero,  cuando la fatalidad y el dolor te tocan, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza?
¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable, con un espíritu fluido, pero después de una muerte, una separación o un despido se ha vuelto duro e inflexible?
Por fuera te ves igual, pero ¿eres amargada y rígida, con un espíritu y un corazón endurecido?
¿O eres un grano de café?
El café cambia al agua hirviendo, el elemento que le causa dolor.

Cuando el agua llega al punto máximo de ebullición el café alcanza su mejor sabor y aroma.

Ojalá logres ser como el grano de café, que cuando las cosas se pongan mal, tú puedas reaccionar en forma positiva, sin dejarte vencer por las circunstancias y hagas que las cosas a tu alrededor ¡mejoren!

Que ante la adversidad exista siempre una luz que ilumine tu camino y el amor de DIOS llene tu corazón para que lo compartas con las personas que te rodean y que puedas siempre esparcir e irradiar fuerza, optimismo y alegría como el “grato aroma del café”…


Pido a DIOS que nunca pierdas la esencia limpia de su amor y que te permita superar cualquier obstáculo victoriosa y exitosamente…”


Sociedad En Las Redes


Por mucho que ocupen miles de páginas, minutos de audio o bits de información, la redes sociales han existido siempre. Lo novedoso del momento es la capacidad que tienen de plasmarse, mostrarse, y por tanto, amplificar su escala y sus efectos. 

No sólo podemos saber quién conoce a quién mediante una red profesional como es Linkedin, sino que, personas distantes geográficamente pueden conocerse en Internet gracias a un interés común que les lleva a encontrarse a través de blogs, redes sociales, foros o cualquier instrumento de interacción entre usuarios.

Con la llegada de Internet, la sociedad que consigue conectarse, es capaz de crecer en sus vínculos, reforzarlos, tejer una tupida red alrededor de intereses comunes, causas y motivaciones.

Se olvida con frecuencia que Internet es una red de máquinas que une a las personas que miran las pantallas, es decir, fundamentalmente una red de personas. Red sin centro geográfico, red con millones de nodos, red distribuida, donde la información en doble sentido se convierte la savia que alimenta y hace crecer la red.

Como bien decía Manuel Castells “la tecnología es mucho más que una tecnología. Es un medio de comunicación, de interacción y de organización social“.

La información es ahora de todos y está en todas partes. Los flujos de información que corren por la red hacen del mundo un lugar más pequeño y llevan a un profundo cambio que afecta a todos los aspectos de la existencia humana. La digitalización de los soportes y la aparición de Internet están modificando, no sólo ya las formas de distribución de productos y servicios, sino que trastoca toda la cadena de valor.

La información compartida abre caminos a la colaboración y a la creación insospechada hasta el momento para las empresas y en otras formas de organización social. Nuestras vidas se ven modificadas: nuestra forma de comprar, de informarnos, de administrar nuestro ocio, de tomar decisiones, de educarnos, de trabajar, de comunicarnos, de crear…

Por tanto estamos hablando de algo más que un cambio tecnológico: estamos delante de un verdadero cambio de paradigma, de un cambio cultural.

Pero incluso este cambio cultural alberga ya un peligro: el peligro de la desconexión. Muchos quedarán al margen de la conexión a la red de personas. No sólo un tercer mundo sin las infraestructuras tecnológicas; la brecha digital es también generacional, educacional, social, y hasta pueden darse formas de autoexclusión como reacción temerosa ante las incertidumbres del cambio de era.

A la vez, también habrá quien quiera evitar que las personas formen parte de esta red descentralizada y distribuida, so pena que sean capaces a autoorganizarse.


Por todo ello, estar o no estar conectado podrá marcar la diferencia para participar o quedarse fuera de la nueva sociedad red que ya está aquí.


Modos De Comunicación


La comunicación no verbal es un tipo de lenguaje corporal que los seres humanos utilizan para transmitir mensajes, en la mayoría de casos de forma inconsciente.

Es sabido desde hace ya mucho tiempo que la información no sólo se transmite con las palabras, sino también a través de los movimientos corporales como las posturas, las miradas, las distancias entre unos y otros, la forma de sentarse o incluso de caminar.

La comunicación no verbal que va más allá de las palabras, y por ese motivo es la que transmite en mayor medida los verdaderos sentimientos o estado interior personal. El lenguaje no verbal es el lenguaje corporal que no miente fácilmente (aunque todo se puede entrenar), a diferencia de la palabra que sí lo hace más a menudo de lo que pensamos. De hecho, a menudo sucede que las palabras dicen algo que contradicen los gestos de quien habla.

Aun así, no debemos pensar que podemos saber a ciencia cierta qué está pensando de verdad una persona sólo con verla. La interpretación de un gesto, sobre todo si es aislado, puede traernos confusión, puesto que los gestos obtienen su significado al relacionarse los unos con los otros.

Albert Mehrabian, un prestigioso antropólogo, concluyó que cuando alguien está hablando solamente se recibe el mensaje de sus palabras en un 7%, mientras que por el tono de voz y otros detalles vocales nos transmite hasta un 38%, mientras que el máximo del contenido de la comunicación lo transmite el lenguaje corporal de los gestos, con un 55%.

¿El lenguaje no verbal es el mismo en todas las partes del mundo?
El lenguaje no verbal que expresa sentimientos o estados interno como el hambre, la tristeza, la alegría, el miedo, la indignación, el enfado, la sorpresa, etc… es igual en todo el mundo. Los gestos es el “idioma” internacional de la humanidad.

Pero debemos saber que al igual que se aprende un idioma, también se aprenden los gestos, imitándolos porque forman parte de la cultura del país (pensemos en los italianos y su rico vocabulario de gestos, sobre el que se han hecho numerosos estudios). 

No obstante los gestos fundamentales son invariables, por ejemplo, en los recién nacidos de cualquier lugar del mundo. Si un bebé tiene hambre, malestar físico o psicológico, llora, y cuando se siente satisfecho sonríe para comunicar su alegría.

El “dialecto gestual” que altera estas raíces, se adquieren a medida que crecemos según la cultura de cada país.

Los niños se mueven de una forma más inconsciente, por eso su lenguaje gestual es más sincero que el de los adultos. Con la edad aparecen las represiones psicológicas, los complejos, la educación es más notable, etc… por este motivo, el adulto reprime sus expresiones naturales y tiende a disimular sus gestos.

Cuanta más edad se tiene, más inexpresiva es una persona, y por lo tanto más difícil de traducir bien el lenguaje de sus gestos.

Por otro lado, también se ha visto que cuanto más elevado es el status social, más moderados son los gestos, y cuanto más bajo es dicho status, más amplia y auténtica es la expresión del lenguaje no verbal. 

Quizás la clave de la explicación al por qué ocurre esto, resida en que a más educación para “saber estar”, más represión hay sobre la autenticidad personal.