jueves, 8 de septiembre de 2016

La Comodidad



Es muy probable que no exista otra sensación más grata que la que nos pueda proporcionar la comodidad y el confort, una vez que nos “acomodamos” en nuestro sillón preferido todo lo demás pasa a un segundo plano y pensamos que seguramente aquí “no pasa nada” y si hipotéticamente algo ocurriera, mejor será que sea muy lejos y no nos incomode.

De forma natural buscamos la comodidad, es nuestra tendencia. Cuanto te sientes cómodo estás seguro, arropado y tranquilo; todo o la mayor parte de lo que sucede está bajo tu control y no percibes ninguna amenaza potencial. Sin embargo, ¡cuidado! Por un lado, no vas a poder permanecer siempre en este estado y, por otro, tampoco es bueno que lo hagas: vas a debilitar tus fuerzas y limitar tu crecimiento.
Buscando la comodidad limitamos nuestro mundo, evitando así situaciones propicias para nuestro desarrollo y crecimiento personal.
Las situaciones o las personas no son incomodas por sí mismas, la incomodidad surge de nuestra experiencia personal, y somos nosotros los que nos sentimos incómodos ante ciertas situaciones o personas. Cuando se adopta esta perspectiva, cambiamos el foco de nuestra atención; dejamos hacia el exterior para buscar respuestas y propuestas en nuestro interior.”

Esa es nuestra naturaleza, se dice que “el hombre natural es enemigo de dios” y lo que podríamos agregar es que el hombre natural se rige por otras normas de sobrevivencia en las cuales no están previstas las actitudes altruistas  como lo pueden ser el amor al prójimo y la solidaridad.

Hugo W Arostegui



Protagonistas


Crecemos con la noción de que aquello  que no llega a difundirse en los medios, sean éstos gráficos o televisados, o “colgados” en las redes sociales, páginas web, correo electrónico, etc. no merecen ser considerados como noticia relevante y en consecuencia, no existen.

Tenemos la marcada tendencia a considerar como noticias dignas de crédito a aquellas que inundan nuestras fuentes de información y por tal razón corremos el riesgo de ser un tanto “saturados” por el sensacionalismo impregnado en la procura de “captar nuestra atención”

Resulta entonces que “la sensación térmica” que todos tenemos como imperante en la sociedad que integramos  es el resultado de “tales noticias” donde todo lo que tiene que ver con los “males de moda” llámense, asesinatos, robos, violaciones, accidentes graves, víctimas fatales, etc.

Estas son las noticias que recibimos y como consecuencia encontraremos como resultado la posibilidad de identificar a “los protagonistas”  de los acontecimientos más relevantes que han “sacudido” por no decir, alarmado, a todos nuestros conciudadanos, que harán sentir sus reclamos (y justo es considerar que les asiste todo el derecho de hacerlo, y que  además, deben hacerlo.)

Lo lamentable de todo este asunto es que como no se mencionan una multitud de buenas obras que a diario se realizan, o mejor dicho, realizamos todos, o casi todos los demás integrantes de la sociedad, esto no forma parte del “menú de noticias” éstos sucesos que nos congratulamos de que realmente sucedan no llaman la atención de los medios informativos, no son noticia y sabido es que “sin noticias no hay protagonistas” solamente son reconocidos por un “círculo íntimo” donde tales hechos se desarrollan.

Estos son los verdaderos protagonistas, los  ignorados pero siempre vigentes, todos aquellos que como cada uno de nosotros, hace de la solidaridad “el pan nuestro de cada día”.


Hugo W Arostegui

martes, 6 de septiembre de 2016

El Ciudadano



Muchos se han de preguntar cómo habrá que comportarse o que actitud adoptar para poder sentirse en consonancia con la realidad actual que nos circunda y poder responder sin claudicar en todas las oportunidades en que sea necesario marcar nuestro compromiso acorde y en consonancia con los postulados que nos motivan.

No es necesario para asumir un compromiso con nuestra vida en sociedad la adopción de posturas radicales o violentas pues lo que pudiésemos componer con nuestras exigencias lo estaríamos destruyendo en un enfrentamiento que deberíamos evitar, pues  lo que resulta muy claro es que la violencia sólo puede engendrar más violencia, en este caso estaríamos hablando de violencia multiplicada, la que pudiésemos ejercer nosotros y las que en contrapartida ejercerán quienes deban reprimir tales acciones.

Lo que sí se requiere de un ciudadano comprometido con la sociedad que integra es una firme vocación de legalidad en todas nuestras acciones impidiendo que las suspicacias, la informalidad y el comportamiento deshonesto tengan cabida en cada una de las transacciones que se realicen.

En el marco de una sociedad debidamente organizada como la que cada uno de nosotros integra lo que debe imperar es la ley que nos representa y protege, eso sí, a la hora de ejercer nuestro deber cívico, quienes sean electos por la mayoría de nuestros votos deberán tener muy en cuenta el compromiso asumido ante los ciudadanos, entonces todos sabremos que para ser dueños de nuestro destino lo que es necesario es estar atentos al quehacer nacional, no bajar la guardia bajo ningún concepto y rechazar la corrupción venga de quien venga.

Hugo W Arostegui




Asumamos





Observamos con mucha atención los acontecimientos que diariamente son informados por los medios que cubren de un extremo al otro la totalidad del planeta, donde puede notarse fácilmente, que somos convivientes que nos alojamos en un lugar donde lo que ocurre, por lo reiterado, ya no nos causa sorpresa ni sobresaltos, nos estamos acostumbrando a la violencia en todas sus variantes, tornándonos insensibles a todo lo que pueda suceder en otros ámbitos, que quizás ,argumentando hipotéticas distancias, nos es más conveniente ignorar.

Así estamos, como decimos es “nuestro mundo” el que todos conformamos y en el cual deberemos asumir la cuota parte de responsabilidad que a cada uno nos corresponda, de nada sirve dedicarnos a “mirar el partido desde afuera” para los seres humanos, todos sin exclusiones, resulta inadmisible que pretendamos refugiarnos en el anonimato o en el “no tengo nada que ver” el grado de información al que actualmente tenemos acceso nos cambia radicalmente el rol y de ser meros espectadores para reconocernos como principales actores en todos los acontecimientos en que “nuestra razón de ser” nos introduce.

Comencemos hoy, no hagamos planes para un mañana, porque cuando “ese mañana llegue” seguramente ya no estaremos para cambiar nada, este es el día de decir “basta” asumamos que este “nuestro mundo” nos necesita hoy más que nunca para demostrar con nuestros hechos que cuando todos y cada uno contribuya con su cuota parte de responsabilidad seguramente podremos cambiar y sobre todo mejorar las condiciones en que nos encontramos como sociedad, si realmente todos asumimos, sí se puede.

Hugo W Arostegui

lunes, 5 de septiembre de 2016

Frases Sobre Amistad















Un amigo es uno que lo sabe todo de ti y a pesar de ello te quiere.
Elbert Hubbard (1856-1915) Ensayista estadounidense.

Si sientes que todo perdió su sentido, siempre habrá un ¨te quiero¨, siempre habrá un amigo.
Emerson (1803-1882) Poeta y pensador estadounidense.


La amistad es más difícil y más rara que el amor. Por eso, hay que salvarla como sea.
Alberto Moravia (1907-1990) Alberto Pincherle. Escritor italiano.

Un hermano puede no ser un amigo, pero un amigo será siempre un hermano.
Demetrio de Falero (350 AC-280 AC) Orador, filósofo y gobernante ateniense.

El que busca un amigo sin defectos se queda sin amigos.
Proverbio turco

La amistad es un alma que habita en dos cuerpos; un corazón que habita en dos almas.
Aristóteles (384 AC-322 AC) Filósofo griego.

Los verdaderos amigos se tienen que enfadar de vez en cuando.
Louis Pasteur (1822-1895) Químico y microbiólogo francés.

Los amigos que tienes y cuya amistad ya has puesto a prueba / engánchalos a tu alma con ganchos de acero.
William Shakespeare (1564-1616) Escritor británico.

La verdadera amistad es como la fosforescencia, resplandece mejor cuando todo se ha oscurecido.
Rabindranath Tagore (1861-1941) Filósofo y escritor indio.

La amistad duplica las alegrías y divide las angustias por la mitad.
Sir Francis Bacon (1561-1626) Filósofo y estadista británico.




Semblanza


“Descripción física o moral de una persona, generalmente acompañada de una breve historia   de su vida.

Realizar una semblanza de alguna persona de la cual no contamos con otra descripción que aquella que surja de su “imagen virtual”  la que venimos percibiendo a través de nuestros contactos en las redes sociales puede resultar una tarea un tanto compleja de efectuar.

Como bien sabemos una semblanza es una breve y precisa descripción en la que destacamos los aspectos más relevantes de una persona en cuestión intentando ser lo más justo y preciso posible en todo aquello que mencionamos.

Ahora bien, cada uno de nosotros debe tener una idea bastante precisa de nuestra propia semblanza y habremos considerado cuáles son aquellos “rasgos personales” que nos gustaría describir como aquellos que nos destacaría en la forma  “más justa y precisa” en la consideración de los demás.

Cuando se trata de describirnos, de realizar “nuestra semblanza” debemos tener en cuenta de que no podremos “multiplicar las palabras” digamos que lo que expongamos además de ser escueto y preciso deberá ser un fiel reflejo de la persona de la cual nos referimos, todos nos merecemos ser apreciados por lo que entendemos son nuestros valores y mucho más cuando quien nos realiza una semblanza somos nosotros mismos, de manera que aprendamos a amarnos y apreciarnos de la mejor manera posible.

Si esta tarea nos resultara difícil o un tanto incómoda de realizar, lo que deberíamos hacer, obviamente, es  practicar más en el destaque de todo aquello que nos hace insustituibles.

Hugo W Arostegui



domingo, 4 de septiembre de 2016

Construyendo Caminos


Hay momentos en los cuales el simple hecho de saber que estamos a punto de escarbar con nuestras propias manos como quien introduce sus dedos en la fertilidad de una tierra bien abonada nos reconforta y nos alienta a continuar nuestra tarea de recolectores de las ideas sembradas en su interior.

Es así como vamos avanzando y poco a poco desentrañamos todos los elementos que han de componer nuestro relato el cual será el fruto de las vivencias que van surgiendo en la medida en que vamos hurgando más profundo en la búsqueda del contenido atesorado en su interior.

Nuestros temas son difundidos con mucho esmero y dedicación en el afán de contribuir con el establecimiento entre todos de la “cultura de la comunicación” donde el arte de la creatividad sea una manera corriente de manifestar nuestra contribución al enriquecimiento colectivo.

Nos sentimos involucrados en este intento de “construir caminos” que acorten distancias, que unan inquietudes y fomenten el intercambio de ideas conformando un “universo participativo” donde proliferen todas las posturas y puedan convivir en la diversidad de argumentos todos y cada uno.

Hugo W Arostegui