sábado, 12 de noviembre de 2016

El Huevo O La Gallina?


El drama del desencanto: "el drama del desencantado que se arrojó a la calle desde el décimo piso, y a medida que caía iba viendo a través de las ventanas la intimidad de sus vecinos, las pequeñas tragedias domésticas, los amores furtivos, los breves instantes de felicidad, cuyas noticias no habían llegado nunca hasta la escalera común, de modo que en el instante de reventarse contra el pavimento de la calle había cambiado por completo su concepción del mundo, y había llegado a la conclusión de que aquella vida que abandonaba para siempre por la puerta falsa valía la pena de ser vivida." Gabriel García Márquez.

Es probable que el descomunal desarrollo de las “intercomunicaciones humanas” la introducción quizás un tanto abrupta de la “era digital” cubriendo o abarcando todas las capas etarias, desde la niñez a la tercera edad, nos haya tornado tan “ciber depedientes” de que en algún momento, quizás no tan lejano, nos haga llegar a un punto de no poder comprender que exista o haya existido algún otro medio a través del cual nos hayamos intercomunicado.

Esto que mencionamos es aplicable a los sucesos del día a día, vale decir, la percepción de todo lo que ocurre o pueda ocurrir, la cual nos llega a través de los medios informativos que nos “mantienen informados” valga la redundancia” medios que han acaparado nuestra atención manteniéndonos prácticamente rehenes de una especie de “dosificación diaria” de las noticias que “oficialmente podamos digerir”

Estamos en la disyuntiva de aceptar esta especie de “estatus quo” universalmente establecido o recurrir a las distintas fuentes de información a nuestro alcance para poder construirnos un criterio “libre e independiente “que nos permita saber lo que realmente ocurre a nuestro alrededor.

Es algo relativamente parecido a nuestro gran dilema existencial referente a las prioridades, ¿Qué es lo que está primero?  ¿el huevo o la gallina? en materia de comunicaciones e información la situación imperante nos lleva a la siguiente interrogante: cuándo la noticia que nos llega es eso “una noticia”  lo que realmente ha sucedido, o lo que los medios informáticos que tenemos a nuestro alcance “nos lo cuentan” como noticia.

Es a cada uno de nosotros a quienes corresponde dar una respuesta.

Hugo W Arostegui



viernes, 11 de noviembre de 2016

Juguemos En El Bosque


Un antiguo juego que solíamos jugar cuando éramos niños tenía un estribillo que todos cantábamos a la espera  de que el lobo surgiera intempestivamente en la escena.

La canción decía más o menos así:

“juguemos en el bosque mientras el lobo no está” y todos exclamábamos a coro “¿lobo estás?”

Lo que me ha traído a la memoria esa vieja canción de nuestra niñez han sido los últimos acontecimientos que pareciera que han “conmocionado ”al mundo occidental y cristiano, sobre todo y para ser un tanto más preciso, al mundo comprendido por el que constituimos  “el patio trasero” de nuestros poderosos “vecinos del norte”

Lo que ha ocurrido está muy lejos de representar “el estado de catástrofe” que la mayoría de los gobiernos y los medios de comunicación, sobre todo éstos últimos, nos han querido trasmitir en estos últimos meses, parece que no nos hemos percatado que las transformaciones  también se hacen notar en la parte norte de nuestro hemisferio, los resultados ante los que “continuamos jugando en la ronda del miedo”  están a la vista y tendremos que “agiornarnos”  es decir, “ponernos al día” en las consecuencias de una globalización que nos repercute en el estado de animo de todos los que directa o indirectamente “nos involucramos”

En resumen, muy breve por cierto, vemos como “esa sensación de miedo colectivo” ha incidido muy fuertemente en la clase media blanca “tradicional” de los ciudadanos antiguamente “todopoderosos” de los estados más industrializados de Norteamérica, quienes ha sufrido en carne propia la pérdida de algunos privilegios los cuales han sido absorbidos por una clase de emigrantes mucho más preparada para ocupar los puestos de trabajo que las nuevas tecnologías han ido introduciendo en la industria y ante esta sensación de inseguridad,  por no decir de “verdadero pánico” la otrora poderosa clase media blanca ha optado por intentar “cerrar sus fronteras” y refugiarse en las promesas un tanto mesiánicas de quien ha resultado a la postre el ganador de las elecciones.

Como se suele decir, “la alegría va por barrios” esta vez la ciudadanía norteamericana está sintiendo “en carne propia” la misma medicina que “nuestra clase política” nos ha aplicado en Latinoamérica.


Hugo W Arostegui  

jueves, 10 de noviembre de 2016

No Gastar Pólvora En Chimangos




Vemos en múltiples oportunidades revoloteando sobre el horizonte de nuestros muros en las redes sociales tal como si fuesen “aves rapaces” ciertos chimangos con apariencia humana que observan nuestros movimientos en procura de algo desprevenido al cual puedan atrapar entre sus garras en un vano intento de mitigar su insaciable voracidad.

Así se comportan ciertos personajes que se mueven amparados en un anonimato virtual, los que se introducen en los comentarios ajenos o intercambian opiniones en ese lleva y trae del “dicen que dijiste” son opinólogos de ocasión y desmenuzan la carroña abandonada por quienes no pierden su tiempo haciendo del simple y vulgar chisme materia de comentario.

“Los chimangos son aves rapaces, naturales de América del Sur, que suelen alimentarse de carroña o de animalitos pequeños o desprevenidos. La cuestión es que los chimangos no resultan muy provechosos para los humanos, especialmente porque su carne no sirve como alimento, ya que, a pesar de ser un animal de tamaño considerable, al exponerlo al fuego su volumen disminuye llamativamente.

Así las cosas, los cazadores siempre tuvieron en claro que no valía la pena derrochar cartuchos en los chimangos, pues el valor de la pólvora no se compensaba con los beneficios de la presa obtenida.
Popularmente, la frase pasó a denominar una situación en la que se malgasta un dinero o en la que se efectúa un gran esfuerzo a partir del cual no se obtendrá nada sustancioso. Puede traducirse así: es más lo que se pierde que lo que se gana.

Hugo W Arostegui

Aunque Hagamos De Tripas Corazón


El refrán:
“Aconseja sobreponernos a nuestros temores y miedos al enfrentar problemas o retos”.

Los que habitamos este llamado “tercer mundo” estamos acostumbrados a las dificultades que implica el hecho de “ocupar el furgón de cola” del tren que conduce el ritmo del desarrollo.

Esta condición también nos ha permitido, globalización mediante, “observar por la ventana” todo lo que sucede en el llamado “primer mundo” y con nuestro peculiar ingenio “nos las hemos arreglado” para introducirnos en el mundo de la tecnología y la modernidad.

Esto es lo que llamamos “hacer de tripas corazón” lo que equivale a decir que, aunque quizás tengamos algunas limitaciones en el campo de la ciencia y la tecnología, “igual nos revolvemos” para disimular tales carencias e intentar mantener nuestra vigencia en el “mundo de las comunicaciones”.

Así es todo y es válido para todo lo que eventualmente tengamos que enfrentar, lo que nos “hace competitivos" en cualquiera sea el área en la cual nos movamos, nada impide que podamos “marcar con nuestra presencia” en todas aquellas actividades en las cuales participemos.

La mente humana, nuestra mente, no es clasificable, no tiene un territorio específico, nuestra mente es universal e inconmensurable, ocupa una dimensión que le es propia por definición y es la única capaz de todas las creaciones hasta ahora conocidas.

Hugo W Arostegui


miércoles, 9 de noviembre de 2016

El Ojo En La Mira



"Y la verdad sólo surge cuando están, en el mismo punto de mira, el ojo, el corazón y la mente"

En varias oportunidades nos encontramos en situaciones en las que pareciera que por el tenor de los acontecimientos, es necesario de que nos expresemos en forma inmediata sobre lo que pensamos sobre el grado de incidencia que tales asuntos pudiesen significar no solamente en nuestro fuero íntimo sino que además, lo que pensamos que deberían sentir y consecuentemente reaccionar, todos aquellos con los cuales compartimos tales opiniones.

Ahora bien, pensamos que la cosa en cuestión no pasa ni se debe medir por el “sentido de urgencia o de gravedad” de quién requiere nuestra manifestación al respecto sino, más bien, que los mencionados sucesos, ante los cuales supuestamente deberíamos expedir con cierta premura una opinión sobre ellos, deberán ser analizados en toda su extensión, para extraer las mejores impresiones sobre el caso en cuestión evitando de esta manera agregar una mayor confusión e incertidumbre.

“Existen distintas características del carácter que definen el modo de ser de una persona. El modo de ser de una persona no se describe, únicamente, por un rasgo en concreto sino por la suma de varias cualidades. Un rasgo habitual de aquellas personas que tienen una gran fortaleza emocional es que son imperturbables, es decir, pueden permanecer inalterables a nivel anímico ante un estímulo externo.

Una persona imperturbable es aquella que tiene un gran control sobre su estado de ánimo y sus sentimientos potenciando el valor de la fortaleza como muestra el estoicismo. Desde el punto de vista de las relaciones personales, aquellas personas que tienen un modo de ser de estas características pueden mostrarse distantes en ciertos momentos al parecer un tanto frías.

Una cualidad del carácter

Sin embargo, no se trata de que las personas que son imperturbables no sientan como las demás sino que sus manifestaciones externas ante un dolor determinado o una emoción intensa, es distinta.

Desde un punto de vista positivo, una persona imperturbable es aquella que tiene una gran inteligencia emocional para resistir una situación de tensión manteniendo la tranquilidad de ánimo. Por ejemplo, tienen una claridad mental importante para tomar decisiones al trabajar bajo presión ya que no se dejan desbordar por la emoción.

Una persona imperturbable es aquella que no pierde la tranquilidad en situaciones en las que otras sí pierden dicha serenidad. Una de las virtudes de una persona que se muestra imperturbable es la paciencia y la capacidad de observación.”

Recordemos que la supuesta gravedad de nuestras consideraciones no aceleran ni obran sobre la justicia ni la mayor vehemencia que pongamos podrá alterar sus razones.

Hugo W Arostegui


martes, 8 de noviembre de 2016

A Modo De Compensación



En realidad podemos afirmar que no existen aquellas personas que hayan alcanzado un nivel tal de autosuficiencia por el cual puedan considerarse que se encuentran exentos, de por lo menos intentar dentro de lo posible, el expresar un profundo agradecimiento por aquellas personas que quizás en forma anónima y desinteresada han hecho posible que sucediesen los acontecimientos ,que concatenados unos con otros, decantasen en el usufructo de tal situación, la que denominamos como eventualmente autosuficiente.

Los seres humanos, en nuestra condición de tales, hemos sido y siempre seremos, deudores  contumaces, completamente insolventes e incapaces de asumir cualquier intento de compensación de una deuda original cuyos registros se pierden en los confines de nuestra historia, sin detenernos a mencionar por abrumadoras las cargas por amortizaciones impagas.

“la palabra compensar significa equiparar o igualar algo que está desequilibrado. Este desequilibrio supone que una de las dos partes intervinientes en la cuestión sale perjudicada o disminuida y por lo tanto debe ser arreglada a partir de la acción directa.

Esto entonces se puede aplicar a numerosas situaciones y circunstancias en las que se genere naturalmente este desequilibrio, por ejemplo cuando una persona comete un error y lo compensa a partir del pedido de disculpas o de la realización de alguna obra en beneficio de otro.”

Esto que mencionamos es simplemente un recordatorio de que todos sin excepción alguna tenemos una deuda de gratitud muy grande para con la sociedad que integramos, el único medio a nuestro alcance de adoptar una conducta redistributiva es la de contribuir en la formación de todos aquellos que de una u otra forma nos necesiten.

Algunos nos dirán, todo lo que hagamos como contribución será apenas como “un granito de arena” estamos plenamente de acuerdo, pero el poeta nos advierte en su copla:

“La sangre tiene razones
Que hacen engordar las venas
Pena sobre pena y penas
Hacen que uno pegue el grito.
La arena es un puñadito
Pero hay montañas de arena.”    Atahualpa Yupanqui

Hugo W Arostegui


lunes, 7 de noviembre de 2016

Hablando De Uno


Sucede que uno lleva mucho tiempo en esta tarea de “continuar viviendo” y claro cuando no se tienen muchas certezas de cómo han sido nuestros orígenes resulta, para quienes sienten algo de curiosidad al respecto un verdadero problema el armado de este “rompecabezas” que más se asemeja a un puzle, donde no resulta tan sencillo el poder “encajar” correctamente las piezas.

Creo que todos saben que soy el mayor de muchos hermanos, y aunque a algunos les cueste creer tengo diez hermanas mujeres y ocho hermanos varones, como soy bastante ordenado en temas de genealogía guardo debidamente documentado todo lo relacionado con este tema.

Tanto por parte de mi padre como de mi madre el contacto que hemos mantenido con mis hermanos si bien han sido fraternos como no podría ser de otra manera, como digo, esos contactos han sido un tanto esporádicos, como envueltos en la bruma de un misterio, a tal punto de que ninguno de mis hermanos podría mencionar a ciencia cierta cómo ha sido la vida que he llevado desde que he venido a este mundo allá por los pagos de “paso Pereira” a orillas del Río Negro.

Así como menciono a mis hermanos, incluyendo tanto a los varones como a las mujeres, lo que asevero es extensivo a mis tíos, tías, primos, primas, etc. , lo que resulta incuestionable es que “estoy aquí” algunos intuyen de que tengo una sólida formación académica pero de ahí a saber cómo es que sucedió todo esto, bueno eso también se pierde en la nebulosa de un pasado que continúa presente, aclaro que esta falta de información también la padecen tanto mis hijos como aquellas damas, excelentes compañeras que la vida me ha deparado las cuales también ignoran estos sucesos.

Una vez, siempre hay una vez como en los cuentos de hadas, alguien me preguntó: tío dime realmente ¿quién eres? la pregunta me tomó un tanto de sorpresa y lo que atiné a responder fue lo siguiente: Creo que soy como esos cardos que crecen de puro testarudos que son, que ha encontrado una buena tierra donde afianzar sus raíces y que pudo recoger los mejores ejemplos para incorporar a su existencia la cual ha sido muy dura y fructífera en todos los sentidos como para que todos aquellos que de una forma u otra se hayan relacionado conmigo puedan sentir la integridad y honestidad  que es proveniente de nuestros ancestros.

Agregamos:

“Estamos comprometidos con nosotros a ser nosotros mismos, diferentes de los demás y otros distintos a lo que los demás quisieron hacer de nosotros.

La importancia de tal compromiso reside en el hecho de que sólo quien se asume un individuo, uno distinto a los otros, puede tomar el control de su vida y realizar lo que es propio de su identidad e interés. Quien no se obliga consigo mismo sigue estando a expensas de otros, siendo y actuando de acuerdo a lo que los demás han hecho de él: con unos sumiso, con otros valiente; con unos fuerte, con otros débil; con unos triunfador, con otros un mero perdedor. Dejan de ser ellos para ser con cada cual lo que éste espera que sean. Terminan viviendo vidas esquizoides, sin control ni satisfacción. Y, lo que es peor, sin sentido ni esperanza.”

Hugo W Arostegui