jueves, 18 de agosto de 2016

El Ser Displicente


Ocurren cosas en la vida de las personas que pareciera que tienen el poder de marcarles como con  un sello indeleble en una forma tal que su imagen pública pasa a fundirse tal como si fuese una amalgama con sus aptitudes creando un nuevo personaje donde lo único esperable es una total falta de consideración tanto por la tarea que se realiza como para los destinatarios de la misma.

Nos referimos a lo que bien puede definirse como “una plaga social” el mal de displicencia que una vez que logra hospedarse en un individuo  se incorpora a su accionar destruyendo sus proyectos e ilusiones, una condición esencial en toda proyección constructiva.

Esta displicencia puede observarse  en la que se adopta como “una forma o estilo de vida” y comprende a todos sin excepción, lo que constituye un desafío de toda la sociedad encontrar los medios que permitan superar tales tendencias.

La actitud displicente puede observarse, y por lo tanto es corregible,  en el comportamiento  de un individuo y se manifiesta en una primera instancia en sí mismo, en cómo asuma sus responsabilidades, y luego se traslada a su comportamiento social,  generando resistencias y rechazo, un verdadero “circulo vicioso” que se retroalimenta en la mediocridad.

La displicencia se manifiesta tanto en el hogar de un individuo como en el ámbito estudiantil, lugares de trabajo, servicios públicos , relaciones humanas en general, etc. etc.

“Todas las personas en el mundo poseen un potencial humano ilimitado, pero necesitan descubrir sus pasiones personales, están guardadas en algún lugar. Hay gente que desde temprana edad puede identificar las cosas que más le apasionan y todos los días van entrenando en el perfeccionamiento de su trabajo, en esos casos no se cae en la displicencia, porque a pesar de las dificultades, existe la motivación para volverlo a intentar todas las veces que sea necesario.
Nunca dejar tiempo para que la apatía aparezca:
Las personas más proactivas y que logran muchos éxitos han desarrollado la costumbre de no dejar tiempo para que la apatía aparezca, en cuanto sienten un poco de desánimo, inmediatamente se mueven y ocupan su mente de manera positiva. Poseer una agenda llena de tareas agradables es medicina efectiva para evitar la displicencia.”

Hugo W Arostegui


miércoles, 17 de agosto de 2016

La noche De La Nostalgia


Confieso que no estaba muy afín de escribir sobre este invento uruguayo que se festeja todos los 24 de agosto con el sugestivo nombre de “noche de la nostalgia”.
Cuando entramos en esta época del año, recordamos en julio la jura de nuestra constitución y ahora en este mes de agosto, más precisamente el día 25, la declaratoría de nuestra independencia.
Nosotros, el Uruguay todo, somos una paradoja digna de la mayor consideración, nuestro héroe máximo, el Gral. José Gervasio Artigas, nunca se consideró “uruguayo” el luchó toda su vida con un ideal “El Federalismo”  su mayor anhelo era integrar esta Banda Oriental Del Uruguay al resto de las “Provincias Unidas del Río de la Plata” vivió la última etapa de su vida en la república del Paraguay y falleció en el exilio, desoyendo todos los intentos por repatriarlo, en medio de los humildes en el año de 1850.

Nos sentimos hermanos de las provincias argentinas y muchos, entre los cuales me incluyo, sentimos un fuerte arraigo  con las posturas federalistas de nuestro prócer a quien la historia le rescata como uno de sus grandes cuya visión abarcaba al federalismo de todas las provincias sudamericanas.

Continuando con las paradojas, somos los primeros campeones mundiales de futbol en el año de 1930, el mejor jockey de todos los tiempos, recordado por siempre en la argentina cuyo nombre es Irineo Leguisamo, nació en Salto, Uruguay, el más venerado de los cantores de tango llamado “El Mago” Carlos Gardel, pues nació en  Tacuarembó, Uruguay y existe una profusa documentación que avala que era hijo del Coronel Carlos Escayola.

Como suele suceder, en casos como los que relato, que exista la posibilidad de que surjan algunas posturas contrarias a lo que exponemos y está bien que así sea, podemos tomarlo como “veleidades” de uno de los países más pequeños de Sudamérica que ha “venido al mundo de las naciones” como “un estado tapón” en medio de dos colosos como son sin duda Argentina y Brasil.

Pero si algo nos pertenece, y a esta altura es indiscutible, es la tan manida noche de la nostalgia y adjuntamos algunos datos para intentar explicarlos, dice así:

Resumen de historia:
“El 24 de agosto de 1978, Pablo Lecueder, propietario de CX-32 Radiomundo, organizó una fiesta con «viejos éxitos de la música», que era la temática de su programa radial Old hits, A partir de 1978, todos los años Lecueder utilizó la víspera del día festivo 25 de agosto (Declaratoria de la Independencia), feriado en Uruguay, para realizar la fiesta destinada a recordar y bailar los old hits con la denominación original, marca registrada, y fiesta Nacional llamada La Noche de la Nostalgia.
La idea de estas primeras fiestas era salir a bailar con la música de finales de 1960 y comienzos de 1970, que ha perdurado ya sea por su vigencia, sus cantantes, su letra o su promoción. Son comunes los temas de Queen, Simon and Garfunkel, Cat Stevens, The Beatles, Dire Straits, Supertramp, Elvis Presley, Barry Manilow, Bee Gees y de John Travolta; la música disco, los new romantics, etc.
Desde los primeros días de agosto, las radios emiten esos éxitos y difunden la «vieja música» con aquellos grandes de la canción. Con el correr de los años, se han incorporado temas de los ochenta de artistas como Mikko Mission, David Lime, Baltimora, Toni Peret, Tony Postigo, Mike Platinas, etc., y de los noventa, tales como Technotronic, Snap, 2unlimited, etc.; en palabras de Lecueder, la nostalgia comienza a los 10 años de publicada una canción.
Con el pasar de los años, varios empresarios del rubro entretenimiento, amigos, familiares, comenzaron a hacer otras fiestas de la nostalgia. Rápidamente, el mercado y la demanda crecieron, y se produjeron diferentes fiestas para diferentes públicos, con una variada gama de precios, fiestas del reencuentro, cenas show y hasta fiestas de antinostalgia para quienes quieren salir ese día y no se encuentran identificados con la temática (sobre todo público entre los 18 y 25 años).
Hoy, esta fiesta se ha convertido en un negocio, y es un foco comercial importante en el ambiente del entretenimiento, que da trabajo a restoranes, discotecas, DJ´s, mozos, empresas de gastronomía, alquiler de infraestructuras para fiestas, servicios de seguridad, de iluminación, de amplificación, de transportes, promotoras y hasta casas de lencería y hoteles de alta rotatividad, con promociones especiales por la noche.
Junto con las fiestas de Navidad y Fin de Año, la noche de la Nostalgia se convierte en uno de los eventos que convoca más gente a fiestas. Incluso se considera que se supera en movimiento de gente a las fiestas de fin de año, ya que en esa jornada suelen salir tanto mayores como jóvenes, casados y solteros, a recordar viejos tiempos y no tanto, dependiendo de la edad. Esta fiesta tiene tanta convocatoria debido a que el 25 de agosto es fecha patria en Uruguay y, por lo tanto, es no laborable.
Cabe destacar que esta fiesta se realiza en todo el Uruguay y en cada departamento o ciudad hay por lo menos entre 15 y 30 fiestas entre privadas y públicas, todas con lleno total.

El Ministerio de Turismo promociona esta noche como un atractivo turístico. El 26 de agosto de 2004, mediante la Ley N. 17.825, esta fiesta fue denominada en forma oficial Noche de la Nostalgia, estableciendo en su artículo 2.: «El Ministerio de Turismo incluirá en los eventos de carácter turístico a la Noche de la Nostalgia, promocionando la misma en el exterior a través de Embajadas, Consulados y oficinas comerciales».
Por ahora, eso es todo


Hugo W Arostegui

martes, 16 de agosto de 2016

La Modestia


El mantenimiento del llamado y reconocido “bajo perfil” es una cualidad propia de las personas que no necesitan “desviar la atención” sobre sí mismas , que canalizan sus acciones en el sentido de aportar con su presencia la difusión del carácter y virtudes de todos aquellos que componen su entorno y con quienes disfruta cuando reciben algún tipo de reconocimiento.
“La modestia es la actitud tendiente a moderar y templar las acciones externas; implica contenerse en ciertos límites, de acuerdo con las conveniencias sociales o personales. También es la cualidad de humilde, de falta de vanidad o de engreimiento. Es además una cualidad del carácter de una persona que le hace restar importancia a sus propias virtudes y logros y reconocer sus defectos y errores: la modestia es una gran virtud.
Las prácticas específicas de la modestia son diferentes en cada cultura, en cada época y en cada comunidad. El estándar de modestia posee diferentes características, y es una medida que tiende a encauzar al individuo en la sociedad, ya que cada persona es juzgada por ésta cuando se extralimita en su comportamiento.
Los principios generales de la modestia promueven evitar la excesiva atención hacia la propia persona, limitando las acciones y actitudes para inculcar comportamientos menos egoístas. A veces, la modestia suele confundirse con la timidez o la simplicidad.
Esta virtud generalmente se entiende como un señalado recato y hasta cierto punto inhibición por las expresiones de sí mismo; un individuo modesto es el que no hace gala de sus bienes o facultades; esta virtud es la consideración de no lastimar al prójimo con un desplante que pueda causarle daño.
La modestia es una característica humana que puede ser vista alternativamente como una virtud o una debilidad. Ello depende, en última instancia, de su perspectiva. En la mayoría de los diccionarios existen varias definiciones de modestia; muy a menudo es presentada como humildad, timidez o sencillez. En la sociedad de hoy cualquiera de estas definiciones de modestia pueden ser vistas como negativas, ya que a menudo la sociedad moderna se centra en el yo: la autoestima, el auto-respeto y la expresión propia.
No obstante, un individuo modesto puede ser visto como una persona poseedora de características positivas. La humildad no necesita ser un déficit; alguien que reconozca sus propias fortalezas y debilidades, que haya llegado a sentirse cómodo con sí mismo, no sentirá ninguna competencia de otros. Se sentirá a gusto al interactuar con los demás, totalmente consciente de quién es, funcionando dentro de los límites de sus propias habilidades o limitaciones con confianza. Alguien que vive y se comporta con sencillez ejecuta calladamente las tareas y rutinas diarias sin tocar trompeta. No hay necesidad de llamar la atención. La modestia actúa con gentileza, pero con la misma perfección y cuidado de alguien que tal vez está anunciando sus logros constantemente.”
https://es.wikipedia.org

Hugo W. Arostegui

Integridad


En el sentido estricto de la palabra, la persona considerada íntegra, sería aquella que no ha tenido ningún tipo de contaminación y permanece inviolable con respecto a sus ideas originales a lo largo de todo su  proceso formativo.

Ahora bien, desde los albores de la historia conocida de nuestra humanidad, se dice que ante la alternativa de una severa advertencia en la cual incluía la expulsión de su hogar original, nuestros primeros padres prefirieron “el fruto del árbol de la ciencia del bien y del mal” a la seguridad que les representaba “el paraíso” para caer en la desobediencia y  el pecado original en un nuevo mundo, el exterior, también denominado “ el mundo solitario y triste”

De manera que por aquello de “reconocimiento de culpa relevo de prueba” podemos afirmar  que la condición humana original constituye la primera “especie en extinción” lo que nos indica que hablar de integridad original en el ser humano es una franca incongruencia.

Lo que pretendemos mencionar en este artículo es el valor de la integridad como medio de conducirse por la vida, para destacar esta condición humana como esencial en la toma de decisiones donde tengamos que anteponer nuestros intereses particulares a aquellos que resulten más beneficiosos para toda la comunidad, es a esta integridad a la que nos referimos.

Agregamos:

“Con respecto a una persona, la integridad personal puede referirse a un individuo educado, honesto, que tiene control emocional, que tiene respeto por sí mismo, apropiado, que tiene respeto por los demás, responsable, disciplinado, directo, puntual, leal, pulcro y que tiene firmeza en sus acciones, por lo tanto, es atento, correcto e intachable.
La integridad, en este último caso, es un valor y una cualidad de quien tiene entereza moral, rectitud y honradez en la conducta y en el comportamiento.

En general, una persona íntegra es alguien en quien se puede confiar.”


Hugo W Arostegui

lunes, 15 de agosto de 2016

Caminos Alternativos


Cuando nos encontramos como “atravesando un largo túnel” donde parece que no tenemos salida es necesario que evaluemos y nos digamos: ¿cómo hemos llegado a este punto? Conjuntamente con la pregunta que nos hacemos podremos observar que en este largo túnel nos encontramos solos y aunque nos parezca que “estamos en el medio de la nada” en realidad lo que nos está pasando es que percibimos la señal de alerta que nos advierte que por donde vamos ya no podemos continuar, debemos tomar una decisión y esa decisión no admite postergaciones, debemos hacerlo ahora, aunque no vislumbremos el final del túnel que nos confunde y agobia,  La decisión de cambiar nuestro rumbo nos pondrá de nuevo en el camino que nos indicará que allá, muy a lo lejos, encontraremos nuestro lugar, aquel anhelado lugar por el cual deberemos luchar.

“Sin importar qué tanto quieran decirte lo contrario otras personas… El camino del éxito, no es fácil.
No es fácil ser un triunfador. No es fácil ganar ante las adversidades, y no es fácil conquistar nuestras metas cuando tenemos situaciones, personas y elementos de nuestro entorno en contra.
Sin embargo, muchas personas confunden la dificultad de transitar el camino del éxito, con la imposibilidad de alcanzar la cima.
Algunos sencillamente creen que “no ser fácil” es lo mismo que “ser imposible”.
Y esto no es cierto, es un engaño, una vil mentira.
Cuando alguien te dice: “es imposible que seas cantante, no tienes lo necesario y además ya no se puede vivir de la música… eso era antes”, en realidad lo que te está diciendo es: “El camino del éxito es imposible para ti”.
Pero resulta que no es imposible. Es muy difícil, complejo, complicado, intrincado… pero NO imposible.
Sin embargo, las personas promedio, tienden a verse intimidadas por la palabra “difícil” porque por lo regular esta va ligada a las palabras “compromiso” y “acción”.
Cuando tenemos que actuar a pesar de las condiciones adversas, y cuando nos toca enfrentarnos al mundo para lograr nuestras metas, quizás veamos que la motivación tiende a verse disminuida seriamente, incluso cuando el futuro es prometedor.
Pareciera ser que un poco de responsabilidad nos aterroriza, y mucho más cuando se trata de responsabilidad con nosotros mismos.
El camino del éxito personal, requiere que tengamos la valentía de tomar decisiones por nuestra propia cuenta. Y requiere algo mucho más importante, que todo lo anteriormente mencionado: Pasión.
Con pasión, se alivianan las cargas, somos más felices mientras construimos nuestro futuro, y le brindamos a la sociedad un mejor resultado con base en nuestros talentos.
Finalmente, lo importante es que dicho éxito que queramos lograr, contribuya en cierta medida, a que este… sea un mundo mejor.
www.sebascelis.com

Hugo W Arostegui



domingo, 14 de agosto de 2016

Mal De Muchos…



Nuestros abuelos ya conocían un refrán que solía utilizarse cuando sentían que se intentaba esgrimir en tono de excusa que los que les había pasado ya les había ocurrido a otras tantas personas más, la respuesta era expresada en toda su extensión la cual nos decía: “el mal de muchos es el consuelo de los tontos”

Todo desafío al cual nos enfrentamos en la vida suele estar acompañado de sus consecuentes obstáculos, en caso contrario no revestiría esta condición de “desafío” cuánto mayor es la relevancia de lo que pretendemos conquistar tendremos, en contrapartida, la necesidad de realizar los mayores esfuerzos imaginables para poder coronar con éxito nuestra victoria.

Resulta obvio que como siempre suele acontecer en todos los emprendimientos humanos nos encontremos con competidores que no puedan soportar el esfuerzo requerido y abandonen antes de alcanzar la meta propuesta, quizás, veamos en esta actitud, la de claudicar ante las exigencias, una buena excusa para sumarnos al abandono, pero cuando se presentan estos momentos de flaqueza es cuando deben aflorar nuestras convicciones, recurrir a la autoestima que nos tengamos y demostrar que somos capaces de marcar la diferencia.

“Se puede decir que este refrán está relacionado con la desgracia o consuelo, ya que existen personas que se consuelan con saber que no solo a ellas le pasa una desdicha o infortunio, siendo esta idea absurda ya que los problemas no mejoran porque afectan a todos.

La expresión de esta frase enseña a todos los individuos que por buscar personas que se encuentran en la misma situación de desdicha no es suficiente para solventar el problema, aunque no es menos cierto que pueda sentir consuelo con otros que se encuentren en la misma dificultad, por ejemplo: el alumno que fue expulsado de clase junto con todos sus compañeros, de seguro es un alivio para él que todos recibieron el mismo castigo, pero esto no solventara el problema en el cual está inmerso.
En ocasiones, se usa únicamente la primera parte en un texto, y otras veces la segunda parte, por ejemplo: mal de muchos…, consuelos de tontos… Además, tiene algunas variantes, como “mal de muchos, gozo es”, “mal de muchos, consuela horrores”, “mal de muchos, consuelos de bobos”, entre otros.”

Este resulta ser “el valor agregado” que debemos aportar para poder marcar la diferencia entre lo que se “pretenda ser” y lo que seamos en realidad.

Hugo W Arostegui


sábado, 13 de agosto de 2016

El Sentido Común



Cuando mencionamos al sentido común que nos conduce a la toma de tal o cual actitud, deberíamos agregar: es el sentido común de quién? O de quiénes? A cuántos hemos solicitado su opinión al respecto, de repente nos podemos encontrar que lo que nosotros entendemos por “sentido común” es mucho menos común de lo que nos lo imaginamos.

Existe un dicho popular que nos manifiesta que lo que denominamos “sentido común” es el menos común de los sentidos lo que nos da a entender que recurrir a este sentido al que denominamos “sentido común” suele llevarnos a apreciaciones inconsultas o carentes de la aprobación general a la cual invocamos.

“El filósofo español Jaime Balmes escribió un libro sobre el sentido común. Henri Bergson define al sentido común como "la facultad para orientarse en la vida práctica".

 E. Mora-Anda dice que el sentido común nos ahorra tonterías: calcula lo probable y lo improbable, lo razonable y lo absurdo.

No se atiene a reglas sino a lo que puede funcionar y no es perfeccionista, que esto es neurótico, sino que prefiere "lo razonable", también analizado por Lin Yu Tang en "La Importancia de Vivir". Para Trout y Rivkin, el sentido común es una facultad esencial de la persona: «una facultad que posee la generalidad de las personas, para juzgar razonablemente las cosas».

Yash, Hipat Roses e Imeld lo definen como «el don provisto para saber distinguir todo lo que nos rodea: el bien, el mal, la razón y la ignorancia”.

Es muy probable que “el sentido común” les indique que no vale la pena darle tanta importancia a este asunto, de ser así, adelante, continuemos con la apreciación, ahora, si sienten algo parecido “a un bichito que nos corroe” seguramente el “sentido común” nos lo hará saber emitiendo su opinión autorizada.


Hugo W Arostegui