Los pensamientos que tenemos
y las palabras que decimos están continuamente configurando nuestro
mundo y nuestras experiencias. Muchos tenemos el viejo hábito de pensar negativamente,
y no nos damos cuenta del daño que nos hacemos a nosotros mismos. Sin embargo,
nunca estamos estancados, porque siempre podemos cambiar nuestra manera de
pensar. Cuando aprendemos a elegir constantemente pensamientos positivos, los
viejos y negativos se disuelven y desaparecen.
Así pues, mientras lees los poderosos pensamientos
siguientes, permite que esas afirmaciones e ideas te inunden la conciencia. Tu
inconsciente va a elegir los pensamientos que son importantes para ti en este
momento. Estos conceptos son como fertilizantes para la tierra de tu mente. Al
absorberlos a medida que los vas repitiendo enriqueces lentamente la base de tu
jardín de la vida. Cualquier cosa que plantes crecerá en abundancia. Te veo
como una persona sana y vibrante, rodeada de una belleza exquisita, teniendo
una vida de amor y prosperidad, llena de alegría y risas. Estás en un
maravilloso camino de cambio y crecimiento. Disfruta de tu viaje.
Los pensamientos de Louise Hay para tu inspiración:
1 Estoy en proceso de curación
Tu cuerpo sabe sanarse a sí mismo. Quita la basura negativa que lo estorba y
ámalo. Proporciónale alimentos y bebidas nutritivos. Mímalo. Respétalo. Créate
una atmósfera de salud y bienestar. Permítete sanar.
2 Confío en mi sabiduría interior
Hay un lugar dentro de cada uno de nosotros que está totalmente conectado con
la infinita sabiduría del Universo. En este lugar están todas las respuestas a
todas las preguntas que podemos plantearnos. Aprende a confiar en tu yo
interior.
3 Me dispongo a perdonar
Si nos quedamos en una prisión de rencor justiciero, no podremos ser libres.
Aunque no sepamos cómo perdonar, podemos estar dispuestos a hacerlo. El
Universo responderá a nuestra disposición y nos ayudará a encontrar la manera.
4 Todo lo que hago me satisface profundamente
Nunca vamos a tener la oportunidad de volver a vivir este día, de modo que
hemos de saborear todos y cada uno de los momentos. Hay riqueza y plenitud en
todo lo que hacemos.
5 Confío en el proceso de la Vida
Estamos aprendiendo cómo funciona la Vida. Es como aprender a utilizar el
ordenador. Cuando compramos nuestro primer ordenador, aprendemos los procesos
básicos: cómo se enciende, cómo se apaga, cómo se inicia y cómo se termina un
documento, cómo se imprime. Y nos quedamos admirados de las maravillas que hace
el ordenador. Sin embargo, vemos que es mucho más lo que puede hacer cuando
aprendemos más cosas sobre su funcionamiento. Lo mismo ocurre con la Vida.
Cuanto más aprendemos de su funcionamiento, más maravillas realiza para nosotros.
6 Tengo el espacio vital perfecto
Nuestra casa es siempre una imagen exterior de nuestro actual estado de
conciencia. Si odiamos el lugar donde vivimos, no importa a dónde nos mudemos,
porque acabaremos odiando esa casa también. Bendice tu vivienda actual con
amor. Agradécele que provea a tus necesidades. Dile que te vas a mudar y que
otras personas maravillosas van a venir a ocupar tu lugar. Deja amor cuando te
marches y sentirás el amor en tu nueva casa. Antes de encontrar el lugar donde
vivo ahora, decidí que deseaba comprar una casa a personas que amaran. Desde
luego, eso es exactamente lo que encontré. Mi casa está llena de vibraciones de
amor.
7 Puedo liberar el pasado y perdonar a todo el
mundo
Tal vez no queramos olvidar viejos agravios, pero aferrarnos a ellos nos
mantiene estancados. Cuando dejo atrás mi pasado, mi momento presente se vuelve
más rico y pleno.
8 El poder está siempre en el momento presente
Aunque haga mucho tiempo que tenemos un problema, siempre podemos comenzar a
cambiar en este momento. Porque cuando cambiamos nuestra manera de pensar,
también cambia nuestra Vida.
9 Estoy a salvo, sólo es un cambio
Lo que creemos se convierte en realidad. Cuanto más confiamos en la vida, más
nos apoya.
10 Me dispongo a cambiar
Todos deseamos que la Vida y los demás cambien. Pero nada va a cambiar en
nuestro mundo mientras no estemos dispuestos a hacer cambios en nosotros
mismos. Muchas veces nos aferramos con fuerza a hábitos y creencias que ya no
nos sirven de modo positivo.
11 Es sólo un pensamiento, y los pensamientos se
pueden cambiar
Las posibilidades más terribles que nos podemos imaginar sólo son pensamientos.
Con facilidad podemos negarnos a asustarnos de esa manera. Nuestros
pensamientos han de ser nuestros mejores amigos, pensamientos que nos
configuren nuestro mundo de manera positiva. Pensamientos consoladores,
agradables, amorosos, amistosos, pensamientos risueños. Pensamientos sabios e
inspirados.
12 Cada pensamiento que tengo está creando mi
futuro
Siempre soy consciente de mis pensamientos. Soy como un pastor de un rebaño de
ovejas; si una se despista y se va por su cuenta, con amor la hago volver con
las demás. Si advierto en mi mente un pensamiento poco compasivo, nada amable,
rápidamente lo reemplazo por uno compasivo y amable. El Universo siempre
escucha mis pensamientos y responde a ellos, y yo los mantengo tan limpios y
claros como puedo.
13 Nadie es culpable
Si nos ponemos en la piel de otra persona, comprendemos por qué se comporta de
la manera como lo hace. Todos hemos sido hermosos bebés, totalmente abiertos,
con confianza en la Vida, mucha autoestima y una sensación de valía personal.
Si no somos así ahora, es porque en algún lugar del camino alguien nos enseñó a
ser de otra manera. Podemos desaprender la negatividad.
14 Dejo marchar todas las expectativas
Si no tenemos expectativas concretas no podemos tener decepciones. Si nos
amamos y sabemos que sólo nos esperan cosas buenas, no importa qué venga,
porque será bueno y gratificante.
15 Veo las cosas con claridad
La mala disposición a «ver» ciertos aspectos de nuestra vida puede nublarnos la
vista. Suele ser una forma de protegernos. Los ópticos hacen poco para curar
los problemas de la vista; sólo recetan lentes cada vez con más aumentos. La
mala alimentación también contribuye a empeorar la visión.
16 Estoy a salvo en el Universo y la Vida me ama y
me apoya
Llevo esta afirmación en mi monedero. Siempre que saco dinero de él leo: «Estoy
a salvo en el Universo, y la Vida me ama y me apoya». Es un buen recordatorio de
lo que es verdaderamente importante en mi Vida.
17 Mi Vida es un espejo
Todas las personas de mi Vida son reflejos de una parte de mí. Los seres que
amo reflejan mis aspectos amorosos. Las personas que me caen mal reflejan esas
partes mías que necesitan curación. Todas las experiencias de la Vida son
oportunidades para crecer y sanar.
18 Equilibro mi parte masculina y mi parte femenina
Todos tenemos una parte masculina y otra femenina. Cuando están equilibradas,
estamos sanos y completos. El hombre totalmente macho no está conectado con su
lado intuitivo. Y una mujer débil y frágil no expresa su lado fuerte e
inteligente. Todos necesitamos ambas partes, la masculina y la femenina.
19 La libertad es mi derecho divino
En este planeta, disponemos de una total libertad de elección. Y nuestras
elecciones las hacemos en la mente. Ninguna persona, ningún lugar ni ninguna
cosa puede pensar por nosotros si no lo permitimos. Sólo uno mismo puede pensar
en su mente. En nuestra mente tenemos libertad absoluta. Lo que elegimos pensar
y creer puede cambiar nuestras circunstancias actuales hasta hacerlas
irreconocibles.
20 Dejo marchar todos los miedos y dudas
Los miedos y las dudas sólo son mecanismos de retraso que nos impiden tener lo
bueno que decimos desear en nuestras vidas. Dejemos que se vayan.
21 La Sabiduría Divina me guía
Son muchas las personas que no saben que en nuestro interior tenemos una
sabiduría que siempre está de nuestra parte. No prestamos atención a nuestra
intuición y después nos preguntamos por qué la Vida no nos funciona bien.
Aprende a escuchar tu voz interior. Sabes exactamente lo que te conviene hacer.