jueves, 6 de junio de 2019

La Humanidad “Nuestra”


Esta mañana, al levantarme, se instalaron en mi pensamiento, una sucesión de imágenes intermitentes, como las luces que adornan los arbolitos de navidad, donde aparecían personas de distintas razas, que a medida que surgían, iban conformando un mosaico multicolor, en el cual se podían apreciar las múltiples facetas expresivas que nosotros, los humanos, hemos sabido cultivar a lo largo y ancho del planeta que habitamos, desde mucho antes de que la historia comenzase a registrar y luego intentar  ordenar y compilar, las distintas versiones ,que sobre nuestro origen y razón de ser, se nos han querido transmitir, como un preciado legado de los dioses, a nuestras ansias de saber y comprender, las incógnitas y los por qué, de nuestra  presencia en un habitad compartido con una infinidad de especies a las cuales consideramos inferiores ,y por ende, sometidas a nuestro arbitrio y voluntad.

Si quisiéramos encontrar un denominador común, para toda la gama de sensaciones que germinan en nuestro huerto ancestral, todo parece indicar que las semillas que han dado origen a nuestra especie, han provenido de viveros situados en el exterior de este planeta, lo que nos convierte en algo así como extraterrestres, sentimos en nuestro fuero íntimo, que provenimos, al nacer, de algún lugar lejano , donde estábamos mucho mejor de lo que podamos lograr estar en este mundo, que mirado de esa manera, se parece más a un lugar de prueba, donde tendremos que vivir la ley de obediencia y sacrificio, y anhelar la intervención divina para limpiarnos del pecado original, consecuencia de la desobediencia heredada de nuestros primeros padres.


Esas imágenes, a las cuales hago referencia, son una representación de un “yo” colectivo, o mejor dicho, un “yo” y un “tu” colectivo, pues resulta inadmisible concebirme a mí mismo,  en prescindencia del otro, o los otros, los demás tú, que conjuntamente conmigo, conjugan el verbo que desde el principio dan sentido a todo lo humano.

La Ausencia De Límites

Es muy común, sobre todos en los más jóvenes, la búsqueda constante, de alternativas que les permitan la evasión a todo lo que pueda ser interpretado como una limitación, sea de la índole que fuese, para muchos de los que nadan en el mar de la ignorancia, la verdadera libertad, estriba en vivir fuera del alcance de toda norma que, siquiera intente, poner algún freno, a sus cada vez más acuciantes deseos de poder gozar de una libertad irrestricta.

Ahora bien, hagamos un esfuerzo por entender, qué es, lo que realmente está pasando, en cada una de las incontables constelaciones, que dan vida y sentido a este universo tan plagado de intereses en pugna como lo es sin duda el complejo mundo de las relaciones humanas.

En nuestros días, podemos decir, que hemos dado pasos significativos, en todo lo referente a los Derechos Humanos, mucho se ha legislado sobre este tema, aunque esto no signifique que la mera normativa del derecho, haya tenido como resultado el acatamiento a lo que la ley determina sobre el tema, sobre todo en la protección de los más débiles, como es el caso de las mujeres y los niños, la violencia doméstica, de género, y todos los tipos de violaciones a las que son expuestas las minorías.
Todos los días, las páginas de los periódicos y los noticieros de radio y televisión,  nos ponen en evidencia de cuán lejos estamos de erradicar esta afrenta, verdadero escupitajo en el rostro, a una sociedad,  que contempla, estupefacta, como, al igual que los insectos encandilados, sus hijos se mutilan y mueren, sin ninguna otra razón, que la simple irracionalidad de sus actos.

Todo parece indicar que el hábitat del hombre se encuentra bajo la amenaza del propio hombre, el cual está demostrando, pese a los altos grados de evolución alcanzados en el campo de las ciencias, la tecnología y en el de las comunicaciones - por citar algunos- es incapaz de transmitir valores esenciales a sus crías, las cuales crecen insensibles a las reales necesidades de su propia especie, transmutando el sentido armónico de la convivencia solidaria, por la búsqueda constante del sometimiento de los unos sobre los otros, como si los cimientos heredados por siglos de civilización, parecieran un vetusto y arcaico lastre, de los cuales es preciso liberarse cuanto antes.

Miramos, en nuestra ruta imaginaria, las señales de tránsito, las  que han sido puestas para orientarnos, las que intentan guiarnos con seguridad a nuestro destino, pero resulta que hacemos caso omiso a sus recomendaciones, despreciamos los límites recomendados y nos dejamos seducir por el instinto, ajenos a la razón, optamos por la irracionalidad, actitud propia del que se considera superior o mejor dotado para tomar decisiones, aunque estas decisiones, no sólo nos afecten a nosotros, sino, lo que es más grave, afecten a todos en nuestro entorno, incluyendo, muchas veces, a quienes más amamos en la vida.


Entonces, ocurre lo que sabemos que va a ocurrir, tomamos el volante y, mientras la luz verde esté encendida,  continuaremos raudos nuestra marcha, cuando se enciende la amarilla, aceleramos para intentar pasar antes del cambio, y cuando la luz roja nos indique que debemos parar, la adrenalina acumulada nos inducirá a pensar de que aún es posible continuar y seguimos avanzando…

… El impacto es apenas unos instantes, sus consecuencias suelen durar una eternidad.


Quizás haya llegado la hora de poner un poco más de atención a lo cotidiano, a las cosas que suceden por la sencilla razón de que alguien ha estado allí para hacer que acontecieran, los que cumplen sus roles cuasi ignorados, como las abejas obreras en la colmena, nos referimos a los guardias de tránsito, los bomberos, las ambulancias, los servicios de emergencia, los centros asistenciales, los que hacen lo imposible por la rehabilitación perdida, y …por supuesto, a  aquellos que toman sus palas y cavan las sepulturas.

Titiriteros

La vida que construimos condiciona nuestra relación con los demás, las experiencias vividas, es decir, el acumulado de situaciones de las cuales hemos sido actores, ya sea en forma voluntaria – cuando hemos sido autores o coautores de los mismos – o involuntariamente – cuando los acontecimientos generados por terceras personas nos involucran ya sea para nuestro bien o para soportar sus consecuencias.

Lo que llamamos nuestra vida, aun cuando la vivamos en estrecha relación con las personas que comprenden nuestro entorno, las cuales son parte del entramado social de nuestras relaciones cotidianas, no puede ser vista como la consecuencia de un comportamiento padrón, modelado por las circunstancias comunes que supuestamente nos hemos visto obligados a aceptar, ya sea por sometimiento o sujeción voluntaria.

Cuando nos damos cuenta que nuestra existencia se relaciona en el devenir de los acontecimientos con la existencia de otros seres, otros “yo soy”, formando una constelación de entidades unipersonales que no siempre lograr dominar  el rumbo de sus orbitas, colisionándose, las unas contra las otras, cuando el efecto de este encuentro es armónico, solemos decir que se ha provocado el desprendimiento de alguna misteriosa substancia, que hemos captado cierta “química”  que nos atrae al uno hacia el otro.

Estas atracciones, pueden llegar a mantenerse por largos períodos, incluso  toda una vida.

Cuando este encuentro se produce en circunstancias adversas, conflictivas, inmediatamente activamos nuestros mecanismos de defensa, nos ponemos en guardia, desconfiados, agresivos  y/o temerosos, intentando justificar tal proceder, con el argumento de que tal persona tiene muy “mala onda”.

Tales momentos de percepción de nuestra condición humana, la cual, como lo  hemos expresado tantas veces, es esencialmente social, y, por esta circunstancia, extremadamente permeable a los acontecimientos que se desarrollan, ininterrumpidamente, en este gran escenario donde se exhibe el drama del diario vivir, en el cual, todos, interpretamos nuestro  propio papel siguiendo un libreto improvisado por las circunstancias compartidas.

Quizás, en situaciones como las descriptas, nos preguntemos, por las razones, si es que hay alguna, de que pertenezcamos a una especie, que según nos han dicho, es la única sobre la faz de este planeta que tiene conciencia de ser, es decir, que estamos condenados a saber de nuestra existencia, desde su principio al de su inevitable fin, la certeza del nacimiento y la acechanza constante de la muerte, constituyen elementos centrales del drama humano.

Las preguntas que nos formulamos, requieren alguna respuesta, y esta, la respuesta que afanosamente buscamos, en muy contadas ocasiones surge de nuestro fuero interior, lo más probable es que en el afán de satisfacer la ansiedad que nos embarga en cuánto a los motivos de nuestra condición actual en esta vida, de donde surgen los atributos de nuestra especie, y, sobre todo, hacia dónde nos dirigimos, recurramos a la búsqueda de las distintas posturas que sobre este trascendental tema se nos exhiben por parte de aquellos que se autoproclaman como guías, orientadores autorizados, poseedores de la mística y única llave capaz de abrirnos las puertas del infinito.

El mercado del conocimiento ilustrado que pretende darnos una respuesta a nuestras interrogantes, está atiborrado de ofertas, si pudiésemos recorrerlo, como quién recorre una feria, oiríamos a sus mercaderes corear a viva voz las ventajas de sus enunciados, llamando nuestra atención  a través de la piadosa agresividad de sus argumentos.

En cada rincón de esta imaginaria feria se nos dirá que ese lugar específico, y ninguno de los otros lugares que les circunda, es el que tiene el único conocimiento verdadero, que es a ellos, y solamente a ellos, que se les ha conferido el poder de llevarnos a la salvación , al encuentro del paraíso perdido.

Al transitar por ese mundo, el llamado mundo de los “ismos”  veremos que el simple hecho de estar vivos, nos convierte en una valiosa mercancía, una presa apetecible para ofrendar a sus dioses, ya sean éstos dioses, canonizados, idealizados,  o deambulen perdidos  por las sendas del nihilismo.

Encontraremos allí, capitalismo, fascismo,  comunismo, cristianismo, islamismo, judaísmo, existencialismo, materialismo, ateísmo, etc. etc. todos con su dogma debidamente estructurado, férreo, inconmovible, plantado con todas sus huestes en el campo de batalla, con la finalidad de luchar hasta el fin contra todos los demás, porque,  para el ismo, los demás están en el error, sumidos en la ignorancia y deben ser destruidos , humillados ,para que de esta forma acepten “nuestra verdad”  la única, la verdadera.

Es que parece que para asegurarnos el porvenir, debemos estar protegidos por la coraza de nuestro credo, el dogma nos exige no salir de sus bien delimitados confines, fuera de sus fronteras está la perdición, lo expresamente prohibido
.

Para los ismos, la tierra aún es como un plato, afuera seremos atrapados por las tinieblas y caeremos inexorablemente al abismo.

Detrás De La Pequeña Cuesta


Parado en la cima de mi pequeña cuesta, descubro un nuevo cielo y un sinnúmero de estrellas  que la pequeña mísera cuesta me ocultaba, y al final del nuevo horizonte que se habría ante mí, emerge desafiante la cima de otra pequeña y mísera elevación, que me extiende sus brazos en forma de intrincados senderos como invitándome a sumergirme en su seno, descubrir sus entrañas y nutrirme de sus secretos.

Hay días en que la añoranza paraliza mis torpes avances, cuando las imágenes de un tiempo que ya fue, se clavan profundamente, como un punzante cilicio que desgarra con sus dientes de acero, los sentimientos que anidan en lo profundo de mi ser y que me gritan miles de súplicas y reproches, como el canto de las sirenas que conducen al abismo de la negación, la angustiosa sensación de no ser nadie sin nuestro entorno perdido.

“Todo es energía, el amor, el odio, la envidia, los sentimientos, los pensamientos y para que sepamos manejar bien nuestra propia energía tenemos el libre albedrío.

Y a través de varias vivencias agradables y desagradables, de pasar por muchas experiencias a veces muy dolorosas, tremendas, muy fuertes de aprendizaje, sabemos reconocer los beneficios que otorga la energía de lo bueno.

Pero para eso tendríamos que hacer un largo aprendizaje para llegar a saberlo y para ello teníamos que ir a una escuela, a la escuela de la vida, a la escuela del mundo.

Es la escuela de la vida mi gran oportunidad por eso es tan importante y es lo único realmente mío que tengo, mi propia vida.

Y debo saber que esta vida, la vida de todos los días, es la que me proporciona el verdadero aprendizaje, del vivir.

En el arduo aprendizaje del vivir aprendemos a manifestar la esencia, a través de las diferentes expresiones de nuestro accionar, de nuestros pensamientos, sentimientos, y de los hechos en que tomamos parte.

Nos movemos entre el odio y el amor, entre el bien y el mal.

Las circunstancias adversas siempre nos enseñan algo. Y debemos preguntarnos:
¿Qué debo aprender de esto que me pasa? para no repetir otra vez la misma historia.
Pero siempre cambiamos después de atravesar una crisis.

Nunca somos los mismos luego de una situación límite y a veces esa situación nos hace tocar fondo.
Está en nosotros el saber levantarnos, en la adversidad para ser mejores y más fuertes o caernos sin saber levantarnos del abismo de la desesperación y la angustia.

Hay un dicho: Santos no son los que nunca cayeron, sino los que siempre se levantaron.

Y a veces ¡qué largos, estrechos y difíciles caminos tenemos que recorrer para llegar a la paz y la felicidad dentro de nosotros!”

Elsa Bianco – Aprendiendo a Vivir,  páginas 38 – 40

Los Dueños Del Tiempo


Estamos tan acostumbrados a que los días transcurran, uno tras otro, que nos parece que la vida no es otra cosa que una sucesión interminable de espacios de tiempo a los que llamamos minutos, horas, días, semanas, meses, años, etc.

Ahora, ¿existe el minuto siguiente? ¿La hora siguiente? ¿Los días, semanas, meses, años, etc.?
En realidad, lo que aún no ha sido creado, no existe, damos por descontado que tendremos el minuto siguiente, la hora, los días, y así sucesivamente, en una secuencia natural, de la cual nos hemos apoderado, tal como si fuésemos los creadores, amos y señores de todo lo porvenir.

Esa ilusión, de que el tiempo nos pertenece, es la que nos lleva a pensar que podemos hacer uso y abuso de todo lo que gira en su entorno, el ayer ya pasó, hoy, no sé si lo podré realizar, pero mañana… ha… mañana sí, sin duda, comenzaré a realizar lo que no pude o no quise hacer, ayer, antes de ayer, o quizás hoy mismo.

Nosotros transitamos por la vida y lo que la vida consume es tiempo, de no contar con este precioso elemento, tan esencial como el aire que oxigena nuestros pulmones, la existencia, tal como la percibimos, dejaría de ser, nos sentimos atrapados por el tiempo, de la misma forma que los objetos, sujetos como a una ley de gravedad que nos condena a no poder salir de la materialidad que nos rodea.


miércoles, 5 de junio de 2019

El Valor Agregado


Cuando dedicamos algunas líneas para hablar sobre El Valor Agregado, el pensamiento y la intención nos lleva a relacionar este término, con factores relacionados con la incorporación de valor a los productos primarios a través de la transformación de los mismos en producción final de bienes y o servicios que generen una mayor participación de recursos humanos y horas hombre calificada.
También se menciona este término cuando hablamos de política fiscal, de la necesidad de las economías nacionales de una mayor y mejor redistribución de la riqueza, mediante la aplicación de tributos que graven la cadena productiva con un impuesto al consumo, el cual es conocido internacionalmente como: Impuesto al Valor Agregado.

Un tema importante y recurrente que no se agota, que seguramente su vigencia se mantendrá latente, a medida en que las economías crecen en complejidad y los efectos de la llamada globalización, la cual nos amplia mercados pero también nos torna cada vez más vulnerables a lo que pueda suceder en cada rincón remoto del planeta.

Pero esta vez quiero poner un dique en la corriente del pensamiento tratando de evitar que el mismo se precipite en los profundos surcos ya mencionados e intentar un ligero desvío que nos permita incursionar por algunas sendas menos transitadas pero igualmente interesantes de incursionar. 

 Ahora bien, reflexionemos, ¿qué significa para nosotros nuestra propia vida? Hemos dicho que la existencia es un desafío individual indelegable, sin duda no existe un desafío más importante, una empresa de mayor trascendencia, que la de construir con los elementos que estén a nuestro alcance, una vida digna que nos identifique con los valores inherentes a nuestra condición de pertenencia a la raza humana.

Sin duda alguna, la vida es un desafío, y un desafío significa enfrentar la adversidad, correr riesgos, esforzarse por vencer y luchar hasta alcanzar la victoria, esto es la vida.

Si alguien puede creer que esto que digo es fácil de realizar, entonces nunca se ha tenido que enfrentar seriamente con la adversidad, y si nunca se ha tenido que enfrentar seriamente con la adversidad, no conoce nada de los valores humanos, porque los valores humanos sólo crecen en medio de la adversidad.


A lo que hayamos recibido, además de ser gratos por quién nos lo haya proporcionado, debemos agregarle más valor, multiplicar lo que se nos ha dado y que aún no estamos en condiciones de devolver, para que podamos ser merecedores de ser llamados dignos de recibir la gloria del triunfo, esto es El Valor Agregado al que hago referencia en este artículo. 

Podría hablar horas y horas sobre este tema, pero dejémoslo aquí, les he sembrado unas cuantas semillas de inquietud, el resto es tarea individual de cada uno. 

Hablemos Simple Y Claro



Voy a intentar abordar un tema, que seguramente, es uno de los cuales hemos oído hablar más, desde los albores de nuestra toma de conciencia de que somos parte de un mundo que nos rodea.

Quién de nosotros no ha sido testigo, de las diversas formas, en que, nosotros los humanos, nos explicamos y transmitimos la noción, de que existe un Dios omnipotente, que escucha nuestras oraciones y súplicas, y al cual debemos recurrir cuando nos vemos en dificultades que superan nuestra capacidad de resolución.

En nuestro entorno, siempre nos han rodeado imágenes de rostros idealizados, las cuales representan, a hombres y mujeres, que han dejado de ser, precisamente, hombres y mujeres, para ser recubiertas por un halo solar, que las convierten en poderosos mediadores, entre nosotros, los pecadores mortales, sujetos a un cuerpo de carne y hueso, sexualmente definido, y nuestro creador al que llamamos Dios.

Estas imágenes de personajes asexuados que han superado las limitaciones de la carne, nos son presentadas, como personajes santificados, cuando utilizo el término asexuados, es porque jamás les veremos en una relación directa con el sexo opuesto, las que han nacido mujeres, son vírgenes, y los que se nos representan como varones, son castos y santos, nunca les veremos asociados a lo que llamamos una vida en familia. 

La salvedad a estas imágenes, que se han enquistado en nuestro subconsciente, es la de la “sagrada familia” compuesta por José, María, y el niño Jesús, pero claro, acompañada por la correspondiente aclaración: que José no es el padre de Jesús, y que María, es madre, pero “sin pecado concebida” por obra y gracia del Espíritu Santo, dándonos el mensaje, de que todos los demás concebidos en este mundo, nacemos bajo el signo pecaminoso de “ las debilidades de la carne.”

El mundo occidental y cristiano, al cual pertenecemos en estas latitudes, ha sido impregnado de éstas imágenes, todas las religiones que se sustentan de este tronco inicial, recompuesto a la voluntad, interés, y capricho, de un poderoso emperador, llamado Constantino el Grande, de una forma u otra, rinden tributo a este personaje, de carne y hueso, como cualquiera de nosotros, pero que contaba con la poderosa arma del poder, y de los recursos que de éste emanaban, para condicionar desde entonces, nuestro modo de pensar y adorar.

Nuestro Mejor Lugar


 Estos días estamos siendo saturados por la propaganda preelectoral para las próximas elecciones donde se elegirán las autoridades que deberán representarnos, a todos los que somos potenciales electores, en la conducción de la administración de este lugar, un lugar, que, por las razones que cada uno pueda esgrimir, es el que compartimos con otros conciudadanos, con quienes conformamos esto, que entre todos se ha construido.

En la medida en que nos sintamos parte integral de esto, en que sepamos que lo que tenemos no es un simple lugar en el cual “alguien” o “ algunos” cada cierto tiempo deberá conducir su destino, para bien o para mal del conjunto de todos, y, cuando digo todos, me refiero a ti, a mí, a mis familiares, amigos, vecinos, a los de este barrio y a los que viven en los otros barrios, pueblos, villas, ciudades, en los pobladores urbanos y los que habitan en áreas rurales, todos es mucho más que uno o algunos, todos constituimos ciudadanía, todos, absolutamente todos, sin exclusiones, compartimos y damos sentido a esto, y esto, no es otra cosa que una realidad que nos identifica, que nos ubica , no solamente en un mero punto geográfico de una nación, sino , y esto es lo más importante , nos esboza el perfil humano colectivo, el cual podrá gustarnos o no, pero es la imagen que generamos , esto, es nada más ni nada menos, que el lugar en el cual nos está tocando vivir.

El mejor lugar no podrá construirse jamás sin tu propia participación, nadie puede , y si pudiese, no debe, hacer por ti, aquello que tú deberías realizar por ti mismo, de manera que si lo que pretendes, es transformar el lugar donde vives, en el mejor lugar para vivir, no basta con dejarte horadar los oídos por la propaganda un tanto compulsiva de algún pretendiente a Mesías, que te promete ser el salvador y redentor de todas tus dificultades ciudadanas, si sólo le sigues y le proporcionas tu voto en la próxima elección.

El mejor lugar, dependerá siempre de ti, de tu proyecto de vida, de lo que estés dispuesto a invertir para alcanzarlo, sin tu esfuerzo y sacrificio personal, nunca podrás concretar tus metas.

Volviendo al principio de este artículo, te sugiero que prestes atención a lo que suena a tu alrededor, lo que pasa delante de ti , en esta verdadera calesita de promesas que gira y gira, saturando nuestra vista y audición con las más variadas ofertas de buen gobierno, y poniendo cierta distancia, como quien se dispone a observar una obra de arte, te detengas a contemplar sus luces y sus sombras, sus proporciones, la capacidad expresiva de su autor, y sobre todo, si le encuentras algún valor ético o estético a tal representación.

El mejor lugar lo disfrutaremos todos, sin privilegiados ni excluidos, cuando todos y cada uno, tanto tú como yo, nos decidamos a ser cada día mejores personas, a superar nuestras propias limitaciones, no importa la relevancia de lo que hagamos, ni a la mal llamada clase social de donde provengamos, lo que verdaderamente importa es que si eres un obrero o un empleado, que seas un buen obrero y un buen empleado, que si eres un empresario o un comerciante, que no evadas tu responsabilidad social, lo mismo vale para cualquier actividad que se realice o para el grado de instrucción que hayas alcanzado.

Si quieres un mejor lugar para vivir, comienza a construirlo ahora, ¿mañana? Ese mañana no lo esperes, porque ya pasó.


Los Sobresalientes


Hay pocas personas que alcanzan la total extensión de su capacidad durante el transcurso de sus vidas.

Se ha demostrado que la mayoría de la gente no utiliza más allá de un 5% de su capacidad intelectual.

En años recientes, muchos científicos se han dedicado al estudio de la capacidad humana. Esto se ha denominado: " ANTROPOMÁXIMOLOGIA”

Todos hemos notado que hay personas sobresalientes en el mundo.¿ Qué es ? lo que hace la diferencia entre éstas y el resto de nosotros.

Este pequeño grupo (0,5% - 1% ) son los que vibran o conmocionan a los demás.

Todos los grandes personajes de la historia han sido de este calibre.

Aunque esta posibilidad no está limitada a los que han sobresalido sino que cada persona tiene el mismo potencial, todos debemos y de hecho tenemos la grandiosa oportunidad de por lo menos intentar lograr el desarrollo máximo de nuestra capacidad.

Para que podamos evaluar y analizar nuestra propia capacidad de desarrollo, aquí 
se detallan algunas de las características de aquellos que alcanzan ciertos grados de destaque.


El conocimiento y sobre todo la aplicación de éstos atributos en nuestras propias vidas nos ayudará a lograr integrarnos a este selecto grupo de triunfadores.

He aquí los atributos que hacen la diferencia, “el valor agregado” que hace diferentes a las personas que logran el éxito en sus emprendimientos:

1 ) Nunca quedan satisfechos con su nivel de desarrollo; siempre quieren exceder lo 
Realizado anteriormente.
2 ) Evitan las situaciones cómodas. Hacen las cosas aunque no les gusten porque 
saben de la importancia de su realización.
3 ) Tienen metas apremiantes. No sólo sienten que DEBERÍAN hacer algo, sino que 
les impulsa la voluntad de que TIENEN que hacerlo.
4 ) Nunca culpan a otros. Resuelven los problemas. Cualquier tarea es un desafío que 
hay que superar.
5 ) Les gustan e incentivan los riesgos. Pero toman estos riesgos con juicio y
moderación-
Nunca toman riesgos con descuido y sin calcular. Evalúan y proceden con tacto y 
sin temor
6 ) Tienen VISIÓN son capaces de prever en sus mentes los resultados antes de 
embarcarse a la ejecución del plan propuesto.
7 ) No son esclavos del trabajo, sin embargo si deben llevar a cabo algo, trabajarán 
las 24 horas del día si es necesario.
8 ) Se manejan bien con las presiones. Reconocen que a nadie le interesa si están 

nerviosos o presionados. Saben que sólo ellos deciden qué hacer con sus vidas. Necesitan la tensión de la exigencia, pero confían en su capacidad de decisión.
9 ) Son objetivos. No son egoístas. Dejan que otros reciban el reconocimiento de un 
atributo cuando se lo merecen.
10) Comprenden la naturaleza de la energía. Saben que si aplican suficiente fuerza 
energética serán capaces de mover cualquier cosa.
11) Saben el significado de nutrir. Edifican y nutren a otros, siempre dejan las cosas
mejor de como las encontraron.
12) Entienden la sociabilidad. Disfrutan de los demás pero no dependen de ellos, se 
alejan de sus amigos y las diversiones si hay cosas más importantes o prioritarias 
que realizar.
13) Utilizan y entienden la auto-disciplina. No dejan que los hábitos, deseos y faltas 
los controlen pues han desarrollado la capacidad de controlarse a sí mismos. 
14) Tienen CORAJE. No son reacios por que los demás no se atreven a hacer algo.
Toman decisiones y no vacilan. 
15) Tienen confianza en sí mismos. No dudan ni titubean. Su confianza se nutre de 
acción y obras. 
16) Entienden la importancia de vivir en el presente. No viven con los laureles del 
ayer ni con las aspiraciones del mañana; ellos apuntan a lo mejor en el presente. 
17) No se preocupan por los errores pasados y nunca basan las decisiones de hoy en 
los errores del ayer. Esperan y viven por el éxito del presente. 
18) Reconocen que las experiencias vienen individualmente y no por grupo. 
Cuando reciben alguna capacitación, aplican las enseñanzas a sí mismos y no se 
escudan ni están pendientes de los errores de otros.
19) Son rápidos para perdonar, olvidan y siguen hacia delante desde dónde están.
Saben cómo perdonar sus propias fallas. 
20) Comprenden la importancia de la empatía, ellos son capaces de interpretar los 
sentimientos de otras personas, desarrollando al máximo esta cualidad. 

Las Garras Del Consumismo

En los países desarrollados dónde las personas tienen acceso a innumerables ofertas de la más variada gama que podamos imaginar, dónde la única limitación la constituye el nivel de ingresos del individuo o su núcleo familiar, existe una creciente preocupación por intentar orientar a las personas a que puedan ordenar sus finanzas y de esta manera balancear su frenético ritmo de gastos con los ingresos que obtienen.

La sociedad en términos generales cuida su crédito porque, sin él, literalmente desaparecen las oportunidades de todo tipo, que a diario se ofrecen, para aquellos que encuadran dentro de la definición de buenos pagadores.

La crudeza de esta realidad nos indica, que, si una persona no tiene crédito, por mas efectivo que maneje, sencillamente no existe, la ausencia en los registros de las controladoras de crédito y el hecho de no tener antecedentes en la materia les impide el acceso al sistema de tal modo que la persona solo podrá moverse dentro de las limitaciones de su poder adquisitivo en efectivo, no podrá contar con ninguna otra alternativa bajo ningún concepto.

Eso para una sociedad de alto consumo es una razón más que suficiente para que se busque, por todos los medios, mantener una conducta crediticia confiable.

No obstante, ante la tentación creciente de ofertas verdaderamente increíbles, es muy común vivir al filo de la navaja, al borde del abismo, contrayendo compromisos de pago que no pueden ser cubiertos en las fechas previstas de amortización, ocasionando altos costos adicionales por concepto de intereses y las consecuentes restricciones en la concreción de nuevos créditos en el futuro, los cuales si los obtienen, serán en condiciones desventajosas con relación a los obtenidos anteriormente.

Esta situación ha llevado a crear verdaderas crisis de relacionamiento en los núcleos familiares, siendo una de las principales causas de ruptura de esos vínculos.

El exceso de consumo está considerado como una verdadera plaga y es motivo permanente de atención por las autoridades de gobierno así como de agentes sociales y predicadores de todas las religiones.

Una sociedad desarrollada está orientada al consumo al punto de no concebir otro medio de subsistencia, la sociedad de consumo pregona el concepto del hombre de pie,
seguro de si mismo, capaz de producir bienes y servicios que redundarán en mayores ingresos, ingresos que se volcarán nuevamente al mercado a través de ofertas de bienes de consumo, seguros de vida, inversiones, viajes de placer, etc. etc.
Si en estas sociedades existieran economistas como los que pululan por nuestros medios subdesarrollados, que pregonan la contracción del consumo, para generar recursos para el pago de deuda externa y atender las necesidades del Estado, no sólo serían tratados de ignorantes sino que les dirían: Señores, el hombre debe estar de pie, confiado en si mismo, capaz de producir bienes y servicios, de obtener un ingreso digno y gratificante el cual volcará nuevamente al mercado, esa es la fuente de la inversión, la inventiva, allí están los nichos de mercado ha satisfacer los cuales darán ritmo a la creatividad de los empresarios y medios de difusión, el hombre con capacidad de consumir es la vida de todo el sistema.

La persona sin trabajo y sin un salario digno es un miserable, un esclavo, un demente enchalecado con el mas siniestro de los chalecos de fuerza, el chaleco económico, impuesto por los popes del sistema, los que son guiados por los que viven fuera de la caverna, los creadores de la Biblia económica para aplicación en los países que deben mantenerse a toda costa sometidos y dependientes.

No es de extrañar que se escandalicen cuándo hablamos de estas cosas, no estamos saliendo del libreto autorizado, decir que la política económica y la fiscal, son herramientas que deben estar subordinadas a la política social, para ellos es una herejía, pero nuevamente reafirmamos, la economía es una ciencia social, sus principios están íntimamente relacionados con el resto de las ciencias sociales, su razón de ser es la sociedad en la cual está inserta, el éxito de su aplicación se mide en la calidad de vida de los habitantes de esa sociedad, cuando sus resultados se miran con beneplácito por otros lares, sabremos a ciencia cierta a quién representan y sirven. 

Como puede apreciarse existe una marcada diferencia entre las políticas económico-sociales aplicadas en el mundo desarrollado y las medidas que se implementan en nuestro medio, diferencias que asocian subdesarrollo a subordinación y dependencia.

Meditar sobre estos temas nos ayudará a comprender el altísimo costo social que soportan los países que padecen las recetas de los chalecos económicos, recetas que son concebidas para aplicar en el mundo subdesarrollado pero que son inadmisibles e impracticables en el mundo desarrollado, ¿ por qué será ?.

La Conducta Sexual De El Clero ¿El Huevo O La Gallina?


Los acontecimientos que han escandalizado a la opinión pública mundial en estos últimos días, referente a las denuncias de abusos sexuales por parte de algunos sacerdotes católicos, abusos, que han sido perpetrados a lo largo de toda su vida clerical, que no han sido consecuencia de un impulso involuntario o debilidad circunstancial, sino producto de toda una gama de perturbaciones, surgidas en la maquiavelista impronta de los seminarios formativos, dónde se cultivan, en el nombre de dios, -con minúscula- conductas reñidas con lo que la “letra de la Ley” divina, ha decretado en cuanto a la moral y las buenas costumbres.

Este tema, dista mucho de ser considerado, un fenómeno contemporáneo, fruto de la “modernidad” que todo lo corrompe, la pérdida de valores, o la crisis económica y social, si así fuera, tendríamos que pedir urgentemente a los cielos, el envío en forma inmediata, de nuevos mandamientos, que sustituyan los viejos escritos de Moisés, por otros que puedan estar más en sintonía, con los traumáticos cambios que sacuden este mundo globalizado.

La historia, que todo lo registra, el tiempo Transcurrido, que nos ha permitido “desclasificar” archivos celosamente guardados por la censura, nos permite tomar conocimiento de cómo han sido las cosas desde siempre, es así como sabemos cuántos prelados de la antigüedad, muchos de los cuales han sido canonizados y cubiertos por el manto de la santidad, han incurrido en las mismas desviaciones, por los siglos de los siglos, amén y amén.

Algunos de estos clérigos, en la actualidad, han sido suspendidos de sus funciones clericales, por realizar actividades no compatibles con los votos realizados en su ordenación,

A esta altura de los acontecimientos, resulta obvio, que hay que poner “algo más”, en el análisis de los “por qué” ocurren estos hechos, llamados aberrantes por la sociedad en su conjunto.

Y como principio requieren todas las cosas, nada mejor que recurrir al Génesis, el libro escrito por Moisés, el cual da comienzo a la historia canónicamente aceptada, del origen del hombre en el planeta tierra.
El capítulo 1, dice lo siguiente, leamos:
“Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.
Y les bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.” Génesis 1: 27 – 28.

Ahora bien, ¿Qué se nos está diciendo en estos versículos?, permítanme, que haciendo uso de
Es conveniente agregar la siguiente advertencia: “la interpretación de estos pasajes bíblicos pueden dañar la sensibilidad del lector”, una vez hecha esta salvedad, autorizo al lector a cerrar sus ojos, si está leyendo, o a taparse los oídos, si alguien se los está leyendo, para evitarme el escándalo que les pueda provocar.

Lo que entiendo yo que se nos dice, es que hemos sido creados a imagen y semejanza de Dios, por lo que interpreto, que lo que Dios nos proveyó, es un cuerpo físico perfecto, y por lo tanto, nada vergonzoso y censurable puede haber en él, ¿no? ¿Y qué es lo que ven mis ojos y puedo verificar en mi propio cuerpo? Que el cuerpo de Adán tiene un pene y dos testículos, y que la mujer, Eva, extraída de una de sus costillas, tiene una vagina y un clítoris.

Si a esta primera verificación, le agrego que se les mandó fructificar y multiplicarse, al punto de henchir la tierra, sin decirlo en forma explícita, me parece que les dijo,- en mi básico español así lo entiendo,- “les ordeno que tengan una vida sexual activa, para que puedan cumplir con este propósito, fundamental en el Plan, que Yo, Dios, he preparado “ para todos los seres humanos” y cuando digo todos, no encuentro ninguna distinción entre mí, mi mujer, sacerdotes o monjas, por cuánto también ellos son provistos de los mismos enseres, vale decir, pene, testículos, vagina, ovarios, etc. etc
.
Corroborando, mis dichos, me remito a las palabras escritas por Moisés: Y dijo Jehová Dios: “No es bueno que el hombre esté solo; le haré ayuda idónea para él” Génesis 2:18
“Por tanto dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne. Y estaban desnudos, Adán y su mujer, y no se avergonzaban.” Génesis 2: 22-24
En buen romance, en el sentido literal de la palabra: el hombre y la mujer son una sola carne, cuando se consume el acto sexual, en otras palabras, puede haber un sinnúmero de variedades de practicar sexo, pero para ser una sola carne el hombre y la mujer, es necesario que el hombre se introduzca dentro de la mujer, ¿cómo lo hace? Considero innecesaria la respuesta.

Lo que entiendo yo de este precepto bíblico, es que la práctica sexual es una condición básica de la criatura humana, el haber experimentado, alguna vez, una vida sexual plena, es esencial para un sano equilibrio emocional, sabiamente ,el escritor satírico romano, Juvenal expuso:      “ Mens sana in corpore sano” me podrán decir que existen infinidad de personas, que por diversas circunstancias, se abstienen de practicar sexo, y yo digo que está bien, siempre que sea por su libre y espontánea elección, cada uno es dueño de actuar de acuerdo a los dictados de su propia conciencia, esto constituye el Libre Albedrío del hombre, … y el de la mujer, por supuesto.

Pero volvamos al principio, al título de este artículo, me pregunto: ¿es admisible?, a la luz de la verdad revelada, a la que hemos hecho referencia, aceptar como una condición ineludible, que tanto el hombre, como la mujer, que pretendan seguir una vocación religiosa, tengan que hacer votos de abstención sexual, renunciando a los atributos que Dios les ha dado al momento de su creación? ¿La vocación sacerdotal, es excluyente de la práctica sexual? Me pregunto una y mil veces: ¿por qué?


El sacerdote, tiene un pene y la monja sin ninguna duda, una vagina, por lo tanto el sacerdote y la monja, aún en la soledad de su claustro, naturalmente tienen, aunque lo nieguen, algún tipo de estímulos sexuales, la intensidad de éstos estímulos es algo que cada uno lo sabe en lo profundo de su intimidad, mucho se ha hablado sobre el sometimiento de los deseos de la carne, de cinturones de castidad, de autoflagelación, de azotes, ayunos prolongados, dolorosas penitencias, etc. tales prácticas suelen traer trastornos severos de conducta, de comportamiento masoquista, se podrá intentar revestir la libido de santidad, cuidar las formas exteriores, pero nada puede ocultar lo inocultable.

La iglesia ha asumido una actitud francamente hostil, hacia cualquier tipo de expresión homosexual, se presiona abiertamente a los gobiernos del mundo, para que éstos les nieguen derechos y representatividad, para que les cercenen espacios, en un vano intento de pretender tapar el sol con las manos, cual si fuesen inquisidores medievales que mediante la condena y el terror, imponen su sacrílega voluntad.

La homosexualidad, no es una conducta aberrante, es una opción, una forma de expresar su sexualidad, sin permitir la represión de sus impulsos y preferencias, en cambio, las conductas sexuales, practicada por una parte conocida, la punta del iceberg, de los sacerdotes católicos en todo el mundo, sí es una aberración, la pedofilia, es una aberración, no puede considerarse, en absoluto, un simple desliz, una falta leve, que se sanciona con imponer al infractor rezar veinte avemarías y diez padres nuestros, es una conducta, señores miembros del clero, aberrante, porque se practica sobre seres indefensos, violentados en cuerpo y espíritu, quienes la practican, son victimarios y víctimas a la vez, escoria clerical, que no se limpia, con una simple disculpa.

martes, 4 de junio de 2019

Los Colmillos Del Tigre

Reposición: Los Colmillos Del Tigre



Un amigo, citando a Hamlet, hizo referencia a la célebre frase: Ser o no ser... esa es la cuestión, en uno de los artículos expuestos en el libro Apuntes de un Publicista del cual es autor.

La citada frase me ha conmovido profundamente desde mi juventud y ha sido desde entonces un gran incentivo tanto en mi formación profesional como en las distintas actividades que he podido desarrollar a lo largo de una intensa y gratificante vida.

Ser o no ser, he aquí la cuestión, ¿cual es el ser o el no ser del hombre? ,recuerdo una experiencia vivida con mi hija mayor en su época de estudiante universitaria, estábamos observando el comportamiento de nuestro perro y evaluando sus múltiples habilidades y en un momento dado le expresé a mi hija con admiración, cómo era posible que el animal supiese hacer tantas cosas y ella con naturalidad me contestó,

Papá el sabe, pero no sabe que sabe.

Esa era la cuestión el noble animal podía realizar muchas cosas pero no sabía que sabía, el era un perro, se comportaba como un perro pero no sabía que era un perro.

Esa conciencia de ser, es condición exclusiva de los seres humanos, el hombre tiene conciencia de ser, lo que no quiere decir de que todos los humanos coincidamos en una misma definición de lo que realmente sentimos que somos, digamos que el gran drama de nuestra condición humana es la búsqueda constante de una respuesta que satisfaga

los interrogantes que nos acicatean como dardos punzantes, al sentir,pensar , razonar y actuar.

Aún no hemos podido respondernos preguntas tales como : ¿de dónde vengo?, ¿ quién soy,? ¿ a dónde voy ? preguntas relativas al ser, somos solamente carne y huesos que indefectiblemente se ha de consumir y desaparecer, y que del espíritu, el alma, los valores, los sentimientos, como dice el poeta “ El eterno Ensueño nació sobre las alas de la Luz sempiterna que rasga el velo de lo informe y atraviesa el Tiempo urdiendo incesantes modelos de Ser.

Mudo permanece el misterio, el sentido de éste peregrinar, infinita aventura de la existencia, cuyo correr a lo largo del cielo enciende innumerables círculos de senderos, hasta que al fin de la tiniebla brota el conocimiento en lo infinito del humano espíritu; y en ese alborear indeciso, sin romper su mudez, por entre el claro de la bruma contempla la visión de la Vida y el Amor, surgiendo del tumulto de penas y alegrías profundas. ” Santiniketan, 16 de setiembre de 1929.

En la actualidad tenemos innumerables definiciones de “ser” el ser biológico, el ser social, el consumidor, el agente económico, etc. etc. hemos montado toda una industria de lo humano, hemos incursionado hasta lo más recóndito de la conciencia individual y colectiva a fin de descubrir o crear necesidades insatisfechas que abran nuevos nichos en el mercado del consumo, motive la competencia y mantenga la inversión y la rentabilidad del capital.

Pero, otra vez la pregunta, ¿qué es el hombre? El gran Filósofo y Poeta, Rabindranath Tagore, en su libro La Religión del Hombre, nos decía : Aprendemos en la vida de los animales, que ellos van quemando las etapas de su formación paso a paso, al nacer están bajo la atenta mirada de sus mayores, juegan con otras crías de su especie , van fortaleciendo sus músculos y su instinto hasta alcanzar la plenitud de su potencial.

El tigre no sale a cazar otros animales hasta que no ha desarrollado sus colmillos, sus garras y toda su fortaleza física, entonces sí, se alimenta por si mismo y es autosuficiente, no lo hace antes, porque no esta maduro ni apto para sobrevivir en la Jungla, ¿cómo lo saben sus progenitores? otra vez viene a mi mente la respuesta de mi hija , los tigres lo saben pero no saben que lo saben, no tienen conciencia de ser.

Este ejemplo del poeta, citando la vida de los animales, nos puede ayudar a esbozar una respuesta a nuestra pregunta, ¿ que es el hombre ?, Sin duda podemos decir que es un ser racional, que tiene la capacidad de pensar y conciencia de “ ser hombre”.

Ahora, ¿cómo actúa el hombre ? decimos que es un ser racional pero vemos que se comporta irracionalmente, a diferencia de los animales, agrede el medio ambiente dónde vive y es un tremendo depredador de todo lo que encuentra al punto de comprometer su propia existencia.

En cuánto a la preservación de su especie, el hombre, el ser racional, obviamente no se comporta como las especies animales, el hombre no permite que sus críos quemen las etapas de su formación paso a paso, cuánto es el tiempo de un niño, que cosas debe hacer y aprender en esa etapa?, cuándo se es adolescente? como vimos, el tigre actúa como tal cuando esta en su plenitud , sus garras y colmillos pueden cazar y matar solamente en esa etapa no antes, pero un niño puede tomar un arma y jalar el gatillo mucho antes de estar maduro y responsable para poder hacerlo, ha estado familiarizado con la violencia en la etapa en que debía solamente ser un niño y jugar con otros niños, y los jóvenes adolescentes que en vez de quemar etapas queman e hipotecan su futuro por decisiones tomadas cuando aún no estaban lo suficiente maduros para hacerlo, el tigre si sale a cazar cuando no esta listo para hacerlo no sobrevive, esa es la ley de la jungla, el hombre, animal racional, condena a sus hijos al abandono y la muerte en la jungla social donde impera la violencia, el maltrato, el abandono, el aborto y las drogas junto a otras plagas sociales por todos conocidas.

Hace algunos años comentado el drama de la violencia en las escuelas, un experto en psiquiatría nos comentaba, el problema estriba en que hemos perdido las referencias, los llamados “frenos de la conciencia” , identificando estos frenos en la enseñanza de principios y valores aprendidos en el seno del hogar, en familias bien constituidas con

la presencia de la figura materna y paterna, con abuelos, tíos, primos etc.

Estos valores que otras generaciones han aprendido y cultivado constituyen la base de nuestro ser social, hoy lamentablemente han sido socavados por la constante agresión de nuestra sociedad de consumo , la cual ha ido separando y confundiendo los roles, creando nuevos valores y necesidades, un mundo de solitarios insensibles carentes de afecto y calor humano.

Cuando mi amigo José y yo éramos niños o adolescentes seguramente sentíamos las mismas inquietudes que los niños y adolescentes de ahora, recuerdo a una amiga de esa época que nos decía : todo lo que me gusta o es pecado o me engorda, sentíamos los mismos deseos, reaccionábamos con violencia e ímpetu propios de la juventud, pero había cosas que jamás las realizaríamos porque al momento de actuar, accionaban en nuestro inconsciente los frenos de la conciencia aprendidos en la niñez, esta sensación de lo que es correcto o no, ha impedido la ejecución de actos impulsivos que pudiesen comprometer nuestra integridad o la de nuestros semejantes.

Mi amigo es un publicista de gran calibre, de sólida formación moral, un profesional serio y responsable, por eso en sus apuntes hace referencia al componente ético como un ingrediente imprescindible en una actividad como la suya que ejerce una tremenda influencia en el comportamiento social.

Nuestra sociedad en todas sus expresiones necesita cada vez más de la comunicación

es por eso que esta actividad debe tener claro sus objetivos el cual no es otro que el brindar servicio a la sociedad a través del individuo, el individuo niño, adolescente,

hombre o mujer, adulto o anciano, una creación única e irrepetible, alguien que tiene en si mismo la semilla de toda una especie sólo comparable con la dignidad de los Dioses.

Ser o no ser, tu tienes la respuesta.






Las Vidas De Nuestra Vida


En nuestra búsqueda permanente de nuevas sensaciones encontramos un recurso ineludible en el valioso caudal de nuestros propios recuerdos.

Es esta retrospectiva que realizamos aunando lo que nuestra mente y el corazón han registrado en determinados momentos de nuestra existencia donde podemos reconocer lo sucedido en las vidas que a lo largo de todo el tiempo transcurrido desde que nos reconocemos como personas hemos podido valorar como algo trascendente.


Es allí que percibimos que durante todo este proceso hemos tenido innumerables oportunidades que sólo la convivencia mantenida con nuestros semejantes nos ha deparado en las que se han ido forjando como experiencias propias de ese pasado lo que hoy constituyen nuestras vivencias.

Superación Y Trascendencia



La condición humana es tan compleja que su análisis y estudio, ha sido, es y será, una de las tareas ineludibles de todas las civilizaciones. En la tentativa de encontrar lo que mueve la voluntad de los individuos y sociedades para la acción, se han planteado una serie de teorías que pretenden definir su esencia. ¿Qué impulsa la acción de personas y sociedades?

Algunos plantean que la búsqueda del poder es la esencia de la acción, de la cultura y de las civilizaciones. Desde este enfoque, sería la violencia, el fundamento de la condición humana. Otros defienden la tesis de que el verdadero fundamento de la acción es la búsqueda de valores o ideales morales, manifestando que la utopía ética es el norte que guía y alimenta los objetivos humanos. 

Como en todos los aspectos que se relacionan con la psique, no es posible explicar la conducta desde una única propuesta, pues es la complejidad la que caracteriza a la condición humana y por lo tanto, para entender nuestras acciones, debemos hacerlo desde la amplitud del asombro y la seriedad del análisis de todas las posibilidades de explicación.

Las personas somos criaturas complejas y extraordinarias. La especie humana ha recorrido un poderoso camino de evolución y desarrollo, sin duda no tan pulcro ni aséptico como se podría pretender, sino más bien tortuoso, desgarrador y probablemente autodestructor. Sin embargo hemos evolucionado y creado una civilización que avanza y se proyecta, desde una dinámica inercia producto de la necesidad imperiosa de hacer y actuar en todos los aspectos de la vida. 

Una de las posibilidades de explicación de la acción personal puede ser la necesidad de reconocimiento. Se hacen cosas para que los otros aprecien la iniciativa y el logro y así nos aprecien a nosotros. Todos requerimos el reconocimiento de los otros, de nuestra familia y de las personas con quienes nos relacionamos. La individualidad se afirma cuando nos sentimos apreciados, respetados y considerados socialmente. Y así, desde esa motivación, nos superamos y trascendemos. 

También se puede plantear la posibilidad de buscar una armonía tranquila y bucólica. Seguramente esta es una posición más sabia y sostenible, pero la otra faceta de la condición humana, la de innovar, deslumbrar, demostrar que si se puede, ha sido la que ha primado en la historia de la humanidad. El afán de superación y trascendencia, no es en suma, sino el cumplimiento de una esencia profunda y específica de nuestra especie.

Cualidades De Un Buen Líder


El verdadero líder que tiene el poder es el que menos lo ostenta y el que tiene la mayor compasión por los demás.

La autoridad no se auto impone sino que para que exista debe ser reconocida por los seguidores.

Quien coarta la libertad de los demás es porque tiene miedo de perder el poder que no tiene.

El verdadero poder es ejercer el servicio para los demás.

Quién más sirva es quien será reconocido por todos como la autoridad que tiene el poder.

Un líder con poder producto de su entrega al servicio para los demás no está pendiente de sus propios placeres sino de la ayuda y la guía que puede llevar a los que más lo necesitan.

Un verdadero líder busca la concertación de las ideas y no la confrontación.

Un líder primero aprende a escuchar para poder reflexionar sobre las circunstancias de la realidad y así tomar decisiones más sabias.

El liderazgo es para quienes puedan entender que ejercerlo es una gran responsabilidad que requiere de sacrificios, entusiasmo y pasión por el servicio al prójimo y no para imponerse a la fuerza abusando de los más vulnerables.

Quien hace uso indebido del poder obtenido por las circunstancias de la vida para aprovecharse con corrupción y abuso hacia los demás, es el peor de los pecadores, porque roba o malgasta los recursos disponibles para hacer el bien a la mayoría, para su beneficio personal.

Quienes por comodidad o ceguera ideológica permiten que las posiciones de poder sean ostentadas por líderes criminales son igual de responsables por dichos crímenes.

El principal atributo que debe tener un líder con poder es la honestidad.

Quien actúa con deshonestidad en las cosas más simples de la vida, será mucho peor cuando ejerza posiciones de poder.


Quien hace de su propósito en la vida la entrega al servicio por los demás a través de las virtudes que le destacan, será un excelente líder.

Discriminación Social


La discriminación consiste en tratar a una persona, grupo o institución de manera diferente y perjudicial. Existen diferentes motivos de discriminación que a continuación desarrollaremos y todos ellos son igualmente injustos.

La discriminación no es algo nuevo, durante toda la historia de la humanidad siempre se ha discriminado a otros individuos por cuestión de sus recursos, sus orígenes o inteligencia, e incluso a pueblos enteros por sus ideas diferentes en cuanto a la religión o la política.

Las sociedades, sobre todo las sociedades occidentales, han evolucionado a lo largo de los años de un modo muy positivo, hasta hacer desaparecer estas formas de discriminación social, pero muchas de ellas siguen estando muy presentes.

Discriminación individual frente a discriminación colectiva y discriminación institucional
Entendemos por discriminación individual aquella que se produce entre un individuo y otro. Es decir, cuando una persona trata de manera distinta y negativa a otra persona sin que exista una razón contextual diferenciada.

La discriminación se enfrenta a la discriminación colectiva, que ocurre cuando se da un trato diferenciado de un grupo a otro, negativo e inferior por las mismas razones. La discriminación colectiva la sufren los colectivos LGTB por ejemplo, y se da en casos de discriminación racial, como en EEUU durante los años 60 o las presiones que sufren aquellas personas que profesan ciertas religiones en países islamistas.

Discriminación estructural
Hace referencia a la discriminación que surge de políticas institucionales. En estos casos, algunos supuestos favorecen de manera directa o indirecta a algunos individuos y perjudican a otros. Aunque las políticas de las instituciones deben ser justas para todos, esto no es siempre así.
Una variante de esta discriminación estructural es la discriminación positiva, que busca el efecto contrario, promocionar a ciertos colectivos que socialmente son más desfavorecidos y de ese modo obtienen una representación más igualitaria y equitativa. Las mujeres en algunos supuestos, las minorías raciales o las personas con discapacidades están sujetos en ocasiones a estos casos de discriminación positiva.

En la discriminación negativa ocurre lo contrario. La persona que es víctima de la discriminación es tratada de manera discriminada y perjudicial. Las personas con discapacidades la sufren a menudo a través de las barreras arquitectónicas, los límites en las infraestructuras que les impiden realizar su actividad diaria del mismo modo que las personas sin esas discapacidades.

Discriminación directa e indirecta
La discriminación directa es el tipo de discriminación más fácil de detectar. Ocurre cuando una persona sufre un trato injusto de otra persona debido a sus características. Algunos ejemplos muy habituales es cuando no se acepta a una mujer en un empleo por el hecho de ser mujer o cuando se margina a las personas por su condición sexual.

La discriminación directa es diferente a la discriminación indirecta, que es una forma de discriminación menos visible. Esta forma de discriminación en ocasiones pasa desapercibida, pero sigue siendo muy común. Los llamados micromachismos, comportamientos sexistas que atacan a la mujer de manera sutil y que no es tan fácil de ver pero que en realidad siguen siendo ofensivas para ciertos colectivos.

Racismo o xenofobia
Es una de las formas de discriminación más conocidas. Es la discriminación en función de la raza o la etnia a la que la persona pertenece. Ocurre cuando un individuo o un grupo tratan con interioridad a otra persona o personas de otra raza u otro origen. En la actualidad es patente la discriminación hacia los refugiados y en ello se basa el ascenso que están viviendo muchas fuerzas xenófobas en Europa o la victoria de Trump en EEUU.

Sexismo
Es otra de las formas de discriminación más conocidas, la persona que la práctica infravalora a las personas del sexo opuesto. Las formas de discriminación sexista se manifiestan gracias al sistema heteropatriarcal, que establece que las mujeres están en una posición inferior respecto al hombre únicamente por el hecho de ser mujeres.

Discriminación sexual
La discriminación sexual es aquella que sufren todas aquellas personas que presentan orientación o identidad sexual diferente. Los colectivos LGTB llevan décadas peleando por derribar estas barreras y estas formas de discriminación.

Discriminación por edad

Ocurre cuando el motivo de discriminación es la edad. Suele llevarse a cabo, sobre todo, en los aspectos laborales, en los que se considera que la edad idónea para trabajar es aquella comprendida entre los 25 y los 45 años.