“En la teoría psicoanalítica
freudiana, los mecanismos de defensa son estrategias psicológicas inconscientes puestas en juego por diversas
entidades para hacer frente a la realidad y mantener la autoimagen. Las
personas sanas normalmente utilizan diferentes defensas a lo largo de la vida.”
En ese intercambio en los que
compartimos a menudo es muy probable en que digamos algo “que se nos escape” algo “que no quisimos o no debimos decir”
situación por la cual recibamos como respuesta “un retruque” algo fuerte u
ofensivo que por su agresividad nos pueda “golpear en un punto muy sensible”
con la contundencia de “un directo a la mandíbula o a la boca de nuestro
estómago” en otras palabras, alguien con la habilidad como para causar un daño
que haga “tambalear” nuestra autoestima.
Es en casos como los descriptos en
que suelen aflorar tal como si fuesen “anticuerpos” los mencionados “mecanismos de defensa”
“Los mecanismos de defensa
son aquellos mecanismos, principalmente inconscientes, que los individuos
emplean para defenderse de emociones o pensamientos que producirían ansiedad,
sentimientos depresivos o una herida en la auto-estima si llegasen a la consciencia.”
Ahora
bien, como decimos una cosa también deberemos considerar que estos mecanismos
de defensa los cuales acuden como anticuerpos con la intención de proteger
nuestra autoestima no deben confundirse como si tales mecanismos pudiesen sustituir
a nuestra facultad de utilizar los
valores propios de toda criatura humana que se precie, me refiero a la
autocrítica y al pedido de excusas cuando lo que hacemos, aunque, repito, no
haya sido nuestra intención de causar un agravio u ofensa, nos indiquen cual es
la forma correcta de proceder.
Hugo W
Arostegui