domingo, 4 de agosto de 2019

Cuando Nos Duele Igual



Cuando el dolor nos duele con la misma intensidad que le pueda doler al otro, nos referimos     a aquel al que las circunstancias, o la propia vulnerabilidad de la vida que transcurre sin tomarse una pausa, le muestra “en carne propia” toda la intensidad de “su sentir” cuando quisiéramos que todo lo que le duele no le doliera tanto, decimos entonces que podemos comprender todo lo que significa la compasión.

“Es un término que se presta a confusión. Cuando hablamos de lástima, nos referimos al lamento o quejido ante algo que no sucede como se esperaba, mientras que compasión es un sentimiento humano que se manifiesta a partir y comprendiendo el sufrimiento de otro ser.

Es posible que cuando se experimenta lástima se reconoce la pena y el sufrimiento de otra persona pero sin involucrarse en él, sin sentirlo como suyo. En cambio cuando se experimenta la compasión, el sufrimiento del otro se siente como suyo, va acompañado de empatía y se siente el sufrimiento como si lo estuviera viviendo en carne propia.

Compasión viene del latín cumpassio que literalmente significa “sufrir juntos” o “acompañar”. La compasión implica percibir y comprender el sufrimiento del otro, acompañado del deseo de reducir o eliminar tal sufrimiento. Ante esto, queda aclarado que la compasión no implica menosprecio hacia quien sufre.

La compasión, desde el punto de vista conductual, tiene varias facetas que incluye un componente emocional que se genera cuando percibimos el sufrimiento del otro y generamos un impulso hacia la atenuación de ese sufrimiento. 

De aquí se genera la decisión de realizar acciones destinadas a paliar ese sufrimiento. 

Desde la visión cognitiva lo primero que ocurre es la atención y evaluación del sufrimiento ajeno y la evaluación de nuestras capacidades para intervenir eficazmente en la atenuación o eliminación de ese sufrimiento.

La lástima es un sentimiento egoísta porque lleva implícito el “menos mal eso no me está sucediendo a mí” mientras que la compasión nos permite por un momento dejar de pensar en nosotros para pensar en aquel que vive un dolor, un temor o una desesperanza. Es una manera de acercarse al otro. 

Es a través de la compasión que una persona puede mostrar bondad, solidaridad y nobleza ante la necesidad de acompañar a otro.”

Pensamos que  nos puede ser de gran utilidad el hecho de comprender el origen de los sentimientos que nos embargan cuando nos referimos a la “levedad del ser y de la vida que compartimos” toda acción que nos impulse a “dar de nosotros mismos” aquello que no nos sobra, lo que nos resulta vital y necesario preservar, entonces sí, sabremos de compasión y de amor, que se manifiesta en nuestro interior profundo y se aplica en quienes brindamos nuestro desinteresado servicio.


Lo Que Podrá Ser



 Comenzamos un nuevo mes y nos acercamos al final de año, una época muy propicia para realizar un raconto de todo lo sucedido y en la medida de lo posible renovar nuestro compromiso de corregir errores en el caso de haberlos cometido, ajustar los detalles  de nuestro rumbo y sobre todo asir el comando de nuestro “panel de control”  para asegurar que todas nuestras acciones se encaminen sin claudicaciones a concretar las metas que nos hemos propuesto.

Lo que nos queda por decir es que somos muy optimistas en cuanto al porvenir, pues lo que tengamos por delante, lo que pueda estar “por venir” seguramente vendrá para cualquiera de nosotros, nuestras expectativas en cuánto a lo que pueda suceder, aunque apliquemos “nuestra intuición” siempre estará cubierto por “el puede ser” lo que no debe cambiar bajo ningún concepto, es nuestra actitud hacia lo desconocido, es como nuestra expectativa ante la apertura de un regalo, en este caso un maravilloso regalo que solo la vida nos puede otorgar.


Considerados


La imagen que debemos irradiar es aquella que brota desde la intimidad de nuestros sentimientos más profundos, aquellos que afloran libremente sin compulsión alguna de nuestra parte, los que no deben ser reprimidos ni censurados, los que actuando con total espontaneidad nos muestran a nuestros conciudadanos tal cual somos.  

“Ser respetuoso empieza con una consideración básica de los sentimientos de los demás.

Pregúntate a ti mismo cómo te gustaría que te trataran en cierta situación y haz un esfuerzo para tratar a los demás de esa forma.

Trata a todas las personas que encuentres (desconocidos en la calle, compañeros de trabajo, compañeros de la escuela y familiares) como individuos dignos de amabilidad y cortesía básicas. Tratar a las personas con respeto ¡hace que el mundo sea un lugar mucho más agradable para todos! Estas son algunas formas de mostrarles amabilidad a los demás:

Este es un muy buen momento de comenzar, retomar o continuar con el autocultivo de nuestros valores esenciales donde obviamente no pueden excluirse aquellos que nos hacen confiables y receptivos en nuestro trato hacia todos aquellos que comparten nuestros espacios de intercambio colectivo en la sociedad que afortunadamente todos integramos.


Mensajes En La Orilla



Cuando era niño sentía una peculiar inclinación por las historias que nos solían contar los adultos cercanos a la familia, especialmente aquellas que se referían a los mensajes que se recogían en las playas dentro de botellas, que luego de ser transportadas por las olas del mar, quien sabe desde dónde, una vez que eran recogidos, generalmente por las manos anónimas de algún pescador que transitaba por sus  costas , exponían ante nuestros ojos impávidos mensajes de náufragos perdidos en alguna remota isla, coplas de viejas canciones, poemas, promesas de amor eterno y su anhelo esperanzador de un posible reencuentro.

Ahora, después de tanto tiempo recorrido, continúo con esa sensación de incertidumbre que imaginaba en el ánimo de quién introducía su mensaje en el interior de una botella que luego depositaria en las aguas del mar con la esperanza de que pudiera ser recogido en alguna lejana orilla quien sabe dónde.

Es el mismo sentimiento el que nos embarga cada vez que editamos algún artículo en nuestras páginas y a las que le adjuntamos un esperanzador enlace en las redes sociales, una vez que le publicamos, nuestro mensaje comienza su peregrinaje por los medios electrónicos de la web, ese inmenso mar virtual donde podrá ser recogido por algún navegante que le recoja y le permita a su contenido concretar ese encuentro íntimo e insustituible de quien escribe y su ocasional lector.

Esa es nuestra alentadora esperanza.

Amistades Virtuales

Cuando compartimos lo que somos, sin retaceos ni retoques, con aquellos seres con los cuales hemos establecido una circunstancial relación, decimos que somos afortunados de poder sentir que somos parte de algo que ha surgido con la espontaneidad propia de seres que han trascendido sus propias limitaciones en aras de complementar en él, o los otros, u otras, todo aquello que nos hace, en nuestro fuero íntimo, mejores personas.

Resulta una experiencia sumamente gratificante cuando logramos sintonizar en el amplio espectro de las relaciones humanas, en el entendido de que no estamos sujetos a ningún tipo de fobias ni preconceptos, con aquellas personas que se brindan a sí mismas con la motivación que emana de su espontánea capacidad para compartir experiencias.

Esto es lo que sucede o debería suceder en nuestros encuentros virtuales en la red de amigos que vamos tejiendo, cual si fuese una telaraña, uniendo afectos y coincidencias en las pantallas de nuestros cada vez más sofisticados aparatos de telecomunicación.

Este es el nuevo mundo virtual que se construye a sí mismo y en el cual estamos cada vez más y más inmersos como parte de un bufet expuesto en una mesa de exquisiteces listas para ser deglutidas.

No se trata de entender, a quien le puede interesar entender, se trata de volver a empezar para que no perdamos lo esencial que anida en lo recóndito del ser, muy lejos de la alienación que nos circunda y embrutece los sentidos, es la razón de la sinrazón, es ver al hombre libre de toda la trampa virtual que le encadena.

Escoba Nueva


En los ambientes dentro de los cuales se suele contratar periódicamente a nuevos operarios es común escuchar, en boca de capataces y supervisores, con referencia al potencial desempeño de los mismos, esta expresión que les describe en sus primeros intentos por dejar la mejor impresión de sus aptitudes y habilidades.

“La escoba, instrumento añejo de limpieza hogareña, todavía  perdura en las casas, resistiendo el embate de los modernos escobillones. Cuando uno compra una escoba es lógico que funcione correctamente, que barra bien, pero a medida que el uso va deteriorando su aspecto y su eficacia, va llegando la hora de reemplazarla por otra. Así como ocurre con las escobas, pasa con algunas personas en el trabajo, pues cuando son recién contratadas se esmeran por brindar un servicio de alto nivel a los ojos de todos, en tanto que, una vez que se aburguesaron, su rendimiento presenta un ineludible bajón.”

Esto que bien que podríamos denominar como “el síndrome de la escoba nueva” es algo que nos caracteriza a los humanos, tenemos una natural inclinación a sobrevalorar todo aquello que nos resulta novedoso y así ocurre con nuestros afectos, con nuestros vínculos laborales y toda nueva tarea que emprendamos, comenzamos a hacer algo con un entusiasmo manifiesto para luego dejarnos dominar por el desgaste de la rutina y el aburrimiento.

Todo logro sustentable en el tiempo es aquel que conquistamos con el esfuerzo y la persistencia, un compromiso que nos hacemos a nosotros mismos y que resulta una  condición indispensable para mantener inalterable nuestra capacidad de “continuar barriendo bien”


Usamos Sin Pertenencia


Nada de lo que nos rodea nos pertenece de manera que nos desplazamos por la vida tal cual lo podrían haber hecho, o lo hicieron, quienes han sido identificados por el relato bíblico, me refiero a quienes se les ha conferido nuestra tutela universal, históricamente conocidos como Adán y Eva.

Lo que nos ha sido revelado nos exime de cualquier derecho hereditario que pudiésemos esgrimir por la sencilla razón de haber sido expulsados, conjuntamente con a quienes se le han atribuido  nuestra posterior paternidad, de la parcela de terreno en el cual compartíamos con del resto de la creación, de los bienes y servicios, ángeles incluidos, con una espada flagelante que nos pudiese impedir cualquier intento de retorno.

De manera que si algo nos identifica es la misma precariedad que pudiese tener un mochilero de los tantos que observamos transitar por nuestras rutas, llevando como un caracol humano nuestra casa a cuestas “haciendo dedo” al resto de los mortales para intentar “un aventón” que nos permita continuar con nuestro viaje de destino incierto.

Entonces lo que nos queda, como concesión divina que nos diferencia del resto de los mortales, es nada más y nada menos, que hemos sido creados “a imagen y semejanza” del padre de todas las creaciones, concesión que pone a nuestro alcance la capacidad de transformar todo cuanto nos propongamos realizar, eso sí, dando un fiel cumplimiento a los derechos y obligaciones que rigen para los “herederos de los dioses”

“Mentalmente, el hombre fue creado como un ser racional con voluntad propia – en otras palabras, el hombre puede razonar y elegir. Este es el reflejo de la inteligencia y la libertad de Dios. En cualquier momento alguien inventa una máquina, escribe un libro, pinta un paisaje, disfruta una sinfonía, calcula una suma, o nombra a una mascota, él o ella están proclamando el hecho de que fueron hechos a la imagen de Dios.
Parte del haber sido hechos a la imagen de Dios, es que Adán tuvo la capacidad de tomar decisiones libremente. Aunque le fue dada una naturaleza justa, Adán hizo una mala decisión al rebelarse en contra de su Creador. Al hacerlo, Adán dañó la imagen de Dios de su interior, y pasó esa semejanza dañada a todos sus descendientes, incluyéndonos a nosotros (Romanos 5:12). Hoy, todavía llevamos esa semejanza de Dios (Santiago 3:9), pero también llevamos las cicatrices del pecado, y mostramos los efectos mental, moral, social y físicamente.

Cuando nos preguntemos en lo individual, ¿qué es lo que se espera de nosotros? encontraremos la respuesta en el mismo "soplo de vida" que nos hace coautores de todas esas cosas que por su magnitud no encuentran otra definición más contundente que “maravillosa” como se suele definir a la vida misma.



Ocultar La Verdad


¿"Soy yo acaso guarda de mi Hermano"? Génesis 4:9.

Esta postura ha sido desde siempre una alternativa válida para quienes carecen de escrúpulos y encuentran una tangente para imponer sus condiciones, la mentira como recurso es propia de los que intentan por medio del engaño imponer sus condiciones creando una maraña de “falsas expectativas” que generalmente y en honor a la justicia se convierte en un pantanal cenagoso de donde difícilmente puedan emerger.
“Mentir está en contra de los cánones morales de muchas personas y está específicamente prohibido como pecado en muchas religiones. La tradición ética y los filósofos están divididos sobre si se puede permitir a veces una mentira (pero generalmente se posicionan en contra): Platón decía que sí, mientras que Aristóteles, san Agustín y Kant decían que nunca se puede permitir.
En función de las circunstancias, se entiende que mentir para proteger a personas de un opresor inmoral suele ser permisible. Es el caso, por ejemplo, de las víctimas de una guerra.
Mentir de una forma que intensifica un conflicto, en vez de atenuarlo, generalmente se considera el peor pecado.
Un mentiroso es una persona que tiene cierta tendencia a decir mentiras. La tolerancia de la gente con los mentirosos habitualmente es muy pequeña, y a menudo sólo se necesita que se sorprenda a alguien en una mentira para que se le asigne la etiqueta de mentiroso y se le pierda para siempre la confianza. Esto, por supuesto, es moderado por la importancia del hecho al que se refiera la mentira.
Una mentira graciosa, más comúnmente como bromear, engaño con propósito humorístico, cuando la falsedad se entiende, no se considera inmoral y es una práctica utilizada ampliamente por comediantes y humoristas.
El filósofo Leo Strauss acentuó la necesidad de mentir para ocultar una posición estratégica, o para ayudar a la diplomacia. Así lo hicieron también los representantes de la filosofía política, desde Maquiavelo hasta la "mentira noble" de Platón. 
Que las mentiras desaparezcan completamente del ámbito de la política, de la justicia, de la diplomacia, del periodismo y de otros muchos ámbitos de la vida social es algo virtualmente imposible, tal y como no pueden ser excluidas de las guerras que éstas mismas actividades, supuestamente, deberían prevenir.”


sábado, 3 de agosto de 2019

Una Persona Alrededor


Se suele decir de que el ombligo es lo único que tiene a una persona a su alrededor

“Mientras el bebé se desarrolla en la panza de la madre, el feto está flotando en un fluido líquido que lo rodea y lo protege. Inmerso allí, el bebé no puede respirar o alimentarse por sí mismo, por lo que posee un tubo flexible unido a la zona del abdomen que le aporta oxígeno y los nutrientes esenciales y es el principal lazo que lo une con la madre.

El ombligo marca el punto en el que el cordón umbilical estaba unido al bebé. Cuando el bebé nace y se larga a llorar, eso significa que el niño ya puede respirar por sí mismo. También luego podrá alimentarse de la leche de su madre y evacuar por sí mismo, por lo tanto, ya no necesita el cordón umbilical.

Es allí que el médico procede a cortar el cordón, lo que deja en el abdomen la cicatriz que luego se convertirá en el ombligo y que permanecerá en su cuerpo durante toda la vida. 

Dado que el ombligo es una cicatriz y básicamente se define por el modo en que se corta el cordón umbilical o las circunstancias puntuales de ese momento (pueden quedar restos de tejido de la cicatriz) y no por la genética, el ombligo puede tener diferentes formas y tamaños.”

No obstante todo lo que podamos mencionar acerca del ombligo, lo cierto es que una vez que nacemos y somos declarados y aceptados como una criatura humana, si algo verdaderamente inútil tenemos en nuestro cuerpo es sin duda alguna el ombligo.

Ahora bien, a pesar todo lo que se diga sobre la inutilidad del ombligo, justo es que reconozcamos , nos referimos al ombligo claro, que es un ejemplo de equidad y de espíritu democrático pues a lo largo de la historia toda persona tiene su propio ombligo y no hace distingos en clases sociales, credos ni razas, es tan humilde y recatado que no tenemos noticias de que alguien haya difundido una selfie de su ombligo o que existan certámenes para coronar al “ombligo más lindo y elegante del mundo”

Reconocer virtudes es una característica que nos enaltece como humanos y creo que nuestro ombligo se lo merece.



Ausencia De Frenos De La Conciencia

Cuando observamos los acontecimientos que a diario nos sobresaltan y nos hacen pensar en la inseguridad que nos rodea y que se manifiesta como si fuesen fieras en acecho dispuestas a dar su sorpresivo zarpazo golpeándonos donde más nos duela  destruyendo familias, parientes, amigos, tan cercanos como lo pueda ser nuestra propia casa o la casa del vecino.
En realidad esas temidas fieras que mencionamos, esa inseguridad que tanto nos alarma provienen de una misma fuente, la absoluta falta de moderación que  ha tomado cuenta de casi todas las manifestaciones sociales, nos estamos acostumbrando a caminar por el borde de la cornisa, ahora las normas básicas de convivencia social forman parte del “patrimonio arcaico” que alguna vez nos han regido, ahora son  piezas de un museo como lo pueden ser las señales de tránsito, los signos de pare en las esquinas, la autorización a menores a los locales nocturnos o la prohibición de venta de bebidas alcohólicas.
“La persona que vive con excesos difícilmente triunfe en aquello que se propone porque el exceso siempre desvía, paraliza, y no le permite al individuo actuar con claridad y en orden a cumplir sus propósitos.

Los excesos siempre serán malos y por ello es que hay que evitarlos de plano.

Pensemos en un individuo que bebe alcohol en exceso, esa tendencia no solamente le complicará su vida laboral, ya que a la persona alcohólica le cuesta cumplir con horarios, suele perder la noción del tiempo, la atención, entre otros, sino que también le traerá serios problemas en su vida personal, no pudiendo por ejemplo mantener una relación sentimental duradera, será propenso a caer en peleas y discusiones, y ni hablar de los problemas de salud que puede acarrearle una dependencia excesiva al alcohol.

Entre las enfermedades más comunes vinculadas al alcoholismo se cuentan: cirrosis, anemia, cáncer, dolencias cardiovasculares y hasta demencia porque el mismo causa una progresiva pérdida de las facultades mentales, obviamente cuando se bebe con mucho exceso.”



Rivalidades



 Hemos sido reiterativos en mencionar de que por más que intentemos apoderarnos de él, el incesante tiempo no nos pertenece y que cuánto más le necesitemos mayor será nuestra dependencia y menor la posibilidad  que permanezca a nuestro alcance.

Para intentar compensar al argumento de la falta de tiempo la criatura humana ha inventado a la ansiedad y desde que nos levantamos hasta, muchas veces, demasiadas diría, altas horas de la noche, intentamos vanamente apoderarnos de un tiempo que cada vez se nos parece más a “un tirano cruel y despiadado”  que se nos escurre entre los dedos de nuestras manos como si fuese arena de la playa a la que pretendemos retener cerrando nuestros puños.

“Señalan que la ansiedad debe considerarse patológica “cuando "La ansiedad, la preocupación o los síntomas físicos provocan malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad." Es útil distinguir entre la ansiedad "estado", que es episódica y transitoria, y la ansiedad "rasgo", que es persistente y puede reflejar una personalidad "propensa a la ansiedad".
Si una persona reacciona en alguna ocasión con altos niveles de ansiedad ante una situación, ante la que otras no experimentan tanta ansiedad, se puede considerar simplemente una reacción de alta intensidad, o aguda en un nivel no demasiado alto, que es puntual y no extrema. Esto no suele suponer ningún trastorno.
El problema surge cuando esta forma de reacción aguda es excesivamente intensa, como en los ataques de pánico o en las crisis de ansiedad (en los que la persona no puede controlar su ansiedad y alcanza niveles extremos), o bien cuando dicha reacción aguda se establece como un hábito, es decir, si una reacción de ansiedad de alta intensidad se convierte en crónica, o se vuelve muy frecuente.”

La vida y el tiempo no son rivales entre sí, todo lo contrario, entiendo que se complementan para ayudarnos a disfrutar de esta etapa en la cual “el milagro de la creación” nos permite, “a nosotros y al tiempo”  ser circunstancialmente, contemporáneos.


Como La Estrella En El Firmamento


Cuando una persona necesita alguna de las cosas que utiliza en su indumentaria, digamos, por ejemplo, de un nuevo par de zapatos, lo que hace es concurrir a una zapatería probarse los que más le gusten, y si todo concuerda con sus aspiraciones y con su poder adquisitivo, bueno sale de la zapatería con un par de zapatos nuevos.

Hay veces que cuando se trata de evaluar todo lo que pensamos que nos pertenece, utilizamos el mismo criterio que cuando observamos nuestros zapatos,  miramos las vidrieras, nos probamos el que más nos guste y listo, cambiamos nuestros zapatos, pero resulta que existen algunas cosas que no son una mera mercadería sustituible y me refiero a los que defino como “los recursos naturales” con que nos ha dotado, digamos, “la madre naturaleza”

Cuando nacemos estos llamados “recursos naturales” están ya incorporados a nuestra persona y a medida en que los “vamos descubriendo” nos damos cuenta que eso es lo que somos, formarán  mientras dure nuestra existencia parte esencial en todo lo que aspiremos alcanzar, de nada nos valdrá identificar a los responsables de lo que somos y aunque nos gusten o nos disgusten, para nuestro bien y para la preservación de nuestra “salud emocional” deberemos aceptarnos y querernos como el “todo” que consolida nuestra personalidad.

Es probable que esta sea la tarea sobresaliente de toda nuestra vida, descubrirnos, saber quiénes somos, aprender a valorarnos y aceptarnos tal como hemos venido al mundo.

Debemos estar dispuestos a cumplir con el propósito de nuestra existencia la cual, como si fuese una joya de incalculable valor, estará por siempre ensamblada como solo puede estarlo una estrella con el firmamento.



La Luz Propia



 "Por qué querría yo brillar como la luna, con una luz prestada, pudiendo ser una estrella y brillar con luz propia?"

Hace unos días atrás tuve un inesperado trastorno en las luces de mi automóvil y me quede a oscuras en pleno viaje por la ruta, como estaba haciendo el viaje conjuntamente con algunos amigos que viajaban en su propio coche ellos, mis amigos, decidieron auxiliarme con la finalidad de pudiese continuar con el viaje con lo que se hizo necesario de que yo les siguiese detrás formando una caravana, el viaje fue seguro y requirió que les siguiese detrás y me guiase por la luz de los que iban por delante.

Esto que relato parece nada, apenas un ligero contratiempo, pero en realidad tuve que viajar más de una hora con la luz prestada por mis amigos, durante el viaje aproveché esta ocasión para extraer una enseñanza de todo lo que estaba ocurriendo y créanme que me ha sido de mucha utilidad para ayudarme a comprender y valorar la circunstancia de poder conducirme por la vida utilizando mi propia luz,  el viajar con la luz prestada por más seguro que nos parezca requiere que quién nos ilumina el camino viaje delante nuestro y que nosotros le cedamos el paso y nos resignemos a seguirle detrás.

Me vino a la mente un poema de un autor que actualmente no recuerdo pero que tengo muy presente el profundo significado de sus palabras:

“cuando tu opacas tu luz para que otro pueda brillar todo el mundo se oscurece”


Desconfianza



Cuando era niño cerca de nuestra casa solía haber zorrinos, creo que en algunos lugares les llaman mofetas, que como todos saben su presencia es precedida por un aroma muy particular el cual es imposible de disimular y me consta que para muchas narices el simple hecho de olfatear a la distancia su presencia es una causa más que valedera para poner de por medio la mayor distancia posible.

Recuerdo la vez en que mi padre, notando mi alarma y predisposición por la presencia de tales animalitos me dijo lo siguiente:  “cuando sientas la presencia de los zorrinos lo que tienes que hacer es aspirar profundamente y llenar de aire tus pulmones, en una primera instancia te sentirás muy mal al hacerlo pero  paulatinamente el mal olor desaparecerá y verás que todo se tornará más agradable  y la presencia de ellos te será soportable”

Me imagino que se preguntarán a dónde pretendo llegar con este relato pues bien lo que ha ocurrido es que tuve una charla con un empresario y lo que estaba previsto que sería una consulta relacionada con la situación de su empresa a los pocos minutos derivó en una clara demostración del daño que puede causar en una persona el hecho de dejarse dominar por la desconfianza la cual le corroe de tal forma que se manifiesta en la forma con la cual no solamente trata a sus dependientes sino que abarca además a los propios integrantes de su familia.

Es por esta circunstancia que mientras escuchaba el relato de este hombre no pude evitar que mi mente recordara esa experiencia con los zorrinos y lo del tufillo que tienen, la verdad es que encuentro cierta similitud entre el zorrino y el desconfiado o desconfiada, pues aunque se impregnen con el mejor perfume importado la persona desconfiada no puede evitar la emanación de cierto tufillo que le delata.

“Entonces, cuando una persona tiene una tendencia a la desconfianza, le resultará difícil mantener relaciones sociales y asimismo construir nuevas, básicamente, porque se desconfía de todo y todos.

La desconfianza nos hará ver lo que probablemente no exista y obviamente nos retraerá socialmente y esto tendrá como principal consecuencia el aislamiento social.
Es sin dudas la gran enemiga a la hora de la concreción y del mantenimiento de relaciones de amistad y de pareja.

Sin la existencia de la confianza en el otro, especialmente cuando no existe algo que nos remita duda, será muy complejo ser felices con nuestros amigos, nuestra pareja, nuestros familiares.


Es recomendable que estemos alertas en un nivel normal y no pasarnos al otro lado de la absoluta y total confianza de todos, siempre es mejor el término medio en todas las actitudes de la vida.”


Infaltables Sangre De Pato



“persona que no se altera, perturba o muestra emoción alguna ante una impresión o estímulo externo que normalmente producen turbación, desencadenan una emoción o inducen a determinada acción.”
“El concepto de sangre de pato se asocia a la frialdad y a la distancia, al rictus impávido ante un mensaje.”

A lo largo de nuestra vida sin duda alguna hemos tenido que tolerar, en la medida de lo posible.  a este tan peculiar tipo de personas que además de ser un tanto insípidas en su trato con los demás integrantes de cualquier grupo pareciera que “no le entran ni las balas”, como se dice vulgarmente “viven porque el aire es gratis” de tan inútiles que son en su comportamiento no ameritan siquiera de que nos enfademos, simplemente nos acostumbramos a convivir con ellos y hasta es posible que les integremos en nuestras actividades deportivas aunque sepamos que con ellos en la cancha comenzamos el partido “con un gol en contra”.

Son los tradicionales “sangre de pato” aquellos, que cuando miramos nuestras fotos o filmaciones de otros tiempos, siempre aparecen semiborrosos como que están y no están integrando nuestros grupos.

Hace muy poco tuve la enorme alegría de encontrarme después de mucho tiempo con uno de estos, ahora viejos amigos y le encontré tal cual, casi sin cambios en su apariencia, recuerdo que uno de nuestros amigos, compañero de estudios, solía comentar sobre él lo siguiente “este es más aburrido que bailar con la hermana” en fin.


Fomentar La Solidaridad



“Antón, Antón, 
Antón Pirulero, 
cada cual, cada cual 
que atienda a su juego, 
y el que no lo atienda, 
pagará una prenda. “

Todos hemos tenido en algún momento la oportunidad de sentirnos solidarios los unos con los otros generando un sentimiento de generosidad colectiva con el cual superamos las tendencias de ser egoístas y poner todo nuestro énfasis en el bienestar de los más necesitados para poder alcanzar juntos nuestras mayores aspiraciones de desarrollo comunitario.

Cuando tratamos un tema de tan alto significado como el ser solidarios no puedo evitar el remontarme en el tiempo hasta las tardes noche de invierno en que nos juntábamos en una rueda en la que interveníamos todos sin importar nuestras edades, abuelos, padres, tíos, hermanos y amigos para jugar y divertirnos con el Antón Pirulero, sobre todo cuando cada uno de nosotros imitaba el uso de un instrumento mientras cantábamos a coro “cada cual que atienda su juego”

Pienso que en estas estrofas practicábamos el principio de que cada cual debe atender su juego y si todos asumimos esta actitud, la de atender nuestro juego, estaremos siendo solidarios en el cumplimiento de nuestros deberes individuales en procura de sentirnos útiles y parte del juego.

Se conoce con el término de solidaridad a aquel sentimiento o también considerado por muchos un valor, a través del cual las personas se sienten y reconocen unidas y compartiendo las mismas obligaciones, intereses e ideales y conformando además uno de los pilares fundamentales sobre los que se asienta la ética moderna. A instancias de la Sociología, el término solidaridad goza de una especial participación en dicho contexto, siendo, como dijimos, un sentimiento que supone la unidad de los lazos sociales que unirán a los miembros de una determinada sociedad.

De este modo se dice que una acción es solidaria cuando está orientada a la satisfacción de las necesidades de los otros y no a las propias. Así, la idea de solidaridad expresa el apoyo a una causa ajena. En ese sentido, se trata de un tipo de ayuda o colaboración que viene precedida por un sentimiento de empatía por las circunstancias de los demás.

La solidaridad se puede entender desde una perspectiva individual y colectiva y, por otro lado, como un fenómeno sociológico relacionado con la dimensión moral del ser humano.”


viernes, 2 de agosto de 2019

La Comodidad Digital


Quienes nos hemos habituado a publicar nuestros artículos por medio de internet nos encontramos que en los últimos años nuestra tradicional forma de comunicarnos con nuestros lectores virtuales ha ido cambiando sustancialmente.

Hoy en día los potenciales lectores cuentan con una herramienta poderosísima como lo es sin duda alguna la telefonía celular, en este punto de mi relato, necesito efectuar cierta inflexión para intentar explicar que no nos sentimos calificados para emitir ninguna opinión sobre el uso de la tecnología digital, simplemente enunciamos, que recurrimos a este medio por la vía indirecta de los enlaces que publicamos en las redes sociales, concretamente en mi caso particular, los enlaces que comparto a través de face book.

Dicho esto me dirijo a enfocar este tema por la única vía por la cual me siento medianamente capaz de opinar, el desarrollo de un tema como los tantos otros temas que periódicamente  publicamos en nuestro blog spot.

En lo personal he ido introduciendo paulatinamente, un poco obligado por el intento de facilitar la lectura, ciertas modificaciones que me gustaría explicar, por ejemplo, he notado que mis potenciales lectores reciben los enlaces directamente a sus celulares, esto es algo que agiliza muchísimo las comunicaciones pero que en contrapartida dificulta en la misma proporción la lectura de temas cuyo desarrollo insuma mucho espacio.

De manera que nuestro comentario de algún tema en cuestión parte de la premisa de que cuánto queramos decir a los destinatarios de nuestros temas deberá forzosamente que contar con la simbiosis obligada, digamos que por las circunstancias, entre el relato, el relator y el lector en la comprensión lectora del tema.

Simbiosis: Relación de ayuda o apoyo mutuo que se establece entre dos personas o entidades, especialmente cuando trabajan o realizan algo en común.

“Pero, aunque resulte difícil y hasta arbitrario, es útil distinguir entre narración cotidiana y narración de ficción o, siguiendo a los formalistas rusos, entre narración estándar y narración poética. La primera correspondería a ese tipo de narración vinculada a un simple hacer-saber, mientras que la otra incorpora conscientemente estrategias del tipo simbólico-estético que conducen a potenciar otras categorías del saber-decir: el hacer-hacer y el hacer-ser.

En síntesis, la narrativa digital, acorde con este nuevo horizonte de la narratividad, se puede definir como un objeto virtual  capaz de poner en dinámica no sólo una dimensión técnica (la utilización de recursos audiovisuales y de las nuevas tecnologías de la comunicación), sino una dimensión estética; esto es, la posibilidad de afectar la experiencia sensible a partir del uso artístico de esas técnicas, con lo que entreteje un tipo peculiar de relato: el relato digital. ”


El Recurso Alternativo


En esta época en que proliferan las imitaciones, donde las promociones compiten entre sí para intentar convencernos de las bondades de tal producto, nos han “vendido la idea” de que siempre es posible encontrar sustitutos que puedan tener una “apariencia similar” que puedan reemplazar a lo que procuramos con la ventaja de que nos costarán un precio sugestivamente menor, la denominación encontrada para estos sustitutos es sutil y bastante provocadora, a saber, se denominan en el mercado como “productos alternativos”.

Podremos encontrar con esta denominación productos que responden a una amplia gama de ofertas tales como: bisutería, perfumes, electrónicos, productos para el hogar, etc. etc.

Es tanta su difusión que no faltan adeptos a su consumo incluyendo a la propia “vanidad de la estética” que involucra no solamente a la veleidad de las damas sino también a los musculosos representantes del sexo masculino.

“En esta vida hay que tener mucho cuidado con las apariencias. Las cosas no siempre son lo que parecen, sino que hay que investigar un poco para llegar a averiguar cómo son realmente.
Con esta expresión española, no es oro todo lo que reluce, lo que queremos decir es que, aunque a primera vista algo parece ser bueno, a lo mejor (o bueno, a lo peor) no lo es, sino que tenemos que mirar bien de cerca, investigarlo, para ver si realmente es así.

¿No os ha pasado nunca que habéis visto algo en el suelo que brillaba mucho y, después de pensar por unos segundos que sería algún objeto valioso de joyería ha resultado ser un simple cristal que reflejaba la luz del sol? Pues esto es lo mismo.

Si veis una oferta de trabajo en la que os ofrecen un excelente salario desde el principio, coche de empresa, ordenador personal, gastos pagados, etc., cuidado, es posible que sea un trabajo tan estresante que no os deje vivir.

Así que, como no es oro todo lo que reluce, antes de aceptar que algo es bueno, investigad un poco para ver si realmente lo es. Os llevaréis muchas menos decepciones a lo largo de vuestra vida.”
Comparto este sano consejo que seguramente redundará  en un mejor uso de lo que adquiramos así como en una mayor confianza en la durabilidad y conservación de “nuestras Alternativas”


La Alternativa De La Falacia


“en esta era llena de estafadores cualquier cosa puede pasar, alguna vez nos hemos dejado llevar solo por la vista y resultó que no era lo que esperábamos....si es algo material hay opciones de averiguar si nos conviene o no, pero que me dices de las estafas emocionales??? Ahí la cosa se pone más difícil...”
“la falacia se refiere a los argumentos que intentan defender algo que no es válido. En ocasiones, las falacias se cometen con la intención de persuadir a otros para lograr un fin, como otras veces se cometen sin intención, por ignorancia. 
Con base a lo anterior, la falacia puede estar ligada a la falta de honestidad o lealtad con el objetivo de obtener ventajas sobre otra persona, a través de engaños o mentiras.”  
Existen algunas cosas que se incorporan de hecho, vale decir que se realizan con la intención de “sacar partido” de las buenas intenciones de quienes nos profesan una actitud totalmente desprovista de “esa maldad” que pareciera haber tomado cuenta de ese intercambio de voluntades que a diario pululan por los distintos medios mediante los cuales interactuamos cada uno de nosotros con la sana intención de colaborar con nuestro aporte solidario con quienes a nuestro entender necesitan de nuestra comprensión y afecto.

La persona falaz es aquella generalmente instruida e inteligente que encuentra en “las redes sociales” un campo de operaciones ideal para efectuar sus sutiles incursiones donde interactúa entre sus potenciales víctimas.

Este procedimiento, una vez que se han iniciado los contactos y es aceptado como un amigo más, pone a este personaje en las mejores condiciones para ganar la confianza de su interlocutor y con su proverbial elocuencia y habilidad incursionar, como si fuese un reptil ponzoñoso, en terrenos de índole personal y por lo tanto estrictamente confidencial donde si no se tiene moderación en lo que se  comparte puede derivar en situaciones altamente comprometedoras.

Demás está decir que esto que comentamos ocurre y probablemente ocurra con una intensidad  mucho más frecuente de lo que admitamos, es algo a lo que todos estamos expuestos, es una condición indisoluble con el fenómeno social de las comunicaciones donde quedan a la vista, conjuntamente, todos los valores y aberraciones propios de nuestra condición humana.