domingo, 7 de agosto de 2016

Nuestra Selfie


Muchas veces me han preguntado si me identifico con los temas que publico, si estos artículos que aparecen en mis páginas corresponden con mi forma de ser, y sobre todo, lo que me parece que constituye el meollo de todo este asunto, si todo lo que digo forma parte de la exteriorización de mi personalidad.

Honestamente creo que mi respuesta resulta algo obvia además de innecesaria pues a mi modesto entender existe cierta “adherencia” entre lo que decimos y lo que somos que hacen “el condimento” vital que identifica a todas nuestras expresiones.

Pienso que de no existir otro modo de identificarnos que no fuese la expresión escrita, que ésta, la expresión escrita constituyese “nuestra Selfie” el medio de exteriorizar a los demás quienes somos y cuáles son los valores que motivan estas expresiones, repito, me pregunto: ¿podrían estos escritos que publicamos ser un medio autentico de identificarnos?

Esa es la cuestión, lo que vulgarmente se llama “la verdad de la milanesa” y la respuesta a todas las interrogantes, esta respuesta no nos pertenece a nosotros formularla sino que es exclusiva de cada lector que tenga acceso a lo que expresamos por escrito, es allí, en la identificación de los lectores, donde reside “la imagen” de quien escribe.

“El particular interés que ha adquirido la noción de identidad a partir de 1950, refleja las preocupaciones del mundo moderno. Esta noción se ha impuesto a causa de los importantes cambios culturales provocados por las profundas modificaciones en la sociedad. La globalización de la economía, el establecimiento de un modelo económico único que funciona sobre los principios de racionalidad y de eficacia y la introducción de nuevas tecnologías y de medios de comunicación son el origen de grandes cambios en las sociedades actuales. Se han enlazado el éxodo rural y las transformaciones urbanas que han dado lugar a grandes ciudades donde es difícil conservar los lazos sociales; el desempleo y los cambios en la concepción del trabajo; las reivindicaciones regionales; la inmigración masiva; las transformaciones en los roles sexuales. Esta evolución ha alcanzado a la identidad individual y colectiva y ha provocado efectos psicológicos, sociales y políticos concretos. La sociedad occidental ha pasado de una forma comunitaria a otra en la cual el individuo es el centro. El individualismo es uno de los cambios más importantes de nuestra época. La construcción de la identidad individual constituye un trabajo”

Quienes exponemos nuestro pensamiento nos despojamos de “nuestras hojas de parra” para caminar por el “jardín de la escritura” tal cual hemos venido a este mundo.


Hugo W Arostegui

Autoestima


 Cuando adquirimos el conocimiento de quienes somos y cuál es el legado cultural que nos precede, comenzamos a evaluar en su verdadera dimensión los atributos que nos son propios y que compartimos en igualdad de condiciones con nuestros semejantes.
El principio básico de todos los que profesamos la fe cristiana se encuentra claramente  reflejado en el siguiente pasaje:
“Maestro ¿cuál es el gran mandamiento en la ley? Jesús le dijo:
Amarás al Señor tu Dios, con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.
Este es el primero y grande mandamiento.
Y el segundo es semejante: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
De estos dos mandamientos depende toda la ley y los profetas.” Mateo 22: 35-40
 Como bien se desprende de la lectura de estos pasajes precedentes el agradar a Dios es absolutamente necesario de que nos amemos a nosotros mismos y la exteriorización de este amor solo puede reflejarse en la conducta que prodiguemos a nuestro prójimo.
Hablando claro, el amor a Dios está íntimamente ligado al grado de autoestima que nos profesemos y esa autoestima manifiesta que nos tenemos deberá traducirse en las acciones que nos motiven y al grado de generosidad y reconocimiento que apliquemos con todos aquellos con quienes nos relacionamos en nuestra vida en sociedad.
“Todo ser humano, sin excepción, por el mero hecho de serlo, es digno del respeto incondicional de los demás y de sí mismo; merece estimarse a sí mismo y que se le estime.
“Todos tenemos una imagen mental de quiénes somos, qué aspecto tenemos, en qué somos buenos y cuáles son nuestros puntos débiles. Nos formamos esa imagen a lo largo del tiempo, empezando en nuestra infancia. El término autoimagen se utiliza para referirse a la imagen mental que una persona tiene de sí misma. Gran parte de nuestra autoimagen se basa en nuestras interacciones con otras personas y nuestras experiencias vitales.
 Esta imagen mental (nuestra autoimagen) contribuye a nuestra autoestima.
En virtud de este razonamiento, incluso los seres humanos más viles merecen un trato humano y considerado. Esta actitud, no obstante, no busca entrar en conflicto con los mecanismos que la sociedad tenga a su disposición para evitar que unos individuos causen daño a otros -sea del tipo que sea-.
El concepto de autoestima varía en función del paradigma psicológico que lo aborde (psicología humanista, psicoanálisis, o conductismo). Desde el punto de vista del psicoanálisis, la autoestima está íntimamente relacionada con el desarrollo del ego;  , por otro lado, el conductismo se centra en conceptos tales como «estímulo», «respuesta», «refuerzo», «aprendizaje», con lo cual el concepto holístico de autoestima no tiene sentido. La autoestima es además un concepto que ha traspasado frecuentemente el ámbito exclusivamente científico para formar parte del lenguaje popular.” https://es.wikipedia.org/wiki/Autoestima


Hugo W Arostegui

sábado, 6 de agosto de 2016

Constelaciones Humanas



Decimos que “cada persona es un mundo en sí mismo” de manera que todos partimos de realidades diferentes que nos hacen percibir los acontecimientos desde la óptica de nuestra esfera de influencia y de la distancia que nos separe de un determinado suceso.

Como el mundo que somos cada uno de nosotros nos vamos interrelacionando desde donde orbitamos formando verdaderas constelaciones desde las cuales nos identificamos, estas constelaciones adquieren nombres tales como: constelaciones familiares, redes sociales, agremiaciones, cooperativas, etc. etc.

Tal como sucede con las estrellas que observamos en el firmamento, vistas a la distancia tenemos la impresión de una falsa aproximación entre unas y otras y pareciera que existe una gran armonía entre sus orbitas, lo mismo sucede entre “las estrellas humanas” donde ninguna de ellas puede despojarse de sus “particularidades” y para que puedan “converger armónicamente” es absolutamente necesario desarrollar un gran sentido de empatía en la diversidad de sus esencias.

“La organización de las estrellas en constelaciones es una práctica que existía ya desde tiempos antiguos cuando civilizaciones como las mesopotámicas, las griegas y las orientales llevaban a cabo tal práctica. Esta acción tenía como objetivo principal distinguir de manera más accesible y rápida las estrellas, lo cual servía para la ubicación tanto terrestre como marítima. De más está decir que, al mismo tiempo, estas constelaciones recibían un carácter mágico trascendente y de ahí que se las relacionara con animales o personajes míticos.
... vía Definición ABC http://www.definicionabc.com/ciencia/constelacion.php

Estas constelaciones humanas constituyen en su conjunto las sociedades organizadas que hoy ocupan los cuatro puntos cardinales de nuestro planeta y de ellas depende el mantenimiento armónico que tal como sucede en el firmamento puedan preservar nuestra existencia.

Hugo W. Arostegui


Ir A La Mar En Coche


“De comienzos del siglo XX y desde España, nos llega una expresión muy popular. Sucedía por entonces que comenzaban a verse por las calles los primeros automóviles, que competían con los carruajes tirados por caballos. Para ser propietario de uno de ellos se necesitaba tener bastante dinero. Como también por aquellos años se puso de moda, para los más pudientes, ir a veranear a los balnearios del Mediterráneo o del Atlántico, el colmo de lo exquisito era viajar hasta allí con su propio coche. El que podía hacer eso, lo podía todo. Por eso, surgió la frase “Ir a la mar en coche”, significando que quien podía darse esos dos lujos combinados era un magnate. Esta expresión, con el tiempo y en nuestras tierras, se simplificó en “…y la mar en coche”, como quien dice: “querés todo”. A veces, suele emplearse como etcétera, para rematar una serie de cosas.” 3 mayo, 2010 por sergiodomingo

Habemos muchos adeptos a esta frase que en cierta forma pone en evidencia nuestra natural inclinación a “ir por todo”  en cuánto a nuestras posibilidades de disfrutar al máximo posible de lo que la vida en sociedad nos permita alcanzar.

Claro, también hay que tener muy presente, que si algo nos caracteriza es que tenemos una cierta inclinación a los excesos y que somos muy capaces de intentar dar pasos “mucho más largos de lo que nuestras piernas lo permiten” entonces ocurre que cuando nuestros pasos no son lo suficiente largos zanjemos esta diferencia recurriendo al financiamiento de esta distancia “recurriendo a la “compra del crédito” que compense lo que nos falta.

Esta Frase, “ir a la mar en coche” aunque muchos no sepan su significado  es la que se sigue utilizando como “gancho” en las instituciones financieras y expendedoras de “tarjetas de crédito” las que sin utilizar las mismas palabras nos incitan a disfrutar de esta posibilidad.

“Ir a la mar en coche” mantiene su vigencia mientras en nuestras características continúe incentivando nuestros mayores anhelos, la vanidad.


Hugo W Arostegui

viernes, 5 de agosto de 2016

Ponerle Un Cascabel Al Gato

Se decir “que del dicho al hecho hay un trecho” y por más que este viejo refrán sea por demás conocido no deja de mantener su vigencia cada vez que las circunstancias nos obligan a “bajar un cable a tierra” para evitar un “corto circuito” entre nuestras fogosas ilusiones y la fría e indiferente realidad.
En la vida es imprescindible “asumir la titularidad” de nuestros actos, no está previsto que pretendamos jugar nuestro partido “sentados en el “banco de los suplentes” cuanto antes entendamos esta realidad, que no es otra cosa que “nuestra realidad” mejor estaremos preparados para salir al campo de juego, asir fuertemente nuestros cascabeles, apretar bien el cuello del gato que nos destruye nuestros sueños ratones y colgarle para que suenen bien fuerte los cascabeles, para que cuando nuestras aspiraciones corran riesgo podamos, de esta manera, evitar los malos momentos que sin duda estarán allí, en cada rincón de nuestra vida, agazapados y listos para darnos su zarpazo.
“Hay veces que cuando nos encontramos ante una situación delicada todos los miembros de un grupo sabemos cómo actuar, cual es la solución… pero el problema viene cuando hay que buscar a una persona que realice esa acción.
En este momento es cuando usamos la expresión “¿Quién le pone el cascabel al gato?”.
Esta frase viene de una fábula escrita en el Siglo XIII y que aparece en “El libro de los gatos” de Odo de Sherington.
En esta se nos cuenta como los ratones se reúnen para buscar una solución ante el elevado número de muertes que se producen por el ataque de un gato.
Para acabar con esas matanzas llegan a la conclusión de que deben ponerle un cascabel o algo que haga ruido en el cuello, de manera que cuando el felino se mueva sepan por dónde anda y no les pueda atacar por sorpresa.
Todos los ratones están de acuerdo en que esa es la mejor solución… el problema llega cuando hay que elegir al ratón que lo lleve a cabo, empezando todos y cada uno de ellos a poner diferentes excusas para evitar realizar tan peligrosa acción.”
Recuerda, en este juego no hay excusas y no venden soluciones en la farmacia.
Hugo W Arostegui



¿Quién Pone Estas Piedras?


Esto de que somos los únicos seres capaces de tropezar dos veces contra la misma piedra, además de ser cierto, nos pone en evidencia de que por más que “anunciemos con bombos y platillos” de que somos los únicos capaces de hacer uso de la razón en todas nuestras actividades humanas, todavía nos siguen doliendo las puntas de nuestros pies de tanto golpearnos en las piedras.
“Somos la única especie que caemos varias veces en los mismos errores, nos tropezamos ante los mismos obstáculos, y caemos en la misma trampa varias veces. Es curioso que esto suceda, puesto que nuestra capacidad de aprendizaje debería limitar esas reincidencias. Entonces, ¿por qué las personas tropezamos varias veces con la misma piedra? El caso es que, aunque me he planteado esta pregunta en más de una ocasión, siempre me he quedado con una respuesta a medias.
Algunas personas, ya sea por nuestra ingenuidad, despiste o porque no queramos asumirlo, nos  tropezamos una y otra vez con una misma piedra (en un sentido metafórico, ya que la piedra simboliza cualquier obstáculo que podamos encontrar en la vida). Tendemos a reiterar los mismos errores de pensamiento y de comportamiento, y surgen sensaciones entorno a que nunca terminamos de aprender lo suficiente. Esa es la incoherencia del ser humano: se cae y se cae.
Sabemos que la vida no es perfecta, que hay ocasiones en las que las cosas no salen como nos gustaría (por mucho interés, esfuerzo y ganas que le pongamos), y que esos tropiezos nos hacen madurar. Pero, ¿creéis que siempre es así? Mi opinión es que, aunque la enseñanza que se pretende transmitir es que “hay que aprender la lección y no cometer el mismo error dos veces”,  en la práctica se asemeja más al idealismo que a la realidad; Esta moraleja me recuerda a aquella metáfora que dice que “no es oro todo aquello que reluce”, precisamente porque no siempre somos capaces de dejar de tropezar con esa piedra que se interpone en nuestro camino, del mismo modo que no siempre aprendemos de los errores que hemos cometido.
Quizás necesitamos piedras de vez en cuando, sobre todo cuando estamos aprendiendo. Es difícil darse cuenta de que eres capaz de hacer las cosas bien si antes no te has equivocado un par de veces. Lo fácil a la primera hace que dejemos de prestar atención a los detalles, por lo que la próxima vez que lo intentemos es posible que no nos salga tan bien como nos salió la primera vez. Por lo tanto, necesitamos equivocarnos.” https://emialbaalba.wordpress.com
Mientras tanto aconsejamos desinflamar la zona y tomar algún analgésico.
Hugo W Arostegui



jueves, 4 de agosto de 2016

Aguantate Piola


Si hay algo que merece un comentario al respecto es la actitud displicente de los ciudadanos que por ser “mayores de edad” o sea, adultos electores, que por su condición de tales podrían decidir a través de su voto los destinos de la conducción política que adopten los candidatos a gobernar a sus respectivas naciones, resulta que han optado por abstenerse de emitir su opinión al respecto.

Los resultados que arrojan las distintas encuestadoras que intentan obtener una imagen aunque sea un tanto parcial de las distintas tendencias de los electores encuestados muestran márgenes en ascenso en las opciones: no sabe, no contesta, vota en blanco o se abstiene.

Todo indica que la consiga o la modalidad imperante es “dejar correr los tiempos” un comportamientos que si bien puede ser admisible en los zagueros de los cuadros de fútbol que se sienten apabullados por los rivales no resulta ser recomendable en quienes tienen las facultades de emitir una opinión que pueda ejercer algún tipo de influencia en el resto de los ciudadanos, no resulta una opción recomendable acostumbrarse a “patear la pelota para cualquier lado"

Es por eso lo del título de este tema, esta estrategia del “aguantate piola” que en estos casos significa algo así como: “no seas bobo” “no te metas” “no te conviene” etc. etc. cosa que automarginaliza a quien piensa de esa manera permitiendo que sean otros los que, como siempre pasa en estos casos, tomen sobre sí, la difícil tarea de “sacar las castañas del fuego”

Como digo, esta es solo una opinión, pero sumada a la tuya y a la de otros como tú, pueden significar una montaña de opiniones un tanto difícil de escalar y mucho menos ignorar.


Hugo W Arostegui

miércoles, 3 de agosto de 2016

El Monstruo De Las Cuatro Patas

Aunque es un tipo de monstruo que no revista antecedentes como tampoco se dice nada de él en los registros de la mitología griega, lo que ya es mucho decir, lo cierto que creo que se ha ganado por mérito propio que los estudiosos de estos fenómenos entiendan de que ha llegado la hora de reconocer oficialmente las andanzas de uno de los peores flagelos de la época contemporánea.

Los profesionales que tienen a su cargo temas tan importantes como lo es sin duda “el ausentismo laboral” y la acumulación de certificados médicos que autorizan licencias por temas tales como: stress, lumbalgias, esguinces, han detectado que el consabido monstruo no actúa en soledad sino que se le ha detectado que suele presentarse acompañado de un entrañable compañero de andanzas, nos referimos al que responde por el curioso nombre de
“cinco minutos más”

En realidad no tiene mayor relevancia la época del año ni del estado de la temperatura ambiente, quien ha sido atrapado permanece “como adormilado” por alguna sustancia tóxica que le inhibe sus sentidos y llega a confundirle de tal manera de que la pobre víctima piensa de “que siempre tiene tiempo” o lo que suele ser mucho peor, que se convenza “de que todo puede esperar un ratito más”

Así las cosas se sabe que estos monstruos actúan en complicidad con las sábanos muy suaves, a veces delicadamente perfumadas, también conspiran la cantidad y peso de las mantas que el pobre sujeto tenga encima y también cuentan con la ayuda invalorable de relojes despertadores que suelen quedar bien callados con un simple manotazo o el golpe de alguna “chancleta” enarbolada al azar.

Se han detectado estos monstruos, nos referimos al instigador de todos estos males, los cuales son exhibidos con gran pompa y en la mayor impunidad en las principales empresas que se dedican a incentivar su venta en casas comerciales, grandes superficies, shoppings, etc. en la modalidad de una y dos plazas, generalmente acompañados de mullidos colchones sumamente cómodos y confortables.

Para evitar alguna demanda en mi contra y no ser acusado de provocar “alarma pública” no voy abundar en  más detalles aunque me consta que muchos ya han pasado por esta experiencia.


Hugo W Arostegui  

Impulso

                 

“Como la Alquimia y todas las disciplinas ocultas, La Cábala dice que el hombre contiene en su humana dimensión todo el universo.
Es por eso que se lo define como un microcosmo.

Notemos, de paso, que cuando el esoterismo dice que el hombre es como el universo, que lo que está encima es como lo que está debajo, no se está aludiendo a la igualdad sino que esa expresión es una analogía.
El hombre y el mundo no son semejantes y menos aún iguales:  
El hombre y el mundo son análogos.”
                                            La Kabbalah, Segunda Parte    Hugo W Arostegui

De acuerdo con nuestras convicciones y los dictados de las grandes religiones que nos han legado sus enseñanzas se nos dice, y la gran mayoría de nosotros crece con esta sensación aunque no sepa o no pueda explicarlo con cierta claridad, “el ser humano no pertenece a este mundo” lo que implica decir que venimos de otro lado y una de las respuestas mayormente aceptada es la de que “venimos directamente de la presencia de Dios, El  Padre” .

Pues bien, es muy probable que esta sea la causa fundamental por la cual la sociología nos indica que si bien, el ser humano nace biológicamente, para considerarse un “Ser” con el goce pleno de sus facultades, deberá superar las limitaciones inherentes a este nacimiento.

Para nosotros, los humanos. Existe una “barrera natural” que funge como si dependiera de una imperceptible “ley de gravedad” que nos mantiene al igual que al resto de los mortales “atrapados” contra la tierra sin mayores diferencias con lo que le ocurre a un “vulgar gusano” que convive con nosotros.

Esta barrera que nos mantiene atrapados sólo puede ser superada por “la energía” que acumulemos por medio de nuestro esfuerzo individual, es intransferible y por ende no existe, agregaría, “gracias a Dios” otro medio de comprarnos un pasaje que permita viajar en uno de esos cohetes interplanetarios que logran incursionar en la estratosfera, además nos serviría de muy poco, pues irremediablemente estaríamos obligados a retornar.

El impulso al que hacemos referencia al comienzo es imprescindible y sólo pueden obtenerlo quienes lo obtengan mediante su perseverancia y dedicación, lamentablemente hemos sido testigos de situaciones en las  cuales el impulso acumulado ha sido insuficiente y esas naves no han superado las limitaciones del medio cayendo estrepitosamente al vacío.

La capacidad creativa de cada ser humano es más que suficiente para superar todas las limitaciones, eso sí, requiere que no escatimemos el esfuerzo que tal desafío nos requiere.

Como bien dicen los veteranos que juegan partidas de truco: “lo que cuesta vale”

Hugo W Arostegui




Siempre Listos


He tenido la oportunidad cuando tenía unos seis años de edad de integrar un grupo de “niños exploradores” denominado Gral. Eugenio Garzón, nuestra consigna dada a “voz en  cuello” por todos los integrantes debidamente cuadrados al estilo militar era la siguiente: Dios, Patria, Hogar, Siempre Listos.

Desde entonces esta ha sido una consigna que ha estado presente en cada una de mis aptitudes aplicadas tanto en el estudio, como en el trabajo, una consecuencia natural y previsible desde entonces ha sido el haber desarrollado una muy marcada tendencia a asumir responsabilidades y ocupar los puestos de trabajo más exigentes en cuánto a dedicación como a sacrificio personal.

Hubieron muchas instancias en el transcurso de nuestras vidas durante las cuales nos hemos dado de bruces con nuestros propios límites y cuando todo presagiaba que nuestras fuerzas colapsaban ante tales exigencias, desde lo más recóndito de nuestro ser resonaban estas palabras recitadas al unísono en nuestros primeros años, “siempre listos”.

Todos los días debemos realizar algunas tareas, algunas nos gustarán más, otras mucho menos y habrán otras, o quizás muchas otras que francamente las quisiéramos evitar, la realidad se encarga de que demostrarnos de que no es posible “sacarle el cuerpo” a todo aquello que sabemos que dependen de nosotros su realización pues bien, amigo o amiga mía, hagámoslo con buen humor y entusiasmo.

El mundo, la sociedad que integramos nos necesita, pongámonos las pilas y comencemos a trabajar en todo lo que nos corresponde tomemos “el toro por sus astas” nada ni nadie podrá impedirlo, el por qué ya lo sabemos: “estamos siempre listos”

Hugo W Arostegui



martes, 2 de agosto de 2016

El Buen Humor



Les suelo hacer a quienes trabajan conmigo el siguiente comentario: “cada mañana cuando me levanto y me paro frente al espejo, al verme, siento una profunda gratitud hacia mis progenitores, ¿saben por qué? Por qué realmente se esmeraron cuando me hicieron me hace muy feliz y me llena de entusiasmo verme frente al espejo y empiezo mi día pleno de entusiasmo”

Y créanme que esto no es un chiste forma parte del buen humor con el cual comienzo mi jornada de trabajo y cuando veo algunas caras largas y desanimadas les hago el siguiente comentario: “que les pasa? Han estado “chupando limones” acaso? ¡por favor! vayan nuevamente a sus casas y rompan todos los espejos, tapen todos los que encuentren pues cualquiera que se viese tal como se les ve a ustedes con seguridad empieza el día con una gran depresión”

“Relacionamos continuamente el buen humor con la felicidad, y muchas veces nos paramos a pensar... ¿Qué fue primero? ¿Nuestra felicidad o nuestro humor? ¿Quién provoca a quién? Pues bien, podemos decir que ni uno ni otro, es nuestra actitud ante las cosas que provoca que todo vaya bien....o mal.

Tenemos dos opciones a la hora de afrontar las cosas cotidianas, hacerlo con buen humor o mal humor, ser positivos o negativos... Nuestra predisposición ante los problemas es fundamental a la hora de medir el resultado final del problema y sobre todo, de nuestro estado de ánimo.

Todos tenemos nuestros momentos de felicidad y tristeza, obviamente, y no es normal estar siempre feliz, en cada momento, pero lo que no es lógico es estar enfadados con la vida constantemente, si te identificas con una actitud similar a esta, quizás sea hora de empezar a hacer las cosas de un modo más desenfadado.”

Así es la cosa

Hugo W Arostegui


El Hombre Libre


Así como si bien el hombre biológico nace, el hombre en su condición de tal, vale decir, el ser socializado e integrado, se construye a sí mismo, a medida en que vaya incorporando en su necesaria preparación. un conjunto de valores que lo habiliten para el ejercicio pleno de sus derechos y las concomitantes obligaciones que esta situación implica.

Cuando nos referimos al hombre o a la mujer, socialmente hablando, el constituido en un ser social, estamos pensando en seres humanos aptos y por lo tanto, esencialmente libres.

Podemos mencionar la presencia de una clara dicotomía, por un lado, tenemos al “hombre natural” el nacido biológicamente pero carente de un imprescindible “proceso de socialización” no apto para su inserción social y por el otro, al hombre como integrante de una organización social donde puede ejercer plenamente su condición de tal.

Podemos afirmar que el concepto de ser humano socializado está íntimamente ligado a su derecho a decidir por su expresa voluntad de acción,  lo que equivale a decir que integra una sociedad constituida por seres que gozan de “la igualdad” que solo les puede proporcionar la libertad de elección tanto individual como socialmente hablando.

Concepto de libertad:
“La libertad da como resultado seres dignos y satisfechos ya que al poseer un individuo su plena libertad puede elegir cómo llevar adelante su vida, cómo transformarla o cómo mantenerla de acuerdo a lo que necesite o quiera. Por eso, la importancia de la libertad recae en el hecho de que es un elemento fundamental que contribuye directamente con la generación de una persona plena, satisfecha, llena de placer, alegría y mucho más fortalecida tanto a nivel social como individual. Recordemos que una persona a la que su libertad es quitada suele convertirse en una persona débil, insegura y miedosa simplemente por considerársela no apta para actuar de acuerdo a sus propios intereses.”
... de Importancia:
http://www.importancia.org/libertad.php

Hugo W Arostegui


lunes, 1 de agosto de 2016

Del Tiempo Del Ñaupa


Escuché en estos días pasados de labios de un anciano que ha vivido toda su vida, como se suele decir, “en el medio del campo” este hombre me contaba que conoció a don Lino, mi abuelo, a mi padre, Martín y a mis tíos, Tito y Lito, conocidos por sus apodos y rematando la cuestión, para darme una idea de su longevidad, me dice: “yo soy del tiempo del ñaupa”

En mis albores he escuchado bastante asiduamente esta expresión pero cuando estaba un poco más crecidito las expresiones que usábamos eran tales como: “esto es del tiempo de María Batata”, también, más modernos, decíamos “tiempos de Maricastaña” o cuando hablábamos de cosas tan antiguas como sabidas, decíamos, “más conocidos que el agujero del mate”.

Como digo, estos términos eran utilizados asiduamente en nuestras conversaciones y no nos llamaban la atención en una forma particular, eran expresiones que se decían  “entrecasa” totalmente incorporadas a nuestra forma de hablar “entre nosotros”

Al escuchar a este anciano, noventa y seis años, toda una institución en materia de conocer orígenes, decirnos que era de los tiempos del ñaupa, despertó mi curiosidad en cuanto a los orígenes de esta expresión y por más que he preguntado nadie pudo darme una respuesta que considerase satisfactoria.

Tal es así que recurrí al “mata burros” de internet y esto es lo que pude rescatar al respecto,

Dice así:

Expresión muy antigua, valga la redundancia, y muy particular para indicar que una cosa o un acontecimiento es de mucho tiempo atrás. La creencia popular considera que Ñaupa fue una persona de muy antigua data o que tuvo una existencia asombrosamente prolongada, sin embargo, esto está muy alejado de la realidad. También suele asociarse al lunfardo, en especial cuando se dice que una canción o un tango, más precisamente, es del tiempo del ñaupa. La frase se entiende perfectamente cuando se descubre que el vocablo ñaupa proviene del término quechua ñawpa, que significa, justamente, viejo o antiguo.”

Hugo W Arostegui


El Arte De Discurrir


Considerar detenidamente una cosa para llegar a comprenderla

No es verdad que las personas paren de perseguir sueños porque se hacen viejas, sino que se hacen viejas porque paran de perseguir sus sueños”
(Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura en 1982, 1927-2014).

Esta frase de Gabriel García Márquez ha quedado “prendida” en mi subconsciente y prácticamente no me ha abandonado desde hace un buen tiempo.

En cierta medida me ha aportado muy sólidos argumentos para contrarrestar algunas “presunciones” que suelen hacerse con motivo al cúmulo de años que el tiempo cronológico vigente viene registrando sobre mi persona.

Resulta cada vez más notoria una frase que suelen decir algunas personas que han pasado algún tiempo sin verme, la tal frase, dicha en un notorio acento cordial y afectivo, dice más o menos así “ hola, Arostegui, que bien se le ve, parece que el tiempo no ha pasado para usted” dicha tal expresión nos estrechamos en un fuerte abrazo y nuestros viejos amigos, parientes, colegas de trabajo y demás conocidos seguimos cada cual por sus propios caminos “y hasta la próxima” como solemos decirnos casi siempre.

Está claro que tales encuentros me resultan muy agradables y me hacen sentir muy alagado por sus “espero” muy sinceras expresiones, realmente este tema del paso del tiempo me tiene muy sin cuidado y de existir alguna relación con la persecución de mis sueños, cosa que no dudo en absoluto, en lo personal no tengo la menor duda de que cuando llegue, si es que llega, el final de mis días, me ha de encontrar como si fuese un sabueso empedernido “olfateando mis sueños” en procura de alcanzarlos.

Hablando de discurrir, recuerdo una respuesta que le he dado a alguno de estos viejos amigos míos con motivo de la frase que ya les he mencionado, en esa oportunidad en el tono jocoso que suele ser mi característica, la respuesta ha sido algo así: díganme una cosa, que es lo que tengo que entender con eso de “que bien que estoy” significa acaso que de acuerdo al tiempo transcurrido debería estar embalsamado y conservado en formol, demás está decir que estos dichos míos les pone un tanto sonrojados y todo termina en una sonora carcajada.

He aprendido a soñar sentado a la vera de una fuente y esa fuente tiene un nombre:
La suelen llamar “la de la eterna juventud”

Hugo W Arostegui



domingo, 31 de julio de 2016

Manteniendo El Fulgor


“Como un fugaz pensamiento
aquel resplandor
un inmenso estallido de luz,
llamémoslo así, el fulgor.”
Nacho Vegas 

Cada día, en la constancia de nuestro deambular, como aquellos que salen a trotar por las mañanas por el simple gusto de hacerlo, así es lo que hago yo frente al teclado de mi ordenador.

El detonador de este súbito entusiasmo, que puja muy dentro mío por manifestarse, ha sido la percepción de un extraño fulgor que desde los confines inescrutables del pensamiento me indica que debo intentar, una vez más, como todos los días, mantener la llama vivaz de este ingenio mío que me exige ejercitar todas mis habilidades en la vigilia constante de todas las expresiones creativas que suelen surcar, cual si fuesen estrellas fugaces, dejando a su paso la casi imperceptible huella de su fulgor.

Nuestra capacidad de extraer la información que se acumula en la memoria se ejercita en la práctica constante de este trotar por los senderos del recuerdo inhalando el fluido vital ,que nutre y fortifica a la vez, la veta inspiradora que nos insta a continuar y continuar, extasiados  por la siempre distante aureola de su fulgor.

Quien lo intenta describir en su escritura suele percibirlo tal como se percibe al astro rey, en el fulgor tempranero de cada mañana donde nos exhibe la aurora de un nuevo amanecer.


Hugo W Arostegui

sábado, 30 de julio de 2016

Un Muy Sentido Recuerdo


Adiles Elena Arostegui     
26/05/1953- 29/07/2016

En este día de julio ha partido de este mundo una hermana mía nacida en el medio rural en una época si se quiere muy lejana cuando en mis primeros diez años de vida supe, por medio de mi tía Elena que había nacido una niña, su sobrina, que tuvo como nombre un reconocimiento, hecho por su hermano, Martín a quién la distancia, sumado a las circunstancias adversas que supo poner la distancia y las tan particulares formas de encarar la vida que ambos hermanos enfrentaban.

De esta forma es que supe que había nacido una hermana mía, como digo, en una época muy lejana en el tiempo, cuando con mis muy escasos diez años, fui tomando conciencia de la familia que integraba cuando intentaba comprender en mi aún inocentes primeros años el nuevo nacimiento ocurrido, allá lejos, en La Sierra, departamento de Maldonado, “a un mundo de distancia” de la ciudad de Montevideo donde yo en aquel entonces, un tanto, solitaria y tozudamente, intentaba comprender lo que sucedía a mi alrededor.

Mi hermana Adiles nació y creció como una flor cuyo capullo nunca se abrió, desde su más tierna infancia, con sus escasos dos años, fue víctima de una enfermedad que la condenó a vivir el resto de sus días en su condición de sordomuda, esto que describimos muy someramente ha sido una constante desde siempre, tengo la absoluta certeza de que no obstante sus severas limitaciones, conoció y reconoció a sus padres y hermanos incluyendo a mí mismo, como también a mis hijos y a sus sobrinos.

Hoy ha partido, sinceramente, de lo profundo de mi sentido corazón, siento que ha abierto sus ojos a una nueva vida, la vida que siempre mereció, su imagen permanece en mi memoria con su tierna mirada y esos ojos que seguramente sabían mucho más que su particular circunstancia le permitían expresar,

Seguro que resultará muy difícil comprender lo que me pasa por dentro pero así es la vida con sus matices que nos mezclan los recuerdos y humedecen nuestros ojos en lágrimas de un hermano mayor que no olvida.

Hugo W Arostegui


viernes, 29 de julio de 2016

Realización


Es bueno que de vez en cuando nos detengamos a analizar cuánto realmente nos conocemos a nosotros mismos, que tiempo nos hayamos tomado para dialogar con “el otro yo”, para escucharnos, y tratar de entender cuáles son aquellas cosas a las que íntimamente aspiramos.

Resulta que muchas veces nos vamos introduciendo en lo que suele llamarse “la vida real” y frente a la crudeza de sus exigencias nos vamos despojando de nuestros sueños e ilusiones..

Es entonces en que paulatinamente, digamos que al ritmo de las muchas concesiones y recortes que a nuestras primeras aspiraciones le vamos truncando preferimos sumergirnos en las exigencias de un mal entendido “tiempo presente” embriagamos la conciencia con nuevas y variadas emociones y literalmente “pateamos para cualquier lado” nuestro “querer ser” y nos conformamos con un: “si yo pudiera ser, si las ocasiones fueran más propicias, seguramente, entonces sí, sería.

Nos enmudecemos y esquivamos la soledad y con ella las oportunidades de diálogo con nuestro “compañero del alma” el que guarda como si fuese el primer día todos nuestros sueños y anhelos de realización personal.

Mi compañero de viaje y yo aprovechamos “las madrugadas del mate” para compartir juntos los momentos de reflexión, cada uno sabrá mejor que nadie la ocasión del momento oportuno, quizás se prefiera caminar, sentarse al lado de leños encendidos, en fin, todo puede significar una oportunidad cuando queremos tenerla, nos debemos ese diálogo para limar frustraciones y asperezas y sobre todo poder sincerarnos, cobrar fuerzas y continuar avanzando.

Reflexionemos:

“Cuando alguien no logra realizarse se aliena, o sea que se
hace lo que no es, lo que no debe ser.

Hemos dicho que el hombre es un ser en proyecto, un ser
que se va haciendo. Ser persona es una posibilidad en que
permanentemente se encuentra el hombre.

Llegar a ser persona debe constituir la meta de nuestra
existencia individual y social.

Realizarme como persona significa llegar a ser lo que estoy
llamado a ser, desarrollando mis dimensiones y alcanzando
y ejerciendo los valores humanos.

Ser persona es la vocación o llamada de todo hombre. No
quedan más alternativas que la de responder positivamente
o la de conformarse con no ser.

Realizarse es "ser más", es "humanizarse", es "personalizarse",
es llegar a ser lo que debe ser.

Alienarse es "ser menos", es" deshumanizarse", es" despersonalizarse",
es "esclavizarse", es frenar en sí y en los demás la obtención y el
ejercicio de los valores humanos.

La despersonalización, la deshumanización, la alienación, hace que
desaparezca el hombre-persona y que aparezca el hombre-cosa,
el hombre-máquina, el hombre-animal, el hombre-objeto.

La realización humana es nuestro gran compromiso.”
 

Hugo W Arostegui

jueves, 28 de julio de 2016

El Hábito De La Lectura


Me maravilla poder observar las inúmeras opciones que la vida moderna nos ofrece para que podamos incursionar desde nuestra propia casa a la lectura de textos de los más diversos autores prácticamente sin costo alguno y bajar los contenidos de sus obras al instante.

Sin pretender amargarle la vida a los estudiantes actuales de cualquier disciplina permítanme que me tome el atrevimiento que los años de tránsito por esta vida me han otorgado para narrarles algunos breves episodios que se remontan a la época en la cual integraba un grupo de estudiantes universitarios que enfrentábamos con cierto estoicismo la ardua preparación de nuestras tesis de pasaje de grado.

Como puede apreciarse no pretendo incursionar en la prehistoria y ni siquiera en la historia convencional para comentar ciertas cosas de mi juventud pues no me considero tan viejo.

Lo cierto es que en mil novecientos sesenta apenas teníamos en nuestro país el acceso a la televisión y con mis jóvenes diecisiete años desconocía totalmente que con el paso del tiempo seríamos testigos presenciales de esta magistral revolución de la era informática.

Para ser breve, simplemente diré, que en nuestra juventud no teníamos acceso a determinados autores por la sencilla razón de que no existían estos textos de estudio ni siquiera en la propia Biblioteca Nacional de manera que nuestros profesores nos informaban de los temas expuestos por algunos autores con la salvedad de que si quisiéramos incursionar en la lectura deberíamos, irremediablemente, estudiar a estos autores en  la Biblioteca Nacional en Buenos Aires, Argentina.

Ante esta situación, lejos de amilanarnos, nos organizamos hicimos colectas entre todos y elegíamos a uno de nosotros, a mí me ha tocado hacerlo varias veces, comprábamos pan y  mortadela para poder comer al día siguiente y como a las nueve de la noche nos embarcábamos en el “vapor de la carrera” que demoraba toda la noche en cruzar el río de la plata y desembarcábamos en el puerto de Buenos Aires, de allí a la biblioteca y pasarnos todo el día sacando apuntes de los libros, todavía tengo una marca en mis dedos de la mano derecha, de tanto escribir, que seguramente me acompañará por el resto de mis días. después de hacer todo esto regresábamos de la misma manera a Montevideo.

Al regresar nos repartíamos los apuntes y pasábamos largas horas “picando matrices” para luego pasarlas, una por una, por el mimeógrafo y de esta manera confeccionar los temas de estudio, vendíamos estos trabajos a un costo mínimo para intentar resarcirnos de los gastos y de esta manera estar en condiciones de poder nuevamente viajar cuando fuese requerido.

Todos tenemos “como premio consuelo” el  mérito de ser mencionados por las autoridades que nos visitaban y conocían el esfuerzo que realizábamos, quienes manifestaron en algunas ocasiones “estos maravillosos jóvenes de la generación de los sesenta”

Al terminar se me ocurrió dejarles esta valiosa opinión:

 “Según Vaughan Bell, polifacético psicólogo e investigador del King’s College de Londres, “la capacidad de concentrarse en una sola tarea sin interrupciones representa una anomalía en la historia de nuestro desarrollo psicológico”. Y aunque antes de la lectura cazadores y artesanos habían cultivado su capacidad de atención, lo cierto es que sólo la actividad lectora exige “la concentración profunda al combinar el desciframiento del texto y la interpretación de su significado”, dice el pensador Nicholas Carr en su libro Superficiales (Taurus). Aunque la lectura sea un proceso forzado, la mente recrea cada palabra activando numerosas vibraciones intelectuales.

Hugo W Arostegui


Quien Escribe


Como bien puede apreciarse suelo participar activamente en la difusión de artículos, ahora bien, de ninguna manera, como lo he reiterado innúmeras veces, esta actividad que mencionamos no significa que nos consideremos escritores en todo el sentido de la palabra,    lo que sucede es que el medio que utilizamos para difundir nuestro pensamiento es precisamente la escritura, (bueno esta agregar que es el único modo que conocemos)

Si alguien me pregunta: ¿Por qué usted está diciendo esto? La verdad es que mi respuesta puede resultar un tanto confusa, entonces, claro, no ha de faltar la siguiente interrogante:        dígame, ¿por qué dice usted que su respuesta sería un tanto confusa? Entonces, obligado, intentaré responder, no resulta nada sencillo esbozar algún tipo de comunicación cuando desconocemos a quién o quienes nos dirigimos, en artículos anteriores nos hemos referido a que nos consta de que han ingresado a nuestros “links” personas provenientes de distintos lugares del planeta de las cuales no tenemos muy claro cuál sea su perfil, sabemos que muchos son estudiantes otros profesionales de la educación y muchos otros, sobre todo muchas otras, que ingresan a la lectura por el simple gusto de enterarse de lo que decimos.

Lo que dejamos claro es que la voluntad de escribir responde a que la escritura es el medio que conocemos para expresar lo que sentimos, todo lo que surge de nuestro tecleado es el fruto de nuestra creación intelectual la cual no siempre alcanza a satisfacer los requerimientos de quienes participan de la lectura de los mismos, entendemos que es posible que nuestro dominio del lenguaje, por más que nos esforcemos en enriquecerlo, pueda carecer de la capacidad expresiva que por respeto a nuestros lectores deberíamos tener.

Eso sí, nobleza obliga, a esta altura no nos podemos escudar en supuestas limitaciones, todo lo que lleva nuestra firma está avalado por una vasta trayectoria en el terreno de la comunicación y nos consideramos, sin falsa modestia, lo suficientemente formados como     para emitir una opinión autorizada en todo lo que expresamos.

Una cosa es querer y otra muy diferente es el poder.

Hugo W. Arostegui


miércoles, 27 de julio de 2016

Lectores: La Opción Informática


En estos últimos tiempos, digamos de algunos meses hacia atrás, en la lectura de un informe que puede consultarse en los registros internos que Google mantiene en la cuenta de mi blogger “hugoaros. blogspot.com” encuentro que se ha incrementado sustancialmente la cantidad de lectores que descargan directamente a sus celulares los enlaces que publico a través de Facebook.

Además me ha llamado la atención de la ubicación de los lectores, su procedencia y los sistemas que utilizan para la recepción de los artículos en cuestión, según este informe de la página interior del mencionado blogger se pueden encontrar lectores en diversas partes del mundo, por citar estas procedencias digamos, por ejemplo: Uruguay, Brasil, EEUU, Canadá, Venezuela, España, Chile, Argentina, Rusia, Polonia, Portugal, Monrovia, etc.

Quienes nos consideramos escritores virtuales, vale decir que utilizamos los medios informáticos para la divulgación de nuestros artículos, en mi caso confieso de que no tengo mayores conocimientos en la materia, digamos que esto que menciono es lo que puedo entender de los reporter de las publicaciones de Google en mis páginas internas, lo mismo me sucede con los anuncios que aparecen publicados en estos temas.

Con el tiempo los artículos que reúnen estas condiciones ya sobrepasan los trescientos y reitero de que no participo ni en la selección ni en los anuncios que se adjuntan a mis temas, hasta el momento de vez en cuando observo lo que se expone para monitorear la seriedad de los mismos y dejo en manos de Google esta selección no encontrando nada anormal o fuera de tono en el acceso.

He estado ajustando los temas que publico actualmente sobre todo en su extensión para facilitar de alguna manera los enlaces que realizo a través de face book, cualquier situación que puedan encontrar en cualquiera de estas publicaciones solicito por favor que me lo hagan saber vía correo electrónico mi dirección es la siguiente: arostegui.hugow7@gmail.com

Sinceramente

Hugo W Arostegui