sábado, 15 de junio de 2019

El Verbo De Todos

En estas vacaciones he podido apreciar las diferentes posturas de cada uno de los contertulios de cualquier grupo de personas que mantengan una animada conversación sobre distintos aspectos de las relaciones humanas.
Resulta muy interesante la observación de que ninguno se siente desprovisto de su capacidad de opinar sobre cualquier asunto en cuestión y todo parece indicar de que cuando se emite cualquier juicio relacionado  con éstos temas que hemos puesto a consideración, siempre nos parece que nos estamos refiriendo a una tercera persona, alguien que nada tiene que ver con nosotros mismos.
"Libertad de pensamiento y de expresión.
1. Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y de expresión. Este derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin consideraciones de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en forma impresa o artística, o por cualquier otro procedimiento de su elección y gusto
2. El ejercicio del derecho previsto en el inciso precedente no puede estar sujeto a previa censura, sino a responsabilidades ulteriores, las que deben estar expresamente fijadas por la ley y ser necesarias para asegurar:
a) El respeto a los derechos o la reputación de los demás.
b) La protección de la seguridad nacional, el orden público o la salud o la moral públicas.
3. No se puede restringir el derecho de expresión por vías o medios indirectos, tales como el abuso de controles oficiales o particulares de papel para periódicos, de frecuencias radioeléctricas o de enseres y aparatos usados en la difusión de información o por otros medios encaminados a impedir la comunicación y la circulación de ideas y opiniones.
4. Los espectáculos públicos pueden ser sometidos por la ley a censura previa con el exclusivo objeto de regular el acceso a ellos para la protección moral de la infancia y la adolescencia, sin perjuicio de lo establecido en el inciso 2.
5. Estará prohibida por la ley toda propaganda en favor de la guerra y toda apología del odio
nacional, racial o religioso que constituyan incitaciones a la violencia o cualquier otra acción ilegal similar contra cualquier persona o grupo de personas, por ningún motivo, inclusive los de raza, color, religión u origen nacional."
La Real Academia Española da como su definición “acción y efecto de someter”. 

Definiendo a someter como: “sujetar, humillar a una persona, una tropa o una facción”, “conquistar, subyugar, pacificar un pueblo, provincia, etc.” En ambos casos el verbo se utiliza también como pronominal.

“Subordinar el juicio, decisión o afecto propios a los de otra persona”; “proponer a la consideración de alguien razones, reflexiones u otras ideas”; “encomendar a alguien la resolución de un negocio o litigio”; “hacer que alguien o algo reciba o soporte cierta acción”.
En este caso también se puede utilizar como pronominal. Para la Enciclopedia Universal es: “acción y resultado de someter o someterse”.

Sometimiento En psicología se categoriza de esta manera a quienes se dejan manipular por otros. 

Estas personas se quejan, se sienten víctimas del opresor u opresora en cuestión y sueñan con liberarse de esa influencia. Lo que no saben, o aún no han descubierto, es que antes de poder vencer a quien las manipula deben dejar de sabotearse y vencerse a sí mismas. 

La relación entre quien somete y el sometido es mutua y muchas veces inconsciente, ya que uno se necesita al otro. 

El segundo, generalmente no tiene confianza en sí mismo, es inseguro, siempre quiere agradar, no tolera el rechazo porque teme no ser amado, es vulnerable y sensible. 

Quien somete también tiene baja autoestima y falta de confianza, solo que se ha sobre adaptado y se ha ocultado tras la máscara de quien es seguro, dominante, autoritario.

Por eso en primer lugar seduce y luego confunde y tergiversa los hechos para dominar. 

No siempre el manipulador se da cuenta de que está manipulando ni el manipulado se da cuenta de que es su víctima. Pero ambos son los polos opuestos de una misma falencia: amarse, conocerse y respetarse a sí mismos. 

Sinónimos de sometimiento Imposición, dominio, sujeción, opresión, entrega, subordinación, dependencia, sumisión, obediencia; represión, reducción; capitulación, rendición, acatamiento; claudicación; humillación.


viernes, 14 de junio de 2019

Razón De La Sin Razón

“Bendito el que hizo el por qué 
pa' disculpas de los males, 
bendito el que hizo el por qué 
pa' disculpas de los males, 
si te lo querés saber 
preguntá y después contame. 

Porque tengo razón 
que no tengo razón, 
que me falta un ojal 
que me sobra un botón. 
Porque sí, porque estoy, 
porque no, que me voy, 
porque soy, porque doy, 
porque fui. “

Una vez dijimos que cuando sabemos algo o mejor dicho, cuando pensamos que sabemos algo, y luego lo divulgamos, indefectiblemente, opinamos, y la emisión de nuestra opinión con seguridad estará impregnada de todas nuestras razones o los consabidos por qué de los “detalles agregados”


Parece que cuando nos extendemos en nuestros considerandos en el desarrollo de nuestro tema en cuestión perdemos un poco la noción de “dónde estamos” y debe ser por esa causa que en algunas oportunidades “las cuentas no nos cierran” vale decir, o nos sobra un ojal o nos falta un botón.

Según suelen decir los entendidos en la materia, esta puede ser la causa de los malos entendidos, los consabidos “corto circuitos” el elemento humano de la razón de la sinrazón.

Atrapasueños

El acontecer, como el existir, son simples abstracciones desde las que describimos lo que llamamos realidad. Hechos y situaciones no sucederían, ni se sucederían, si no los situáramos en unas coordenadas espaciales y temporales precisas, la realidad.

Solo así son inteligibles, como datos, pero en los asuntos humanos, decía Weber, hay siempre una historia interna, por lo que no podemos alcanzar nunca más que una verdad parcial o relativa.

Así pues, somos lo que imaginamos, nuestra propia existencia depende de cómo nos imaginamos.

Pero lo que imaginamos nunca sucede como habíamos fantaseado, demasiados condicionamientos y categorías, demasiadas normas y abstracciones, todo es interpretación, nada existe por sí mismo, una tupida red de interdependencias envuelve todo cuanto hacemos o pensamos desde que se inició eso que llamamos pasado.

Herencia Literaria


Entre las muchas preguntas que suelen hacerme a través de mi correo electrónico hubo una de ellas que me ha dejado preocupado y confieso que un tanto triste, quizás no tanto por su contenido, el cual me resultó muy franco y fluido, sino porque pude captar en esas expresiones una absoluta orfandad de ciertos valores que a mi entender dejaban a mi interlocutor sumido en la peor ausencia que persona alguna pudiese padecer, como si la vida en sociedad heredada no contara con los eslabones básicos que la unieran a esa cadena evolutiva que nos identifica como integrantes de pleno derecho a la sociedad humana que todos conformamos.


Me detuve expresamente en la siguiente expresión: “Para qué diablos sirve eso que hoy llamamos literatura” cuando en nuestra era utilizamos medios electrónicos que ponen a nuestro alcance toda la información que necesitamos al instante.

Estuve buscando una respuesta adecuada a la pregunta recibida y encontré este excelente trabajo que las responde claramente, espero que pueda serle útil su lectura y que pueda compensarle de alguna forma lo que entiendo solo obedece a una falta de observación.

 Cómo sería la vida sin literatura? Creo que sin la literatura todo sería muy difícil de realizar. La literatura es uno de los grandes soportes de nuestra sociedad, es una herramienta que nosotros como personas, ocupamos casi a diario, es impensable lo que sucedería si no existiera. La literatura abarca un gran proceso en nuestra vida, abarca desde un medio de comunicación y expresarnos, hasta una forma de aprendizaje.

Desde la antigüedad, la literatura ha abarcado una buena parte del tiempo de las personas;
ha sido un medio en el cual nosotros como personas, podemos plasmar nuestras ideas y pensamientos en miles de formas, y miles de conceptos inimaginables, con la literatura nos expresamos y abrimos nuestro corazón e imaginación. La literatura abre un mundo de posibilidades infinitas a través de la belleza en la palabra, los sentimientos personales y una amplia gama de vocabulario, todo en conjunto, forma la literatura.

La literatura la podemos encontrar en todas partes; cuando vamos caminando por las calles siempre vemos letreros de publicidad, anuncios en los edificios, papeles volando; todo eso de alguna forma es literatura, y como vemos en esos ejemplos, es parte de la vida cotidiana.
Ahora, viendo a la literatura como un medio de desarrollo, se puede decir que si lo es. La literatura nos permite aprender cosas, esas cosas ayudan a realizar un trabajo, gracias al trabajo, ganamos dinero, y con el dinero, podemos seguir alimentándonos día a día. Si lo vemos desde un cierto punto, la literatura es una base para el desarrollo laboral de las personas, pues aporta los conocimientos que usamos día a día.

Escribir es una de crear algo que alguien necesita, llenar un vacío que tengas en tu vida; pero uno debe recordar que escribir no es solo para uno mismo, es para transmitir un mensaje que capte la atención de los demás, es una extensión más de ti mismo sin la cual no podríamos coexistir en la sociedad moderna.

Una vida sin literatura, es una vida sin imaginación. Sin la literatura, el mundo sería muy seco, la literatura nos da ese toque de creatividad e imaginación que tanto le hace falta al mundo, la literatura es emoción, es amor, felicidad, drama, tristeza, todas esas emociones que sentimos a diarios son expresadas gracias a la literatura.

Sin literatura, la gente no podría expresarse y desahogar todas esas emociones que uno carga a diario, no tendríamos emociones, no sentiríamos nada, no aprenderíamos a vivir, no pensaríamos.

Todos nuestros recuerdos, todas nuestras memorias, todo lo aprendido a través de toda la historia de la humanidad no existiría sin la literatura. Con la literatura aprendemos de nuestros errores como especie, como grupo de personas y como individuos, ¿se imaginan que pasaría si esto no existiera?, la verdad es que yo no puedo ni imaginármelo. Las personas no tendrían una base en la cual aprender, pues sin literatura no habría libros, toda la cultura que tenemos hasta ahorita no existiría, no sabríamos nada, no podríamos curar enfermedades, no avanzaríamos.

Poniéndolo más sencillo, todo nuestro lenguaje y la manera de comunicarnos entre nosotros provienen de la literatura, si no hay literatura, no nos comunicamos entre nosotros; es así de simple.


Toda nuestra vida está influida por la literatura, ya sea de manera directa o indirecta, tiene un efecto en nuestra vida más grande de lo que creemos, hay que estar agradecidos de que la literatura existe."







Al Ñudo Que Lo Fajen

“Frase tomada del Martín Fierro, de José Hernández, en la que se hace referencia a lo vano e inútil de los intentos por ocultar las verdaderas características de la personalidad humana.

La expresión al ñudo -que no debe ser pronunciada como si fuera añudo- que lo fajen es propia del Río de la Plata, quiere decir «inútilmente, en vano» y proviene de la costumbre de ceñir a los bebés con una faja.”

Es posible que lo podamos apreciar al “mirar nuestra imagen” que la misma no nos parezca coincidente con la que solemos “irradiar” a través de nuestras acciones diarias. 

Quizás pueda ser esta circunstancia, (lo que pueda apreciarse tan diferente de lo que estimamos que realmente somos) lo que debamos intentar corregir para acercarnos mejor disminuyendo las diferencias en cuánto a lo que “pensamos que somos” y lo que es percibido por aquellas personas con las cuales diariamente nos relacionamos.

“El ser humano se caracteriza principalmente por su diversidad. En este sentido, las personas expresamos y aprehendemos las cosas de muy distinta manera. Por lo tanto, podemos decir que un individuo puede tener una experiencia muy distinta a la de otro aunque se trate del mismo tema. Así las cosas, la personalidad es un bien estrictamente humano que define a cada persona según una serie de características específicas. Por supuesto, una personalidad similar se puede repetir en distintas personas.”

“Cómo se comporta alguien nos permite saber de manera inequívoca cuál es su manera de ser. Porque el comportamiento remite a las acciones de un individuo y a los sucesos que va mostrando en su vida diaria.
Las personas no solamente pueden ser conocidas por lo que dicen sino también por lo que hacen o no.

Lo más importante y adecuado es que exista una coherencia entre lo que se hace y se dice, si hay desconexión entre ambas cuestiones no será una buena señal y ello nos anticipará que existe un conflicto con esa persona y que no habrá una armonía en su interior.

Porque básicamente el comportamiento de alguien es el fiel reflejo de su universo interno. Por supuesto que es muy difícil para cualquiera, aunque lo intentemos y queramos, meternos en la cabeza de alguien. Conocer sus pensamientos, etc., sin embargo, más allá de esa dificultad, la mejor manera que se tiene a la mano a la hora de conocer a alguien son sus actos, ellos nos demuestran quien es verdaderamente, porque al hablar podrá decir muchas cosas pero a las acciones nos remitimos y en ellas está la verdad.”

Aunque insistan con el argumento de que “somos irremediablemente lo que somos” no es aceptable de que nos “encapsulemos” dentro de ningún preconcepto, ni hemos nacido barrigudos para siempre, ni mucho menos alguien pueda decir que “sea al ñudo que nos fajen”


Nosotros, todos nosotros, podemos,  agregaría que debemos, irradiar nuestra mejor imagen aquella que nos proyecta cual si fuésemos un faro que indica a todos de que "aquí estamos nosotros" para ayudar y orientar a quienes se mueven aún en medio de las penumbras.

Ciencias Humanas

En nuestras expresiones personales resulta relativamente fácil extraer de las mismas algunas conclusiones que nos definen como poseedores de una clara tendencia a las denominadas “ciencias sociales” ,eso está claro y es bueno que a lo largo de todos nuestros dichos hayamos podido incorporar esta impronta que nos relaciona con “Las Humanidades”

“Entendemos por Humanidades todas aquellas disciplinas que estudian el comportamiento, la condición y el desempeño del ser humano, por oposición a las Ciencias Naturales que basan su estudio en el análisis de la naturaleza y de los fenómenos relacionados con ella. Las Humanidades, también conocidas como Ciencias Sociales, se interesan por el estudio de elementos vinculados a la cultura, a la religión, al arte, a la comunicación y a la historia.

En este sentido, una de las principales diferencias entre las Ciencias Naturales y aquellas designadas como Humanidades es que mientras las primeras cuentan con tipos de análisis, estudio, comprobación y reformulación claramente definidos y lógicos, los diferentes objetos de estudio de las Humanidades no pueden ser nunca limitados a análisis empíricos o de estímulo-efecto ya que las variaciones no suelen ser tan fácilmente delimitables y comprensibles. Es por esto que las Humanidades se caracterizan por contar con análisis de tipo especulativo, crítico y de debate ante los fenómenos que le interesan. Las Humanidades no establecen entonces leyes ni postulados irrevocables sino que plantean el análisis de sus objetos de estudio desde posturas variables y debatibles.

La palabra Humanidades proviene del latín, humanitas, que hace clara referencia al ser humano (y a todos sus logros) como eje de estudio. A lo largo de la historia, las Humanidades siempre han sido desarrolladas y profundizadas por diferentes eruditos y pensadores que buscaban comprender el comportamiento y la condición del hombre por fuera de los hechos empíricamente delimitables.

Entre las ciencias consideradas Humanidades debemos mencionar principalmente a la Literatura, a los lenguajes (tanto antiguos como modernos), a la Historia, la Economía, el Arte en sus diversas formas (Plástica, Música, Danza, etc.), la Lingüística, la Teología, la Filosofía, la Semítica y la Semiología, la Filología, la Antropología, la Sociología, los estudios culturales en general, la Comunicación y la Psicología entre muchos otros. Cada una de estas ciencias cuenta con numerosas teorías y postulados que han variado a lo largo del tiempo y que son parte del conjunto de métodos desarrollados por el hombre para comprenderse a sí mismo, su comportamiento, sus logros y su condición”.


Hemos avanzado mucho en los últimos cincuenta años en el estudio de esta disciplina aunque claro está no hemos podido mantener un equilibro entre lo que ahora sabemos y lo que la humanidad en su conjunto ha podido desarrollar, es un hecho de que el mayor conocimiento de estas disciplinas no se armoniza con una mayor y mejor humanidad, lo que ocurre es que ahora han mejorado las condiciones de realizar un buen diagnóstico aunque desconozcamos los medios que nos permitan un mejor tratamiento de nuestras falencias sociales.

La Madurez De Asumir

Caramba, el tiempo pasa, nuestra mente permanece dentro de este cascarón que nos recubre, ella, nuestra mente, la consecuente testigo de todo este proceso, continúa dictándonos todo lo que percibe, ahora ya no permanece callada, no nos habla a través del dolor que nos aqueja por alguna impericia cometida, ahora no es necesario que nos grite desde nuestro interior, solo nos susurra suavemente, ahora es un nexo vital y moderador que nos ayuda a comprender mejor todo el valor acumulado de eso que llamamos con ternura, madurez.

“Cuando tomamos decisiones mirando el largo plazo. Cuando tenemos la capacidad de asumir las consecuencias de nuestros actos. Cuando hemos conocido el éxito y el fracaso. Cuando entendemos que la vida continúa y que, al final, uno siempre sigue respirando. Cuando hacemos todo eso, hemos madurado.

“Inmaduro”. A los hombres pareciera quedarles muy bien ese calificativo. Y a las mujeres les encanta decírselos. Basta un solo acto que huela a adolescencia, a descompromiso, a entretención, y son “inmaduros”. Y de ahí a la imagen del treintón o cuarentón con apariencia de 15 y mentalidad de 18, es cuestión de segundos… 

Son los estereotipos los que más le pesan al inmaduro o inmadura (no es un privilegio o desventaja de género esto de no pensar exactamente cómo piensa el resto).

Y les pesa también ese aire de obligatoriedad que acompaña siempre al “inmaduro(a)” y que tiene que ver con que lo que viene es que se ajuste al resto y “madure”. Pero la madurez no es una alternativa que se pueda tomar de entre varias posibilidades. Ese es el problema. La madurez tiene que ver con un proceso inconsciente de experiencias de vida, cambios biológicos y sicológicos que no se manejan a voluntad.

Por todo lo anterior es la pregunta ¿cuándo maduramos? La respuesta es todo lo que viene.

Primero, una definición. Aunque algunas veces se usan casi como sinónimos, madurez no es lo mismo que adultez (aunque pueden coincidir). La adultez es una clasificación social y tiene que ver, como dice a Tendencias el sicólogo y experto en adolescencia estadounidense Stephen Wallace, con “una edad particular en la que cada sociedad determina que el individuo se ha convertido, legalmente, en un adulto”.

La madurez es otra cosa. Más sutil y que no tiene que ver con una edad en específico ni un período exacto. Es, según los especialistas, el momento (generalmente después de los 30) en que una persona asume que si algo sale bien o mal en su vida, es sólo la consecuencia de sus propias acciones. En otras palabras: es el momento en que una persona es capaz de tomar las mejores decisiones posibles pensando más en el beneficio de largo plazo que en lo inmediato, dice el siquiatra de Clínica Las Condes Elías Arab.


Y eso, como es obvio, no es para todos igual. Los procesos y las historias personales influyen en los tiempos de cada quien y, por eso mismo, hay algunos que nunca maduran. Aunque se estima que la mayoría lo hace de los 30 años en adelante y a partir de tres condiciones imprescindibles. Primero, el cerebro, la máquina que permite toda nuestra vida emocional, debe haber finalizado su maduración, algo que nunca ocurre antes de los 25 años. Segundo, la persona se debe haber enfrentado a experiencias no traumáticas, pero sí poderosas y capaces de cambiar la perspectiva, como el fracaso. Por último, debe haber alcanzado la autonomía en tres sectores claves: emocional, moral y económico.”

Tu Eres El Sentido

La vida es espíritu con un cuerpo prestado, la vida es un espacio de tiempo, largo o corto, esto depende de tu percepción, la vida es un compromiso de grandes y no de cobardes, la vida simplemente es el misterio más grande a prueba de razón y ciencia. La vida es como caminar a ciegas por grandes laberintos de fuego, la vida es terminar para volver a empezar, la vida es caer para levantarse.

La vida ciertamente no tiene sentido, porque el verdadero sentido se lo pones tú.
Que tu vida tenga o no sentido va a depender de la pasión con que impregnes tus acciones día con día.

La vida es luz para quien la ha sabido buscar y la ha encontrado, la vida es oscuridad para quien ha perdido la fe hasta en sí mismo.

La vida es materia, pero también espíritu, transformar la materia es un suceso de lógica, transformar tu espíritu es un acto de amor.

La vida tiene senderos de tristeza y de alegría, la tristeza ayuda a fortalecer tu espíritu, la alegría es señal de que tus sueños se han cumplido.

La vida puede ser miseria, para quien no es agradecido, pero puede ser riqueza para quien conoce su valor.

La vida son horas amargas para quien vive en el pasado, pero pueden ser horas felices para quien sabe vivir el hoy y el ahora sin preocuparse del mañana.

La vida es hoy, porque sólo tenemos seguro el momento que vivimos, el recuerdo del momento que pasó y la esperanza del minuto siguiente.

La vida es un gran juego, donde quien aprende ganar disfruta, pero quien no aprende a perder se frustra.

La vida está compuesta de deseos que satisfacen al cuerpo, pero también de ideas que alimentan el alma.

La vida tiene muchos obstáculos, el más aberrante de todos es “No querer”, la meta más grande es superarte a ti mismo, la limitante más tonta es pensar en los demás.

La vida es una lucha cotidiana para los seres grandes de espíritu, iniciada la batalla puedes caer o vencer, si caes te fortaleces, si vences, no te conformes con saborear eternamente las mieles de un triunfo, por el contrario, prepárate para la Gran Guerra.

La vida tiene razón y emoción; la razón es la respuesta lógica de un pensamiento, la emoción es la respuesta de tus sentimientos. Quien vive con razón piensa siempre en sí mismo, Quien vive la emoción es capaz de vivir y sentir por los demás.

La vida puede ser un simple sueño para quien nunca se atrevió a conquistarla, pero puede ser una realidad para quien se esfuerza por vivirla.


Comportamiento Social


 Cuando aplicamos sólidos criterios de comportamiento tanto en lo que concierne a nuestra conducta personal como al que apliquemos en nuestras relaciones sociales no solamente nos hace más confiables y previsibles sino que además, nos representa como “actores conductores” individuos capaces de alcanzar los objetivos propuestos con la voluntad y confianza propias de quienes aspiran a alcanzar sus metas superando con su esfuerzo constante todos los desafíos que puedan eventualmente encontrarse por delante.

“La noción de disciplina, por lo tanto, puede estar vinculada al comportamiento o a la actitud de alguien. Se dice que la disciplina es buena cuando la persona respeta las reglas, las leyes o las normativas dentro de algún ámbito: “Insultar a una maestra es una falta grave de disciplina”“Todos los jugadores tienen que respetar la disciplina impuesta por el entrenador”.
Y eso sin olvidar lo que se conoce como disciplina personal o autodisciplina que es aquella que se compone de una serie de pautas y de comportamientos que alguien lleva a cabo, de manera constante y férrea, en beneficio de una estabilidad y de la consecución de los objetivos que se ha marcado.
Es por ello que cuando se habla de autodisciplina en muchas ocasiones se identifica con éxito personal pues se establece que es la forma de lograr los sueños que tenemos. En este sentido, un perfecto ejemplo es el conjunto de atletas que tienen como meta ganar sus competiciones y las pruebas a las que tienen que enfrentarse. Así, para lograr la victoria en las mismas se hace necesario que tengan una disciplina de entrenamiento y de alimentación que les capacite física y mentalmente.
De esta manera, se establece que este tipo de disciplina propia se sustenta en una serie de principios o de reglas básicas como son la fuerza de voluntad, la persistencia, el trabajo duro, la aceptación y la laboriosidad. Elementos todos ellos que se convierten en la clave para establecer nuestra disciplina y, por tanto, para alcanzar los fines que nos hayamos marcado.

La disciplina, por otra parte, puede ser un campo profesional o de estudio. La antropología, la escultura, la kinesiología y el fútbol son cuestiones muy diferentes que, sin embargo, pueden considerarse como disciplinas según el contexto. Así es posible encontrarse con expresiones como “John Koggrer es un experto en antropología, sociología y otras disciplinas de las ciencias sociales” o “La escultura es mi disciplina artística favorita”.


La disciplina es una opción de vida que nos permite un trazado firme y concreto como asimismo establecer las prioridades, sabiendo escoger, separando aquello que le resulte vital de todo lo trivial que pudiese conspirar en contra de todo aquello que se ha propuesto alcanzar.

Frases Para El Camino

La vida no es sólo trabajar, es tener tiempo para vivirla, tener tiempo para las cosas cotidianas.

Cuando te permites lo que mereces, atraes lo que necesitas.

Consejo del día: no te enojes, recuerda que la gente no te hace cosas, la gente hace cosas y tú decides si te afectan o no.

Los dos guerreros más poderosos son la paciencia y el tiempo. León Tolstoi

No desesperes nunca, ni cuando estés en las peores condiciones, porque hasta de las nubes más negras, cae agua limpia.

El secreto de la genialidad es conservar el espíritu del niño hasta la vejez, lo cual quiere decir nunca perder el entusiasmo.

Nunca te definas por tu pasado, fue sólo una lección, no una sentencia de por vida.

Los pesimistas se quejan del viento, los optimistas esperan que cambie, los realistas ajustan las velas. William Arthur Ward

La gente no es pobre por cómo vive, es pobre por cómo piensa.

El ser humano suele ser tonto, pero tan tonto que se olvidó de ser feliz,sueña con el futuro, llora por el pasado y no sabe disfrutar el presente.

¿Qué has aprendido después de tanto dolor, de tantas traiciones? Entonces respondí: “aprendí a siempre sonreír”. Blaster

Di lo que te molesta cuando te moleste y no cuando te harte, así podrás decirlo con tus mejores palabras y no con tus peores ofensas.

No escoges ni a tus padres, ni a tus hijos, ni a tus suegros. De tu familia sólo podrás escoger a una sola persona: tu pareja…Mucha suerte

Deja que el tiempo pase, y ya veremos lo que trae… Gabriel García Márquez.

No acumules silencios o acabarás gritándole a la persona equivocada.

El reto más grande de la vida es descubrir quién eres. El segundo reto más grande es ser feliz con lo que has descubierto.

La estupidez se manifiesta cuando la lengua le gana al cerebro.

No uses estas frases todas juntas porque deseo que tu camino sea largo, muy largo.

jueves, 13 de junio de 2019

Los Excesos


No se deben multiplicar las palabras para intentar aclarar lo que los hechos demuestran en nuestro entorno, el cúmulo de evidencias que recogemos a diario nos despojan de la necesidad de ahondar en el manejo de las consabidas argumentaciones, se dice que cuánto más nos esforzamos en la elaboración de argumentos, utilizando todos los medios posibles a nuestro alcance, lo único que logramos es enturbiar mucho más aquello que se pretende aclarar.

El sentimiento de conocer y aprender del pasado ya no es tan claro hoy, cada vez es mayor la cantidad de personas que lo desestiman y viven anclados en el presente. Esta tendencia al presentismo convive con el resurgimiento de feroces tradicionalismos. 


A la vez estamos viviendo una colosal crisis de identidad. Algunos la llaman crisis de la modernidad, otras crisis de la civilización occidental, otros, crisis de valores, otros postmodernidad, otros globalización. 

Como se le llame, existe una conciencia generalizada de que los fundamentos mismos de la tradición occidental y cristiana están siendo removidos y que algo esencial de aquello que dejó definida nuestra identidad, ha empezado a morir irremisiblemente. Y esta crisis alcanza a todo el mundo y a todas las esferas de la vida aunque toma diferentes matices de acuerdo a cada contexto”.

Una Lección De Vida

Cuando te diriges a otras personas, empleando tonos despectivos, como: “qué se piensa ese que es”, deberías, previamente, intentar responderte algunos interrogantes relacionados con tu propia persona, claro que, para llegar a este punto, es necesario que poseas un mínimo de capacidad autocrítica, cualidad ésta, que de acuerdo a lo que se puede apreciar a simple vista, no tienes ningún interés en cultivar, sobre todo, cuando se tiene una tendencia natural a todo lo vulgar y mediocre, cuando la soberbia y la vanidad, que manan a raudales de tu ser interior, apenas pueden ocultarse tras tu apariencia de “niña bonita” ,apariencia que bruscamente se desvanece a la menor contrariedad de cualquiera de tus caprichos.

Se pueden tener caprichos eso no está mal, también se pueden anhelar o ambicionar, como es tu caso, un sinnúmero de cosas que otros tienen o dicen que tienen, a tu edad todo es posible, puedes defender tu espacio con uñas y dientes, tener más libertad de acción, no rendir cuentas a nadie de tus actos, etc. etc., todo eso puede ser… pero:

Cuando uno pretende transitar por los senderos de la “autosuficiencia” en el sentido de poder hacer “ todo lo que se le antoja” debe primero aprender algunos principios básicos que hacen a la convivencia entre humanos supuestamente civilizados, debes comprender que el ser humano es esencialmente un ser social, y esto no es simplemente una frase aprendida en alguna lección de sociología, nuestra condición, salvo muy raras excepciones, sencillamente no puede desarrollar todo su potencial a menos que se interrelacione con los demás miembros de su especie, aprendiendo, paso a paso, las leyes que regulan esa convivencia.

Personas como tú, quizás piensen que las leyes y las normas, dictadas mucho tiempo antes, de que los ovarios fecundados de tu madre, permitiesen tu irrupción al mundo de los seres vivos, no son otra cosa que restricciones arbitrarias, imposiciones de los más viejos, cuya finalidad tiene como único objetivo, el de pretender imponer su vetusta voluntad, sobre los que, como tú, son jóvenes, inteligentes, informados, modernos, y por ende, mejor dotados para tomar sus propias decisiones, sin depender de nada ni de nadie.
Hay Señor: ¡Cuánta ignorancia!

Vivimos en un planeta llamado Tierra, el cual, como todos hemos aprendido, forma parte de un sistema al que los científicos han llamado “sistema solar”, también nos han dicho, que este sistema solar, forma parte de una galaxia, y que incontables millones de éstas galaxias se interrelacionan armónicamente conformando nuestro Universo.

Este insignificante punto en la inmensidad del espacio, llamado Tierra, en el cual vivimos, también está regido por leyes, la de la gravedad, por mencionar una, la cual determina, entre muchas otras cosas, que todos los seres vivos, que habitamos su superficie, estamos literalmente, aprisionados a su suelo, desde el gusano que repta y orada sus entrañas, hasta el águila majestuosa, que surca con su vuelo las cumbres de las montañas.

Por qué menciono esto, por la sencilla razón de pretender demostrar que no existe ningún lugar en el universo donde no se respeten los espacios, tanto individuales como colectivos, y este equilibrio armónico sólo es posible, cuando cada uno de los actores cumple con la finalidad de su propia esencia y razón de ser, aquí y ahora, asumiendo las responsabilidades inherentes a la cohabitación en un mundo que nos cobija a todos, en la convivencia pacífica de todos los seres vivos, existen reglas que regulan y garantizan derechos y obligaciones, nadie, absolutamente nadie, puede exigir el respeto de los demás si en contrapartida no está dispuesto a respetar y salvaguardar el derecho de todos y cada uno.
Esto que te estoy diciendo, si aún no lo haz aprendido, se denominan principios básicos de convivencia, el desconocimiento de los mismos, no nos exime de su vigencia, sólo demostrará el grado de desviación que hayamos alcanzado en la ruta que nos conduce a nuestra propia realización, cuánto más tardemos en comprenderlo, mayor serán las posibilidades de frustración, este es un camino donde no existen atajos ni desvíos, ciertamente, por el bien de nuestra propia especie, no deberíamos pretender que alguien realice alguna tarea, por sencilla o compleja que nos parezca, que podamos estar capacitados para efectuarla por nosotros mismos.

Y esto no es por puro egoísmo, todo lo contrario, es la ley de la vida, la misma ley que impulsa a los pájaros a expulsar a sus pichones de sus nidos, una vez crecidas suficientemente sus alas, para que aprendan a volar por sí mismos y sobrevivan.

De manera que, si ya haz testado la fortaleza y longitud de tus propias alas y consideras que estás en condiciones de volar libremente, adelante. Pero… Cuidado!
Las aves no se arrojan solas al vacío, ni se separan de su grupo, permanecen juntas y se protegen mutuamente.

Hablando en términos tecnológicos, imagínate una gran aeronave, dotada de todos los elementos necesarios para garantizar la mayor seguridad en su desplazamiento por el espacio aéreo, piensas que esta majestuosa aeronave, ¿prescindiría de su contacto con la Torre de Control? ¿Viajarías tú en una aeronave, por mejor equipamiento que posea, si su piloto se comportara de tal manera? Sin duda que eres lo sufrientemente inteligente como para no cometer semejante imprudencia.

Cuánto más experimentado sea el piloto, mayor serán las precauciones que tome al pilotear su nave.

Te has puesto a pensar, que tú también eres un piloto, que estás pretendiendo conducir la nave de tu propia vida por los caminos desconocidos del porvenir, me viene a la mente, las palabras del poeta Antonio Machado, el cual sabiamente nos dice: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar”.

El tiempo que llevamos compartiendo algunos espacios de nuestras vidas, me ha permitido captar algunas señales – sería prácticamente imposible pretender captarlas todas- señales que hacen a tu entorno, a tus preferencias e inclinaciones, a tu escala de valores, tales como los referidos a la cultura, al cultivo del lenguaje, la solidaridad que es fruto del grado de empatía que hayas desarrollado, sobre todo en lo que se refiere a tu entorno familiar, la ausencia de gratitud por todas las cosas que recibes a diario, el uso y abuso de todo lo que está a tu alcance sin importar su origen, tu vanidad y egocentrismo, etc. etc.

Estas señales que emites, las cuales, como te digo, he podido captar, me permiten percibir, que estamos ante la presencia de un ser, que no obstante, poseer potencialmente, digamos en el plano aún carente de cultivo de tus aspiraciones personales, corre el serio riesgo de convertirse en algo un tanto desagradable, una personita fútil, superficial y vanidosa, a la cual es mejor evitar.

Entonces, ante tu pregunta, un tanto despectiva, de ¿quién se piensa este que es? Cuando te diriges a otras personas, que quizás no compartan plenamente tus tan particulares puntos de vista, correspondería que previamente estuvieses en condiciones de formular juicios de valor sobre tu propia persona, y te respondas con sinceridad, ¿quién pienso que yo soy?

Tal como lo he mencionado antes, el valor que cada uno se pueda dar a sí mismo, está directamente relacionado, con el grado de desarrollo que haya alcanzado, en su capacidad de reconocer las innumerables acciones, que, día a día, son realizadas por personas de nuestro entorno, sin reclamo alguno, con la única finalidad de colaborar, para que nuestra propia vida, sea mucho más placentera,
de lo que sin duda sería, si ellas no estuviesen allí, para hacer que las cosas realmente sucedan.

Acciones tales como: Darte afecto, proporcionarte y servirte los alimentos que consumes, el abrigo que te cobija, los recursos que demandas para satisfacer tus necesidades, etc. etc.

Una lista enorme de bienes y servicios que diariamente consumes, que demandas que se te brinden, por la sencilla razón, que te consideras con el derecho de demandarlos, sin que te sientas con la elemental obligación de agradecer y si es posible, retribuir.

Si miras con atención tu entorno, podrás ver, aunque hay un dicho muy sabio que dice, “ no hay peor ciego que aquel que no quiere ver” que prácticamente no existe ninguna cosa de las que demandas día a día, que provengan de tu propio esfuerzo, en realidad se puede decir que eres tan dependiente de los demás, como lo podría ser una persona inválida, tu por ti misma, no aportas ningún valor, no agregas nada, sólo reclamas, ¿crees tú que mereces lo que a diario recibes?

¿Piensas que el simple hecho de que son tu familia obliga a los que conviven contigo a dar y dar, sin recibir ningún tipo de reconocimiento por lo que hacen?

Las personas que realmente te aman, están allí, siempre dispuestas a extenderte sus manos, pero debes entender, que esas personas tienen un gran valor en sí mismas, han aprendido que los milagros, no se piden ni se reclaman, simplemente se producen.
Ellos son los hacedores de la vida diaria, los que transforman dedicación y sacrificio en obras de invalorable valor, los que permanecen ignorados, ajenos al reconocimiento y a la gratitud.

Vivimos en un mundo de consumo, estamos permanentemente en acecho, buscando, como lo hacen las fieras en medio de la jungla, consumir, consumir, es la consigna de la hora.

Lo que anhelamos hoy, puede ser descartable mañana, siempre habrá algo que despierte nuestro deseo de consumir, todo esto ocurrirá, hasta que llegue el día en que la calesita de la vida se detenga y nos tengamos que descender de ella, es en este punto trascendente de nuestra efímera existencia, cuando nos damos cuenta de la naturaleza del valor, de aquello que hemos dilapidado, despreciado o simplemente ignorado.

Lo del principio, cuando te refieras a los de tu entorno, te sugiero que sustituyas los gestos despectivos, por sentimientos de afecto, por reconocimiento y gratitud, porque ellos están allí, no para ser consumidos y descartados, sino para darle sentido humano a cada día.

Si hoy, no le encuentras sentido a mis palabras, la esperanza de un mañana en que sí puedas entenderlas, permanece.


La Economía Del Pueblo


El Derecho y La Justicia, La Ética y la Moral:

Haremos de este relato un cuento corto, una simple reseña de acontecimientos lo suficientemente explícitos como para ayudarnos a entender un poco mejor, los cómo y los porqué, ocurren las cosas que ocurren, acciones que se desarrollan en nuestro entorno y que sin embargo, no obstante ser obvias, escapan al registro crítico de quienes las compartimos.

Una constatación flagrante de que la ética de los principios enunciados, se diluye en las acciones reales de la convivencia, moral es esencialmente, costumbre, la forma de hacer y entender lo correcto, como una respuesta práctica a la realidad posible.

Comenzaremos con Silvia, una mujer de mediana edad, que un día decidió hacer lo que muchas de sus conocidas, incluida su propia hermana, habían hecho, independizarse montando su propio negocio, de manera que buscó un local acorde a sus necesidades locativas, se proveyó de mercadería viajando con sus colegas a Buenos Aires , siguiendo una ruta segura, con los pasajes de frontera asegurados a un precio razonable, y como alternativa de aprovisionamiento viajaba cada dos semanas a Uruguayana, frontera entre Brasil y Argentina o a Ciudad del Este en Paraguay.

De esta manera se constituyó en empresaria de hecho, los trámites formales de inscripción quedarían para más adelante, cuando las circunstancias se lo permitieran, cuando sus costos operativos le dejasen un margen suficiente como para poder absorberlos.

Cuando las cosas mejoraron, buscó a alguien para que la ayudase y así, de un plumazo, sintió que además de empresaria era una patrona, tenía a alguien bajo su autoridad, alguien a quién tratar como había sido tratada ella en el pasado, había llegado el momento de mandar a otra persona, a quién la dependencia del salario obligaba a obedecer, a limpiar el local si había que limpiar, a hacer los mandados, cualesquiera que fuesen, y obligarla a estar a su orden todo el tiempo que entendiera necesario, ¿Cuántas horas? Todas las posibles, y si a la empleada no le gustaba, que se fuese nomás, no iba a faltar otra candidata que necesitara trabajar, así había sido con ella y así actuaba, no encontraba en su proceder nada anormal o censurable, otra vez, moral es fruto de la costumbre.

De esta forma, Silvia se vinculó con Mabel, su empleada para todo servicio, ambas decían que eran amigas, no obstante , cuando una se refería a la otra, en los círculos sociales que frecuentaban, los epítetos utilizados, dejaban entrever el descontento a duras penas contenido, es que hablar mal de un empleado y quejarse de lo que hace, es considerado natural entre los patrones, como así mismo , decir que un patrón, es un desconsiderado y explotador, es una reacción lógica de quienes desarrollan tareas en relación de dependencia. 

Ahora, pensar en agremiarse Silvia, a la asociación que agrupa a los comerciantes, ni hablar, eso es también parte de la marginalidad, al igual de Mabel, ella reclama sus derechos, pero no es capaz de recurrir al sindicato que la defienda y represente.


Tanto los unos como los otros, esgrimen sus razones, se quejan y reclaman del sistema, se sienten parte de la sociedad, son parte de la economía informal, sus ingresos se integran al gran caudal que mueve los mercados, son como pequeños diques de contención que provocan la sangría constante de los recursos previstos por la política fiscal de los gobiernos de turno, los atajos que han tomado les provee en lo mediato, pero sin que lo hayan premeditado, sin que tengan la intención de provocarlo, son parte de la gran hipoteca que les condiciona el futuro.

Es que historias de vida como las descriptas en este artículo, son aspectos de un mismo entramado social, una demostración de que informalidad y subdesarrollo, son hermanas gemelas, hijas de la improvisación del gobernante, que, dicta las normas con una mano, y las borra con el codo de la indiferencia a la realidad social que les circunda.

Hablemos De Economía

Cuando se tratan temas relacionados con la economía, la mayoría de los mortales pensamos, debido a la tremenda importancia que los hechos económicos han adquirido, que el manejo de esta disciplina, conocida como la reina de las ciencias sociales, debe estar en manos de especialistas en la materia y que solamente éstos “iniciados” son los únicos que pueden emitir una opinión autorizada al respecto.

La relevancia adquirida por la economía en la vida de las naciones ha otorgado superpoderes a quienes tienen la responsabilidad de conducir la orientación de la misma, convirtiéndolos en verdaderos “popes”, referentes ineludibles a la hora de tomar decisiones en cualquier área de actividad de un país.

Lo que hace la diferencia en economía, es la intervención del poder político, por eso, cuando hablamos de economía, siempre nos referimos por extensión, a la expresión, 
 “ que tipo de política económica aplica tal o cual gobierno”.

Es el gobernante que interviene en la economía, - no precisamente para cambiar sus enunciados desde el punto de vista de su aplicación como ciencia - sino que todo gobierno, como responsable del bienestar de la sociedad en su conjunto, es quien tiene el deber de orientar su programa económico a la satisfacción de las necesidades de todos los sectores que la componen, evitando la captura del Estado por intereses corporativos cercanos al poder de turno. 

Es de absoluta responsabilidad del gobernante – el político- asegurarse de que en los ciclos de crecimiento económico se puedan generar los recursos que permitan enfrentar con éxito los inevitables ciclos de contracción de la misma – que ciertamente se han de producir – debe instrumentar salidas para impedir que éstos ciclos negativos se extiendan en demasía, y sobre todo, asegurar que los resultados positivos del crecimiento económico – cuando éstos se alcanzan - no se concentren en determinados sectores de privilegio, sino que a través de su política social y fiscal, debe lograr una distribución de la renta nacional, lo mas justa y equitativa posible entre toda la sociedad.

En países con crisis macro recurrentes , que por efecto de la globalización sufren las consecuencias directas e indirectas de los resultados de la economía mundial, muestran un crecimiento inferior al de países estables, es necesario la consolidación de acuerdos regionales que fortalezcan la apertura al comercio internacional.

Esto no sólo genera ganancias de bienestar para los consumidores, sino que permite aprovechar las economías de escala derivadas del acceso a mercados de mayor tamaño y favorece la búsqueda permanente de mayor eficiencia. 

Sin duda, el poder político es responsable ante la sociedad toda, de defender sus intereses, y debe orientar su política económica a la búsqueda del desarrollo social, poniendo énfasis en mejorar las tasas de desempleo, invertir en salud, educación, y actualización de su tecnología.

Toda política económica debe tener claras sus prioridades y todo ciudadano, cada elector, debe exigir de sus gobernantes una información seria y responsable, evitando el manejo de esta disciplina como algo privativo de ciertos especialistas en la materia, algo inaccesible al conocimiento del ciudadano común, al cual no se le brinda ninguna explicación en un lenguaje entendible, franco y sincero. 

La sociedad debe reclamar al gobernante, definiciones precisas sobre su política social, cuando éstas políticas se asumen y se incorporan al plan de gobierno, deberán condicionar la orientación económica y fiscal, subordinándolas al compromiso social contraído. 

Economía y política se unen en la búsqueda del bienestar social, el orden de los factores en este caso altera el producto, no es la sociedad la que está al servicio de la economía y la política fiscal, sino que éstas son las herramientas a utilizar para alcanzar los objetivos que la sociedad se ha propuesto, entender este principio es fundamental. 

¿Podrá haber en los próximos años una tarea más prioritaria para el sistema político?.

Orígenes:


Evo: Dícese de aquello que es sin principio ni fin.

Hubo una vez, en que las inteligencias, carentes aún de organización, pugnaban unas contra otras.

En medio de la disputa, algunas de ellas, comenzaron a emitir ondas sonoras de intensa vibración, con la finalidad de imponer su criterio sobre las otras, lo que fue respondido con una reacción similar por parte de las demás.

A medida en que aumentaba el descomunal ruido, se dice que las menos desarrolladas aunaron esfuerzos en virtud de sus posibilidades acústicas generando tal estrépito que nadie podía siquiera lograr la mínima concentración.

Tal estridencia generó el caos entre ellas, y de este caos surgió el desorden jamás conocido anteriormente.

En medio de tal desorden no pudo establecerse el control y su ausencia dio lugar a que se instalase entre ellas la no conocida hasta entonces imprudencia.

La imprudencia trajo consigo la ausencia de límites.


Fue entonces que: El caos, el desorden, la ausencia de control, la imprudencia y la absoluta carencia de límites, colapsaron de tal forma que ya nada podía impedir que se produjese,  lo que los científicos modernos han denominado, La gran explosión, que como todos sabemos, se piensa, que haya sido la causa originaria del universo.

miércoles, 12 de junio de 2019

Por Quién Doblan Las Campanas

Para quienes cultivamos desde siempre el concepto de humanismo “universal” es decir,  el hombre como modelo de evolución y desarrollo de sus facultades creativas, sentimos en lo profundo de nuestro ser el dolor indescriptible, las pérdidas humanas irreparables tan abruptamente truncadas por una guerra que arrasa con todas nuestras más nobles expectativas de alcanzar en un futuro mediato la convivencia pacífica de nuestra especie, compartiendo los principios fundamentales de Igualdad, Fraternidad y libertad.

Quizás, o tal vez, sin quizás, el hecho de sentir en carne propia la insania de esta guerra fratricida nos permita comprender mejor todo lo que ocurre a nuestro alrededor aunque estos hechos ocurran “a nuestras espaldas” amparados por la desinformación y la notoria “falta de interés” de los medios informativos de describir estos hechos con el rótulo de “noticia” cuánto menos sabemos más nos refugiamos en la ignorancia, y sabido es que aquello que no se divulga como noticia simplemente no existe.


Volvemos a lo del título de esta nota, a la pregunta: ¿por quién doblan las campanas? Nuestra respuesta no puede ser otra que esta: Las campanas doblan llamándonos la atención, doblan transmitiendo el dolor de lo irreparable,  por la vida humana tan valiosa, doblan por la vida de un niño extinguida a orillas de una playa en Turquía, en definitiva, doblan por ti, por mí y por toda nuestra especie.