viernes, 5 de agosto de 2016

Ponerle Un Cascabel Al Gato

Se decir “que del dicho al hecho hay un trecho” y por más que este viejo refrán sea por demás conocido no deja de mantener su vigencia cada vez que las circunstancias nos obligan a “bajar un cable a tierra” para evitar un “corto circuito” entre nuestras fogosas ilusiones y la fría e indiferente realidad.
En la vida es imprescindible “asumir la titularidad” de nuestros actos, no está previsto que pretendamos jugar nuestro partido “sentados en el “banco de los suplentes” cuanto antes entendamos esta realidad, que no es otra cosa que “nuestra realidad” mejor estaremos preparados para salir al campo de juego, asir fuertemente nuestros cascabeles, apretar bien el cuello del gato que nos destruye nuestros sueños ratones y colgarle para que suenen bien fuerte los cascabeles, para que cuando nuestras aspiraciones corran riesgo podamos, de esta manera, evitar los malos momentos que sin duda estarán allí, en cada rincón de nuestra vida, agazapados y listos para darnos su zarpazo.
“Hay veces que cuando nos encontramos ante una situación delicada todos los miembros de un grupo sabemos cómo actuar, cual es la solución… pero el problema viene cuando hay que buscar a una persona que realice esa acción.
En este momento es cuando usamos la expresión “¿Quién le pone el cascabel al gato?”.
Esta frase viene de una fábula escrita en el Siglo XIII y que aparece en “El libro de los gatos” de Odo de Sherington.
En esta se nos cuenta como los ratones se reúnen para buscar una solución ante el elevado número de muertes que se producen por el ataque de un gato.
Para acabar con esas matanzas llegan a la conclusión de que deben ponerle un cascabel o algo que haga ruido en el cuello, de manera que cuando el felino se mueva sepan por dónde anda y no les pueda atacar por sorpresa.
Todos los ratones están de acuerdo en que esa es la mejor solución… el problema llega cuando hay que elegir al ratón que lo lleve a cabo, empezando todos y cada uno de ellos a poner diferentes excusas para evitar realizar tan peligrosa acción.”
Recuerda, en este juego no hay excusas y no venden soluciones en la farmacia.
Hugo W Arostegui



¿Quién Pone Estas Piedras?


Esto de que somos los únicos seres capaces de tropezar dos veces contra la misma piedra, además de ser cierto, nos pone en evidencia de que por más que “anunciemos con bombos y platillos” de que somos los únicos capaces de hacer uso de la razón en todas nuestras actividades humanas, todavía nos siguen doliendo las puntas de nuestros pies de tanto golpearnos en las piedras.
“Somos la única especie que caemos varias veces en los mismos errores, nos tropezamos ante los mismos obstáculos, y caemos en la misma trampa varias veces. Es curioso que esto suceda, puesto que nuestra capacidad de aprendizaje debería limitar esas reincidencias. Entonces, ¿por qué las personas tropezamos varias veces con la misma piedra? El caso es que, aunque me he planteado esta pregunta en más de una ocasión, siempre me he quedado con una respuesta a medias.
Algunas personas, ya sea por nuestra ingenuidad, despiste o porque no queramos asumirlo, nos  tropezamos una y otra vez con una misma piedra (en un sentido metafórico, ya que la piedra simboliza cualquier obstáculo que podamos encontrar en la vida). Tendemos a reiterar los mismos errores de pensamiento y de comportamiento, y surgen sensaciones entorno a que nunca terminamos de aprender lo suficiente. Esa es la incoherencia del ser humano: se cae y se cae.
Sabemos que la vida no es perfecta, que hay ocasiones en las que las cosas no salen como nos gustaría (por mucho interés, esfuerzo y ganas que le pongamos), y que esos tropiezos nos hacen madurar. Pero, ¿creéis que siempre es así? Mi opinión es que, aunque la enseñanza que se pretende transmitir es que “hay que aprender la lección y no cometer el mismo error dos veces”,  en la práctica se asemeja más al idealismo que a la realidad; Esta moraleja me recuerda a aquella metáfora que dice que “no es oro todo aquello que reluce”, precisamente porque no siempre somos capaces de dejar de tropezar con esa piedra que se interpone en nuestro camino, del mismo modo que no siempre aprendemos de los errores que hemos cometido.
Quizás necesitamos piedras de vez en cuando, sobre todo cuando estamos aprendiendo. Es difícil darse cuenta de que eres capaz de hacer las cosas bien si antes no te has equivocado un par de veces. Lo fácil a la primera hace que dejemos de prestar atención a los detalles, por lo que la próxima vez que lo intentemos es posible que no nos salga tan bien como nos salió la primera vez. Por lo tanto, necesitamos equivocarnos.” https://emialbaalba.wordpress.com
Mientras tanto aconsejamos desinflamar la zona y tomar algún analgésico.
Hugo W Arostegui



jueves, 4 de agosto de 2016

Aguantate Piola


Si hay algo que merece un comentario al respecto es la actitud displicente de los ciudadanos que por ser “mayores de edad” o sea, adultos electores, que por su condición de tales podrían decidir a través de su voto los destinos de la conducción política que adopten los candidatos a gobernar a sus respectivas naciones, resulta que han optado por abstenerse de emitir su opinión al respecto.

Los resultados que arrojan las distintas encuestadoras que intentan obtener una imagen aunque sea un tanto parcial de las distintas tendencias de los electores encuestados muestran márgenes en ascenso en las opciones: no sabe, no contesta, vota en blanco o se abstiene.

Todo indica que la consiga o la modalidad imperante es “dejar correr los tiempos” un comportamientos que si bien puede ser admisible en los zagueros de los cuadros de fútbol que se sienten apabullados por los rivales no resulta ser recomendable en quienes tienen las facultades de emitir una opinión que pueda ejercer algún tipo de influencia en el resto de los ciudadanos, no resulta una opción recomendable acostumbrarse a “patear la pelota para cualquier lado"

Es por eso lo del título de este tema, esta estrategia del “aguantate piola” que en estos casos significa algo así como: “no seas bobo” “no te metas” “no te conviene” etc. etc. cosa que automarginaliza a quien piensa de esa manera permitiendo que sean otros los que, como siempre pasa en estos casos, tomen sobre sí, la difícil tarea de “sacar las castañas del fuego”

Como digo, esta es solo una opinión, pero sumada a la tuya y a la de otros como tú, pueden significar una montaña de opiniones un tanto difícil de escalar y mucho menos ignorar.


Hugo W Arostegui

miércoles, 3 de agosto de 2016

El Monstruo De Las Cuatro Patas

Aunque es un tipo de monstruo que no revista antecedentes como tampoco se dice nada de él en los registros de la mitología griega, lo que ya es mucho decir, lo cierto que creo que se ha ganado por mérito propio que los estudiosos de estos fenómenos entiendan de que ha llegado la hora de reconocer oficialmente las andanzas de uno de los peores flagelos de la época contemporánea.

Los profesionales que tienen a su cargo temas tan importantes como lo es sin duda “el ausentismo laboral” y la acumulación de certificados médicos que autorizan licencias por temas tales como: stress, lumbalgias, esguinces, han detectado que el consabido monstruo no actúa en soledad sino que se le ha detectado que suele presentarse acompañado de un entrañable compañero de andanzas, nos referimos al que responde por el curioso nombre de
“cinco minutos más”

En realidad no tiene mayor relevancia la época del año ni del estado de la temperatura ambiente, quien ha sido atrapado permanece “como adormilado” por alguna sustancia tóxica que le inhibe sus sentidos y llega a confundirle de tal manera de que la pobre víctima piensa de “que siempre tiene tiempo” o lo que suele ser mucho peor, que se convenza “de que todo puede esperar un ratito más”

Así las cosas se sabe que estos monstruos actúan en complicidad con las sábanos muy suaves, a veces delicadamente perfumadas, también conspiran la cantidad y peso de las mantas que el pobre sujeto tenga encima y también cuentan con la ayuda invalorable de relojes despertadores que suelen quedar bien callados con un simple manotazo o el golpe de alguna “chancleta” enarbolada al azar.

Se han detectado estos monstruos, nos referimos al instigador de todos estos males, los cuales son exhibidos con gran pompa y en la mayor impunidad en las principales empresas que se dedican a incentivar su venta en casas comerciales, grandes superficies, shoppings, etc. en la modalidad de una y dos plazas, generalmente acompañados de mullidos colchones sumamente cómodos y confortables.

Para evitar alguna demanda en mi contra y no ser acusado de provocar “alarma pública” no voy abundar en  más detalles aunque me consta que muchos ya han pasado por esta experiencia.


Hugo W Arostegui  

Impulso

                 

“Como la Alquimia y todas las disciplinas ocultas, La Cábala dice que el hombre contiene en su humana dimensión todo el universo.
Es por eso que se lo define como un microcosmo.

Notemos, de paso, que cuando el esoterismo dice que el hombre es como el universo, que lo que está encima es como lo que está debajo, no se está aludiendo a la igualdad sino que esa expresión es una analogía.
El hombre y el mundo no son semejantes y menos aún iguales:  
El hombre y el mundo son análogos.”
                                            La Kabbalah, Segunda Parte    Hugo W Arostegui

De acuerdo con nuestras convicciones y los dictados de las grandes religiones que nos han legado sus enseñanzas se nos dice, y la gran mayoría de nosotros crece con esta sensación aunque no sepa o no pueda explicarlo con cierta claridad, “el ser humano no pertenece a este mundo” lo que implica decir que venimos de otro lado y una de las respuestas mayormente aceptada es la de que “venimos directamente de la presencia de Dios, El  Padre” .

Pues bien, es muy probable que esta sea la causa fundamental por la cual la sociología nos indica que si bien, el ser humano nace biológicamente, para considerarse un “Ser” con el goce pleno de sus facultades, deberá superar las limitaciones inherentes a este nacimiento.

Para nosotros, los humanos. Existe una “barrera natural” que funge como si dependiera de una imperceptible “ley de gravedad” que nos mantiene al igual que al resto de los mortales “atrapados” contra la tierra sin mayores diferencias con lo que le ocurre a un “vulgar gusano” que convive con nosotros.

Esta barrera que nos mantiene atrapados sólo puede ser superada por “la energía” que acumulemos por medio de nuestro esfuerzo individual, es intransferible y por ende no existe, agregaría, “gracias a Dios” otro medio de comprarnos un pasaje que permita viajar en uno de esos cohetes interplanetarios que logran incursionar en la estratosfera, además nos serviría de muy poco, pues irremediablemente estaríamos obligados a retornar.

El impulso al que hacemos referencia al comienzo es imprescindible y sólo pueden obtenerlo quienes lo obtengan mediante su perseverancia y dedicación, lamentablemente hemos sido testigos de situaciones en las  cuales el impulso acumulado ha sido insuficiente y esas naves no han superado las limitaciones del medio cayendo estrepitosamente al vacío.

La capacidad creativa de cada ser humano es más que suficiente para superar todas las limitaciones, eso sí, requiere que no escatimemos el esfuerzo que tal desafío nos requiere.

Como bien dicen los veteranos que juegan partidas de truco: “lo que cuesta vale”

Hugo W Arostegui




Siempre Listos


He tenido la oportunidad cuando tenía unos seis años de edad de integrar un grupo de “niños exploradores” denominado Gral. Eugenio Garzón, nuestra consigna dada a “voz en  cuello” por todos los integrantes debidamente cuadrados al estilo militar era la siguiente: Dios, Patria, Hogar, Siempre Listos.

Desde entonces esta ha sido una consigna que ha estado presente en cada una de mis aptitudes aplicadas tanto en el estudio, como en el trabajo, una consecuencia natural y previsible desde entonces ha sido el haber desarrollado una muy marcada tendencia a asumir responsabilidades y ocupar los puestos de trabajo más exigentes en cuánto a dedicación como a sacrificio personal.

Hubieron muchas instancias en el transcurso de nuestras vidas durante las cuales nos hemos dado de bruces con nuestros propios límites y cuando todo presagiaba que nuestras fuerzas colapsaban ante tales exigencias, desde lo más recóndito de nuestro ser resonaban estas palabras recitadas al unísono en nuestros primeros años, “siempre listos”.

Todos los días debemos realizar algunas tareas, algunas nos gustarán más, otras mucho menos y habrán otras, o quizás muchas otras que francamente las quisiéramos evitar, la realidad se encarga de que demostrarnos de que no es posible “sacarle el cuerpo” a todo aquello que sabemos que dependen de nosotros su realización pues bien, amigo o amiga mía, hagámoslo con buen humor y entusiasmo.

El mundo, la sociedad que integramos nos necesita, pongámonos las pilas y comencemos a trabajar en todo lo que nos corresponde tomemos “el toro por sus astas” nada ni nadie podrá impedirlo, el por qué ya lo sabemos: “estamos siempre listos”

Hugo W Arostegui



martes, 2 de agosto de 2016

El Buen Humor



Les suelo hacer a quienes trabajan conmigo el siguiente comentario: “cada mañana cuando me levanto y me paro frente al espejo, al verme, siento una profunda gratitud hacia mis progenitores, ¿saben por qué? Por qué realmente se esmeraron cuando me hicieron me hace muy feliz y me llena de entusiasmo verme frente al espejo y empiezo mi día pleno de entusiasmo”

Y créanme que esto no es un chiste forma parte del buen humor con el cual comienzo mi jornada de trabajo y cuando veo algunas caras largas y desanimadas les hago el siguiente comentario: “que les pasa? Han estado “chupando limones” acaso? ¡por favor! vayan nuevamente a sus casas y rompan todos los espejos, tapen todos los que encuentren pues cualquiera que se viese tal como se les ve a ustedes con seguridad empieza el día con una gran depresión”

“Relacionamos continuamente el buen humor con la felicidad, y muchas veces nos paramos a pensar... ¿Qué fue primero? ¿Nuestra felicidad o nuestro humor? ¿Quién provoca a quién? Pues bien, podemos decir que ni uno ni otro, es nuestra actitud ante las cosas que provoca que todo vaya bien....o mal.

Tenemos dos opciones a la hora de afrontar las cosas cotidianas, hacerlo con buen humor o mal humor, ser positivos o negativos... Nuestra predisposición ante los problemas es fundamental a la hora de medir el resultado final del problema y sobre todo, de nuestro estado de ánimo.

Todos tenemos nuestros momentos de felicidad y tristeza, obviamente, y no es normal estar siempre feliz, en cada momento, pero lo que no es lógico es estar enfadados con la vida constantemente, si te identificas con una actitud similar a esta, quizás sea hora de empezar a hacer las cosas de un modo más desenfadado.”

Así es la cosa

Hugo W Arostegui


El Hombre Libre


Así como si bien el hombre biológico nace, el hombre en su condición de tal, vale decir, el ser socializado e integrado, se construye a sí mismo, a medida en que vaya incorporando en su necesaria preparación. un conjunto de valores que lo habiliten para el ejercicio pleno de sus derechos y las concomitantes obligaciones que esta situación implica.

Cuando nos referimos al hombre o a la mujer, socialmente hablando, el constituido en un ser social, estamos pensando en seres humanos aptos y por lo tanto, esencialmente libres.

Podemos mencionar la presencia de una clara dicotomía, por un lado, tenemos al “hombre natural” el nacido biológicamente pero carente de un imprescindible “proceso de socialización” no apto para su inserción social y por el otro, al hombre como integrante de una organización social donde puede ejercer plenamente su condición de tal.

Podemos afirmar que el concepto de ser humano socializado está íntimamente ligado a su derecho a decidir por su expresa voluntad de acción,  lo que equivale a decir que integra una sociedad constituida por seres que gozan de “la igualdad” que solo les puede proporcionar la libertad de elección tanto individual como socialmente hablando.

Concepto de libertad:
“La libertad da como resultado seres dignos y satisfechos ya que al poseer un individuo su plena libertad puede elegir cómo llevar adelante su vida, cómo transformarla o cómo mantenerla de acuerdo a lo que necesite o quiera. Por eso, la importancia de la libertad recae en el hecho de que es un elemento fundamental que contribuye directamente con la generación de una persona plena, satisfecha, llena de placer, alegría y mucho más fortalecida tanto a nivel social como individual. Recordemos que una persona a la que su libertad es quitada suele convertirse en una persona débil, insegura y miedosa simplemente por considerársela no apta para actuar de acuerdo a sus propios intereses.”
... de Importancia:
http://www.importancia.org/libertad.php

Hugo W Arostegui


lunes, 1 de agosto de 2016

Del Tiempo Del Ñaupa


Escuché en estos días pasados de labios de un anciano que ha vivido toda su vida, como se suele decir, “en el medio del campo” este hombre me contaba que conoció a don Lino, mi abuelo, a mi padre, Martín y a mis tíos, Tito y Lito, conocidos por sus apodos y rematando la cuestión, para darme una idea de su longevidad, me dice: “yo soy del tiempo del ñaupa”

En mis albores he escuchado bastante asiduamente esta expresión pero cuando estaba un poco más crecidito las expresiones que usábamos eran tales como: “esto es del tiempo de María Batata”, también, más modernos, decíamos “tiempos de Maricastaña” o cuando hablábamos de cosas tan antiguas como sabidas, decíamos, “más conocidos que el agujero del mate”.

Como digo, estos términos eran utilizados asiduamente en nuestras conversaciones y no nos llamaban la atención en una forma particular, eran expresiones que se decían  “entrecasa” totalmente incorporadas a nuestra forma de hablar “entre nosotros”

Al escuchar a este anciano, noventa y seis años, toda una institución en materia de conocer orígenes, decirnos que era de los tiempos del ñaupa, despertó mi curiosidad en cuanto a los orígenes de esta expresión y por más que he preguntado nadie pudo darme una respuesta que considerase satisfactoria.

Tal es así que recurrí al “mata burros” de internet y esto es lo que pude rescatar al respecto,

Dice así:

Expresión muy antigua, valga la redundancia, y muy particular para indicar que una cosa o un acontecimiento es de mucho tiempo atrás. La creencia popular considera que Ñaupa fue una persona de muy antigua data o que tuvo una existencia asombrosamente prolongada, sin embargo, esto está muy alejado de la realidad. También suele asociarse al lunfardo, en especial cuando se dice que una canción o un tango, más precisamente, es del tiempo del ñaupa. La frase se entiende perfectamente cuando se descubre que el vocablo ñaupa proviene del término quechua ñawpa, que significa, justamente, viejo o antiguo.”

Hugo W Arostegui


El Arte De Discurrir


Considerar detenidamente una cosa para llegar a comprenderla

No es verdad que las personas paren de perseguir sueños porque se hacen viejas, sino que se hacen viejas porque paran de perseguir sus sueños”
(Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura en 1982, 1927-2014).

Esta frase de Gabriel García Márquez ha quedado “prendida” en mi subconsciente y prácticamente no me ha abandonado desde hace un buen tiempo.

En cierta medida me ha aportado muy sólidos argumentos para contrarrestar algunas “presunciones” que suelen hacerse con motivo al cúmulo de años que el tiempo cronológico vigente viene registrando sobre mi persona.

Resulta cada vez más notoria una frase que suelen decir algunas personas que han pasado algún tiempo sin verme, la tal frase, dicha en un notorio acento cordial y afectivo, dice más o menos así “ hola, Arostegui, que bien se le ve, parece que el tiempo no ha pasado para usted” dicha tal expresión nos estrechamos en un fuerte abrazo y nuestros viejos amigos, parientes, colegas de trabajo y demás conocidos seguimos cada cual por sus propios caminos “y hasta la próxima” como solemos decirnos casi siempre.

Está claro que tales encuentros me resultan muy agradables y me hacen sentir muy alagado por sus “espero” muy sinceras expresiones, realmente este tema del paso del tiempo me tiene muy sin cuidado y de existir alguna relación con la persecución de mis sueños, cosa que no dudo en absoluto, en lo personal no tengo la menor duda de que cuando llegue, si es que llega, el final de mis días, me ha de encontrar como si fuese un sabueso empedernido “olfateando mis sueños” en procura de alcanzarlos.

Hablando de discurrir, recuerdo una respuesta que le he dado a alguno de estos viejos amigos míos con motivo de la frase que ya les he mencionado, en esa oportunidad en el tono jocoso que suele ser mi característica, la respuesta ha sido algo así: díganme una cosa, que es lo que tengo que entender con eso de “que bien que estoy” significa acaso que de acuerdo al tiempo transcurrido debería estar embalsamado y conservado en formol, demás está decir que estos dichos míos les pone un tanto sonrojados y todo termina en una sonora carcajada.

He aprendido a soñar sentado a la vera de una fuente y esa fuente tiene un nombre:
La suelen llamar “la de la eterna juventud”

Hugo W Arostegui



domingo, 31 de julio de 2016

Manteniendo El Fulgor


“Como un fugaz pensamiento
aquel resplandor
un inmenso estallido de luz,
llamémoslo así, el fulgor.”
Nacho Vegas 

Cada día, en la constancia de nuestro deambular, como aquellos que salen a trotar por las mañanas por el simple gusto de hacerlo, así es lo que hago yo frente al teclado de mi ordenador.

El detonador de este súbito entusiasmo, que puja muy dentro mío por manifestarse, ha sido la percepción de un extraño fulgor que desde los confines inescrutables del pensamiento me indica que debo intentar, una vez más, como todos los días, mantener la llama vivaz de este ingenio mío que me exige ejercitar todas mis habilidades en la vigilia constante de todas las expresiones creativas que suelen surcar, cual si fuesen estrellas fugaces, dejando a su paso la casi imperceptible huella de su fulgor.

Nuestra capacidad de extraer la información que se acumula en la memoria se ejercita en la práctica constante de este trotar por los senderos del recuerdo inhalando el fluido vital ,que nutre y fortifica a la vez, la veta inspiradora que nos insta a continuar y continuar, extasiados  por la siempre distante aureola de su fulgor.

Quien lo intenta describir en su escritura suele percibirlo tal como se percibe al astro rey, en el fulgor tempranero de cada mañana donde nos exhibe la aurora de un nuevo amanecer.


Hugo W Arostegui

sábado, 30 de julio de 2016

Un Muy Sentido Recuerdo


Adiles Elena Arostegui     
26/05/1953- 29/07/2016

En este día de julio ha partido de este mundo una hermana mía nacida en el medio rural en una época si se quiere muy lejana cuando en mis primeros diez años de vida supe, por medio de mi tía Elena que había nacido una niña, su sobrina, que tuvo como nombre un reconocimiento, hecho por su hermano, Martín a quién la distancia, sumado a las circunstancias adversas que supo poner la distancia y las tan particulares formas de encarar la vida que ambos hermanos enfrentaban.

De esta forma es que supe que había nacido una hermana mía, como digo, en una época muy lejana en el tiempo, cuando con mis muy escasos diez años, fui tomando conciencia de la familia que integraba cuando intentaba comprender en mi aún inocentes primeros años el nuevo nacimiento ocurrido, allá lejos, en La Sierra, departamento de Maldonado, “a un mundo de distancia” de la ciudad de Montevideo donde yo en aquel entonces, un tanto, solitaria y tozudamente, intentaba comprender lo que sucedía a mi alrededor.

Mi hermana Adiles nació y creció como una flor cuyo capullo nunca se abrió, desde su más tierna infancia, con sus escasos dos años, fue víctima de una enfermedad que la condenó a vivir el resto de sus días en su condición de sordomuda, esto que describimos muy someramente ha sido una constante desde siempre, tengo la absoluta certeza de que no obstante sus severas limitaciones, conoció y reconoció a sus padres y hermanos incluyendo a mí mismo, como también a mis hijos y a sus sobrinos.

Hoy ha partido, sinceramente, de lo profundo de mi sentido corazón, siento que ha abierto sus ojos a una nueva vida, la vida que siempre mereció, su imagen permanece en mi memoria con su tierna mirada y esos ojos que seguramente sabían mucho más que su particular circunstancia le permitían expresar,

Seguro que resultará muy difícil comprender lo que me pasa por dentro pero así es la vida con sus matices que nos mezclan los recuerdos y humedecen nuestros ojos en lágrimas de un hermano mayor que no olvida.

Hugo W Arostegui


viernes, 29 de julio de 2016

Realización


Es bueno que de vez en cuando nos detengamos a analizar cuánto realmente nos conocemos a nosotros mismos, que tiempo nos hayamos tomado para dialogar con “el otro yo”, para escucharnos, y tratar de entender cuáles son aquellas cosas a las que íntimamente aspiramos.

Resulta que muchas veces nos vamos introduciendo en lo que suele llamarse “la vida real” y frente a la crudeza de sus exigencias nos vamos despojando de nuestros sueños e ilusiones..

Es entonces en que paulatinamente, digamos que al ritmo de las muchas concesiones y recortes que a nuestras primeras aspiraciones le vamos truncando preferimos sumergirnos en las exigencias de un mal entendido “tiempo presente” embriagamos la conciencia con nuevas y variadas emociones y literalmente “pateamos para cualquier lado” nuestro “querer ser” y nos conformamos con un: “si yo pudiera ser, si las ocasiones fueran más propicias, seguramente, entonces sí, sería.

Nos enmudecemos y esquivamos la soledad y con ella las oportunidades de diálogo con nuestro “compañero del alma” el que guarda como si fuese el primer día todos nuestros sueños y anhelos de realización personal.

Mi compañero de viaje y yo aprovechamos “las madrugadas del mate” para compartir juntos los momentos de reflexión, cada uno sabrá mejor que nadie la ocasión del momento oportuno, quizás se prefiera caminar, sentarse al lado de leños encendidos, en fin, todo puede significar una oportunidad cuando queremos tenerla, nos debemos ese diálogo para limar frustraciones y asperezas y sobre todo poder sincerarnos, cobrar fuerzas y continuar avanzando.

Reflexionemos:

“Cuando alguien no logra realizarse se aliena, o sea que se
hace lo que no es, lo que no debe ser.

Hemos dicho que el hombre es un ser en proyecto, un ser
que se va haciendo. Ser persona es una posibilidad en que
permanentemente se encuentra el hombre.

Llegar a ser persona debe constituir la meta de nuestra
existencia individual y social.

Realizarme como persona significa llegar a ser lo que estoy
llamado a ser, desarrollando mis dimensiones y alcanzando
y ejerciendo los valores humanos.

Ser persona es la vocación o llamada de todo hombre. No
quedan más alternativas que la de responder positivamente
o la de conformarse con no ser.

Realizarse es "ser más", es "humanizarse", es "personalizarse",
es llegar a ser lo que debe ser.

Alienarse es "ser menos", es" deshumanizarse", es" despersonalizarse",
es "esclavizarse", es frenar en sí y en los demás la obtención y el
ejercicio de los valores humanos.

La despersonalización, la deshumanización, la alienación, hace que
desaparezca el hombre-persona y que aparezca el hombre-cosa,
el hombre-máquina, el hombre-animal, el hombre-objeto.

La realización humana es nuestro gran compromiso.”
 

Hugo W Arostegui

jueves, 28 de julio de 2016

El Hábito De La Lectura


Me maravilla poder observar las inúmeras opciones que la vida moderna nos ofrece para que podamos incursionar desde nuestra propia casa a la lectura de textos de los más diversos autores prácticamente sin costo alguno y bajar los contenidos de sus obras al instante.

Sin pretender amargarle la vida a los estudiantes actuales de cualquier disciplina permítanme que me tome el atrevimiento que los años de tránsito por esta vida me han otorgado para narrarles algunos breves episodios que se remontan a la época en la cual integraba un grupo de estudiantes universitarios que enfrentábamos con cierto estoicismo la ardua preparación de nuestras tesis de pasaje de grado.

Como puede apreciarse no pretendo incursionar en la prehistoria y ni siquiera en la historia convencional para comentar ciertas cosas de mi juventud pues no me considero tan viejo.

Lo cierto es que en mil novecientos sesenta apenas teníamos en nuestro país el acceso a la televisión y con mis jóvenes diecisiete años desconocía totalmente que con el paso del tiempo seríamos testigos presenciales de esta magistral revolución de la era informática.

Para ser breve, simplemente diré, que en nuestra juventud no teníamos acceso a determinados autores por la sencilla razón de que no existían estos textos de estudio ni siquiera en la propia Biblioteca Nacional de manera que nuestros profesores nos informaban de los temas expuestos por algunos autores con la salvedad de que si quisiéramos incursionar en la lectura deberíamos, irremediablemente, estudiar a estos autores en  la Biblioteca Nacional en Buenos Aires, Argentina.

Ante esta situación, lejos de amilanarnos, nos organizamos hicimos colectas entre todos y elegíamos a uno de nosotros, a mí me ha tocado hacerlo varias veces, comprábamos pan y  mortadela para poder comer al día siguiente y como a las nueve de la noche nos embarcábamos en el “vapor de la carrera” que demoraba toda la noche en cruzar el río de la plata y desembarcábamos en el puerto de Buenos Aires, de allí a la biblioteca y pasarnos todo el día sacando apuntes de los libros, todavía tengo una marca en mis dedos de la mano derecha, de tanto escribir, que seguramente me acompañará por el resto de mis días. después de hacer todo esto regresábamos de la misma manera a Montevideo.

Al regresar nos repartíamos los apuntes y pasábamos largas horas “picando matrices” para luego pasarlas, una por una, por el mimeógrafo y de esta manera confeccionar los temas de estudio, vendíamos estos trabajos a un costo mínimo para intentar resarcirnos de los gastos y de esta manera estar en condiciones de poder nuevamente viajar cuando fuese requerido.

Todos tenemos “como premio consuelo” el  mérito de ser mencionados por las autoridades que nos visitaban y conocían el esfuerzo que realizábamos, quienes manifestaron en algunas ocasiones “estos maravillosos jóvenes de la generación de los sesenta”

Al terminar se me ocurrió dejarles esta valiosa opinión:

 “Según Vaughan Bell, polifacético psicólogo e investigador del King’s College de Londres, “la capacidad de concentrarse en una sola tarea sin interrupciones representa una anomalía en la historia de nuestro desarrollo psicológico”. Y aunque antes de la lectura cazadores y artesanos habían cultivado su capacidad de atención, lo cierto es que sólo la actividad lectora exige “la concentración profunda al combinar el desciframiento del texto y la interpretación de su significado”, dice el pensador Nicholas Carr en su libro Superficiales (Taurus). Aunque la lectura sea un proceso forzado, la mente recrea cada palabra activando numerosas vibraciones intelectuales.

Hugo W Arostegui


Quien Escribe


Como bien puede apreciarse suelo participar activamente en la difusión de artículos, ahora bien, de ninguna manera, como lo he reiterado innúmeras veces, esta actividad que mencionamos no significa que nos consideremos escritores en todo el sentido de la palabra,    lo que sucede es que el medio que utilizamos para difundir nuestro pensamiento es precisamente la escritura, (bueno esta agregar que es el único modo que conocemos)

Si alguien me pregunta: ¿Por qué usted está diciendo esto? La verdad es que mi respuesta puede resultar un tanto confusa, entonces, claro, no ha de faltar la siguiente interrogante:        dígame, ¿por qué dice usted que su respuesta sería un tanto confusa? Entonces, obligado, intentaré responder, no resulta nada sencillo esbozar algún tipo de comunicación cuando desconocemos a quién o quienes nos dirigimos, en artículos anteriores nos hemos referido a que nos consta de que han ingresado a nuestros “links” personas provenientes de distintos lugares del planeta de las cuales no tenemos muy claro cuál sea su perfil, sabemos que muchos son estudiantes otros profesionales de la educación y muchos otros, sobre todo muchas otras, que ingresan a la lectura por el simple gusto de enterarse de lo que decimos.

Lo que dejamos claro es que la voluntad de escribir responde a que la escritura es el medio que conocemos para expresar lo que sentimos, todo lo que surge de nuestro tecleado es el fruto de nuestra creación intelectual la cual no siempre alcanza a satisfacer los requerimientos de quienes participan de la lectura de los mismos, entendemos que es posible que nuestro dominio del lenguaje, por más que nos esforcemos en enriquecerlo, pueda carecer de la capacidad expresiva que por respeto a nuestros lectores deberíamos tener.

Eso sí, nobleza obliga, a esta altura no nos podemos escudar en supuestas limitaciones, todo lo que lleva nuestra firma está avalado por una vasta trayectoria en el terreno de la comunicación y nos consideramos, sin falsa modestia, lo suficientemente formados como     para emitir una opinión autorizada en todo lo que expresamos.

Una cosa es querer y otra muy diferente es el poder.

Hugo W. Arostegui


miércoles, 27 de julio de 2016

Lectores: La Opción Informática


En estos últimos tiempos, digamos de algunos meses hacia atrás, en la lectura de un informe que puede consultarse en los registros internos que Google mantiene en la cuenta de mi blogger “hugoaros. blogspot.com” encuentro que se ha incrementado sustancialmente la cantidad de lectores que descargan directamente a sus celulares los enlaces que publico a través de Facebook.

Además me ha llamado la atención de la ubicación de los lectores, su procedencia y los sistemas que utilizan para la recepción de los artículos en cuestión, según este informe de la página interior del mencionado blogger se pueden encontrar lectores en diversas partes del mundo, por citar estas procedencias digamos, por ejemplo: Uruguay, Brasil, EEUU, Canadá, Venezuela, España, Chile, Argentina, Rusia, Polonia, Portugal, Monrovia, etc.

Quienes nos consideramos escritores virtuales, vale decir que utilizamos los medios informáticos para la divulgación de nuestros artículos, en mi caso confieso de que no tengo mayores conocimientos en la materia, digamos que esto que menciono es lo que puedo entender de los reporter de las publicaciones de Google en mis páginas internas, lo mismo me sucede con los anuncios que aparecen publicados en estos temas.

Con el tiempo los artículos que reúnen estas condiciones ya sobrepasan los trescientos y reitero de que no participo ni en la selección ni en los anuncios que se adjuntan a mis temas, hasta el momento de vez en cuando observo lo que se expone para monitorear la seriedad de los mismos y dejo en manos de Google esta selección no encontrando nada anormal o fuera de tono en el acceso.

He estado ajustando los temas que publico actualmente sobre todo en su extensión para facilitar de alguna manera los enlaces que realizo a través de face book, cualquier situación que puedan encontrar en cualquiera de estas publicaciones solicito por favor que me lo hagan saber vía correo electrónico mi dirección es la siguiente: arostegui.hugow7@gmail.com

Sinceramente

Hugo W Arostegui


El Hilo Conductor


Cada vez nos resulta más claro el importante papel que asume en nuestras decisiones el grado de información que tengamos sobre cada asunto en cuestión, cuando mencionamos a la información es muy conveniente precisar que la misma es generalmente invasiva, que busca penetrar y condicionar nuestros sentidos con la finalidad de predisponernos a aceptar o rechazar cualquier propuesta que recibamos.

El sólido criterio, ese hilo conductor de nuestras decisiones debe ser el resultado de nuestra investigación sobre las diferentes posiciones que se expongan al respecto, y , posteriormente, evaluar las coincidencias que encontremos entre las variables a optar y por la que entendamos es la correcta.

Está claro de que no somos infalibles y siempre estará latente la posibilidad de equivocarnos pero para entonces habremos sopesado las variables, nos informamos lo mejor que pudimos y en la toma de decisiones nos sentiremos identificados con nuestra postura, lo importante es que suceda lo que suceda con el asunto analizado en cuestión siempre ganaremos en experiencia y consideración esto redundará sin duda en el mantenimiento de nuestra autoestima.

Lo mismo sucede en la elección de nuestros temas que publicamos, los temas escogidos para publicar, como este que exponemos, no son tomados al azar ni son el fruto de nuestra dialéctica improvisadora, estos temas responden a ese invisible “hilo conductor” que mencionamos que nos identifica y permite evaluar no sólo nuestra coherencia sino que además actúa de “identikits” de nuestros temas al punto de que la simple lectura de lo que decimos identifica al autor y al “hilo conductor” que le conduce-

Hugo W Arostegui


martes, 26 de julio de 2016

Códigos


“la palabra moral viene del latín mos-moris, que significa costumbre, modo de vivir, el carácter o la forma de ser tanto de un individuo como de una sociedad, aunque también alude a norma, precepto. Siguiendo así, a los antiguos romanos, vamos a definir la moral humana como el conjunto de:

las normas que rigen la conducta de un individuo en una sociedad y
las valoraciones que hacemos sobre actos humanos que consideramos desde la perspectiva de lo bueno o lo malo, lo justo o lo injusto, etc.

Decíamos en artículos anteriores que la vida en sociedad implica la aceptación de las normas de conducta que regulan los niveles de convivencia dentro del grupo y que estas condiciones rigen para todos sus integrantes sin excepción.

En una palabra, cuando alguien manifiesta que “es libre e independiente” y “que no debe ser sometido a ninguna norma” lo que en realidad está demostrando, quizás un tanto ingenuamente, de que desconoce toda imposición de disciplina y que carece de la madurez necesaria para comportarse en armonía con los códigos de convivencia previamente aceptados.

En realidad en todas las convivencias grupales se dan como algo preestablecido el acatamiento a las normas que regulan a ese grupo y podemos afirmar que el desconocimiento de determinados códigos autoimpuestos por todos sus integrantes suelen ser reprimidos con gran severidad por el resto de quienes lo componen.

Observamos la vigencia de estos códigos en grupos tales como: privados de libertad, es decir presos condenados, delincuentes en actividad, meretrices, marginales que pernotan en las calles, etc. etc.

La obediencia a ciertas normas de convivencia trae consigo las consecuentes garantías de protección y solidaridad, la vigencia absoluta de “derechos y obligaciones” para todos los integrantes del grupo al cual se le manifiesta su fidelidad e incondicional adherencia.

Tal la importancia de la observancia de las normas y los códigos que las regulan

Hugo W Arostegui


lunes, 25 de julio de 2016

Relaciones Humanas: Simbiosis


Existen tres tipos de relaciones simbióticas: mutualismo, en donde las dos partes reciben un beneficio, comensalismo, en donde uno de los individuos se beneficia y el otro no recibe ningún beneficio pero no es perjudicado, y finalmente el parasitismo, en este tipo de relación uno de los individuos se beneficia, y el otro individuo resulta perjudicado”

Encontramos un término muy controvertido en las relaciones humanas que bien merece ser analizado en detalle, nos referimos a la simbiosis que suele manifestarse tanto en lo individual en la relación de dos o más personas como también en lo colectivo, como pueden ser grupos humanos tales como: cooperativas, asociaciones laborales, gremiales, políticas, etc.

Notamos de que existe una clara tendencia a que la simbiosis incida en nuestras reacciones en una forma tal que crezcamos y  nos consolidemos actuando en función de una forma de pensar o reconocerse, como si se fuese solo una parte de un todo, donde pareciera de que falta algo que nos complemente para entonces sí, sentirnos parte de todo lo que hacemos.

Esta simbiosis tiende a despersonalizarnos, a desplazar el pensamiento individual subyugándolo al accionar del grupo, a las decisiones grupales o a los intereses de terceras personas que se han apropiado por simbiosis de nuestra personalidad.

Las características de la simbiosis no se agotan en este abordaje del tema, cuando hablamos de personas debemos tener muy en cuenta el derecho natural que posee para decidir por sí misma el grado e intensidad de las relaciones que cultive.

La simbiosis tiende a manifestarse en nuestras relaciones humanas, es por esta circunstancia que mencionamos este tema el cual es innegable que mantiene su vigencia en este intrincado mundo en el cual nos movemos y expresamos.

Hugo W. Arostegui



domingo, 24 de julio de 2016

Sembrando Al Voleo


Mateo 13Reina-Valera 1960 (RVR1960)
Parábola del sembrador (Mr. 4.1-9; Lc. 8.4-8)
“Aquel día salió Jesús de la casa y se sentó junto al mar.
Y se le juntó mucha gente; y entrando él en la barca, se sentó, y toda la gente estaba en la playa.
Y les habló muchas cosas por parábolas, diciendo: He aquí, el sembrador salió a sembrar.
Y mientras sembraba, parte de la semilla cayó junto al camino; y vinieron las aves y la comieron. 
Parte cayó en pedregales, donde no había mucha tierra; y brotó pronto, porque no tenía profundidad de tierra;
pero salido el sol, se quemó; y porque no tenía raíz, se secó.
Y parte cayó entre espinos; y los espinos crecieron, y la ahogaron.
Pero parte cayó en buena tierra, y dio fruto, cuál a ciento, cuál a sesenta, y cuál a treinta por uno.
El que tiene oídos para oír, oiga.”
Esta enseñanza que Jesús habló utilizando la modalidad de parábola se refería a la conocida siembra del voleo con la salvedad de que esta siembra la realizó el sembrador esparciendo las semillas en un terreno sin una preparación previa, como suele suceder con aquellas personas a las cuales poco o nada les interesa las condiciones en las cuales se encuentran.
En lo personal he tenido la experiencia de sembrar al voleo y lo que hacíamos era colgarnos un morral lleno de semillas y en una tierra a la cual habíamos preparado previamente, utilizando nuestras manos las hundíamos en el contenido del morral y las esparcíamos al voleo entre los surcos a las semillas, confiando que a su debido tiempo, la generosidad de sus entrañas las harían germinar abundantemente.
Está claro que el sentido de la parábola de Jesús estaba dirigido a quienes descuidan su preparación previa permitiendo que en su interior crezcan sin control los pedregales y las malezas tornando estériles todo intento de las semillas sembradas por germinar dentro de ellas.
Salvando las distancias, (y ésta es un poco la intención de este artículo) los que regularmente exponemos por escrito nuestras impresiones utilizamos la modalidad del sembrador, nuestros morrales están rebosantes de palabras ordenadas en diversos temas los cuales “esparcimos al voleo” confiando que han de caer, como seguramente sucede, en aquellas mentes que han de ser receptoras y árbitros a la vez de su contenido.
Hugo W Arostegui


Simplemente Retribuir


Los seres humanos somos los herederos de un reino del cual nos ocupamos por el simple hecho de haber nacido dentro de una sociedad que ha asumido el dominio y la conducción de todo lo que le rodea.

Lo que recogemos desde la prehistoria es el saber de que “este mundo” ha sido construido partiendo de la desorganización de los elementos circundantes a los cuales se les organizo y ordenó para ser el albergue ideal para la instalación de los reinos vegetal, animal, etc. para posteriormente instalar la presencia de la raza humana y su descendencia, cabe agregar que a todas las especies creadas se les ordenó que “se multiplicaran según su especie”.

No vamos a detenernos a analizar en detalle todos los pormenores de esta narrativa, lo esencial, que rescatamos muy someramente, es que nuestra especie es en los hechos “extraterrestre” pues se nos dice que “venimos directamente de la presencia de Dios” y que nuestra razón de ser es la de “tomar posesión” de todo el planeta en condición de administradores del mismo, llegando esta atribución a la autoridad de hecho de clasificar y dar el nombre definitivo a cada uno de los seres vivos que conforman  su entorno.

Nuestra condición de meros administradores de este “nuevo mundo” queda en evidencia cuando el propio creador del universo nos expulsa del jardín donde habitábamos y nos condena a vivir en el mundo “solitario y triste” en el cual tendríamos que padecer las consecuencias de nuestra desobediencia.

Este acontecimiento ha sido registrado por “la historia humana” como un castigo tan importante y severo que hasta nuestros días nacemos los humanos con una “marca indeleble” que nos condena a ser “portadores de un pecado original”

No obstante lo expuesto, la realidad incontrastable es que lejos de sentirnos condenados por la desobediencia nos hemos revestido del orgullo y la soberbia propio de quienes pueden hacer lo que quieran “sin tener que rendirle cuentas a nadie” de nuestros actos.

Volvamos a nuestro título de portada, “retribuir” de ser conscientes de nuestros orígenes y de los “derechos adquiridos” de disfrutar de las bondades de este mundo, del cual justo es decirlo “estamos de paso” y de que cuando nos llegue el momento de partir “no nos llevaremos nada de él”  el simple hecho de “ser y estar” debería ser un disparador de gratitud por todas las oportunidades que se nos ofrecen en un nuevo día de vida del que disponemos, quizás sin darnos cuenta, de que constituye “un verdadero presente” de los dioses.

Hugo W Arostegui


Dar De Sí Mismo


Nuestra capacidad para dar de nosotros mismos es la mejor forma de involucrarnos en todas las ocasiones en las cuales tenemos la oportunidad de compartir nuestros afectos y depositar en las manos de las personas la calidez que inspira nuestro reconocimiento.

Las múltiples opciones que tenemos al alcance de la mano para dar cumplimiento a estos llamados “compromisos sociales” hacen que ya no sea necesario que ocupemos nuestro cada vez más escaso tiempo en realizar atenciones de nuestra propia hechura, ahora, encontramos mucho más practico, y probablemente, más económico, realizar alguna compra de artículos pre elaborados que nos permitan “quedar bien” y salvar satisfactoriamente nuestra responsabilidad en el asunto.

Por supuesto que no estamos en desacuerdo con recurrir a estos recursos que la propia vida en sociedad nos proporciona, es como en el caso de la utilización de los avances de la informática en nuestras comunicaciones, el uso de telefonía celular, internet, redes sociales, etc. prescindir de estos medios equivaldría a una auto marginación totalmente ineficaz como inútil.

Solo que nos permitimos decir que “ni tan tan ni muy muy” precisamos más que nunca de un apretón de manos y de un fuerte abrazo es a ese “calor humano” al que nos referimos cuando mencionamos que todos necesitamos “dar más de nosotros” en el cultivo de los valores filiales que retroalimentan nuestra confianza y autoestima.

Eso, como decirnos cosas como: gracias, querido hermano, te amamos, te necesitamos a nuestro lado, etc. etc., eso es dar de nosotros mismos.

Hugo W Arostegui




sábado, 23 de julio de 2016

Paren El Mundo Que Me Quiero Bajar


 “¿No será acaso que esta vida moderna está teniendo más de moderna que de vida?”
 Joaquín Salvador Lavado, Quino,

Una forma diferente de aportar y sumarse a la innovación que día a día emerge desde y hacia nosotros revestida de los sueños, sueños  que se niegan a despojarse de la ilusión de que todo es posible cuando damos el primer paso con la esperanza reflejada en el rostro,

Los carriles por los cuales transita nuestra vida no se encuentran prefijados ni mucho menos adheridos a ninguna predestinación ajena a nuestra propia voluntad de conducirnos, de manera que debemos estar atentos al volante y evitar colisionar con quienes, como lo hacemos nosotros mismos, buscamos un espacio en la ruta que nos conduce a donde pretendemos llegar.

La cultura que nos amamanta desde que iniciamos nuestros primeros pasos es aquella que nos pregona “el fin justifica los medios” y su influjo nos hace pensar que para llegar a lo que nos propongamos alcanzar, la propia competitividad nos obliga a desplazar a quienes nos “amenacen con su propia sombra”

Esta forma de encarar los acontecimientos va francamente “a contra pelo” de nuestra razón de ser, esencialmente los humanos constituimos una realidad social donde la coparticipación solidaria entre todos nos permite alcanzar los altos niveles de civilidad que nos caracteriza.

En realidad nuestra propia realización depende de cuales sean las prioridades que nos orienten en la vida, no somos tanto lo que recibimos, sino que nuestro “ser” se consolida en el desarrollo de nuestra “capacidad de brindar servicio” a los demás, podemos afirmar sin ninguna duda que el “ser y el estar” se conjugan en el acto del ejercicio de la solidaridad.

Extendamos nuestras manos para ayudar y dejemos de lado “los puños apretados” nuestro peor enemigo, el que conspira contra el bienestar social, que indudablemente es el de todos, reside en no reprimir la inhumana inclinación al egoísmo.

Hugo W Arostegui  


viernes, 22 de julio de 2016

La Gratuidad Del Aire


Crecimos acostumbrados a que lo más democrático que poseíamos todos los mortales era el aire a tal punto de que cuando una persona era una de esas que vulgarmente la calificábamos “como que no servía para nada”  al referirnos a ella agregábamos” este tipo está vivo porque el aire es gratis."

Pues bien, esa tal gratuidad del aire pasa a ser una quimera, una ilusión, en las “necesidades básicas” del hombre moderno.

Sin importar mucho, la latitud ni la época del año, lo evidente es que para asegurar nuestro confort y estar acorde con “nuestro status” el aire debe estar “acondicionado” tanto en nuestros hogares, lugares de trabajo, centro de estudios, donde nos atiende nuestro “personal trainer” etc. etc. incluyendo al transporte colectivo y por supuesto, nuestro propio automóvil.

Como puede apreciarse la gratuidad del aire se ha incorporado al vastísimo campo de nuestras “ilusiones” haciendo sentir su “cruda realidad” en las cuentas que por concepto de energía debemos pagar todos los meses.

Alicia continúa viviendo en “el país de las maravillas” y según tengo entendido no es nuestra vecina.

Así es.


Hugo W Arostegui