La
humanidad asiste a cambios profundos con ritmos acelerados. Se está produciendo
un cambio de época, caracterizado por los cuestionamientos de las sociedades al
modelo de desarrollo vigente; los elementos de esta época están perdiendo su
validez y estabilidad, se están generando modificaciones en las relaciones de
producción, de poder, la experiencia humana, la cultura y en general la vida
cotidiana.
Caracterizan al cambio de época las siguientes consideraciones:
Visión del mundo y
paradigma internacional de desarrollo en crisis. Hoy en día la mayoría de las
organizaciones y naciones del mundo están de acuerdo en que esa visión
mecánica, de la cual se deriva el paradigma del desarrollo, está perdiendo su
validez.
Cuestionamiento de
la naturaleza, rumbo y prioridades del desarrollo. El crecimiento material y el
desarrollo tecnológico logrados por la humanidad han cobrado una alta erosión
de los factores eco-ambientales, profunda desigualdad social y crecientes
brechas económicas y tecnológicas entre sociedades desarrolladas y en
desarrollo.
Premisa externa
para el cambio. Es el entorno de las organizaciones el que está cambiando y
este hecho debe ser el referente para establecer nuevos modelos de gestión.
Naturaleza
transformacional de los cambios. Los cambios que van a producirse en las
organizaciones deben orientarse más hacia los fines que hacia los medios.
Revolución
tecnológica. En especial, la relacionada con la tecnología de la información es
la que está cambiando la visión del mundo y el paradigma del desarrollo.
En
relación con la construcción del conocimiento, estos cambios se expresan, entre
otras, por las siguientes características:
Producción
del conocimiento en el contexto de su aplicación.
Establecimiento de relaciones, vínculos entre
diferentes disciplinas científicas para
aproximarse a la comprensión de la realidad desde la conformación de equipos
ínter y transdisciplinarios.
Reconocimiento
de la complejidad de los procesos sociales, culturales y biofísicos en su
temporalidad y espacios que legitiman la participación como posibilidad de
comprensión, y sobre todo de transformación de la realidad.
Las
redes tecno-científicas como cadenas de localidades caracterizadas por un
conjunto de parámetros, prácticas y actores heterogéneos.
El reconocimiento de la validez del
conocimiento tácito, autóctono o denominado como saberes populares en la
academia y en general en la sociedad.
La
producción del conocimiento como compromiso y la superación de la supuesta
neutralidad, pues la ciencia es un emprendimiento humano y como tal está
marcada por intereses, valores, deseos, motivos, propósitos e ideales humanos.
En síntesis, una visión dialéctica orienta a definir las jerarquías del qué investigar, sus relacionamientos para explicar las causas y efectos, las pautas para transformar, y permite expresar las contradicciones que motivan y mueven los procesos más allá de los discursos.
En síntesis, una visión dialéctica orienta a definir las jerarquías del qué investigar, sus relacionamientos para explicar las causas y efectos, las pautas para transformar, y permite expresar las contradicciones que motivan y mueven los procesos más allá de los discursos.