miércoles, 9 de mayo de 2018

Optimismo Vital


“Si tuviésemos suficiente voluntad, casi siempre tendríamos medios suficientes”.                     (La Rochefoucauld).

No desfallezco en la búsqueda de nuevas opciones, oportunidades y alternativas.

El optimista vital, inteligente y tenaz, cuando ya no hay motivos para la esperanza, no pierde ni un átomo de su energía ni de su tiempo en lamentos que le debilitan. Por eso lo sigue intentando con nuevas acciones y renovado esfuerzo, porque sabe muy bien que es en la persistencia, en la fe y en la esperanza inquebrantable en el terreno propicio en el que se producen los “milagros”.

El optimista vital es la voluntad personificada y si cae siete veces se levanta ocho con mayor y más renovado entusiasmo y piensa como William Thomson que la casualidad favorece a las mentes y a las voluntades entrenadas. Al final, lo imposible se hace posible, con pasión, persistencia inteligente y amor.

La Irreverente Innovación


No creo que seamos irreverentes, menos porque digamos que lo somos – tampoco porque digan que lo somos -creo que es por naturaleza. La gente piensa que ser irreverente tiene algo que ver con valores negativos. 

Creo todo lo contrario, la irreverencia se basa en desafiar – intelectualmente – al status quo. Significa hacer que algo suceda cuando todos te dicen que no lo conseguirás, significa defender tus principios y valores delante de cualquier situación y significa buscar nuevos caminos -donde parece no haberlos – para poder ayudar a la gente de tu alrededor, caminos lejos de los que normalmente recorremos, precisamente porque hay mucha gente que no le interesa que esos caminos se exploren y sean descubiertos por gente ordinaria.

Los irreverentes quizá no están bien mirados, porque crean cambio y el cambio hace que los demás reaccionen, eso no gusta a la gente que se encuentra en un posición privilegiada y a salvo, malas noticias para ellos, ahora están en peligro.

Pido disculpas por adelantado – no en realidad no las pido, olvídalo – pero la revolución ha empezado y estoy seguro que vamos a molestar a mucha gente ¡Genial! Eso significará que estamos cambiando algo.

Me parece que los nuevos héroes son esa gente ordinaria que pasan a ser irreverentes. Ir a contracorriente no es malo, sólo que no es lo lógico, pero…

¿Qué es lo lógico? ¿Es lógico seguir las instrucciones de otros? ¿Es lógico que nos digan lo que tenemos que hacer? ¿Caminar por donde todo el mundo ya lo ha hecho?


Superar Límites


La superación personal no tiene límite, es decir, un ser humano puede seguir progresando a nivel de conocimiento y de toma de conciencia a lo largo de su vida. Voluntad y conocimiento que son la base de la superación personal, son dos cualidades que diferencian al ser humano del resto de seres del universo. 

La superación personal muestra la capacidad que tiene un ser humano para reflexionar sobre sí mismo, pero lo que es más importante, para actuar de acuerdo a sus valores y creencias. La superación personal tiene una base teórica a nivel de reflexión pero es fundamentalmente práctica.

La superación personal es ese motor intrínseco que a nivel de motivación mueve el corazón humano cuando una persona aspira a ser más sabia, más competente y más capaz. 

La superación personal remite a ese proceso temporal de cambio en el que una persona sale de su zona de confort para establecer nuevos hábitos y cualidades para mejorar su calidad de vida.


Humanidad: Los Molinos De Viento

Si aceptamos un punto de vista más estético y menos dogmático de la naturaleza humana, podremos aceptar que los seres humanos tendríamos la capacidad de describir y narrar nuestros actos y creencias y dejar el peso de herederas concepciones pasadas que se enfrentan por obtener el título de “la única” manera de ser, ver y sentir el mundo.

Parecería entonces que eso que llamamos “naturaleza humana” no es algo que debamos encontrar con la ayuda de la metafísica, la ciencia o la religión, sino que es algo que tenemos la capacidad de construir.

Retomando a Engels, si el hombre es creador del hombre, si existe algo esencial a eso que llamamos “humanidad”, es nuestra capacidad de cambio, transformación y redescripción constante. 

Es en ese sentido que la era postmetafísica entiende la humanidad, no como algo esencial sino en construcción constante. Fuimos humanos cuando empezamos a manipular el fuego, lo seguimos siendo cuando dejamos de ser nómadas, lo fuimos cuando inventamos reinos, cuando levantamos democracias, y en nombre de la humanidad defendimos la ciencia, porque ella, creímos, nos permitiría vivir una vida más satisfactoria. En nombre de la humanidad inventamos las prótesis, los analgésicos y la inseminación artificial, la televisión, el arte.

Si aceptamos esto, la dicotomía natural - artificial se rompe y vendrían siendo un continuum del mismo sentido de lo humano. Lo artificial sería solo una manera de extender una parte de aquello que llamamos naturaleza en un momento de la historia. Lo artificial no sería “artificial“ en el sentido opuesto a lo natural, si no que sería solo una manera de potencializar lo natural.

Llamar, como Edgar Morin, al hombre un ser “biocultural” es continuar con la dicotomía natural /artificial  o naturaleza / cultura. En lo que sí habría concordancia con el pensamiento de Morin es en afirmar un humanismo antihumanismo, es decir, rechazando que existe alguna esencia que nos haga más humanos. Pues dicha demarcación será siempre contingente.

Pero quienes exaltan una posición esencialista del hombre no lo comprenden así.

Creen poder hallar una postura que se aplica a todos los seres humanos en todos los tiempos y que bordea los peligrosos contornos de la crueldad al hacerse con los discursos y la tecnología necesaria para enfrentar, callar o exterminar a esos otros humanos o “pseudo humanos”.

Nuestro modo de vida, eso que llamamos cultura, la construcción del mundo simbólico del hombre, el lenguaje que usamos para representarlo, es también todo un mundo de metáforas cambiantes que resignifican y modifican nuestro modo de enfrentarnos al mundo y de relacionarnos con él. 

De ahí que nuestras sociedades occidentales post metafísicas estén en constante cambio y resignificación de aquellas estructuras consideradas monolíticas y perennes, o al menos es el ideal de quienes creen haber dejado atrás la fundamentación del mundo en la religión.

Estructuras que considerábamos inmodificables por tener una especie de carga esencial que  fundamentan las instituciones y relaciones sociales como la familia, el estado, la religión, la cultura, etc., están sufriendo una “crisis”, no por verse abocadas a su extinción sino por la necesidad de su resignificación.


En ese sentido, ser conscientes de la contingencia de la noción de humanidad puede ayudar a que seamos conscientes de la crueldad que nuestros límites morales pueden cometer.

La Estupidez No Tiene Límites


Psicólogos de la Universidad Eotvos Loránd en Hungría han realizado un estudio encaminado a determinar los tipos de comportamiento que podrían definir el concepto de lo que conocemos como 'estupidez'. La ignorancia consciente, la falta de control y la ausencia mental son los pilares de esta conducta, publica 'The Independent'.

En la primera parte del estudio los expertos recogieron historias publicadas en medios de comunicación como la BBC y 'The New York Times' relacionadas con comportamientos estúpidos y pidieron a 26 estudiantes que basados en ellas, consignaran en un diario situaciones similares durante cinco días. 

Luego de obtener las conclusiones, los expertos en algunos de los casos modificaron las consecuencias y el nivel de responsabilidad del involucrado y entregaron los casos a 154 estudiantes de pregrado que definieron la intensidad de estupidez en cada uno de ellos y los factores psicológicos que podrían haber estado involucrados.

Los resultados permitieron definir tres grupos principales: en el primero (estupidez grave), se encuentran los individuos que entienden los riegos de sus actos y pese a no poseer las habilidades suficientes se involucran. El segundo (estupidez moderada), encierra a aquellos que por su comportamiento obsesivo-compulsivo carecen de autocontrol, mientras que el tercero (estupidez leve), hace alusión a la ausencia de sentido práctico por distracción o simplemente por falta de destreza que terminan desencadenando situaciones incoherentes.


"Estos resultados nos acercan a la comprensión de lo que la gente considera como una conducta poco inteligente, haciendo énfasis en las perspectivas psicológicas de este comportamiento en el diario vivir", concluye Balazs Aczel, psicólogo experimental y líder de la investigación.

El Valioso Recurso De La Educación

Nuestra diversidad cultural, que abarca desde la concepción hasta la producción de productos audiovisuales, desde el espectáculo vivo hasta los nuevos medios de comunicación, desde la edición hasta las artes visuales, es una diversidad creadora. Genera empleos e ingresos, lleva consigo identidades y referencias colectivas, y contribuye, de esa forma, en nuestro mundo globalizado, a la cohesión social y a la autoestima.

En esta doble índole, económica y cultural, radica el gran mérito de los bienes y servicios culturales. Es una especificidad que responde a la creciente demanda de políticas más integradas, capaces de incluir al mismo tiempo las dimensiones económicas, sociales y ambientales del desarrollo. 

La cultura no es una mercancía más, y este principio reconocido en el plano internacional por la Convención sobre la Protección y Promoción de la Diversidad de las Expresiones Culturales, aprobada en 2005, es el hilo conductor para elaborar estrategias de desarrollo más innovadoras y más sostenibles.


Vivimos en la era de los límites -límites de nuestros recursos, límites de nuestro planeta- y nuestra respuesta debe consistir en liberar el recurso renovable más poderoso con que contamos, la inteligencia y la creatividad humanas. 

Nuestra diversidad cultural es un estímulo para la creatividad. Invertir en esta creatividad puede transformar a las sociedades. Nos incumbe desarrollar en los jóvenes la educación y las competencias interculturales para mantener viva la diversidad de nuestro mundo y aprender a obrar juntos, en la diversidad de nuestras lenguas, culturas y religiones y generar así el cambio.

Recrear El Pensamiento


Cuando nuestros estudiantes se enfrentan a una tarea, sobre todo en las más globales y comunicativas, necesita pasar por diferentes estadios: pensar y elegir la más interesante, desarrollarla y adaptarla al objetivo, detectar errores y dificultades para realizarla.

Es lógico pensar que, para cada una de esas etapas,  necesitan aplicar procesos con una lógica diferente y que,  aunque muchas veces sean complementarios, en ocasiones  pueden y deben ser excluyentes.

Edward de Bono con sus claves sobre el pensamiento lateral y sobre todo con sus seis sombreros para pensar (1985) sistematizó  la forma que tenemos de enfrentarnos a los trabajos colectivos de forma creativa.

La idea es asignar a cada tipo de pensamiento un sombrero con un color. A su vez cada sombrero tiene unas normas de uso que favorecen la aparición de un determinado tipo de pensamiento.

Analicemos este esquema de pensamiento y sus correspondencias en la realización de una tarea colaborativa:

1. El sombrero blanco es el encargado de aportar mera información, el que crea de la nada. Está conectado con los procesos con los que llenamos donde no hay.  Suele ser el primer paso y su clave está en que se trata de mecanismos de acumulación donde  las aportaciones no se valoran o se discuten,  simplemente se exploran. Debería estar presente en las lluvias de ideas o en los sondeos iniciales y su norma es acumular para poder elegir, prescindiendo siempre de las consideraciones valorativas
.
2. El sombrero verde acoge al pensamiento creativo y está regido por la libertad y el riesgo. Tras haber generado esa gran cantidad de información,  permite explorar posibilidades por muy arriesgadas que parezcan. Su punto de partida suelen ser preguntas del tipo “¿qué pasaría si….?”. No nos debe importar  que algunas ideas nos resulten ilógicas o deliberadamente provocativas pues se trata de imaginar para crear, algunos de esos planteamientos ilógicos pueden ser el germen de ideas exitosas.

3. Es el turno del sombrero negro, asignado al  pensamiento crítico, que detecta carencias y dificultades.  Su lógica permite buscar la crítica sin preocuparse por las soluciones. No construye sino que incide en los inconvenientes  de las propuestas para poder mejorarlas más tarde. Es necesario que se eviten las consideraciones de tipo personal y nos centremos en cuestiones objetivas y observables por todos. Este tipo de pensamiento se activa cuando planteamos cualquier actividad de ventajas/inconvenientes y sobre todo en las evaluaciones de las propuestas. Criticar para mejorar es su base.

4. Llega el momento de la intuición: el sombrero rojo. Se trata de valorar intuitivamente las decisiones tomadas. Ahora sí debe aparecer la subjetividad y los condicionamientos de tipo personal, pues lo usamos para  valorar las ideas y  posicionarnos  ante ellas. De esta manera tenemos a nuestra disposición todo tipo de argumentos para legitimar o desechar propuestas. Debería ser el preponderante en los debates para tomar decisiones una vez que hemos visto las ideas desde las otras perspectivas. Con él disparamos toda la artillería disponible para conseguir nuestros objetivos: sentir para valorar es lo que se nos propone.

5. El sombrero amarillo representa el pensamiento operativo, así que su función es moldear y hacer viables las propuestas y permite hacer posibles las diferentes opciones. Con él  visualizamos y somos capaces de planificar en abstracto, así como recrear el disfrute o el fracaso. Entra en acción cada vez que planteamos planes u objetivos y adquiere su verdadera dimensión cuando nuestros estudiantes planifican y ejecutan la tarea. Es el momento de realizar para avanzar.

6. El sombrero azul es el del control y la coordinación. Es verdad que estas funciones normalmente recaen en el profesor, pero hay momentos en nuestra clase en los que ponemos este sombrero a los estudiantes (rol de secretario, moderador, etc.). Aquí hay que organizar para conseguir objetivos, gestionar los tiempos y rentabilizar cada momento.


¿Qué les parece la secuencia? ¿Cambiarías el orden de algún sombrero? ¿Se les ocurre algún sombrero más?

Habilidades Mentales



Con respecto a sus habilidades mentales el ser humano responde desde cuatro ámbitos: psicológico, neurológico, inmunológico y endocrinológico.

La medicalización y la psicologización pueden ser más bien parte del problema que de la solución. Mirando a los costados se ve siempre más de lo mismo. Lo que puede aportar la educación de la mente, integrada con la medicina y la psicología, es cambiar los hábitos negativos recurrentes que no se pueden combatir con consejos útiles por habilidades mentales, porque lo que falta es una metodología para la resolución de los problemas.

Ante las angustias, y ansiedades que genera una sociedad estresante no todos tienen los recursos para superar sus conflictos. Y el que no tiene medios ni métodos para resolverlos debe apelar a la fuerza bruta.

Una solución al alcance de todos. Vivimos en una sociedad que hace un culto de la información pero que no valoriza la formación. Los hábitos mentales los creamos nosotros, y no precisamente con métodos científicos; pero luego ellos nos crean. Proponemos que en nuestros hogares, en nuestras escuelas, se instale un concepto diferente sobre las habilidades mentales basado en el desarrollo del potencial: aprender a ser, aprender a aprender, aprender a hacer, aprender a convivir.

¿El cerebro se cansa? ¿Por qué? ¿Cuáles son los síntomas más frecuentes?
Ante los problemas de estrés, burnout o cerebro quemado, bajo rendimiento, desgano, falta de concentración, problemas con la memoria, cada vez más gente se acerca a la gimnasia mental. A la educación le falta una materia: " Desarrollo de las habilidades mentales". Sin ella no se sabe usar el hardware cerebral, y entonces el software es el esfuerzo extremo.

La falta de un pensamiento estratégico -una visión clara del futuro deseado, también influye. Para enfrentar la ausencia de un modo de ser, de aprender, de hacer y de convivir; se usan recursos inapropiados (muchos recurren a una pastillita cada tanto). Pese a que la resiliencia es la capacidad de superar la adversidad, y se basa en el supuesto de que "lo que no te mata te fortalece", no es conveniente tener que usar la fuerza bruta para superar la falta de métodos para ejercitar las habilidades mentales.

Sucede en todas las personas por igual o hay cerebros que tienen mejor estado que otras? ¿Por qué?

La metáfora de la libertad del pájaro porque puede volar es falsa. Él nace condicionado y no puede elegir. A diferencia del animal que nace completo el cerebro del niño es una página en blanco a completar con las experiencias de la vida.

El famoso 10%. El ser humano logra el 10% de lo que podría obtener en rendimiento. ¿A qué se debe que no lo advierta? En primer lugar a la educación con su enfoque enciclopedista que detiene el crecimiento impresionante del niño en los primeros años de su vida por el afán de socializarlo. Si un niño es muy creativo lo primero que hace la maestra es la llamar a los padres.

Intuitivamente hay gente que usa mejor su cerebro que otra, pero no se enseña a perfeccionar los mecanismos que contribuyen al éxito. El segundo problema es nivel general de mediocridad con el cual nos comparamos y que luego aceptamos como normal. Pero si todo el mundo anda mal estar como todo el mundo no es nada bueno.

Por eso la persona que mejora – tomada como modelo- incide en el rendimiento de los demás, si se investiga y se trata de imitar cómo lo hace. Así los demás podrían modificar su propio método o conducta. Esto se llama benchmarking metodológico que consiste en compararse con los mejores en materia de habilidades mentales.

¿Es posible recuperarlo?
El cerebro humano tiene una plasticidad extraordinaria y refleja inmediatamente lo nuevo que se hace. Aprender algo tiene su reflejo en la cadena neuronal que soporta el aprendizaje. La Huella mnémica – el registro corporal del aprendizaje- existe y modifica el cerebro.

Por eso planteamos una nueva alternativa. Que las huellas se conviertan en capitales del progreso y no en simples anotaciones sin relevancia.
Los griegos decían "mente sana en cuerpo sano". 

Lo más destructivo de la enfermedad mental a que nos expone la vida moderna, es no saber enfrentarla. El cuerpo es el actor de una mente que piensa: el intelectual actúa con palabras y conceptos, el hombre de acción con personas y cosas. Entre ambos conforman al Creactor, el sujeto capaz de integrar la mente y el cuerpo al entorno que lo rodea.

Una tercera alternativa. Ante el enfoque tradicional (médico o psicológico), el que se ha caído tine una oportunidad de cambio a través de la educación de la mente y de la gimnasia mental bien encarada. Einstein decía que "el arte es la manera de llegar a las verdades más profundas por el camino más sencillo" y este es el formato ideal para potenciar las habilidades mentales.

El problema central es cómo motivar, porque el sistema educativo mira para otro lado y la educación sistemática se aleja cada vez de la definición original de educación que es "sacar de adentro el potencial que todos traemos al nacer".
El cuerpo calloso es un conjunto de fibras nerviosas que unen los dos hemisferios cerebrales. El hemisferio lógico, racional y analítico es el hemisferio de la ciencia. Su materia prima es la palabra y su producción es el concepto. 

El derecho es emocional, holístico, intuitivo, sensible, es el hemisferio del arte. Su materia prima es la imagen y su producción es la idea. En nuestros cursos enseñamos a manejar el pensamiento científico, pero sin descuidar el creativo, el sistémico y el estratégico. Después de todo la ciencia no es más que el perfeccionamiento del sentido común.

La estrategia educativa. Los cursos de desarrollo de las habilidades mentales se fundamentan en enseñar a pensar. Por otro lado ayudamos a generar proyectos concretos mediante " think tanks" (Fábricas de ideas), que buscan complementar la cadena productiva con el valor agregado del empowerment (el desarrollo del poder interior) y con la inteligencia social mediante una red de alianzas estratégicas múltiples.

El papel del periodista es clave en los procesos de transformación, la gente que no sabe o no se informa, no se da cuenta de lo que le pasa. Aristóteles que se anticipó en casi todo decía: "soy amigo de Platón pero soy más amigo de la verdad" y "la realidad es la única verdad". Aún para los que queremos ser creativos y no resignarnos a un mundo sin futuro, debemos aceptar lo que pasa,: "si no se sabe qué hacer lo mejor es hacer nada”. Aceptar y comprender por qué nos pasa lo que nos pasa es el primer paso para innovar, para transformar el defecto en virtud; y en cierta medida es hacer algo para iniciar el incremento de las habilidades mentales.

* Dr Horacio Krell. Director de Ilvem. Secretario de rel. Internacionales de UAF Unión Argentina de Franquicias y Propulsor de UP Unión de Permutas. horaciokrell@ilvem.com.

 

La Persona Humana


La persona humana es, de acuerdo a la teología cristiana y a las filosofías de tal inspiración, un individuo de naturaleza racional, portador de potencialidades que se desarrollan a través de la vida, en el seno de la familia y de la comunidad, o, tal como lo señalan otros autores, es "un ser corpóreo y espiritual al mismo tiempo. 

Es una unidad sustancial de alma (o espíritu) y cuerpo. Decimos unidad sustancial, no accidental, porque la unión entre el alma y el cuerpo resulta en un solo ser: el ser humano, la persona humana".

Uno de los primeros que desarrolló esta noción fue San Agustín, quien logró que el término pudiese usarse tanto para referirse a la Trinidad como al ser humano. 

Uno de los más influyentes, posteriormente, fue Boecio quien la definió como " la persona es una sustancia individual de naturaleza racional". San Anselmo acepta esta definición, pero señala que hay un contraste entre persona y substancia. Dice San Anselmo: "Se habla sólo de persona con respecto a un naturaleza racional individual, y de la substancia con respecto a los individuos, la mayor parte de los cuales subsisten en la pluralidad". Para Santo Tomás ....


En la actualidad, se entiende por persona no solamente el ser humano, el individuo perteneciente a la especie humana, sino el hombre en su modo específico, "el ser que tiene un yo consciente, unitario" ​.

martes, 8 de mayo de 2018

Ética Y Tecnología


De modo muy parecido a lo que ocurrió con el teléfono y el telégrafo hace un siglo, la tecnología de la información está transformando actualmente la velocidad y las maneras en que la gente se comunica entre sí. En principio, con una pequeña cantidad de equipo cualquiera puede comunicarse con otra persona del planeta en cualquier momento. En el sector alimentario y agrícola, la información moderna y las tecnologías de la comunicación encierran un enorme potencial para compartir amplia y rápidamente los conocimientos en todas las fases de la cadena alimentaria. 

Por ejemplo, permiten la agricultura de precisión: un cultivo guiado por una información ecológica detallada que reduzca al mínimo el empleo de agua, de productos agroquímicos y de mano de obra. 

Cuando todo ello se combina con las nanotecnologías que están apareciendo (y que permiten la manipulación y la fabricación a nivel molecular), la informática puede hacer posibles también enormes incrementos de la producción.

Sin embargo, el acceso a las nuevas tecnologías de la información es muy desigual. Incluso en los países industrializados, los pobres carecen de acceso a los nuevos medios. En gran parte del mundo en desarrollo sólo unos pocos pueden permitirse el teléfono, y únicamente un reducido grupo selecto puede acceder a las nuevas tecnologías. 

Además, al igual que la informática puede acelerar una comunicación constructiva de orden político, comercial y familiar, puede también hacerlo con fines destructivos. Por lo general, estas nuevas tecnologías permiten inmiscuirse en las vidas privadas de los ciudadanos en formas que nunca habían sido posibles hasta ahora.

Cada uno de los puntos que se han comentado brevemente hasta aquí plantea profundas cuestiones éticas que la FAO habrá de afrontar en las actividades que le están encomendadas por su mandato. 

Los aspectos topados están inseparablemente relacionados entre sí. La urbanización y la agricultura industrializada han intensificado masivamente el comercio mundial, han multiplicado la riqueza material total del mundo y su prosperidad, han ampliado considerablemente el ámbito de la alimentación humana, han reducido su costo y aumentado la abundancia de los cereales básicos, variando el valor dentro del sistema alimentario y agrícola, que se ha desplazado del campo a los sectores de los insumos y de las actividades posteriores a la recolección. 

Ahora bien, al mismo tiempo estas transformaciones han planteado nuevos problemas, que son a la vez materiales y éticos.



El Crecimiento Personal


El crecimiento personal hace referencia a una serie de actividades que ayudan a mejorar la conciencia de uno mismo y descubrir la propia identidad, con el fin de impulsar el desarrollo de los propios potenciales y las habilidades personales y relacionales

El objetivo es mejorar la calidad de vida y contribuir a la realización de sueños y aspiraciones individuales.

Crecer como persona es un proceso que dura toda la vida. Por desgracia, no siempre tomamos el camino apropiado y podemos encontrarnos en una situación en la que nos sentimos lejos de nuestra propia esencia y vivimos en piloto automático, distanciados de nuestros sueños, nuestras aspiraciones y nuestras necesidades. 

En esta sociedad que va tan rápida, es fácil dejar de ser protagonistas de nuestra vida y perder de vista nuestros deseos más personales.

Cuando llegamos a este punto, toca cambiar y conectar de nuevo con nuestra propia identidad, examinar cómo está nuestro mundo interior y exterior y cómo nos relacionamos con las personas que nos rodean. Toca pasar a la acción y transformarse. De esta manera, podemos recuperar nuestro bienestar y nuestro nivel de autosatisfacción.

Esta transformación comienza en nosotros mismos, porque el cambio es un proceso individual y personal, y nadie puede cambiarnos si nosotros no queremos cambiar. Transformar nuestra vida requiere autorreflexión, ser conscientes de nuestra propia capacidad para lograr nuestras metas y conseguir cambios positivos y duraderos; y exige compromiso, tiempo, energía y estrategias claras y realistas.

El camino hacia el bienestar y el crecimiento personal implica lograr el equilibrio y la armonía en nuestro día a día, en la relación con nosotros mismos y con los demás. Por eso, es necesario observar e identificar si estamos en el lugar donde queremos estar y si estamos satisfechos con nuestra vida, y definir qué podemos hacer para mejorar lo que no nos hace satisface, así es posible trabajar para que ese cambio sea posible.


El bienestar puede entenderse como “estar en el lugar en el que uno quiere estar”, y aunque esto no sea una constante sino algo dinámico, que se construye a lo largo de la vida y que puede modificarse en cualquier momento, sí que puede convertirse en una característica relativamente estable si conseguimos una buena relación con nuestro interior y con nosotros mismos, y si nos empoderamos frente a la vida y seguimos el camino que nosotros nos hemos marcado.

Crear Tu Vida


Sabes que puedes hacerlo, ha llegado el momento de aceptar esa responsabilidad
Crear tu vida supone entender y ser consciente de la influencia que tienes en la dirección que quieres que tome tu existencia. la clave eres tú, y no  las circunstancias incontrolables. Muchas personas consideran que el factor económico es un obstáculo insalvable, no es cierto.

Crear tu vida supone darte cuenta de que no tienes que ser víctima de tu pasado.
Crear tu vida supone ser consciente de que tu vida es única. Nadie la ha vivido antes, ni va a hacerlo después.

Crear tu vida también es tomar conciencia de que la mayoría de las oportunidades que aparecen en tu vida, son generadas por la energía que creas a tu alrededor.

Todas las personas tenemos sueños, pero no todas se deciden a construirlo, la mayoría los aparcan y lo peor es que se dedican a hacer realidad el sueño de los demás olvidándose de los suyos.

Cuando hablamos de sueño pensamos en él como algo lejano, perteneciente al mundo de la fantasía, inalcanzable, vemos una enorme distancia entre nosotros y él. Pero podemos darle forma, tocarlo, olerlo, jugar con él, deleitarte con él...Podemos darle apariencia, dotarlo de estructura y modelarlo. 

Pero hemos puesto muchas barreras, obstáculos y quizás también trampas entre nuestro sueño y nosotros


Sociedad De La Información – Cultura Del Chips



Kevin Kelly es el editor de la revista Wired, uno de los medios indispensables para comprender la sociedad de la información. Ha venido a Madrid para participar en las jornadas sobre Sociedad, Tecnología y Desarrollo, organizadas por el semanario británico The Economist. Y lo ve muy claro: “La nueva economía no está en los ordenadores, ni en las puntocom, ni en los stocks bursátiles. Esta es la gran distracción, y quienes se han fijado en esto están terriblemente desencaminados”.

Entonces, si la nueva economía no está en los ordenadores, ni en las puntocom, ni en la Bolsa, ¿dónde se encuentra? “En los chips implantados en todas partes, menores que un sello de correos y que cuestan menos de un centavo de dólar. 

Está sobre todo en la cultura, en la capacidad de generar innovaciones, porque la nueva economía se mueve por la tecnología pero el factor más importante con mucho es la cultura. Y además, la nueva economía está en las redes, en las mallas que permiten multiplicar los efectos de la cultura y la tecnología”.

De la misma opinión es Luis Angel Fernández Hermana, moderador de las mismas jornadas y editor de En.red.ando: “Es lo que yo siempre me pregunto cuando hablo con un empresario. Pero '¿qué estás haciendo para construir tu red?'”. Y es que la potencia de una red crece exponencialmente, en función de los nodos que conecta. De forma que una red con mil nodos es inmensamente más valiosa que dos con 500.

Estas son algunas de las conclusiones más interesantes de las jornadas organizadas por The Economist. En ellas, además de Kelly y Fernández Hermana, participaron otros periodistas como Peter David, editor de The Economist. También han pasado por la tribuna empresarios y directivos como el presidente de Terra, Joaquim Agut, o Carlos Barrabés, promotor de Barrabés.com. Sin faltar los patrocinadores del evento, como Luis Alberto Salazar-Simpson, presidente de Auna; Jorge Edelmann, presidente de Oracle Ibérica; Javier Monzón, presidente de Indra; Joaquín Moya-Angeler, presidente de Meta4 o Sandy Walkington, de British Telecom. Y todo aderezado por los discursos de políticos como Peter Mandelson, ex ministro laborista con Tony Blair, los ministros españoles Anna Birulés y Josep Piqué, y hasta el mismo presidente del Gobierno, que clausuró las jornadas.

En general, como reclamaron los asistentes en los turnos de preguntas, sobre sociedad y desarrollo se habló poco. Y sobre tecnología hubo pocas ideas frescas, poco discurso nuevo. 

Lo más rompedor, la presentación de Kelly, es la misma que pronunció hace dos años en Bogotá, en unas jornadas patrocinadas por el diario colombiano El Espectador. Claro que, como aseguraba éste, “Internet será un éxito el día que resulte aburrido hablar de ello”. 

Pues está llegando.

La Singularidad


Kurzweil es un inventor, autor, futurista. Además es particularmente relevante en cualquier discusión sobre la singularidad.

"Yo veo el futuro como una explosión de conocimiento humano", le dice a la BBC. "Habrá una explosión de música, arte, cultura, ciencia, ingeniería...".

Escribió el libro "La singularidad está cerca", y lo que lo hace aún más interesante es que no sólo es un teórico, sino que como director de ingeniería en Google, lidera equipos que están ayudando a hacer que la singularidad sea una realidad.

"Estoy trabajando en que las computadoras entiendan el lenguaje natural.
El lenguaje encarna toda la inteligencia humana y no hay manera de falsificar el nivel humano de comprensión del lenguaje: se necesita un nivel de inteligencia humana para hacerlo.

Si podemos dominar el lenguaje humano, podemos dominar la inteligencia.
He dicho consistentemente que para 2029 las computadoras van a estar a la par con la inteligencia humana, lo suficiente para pasar el llamado 'Turing test', lo que significa que serán indistinguibles en su dominio del lenguaje natural y otros tipos de inteligencia.

Ya de por sí pueden hacer muchas de las cosas que hacen los humanos, en algunos casos mucho mejor.

Lo que ocurrirá luego es que nos fusionaremos con esas computadoras y al final entrarán en nuestros cuerpos y nuestros cerebros, nos harán más sanos, más inteligentes.

Cuando lleguemos a 2045, multiplicaremos nuestra capacidad intelectual por mil millones, según mis cálculos, lo que es un cambio profundo y singular por lo que nos referimos a él como 'singularidad'".

2029... 2045... ¿Cómo se llega a esas fechas?
"Es una función exponencial asombrosamente pareja, cuando uno traza el progreso.

La primera tecnología que inventamos, la palabra hablada tomó cientos de miles de años; la palabra escrita sólo tardó decenas de miles de años; la palabra impresa, cientos de años. Ahora tendremos cambios en pocos años.

Hay una aceleración debida a este progreso exponencial".

Lo que Kurzweil sugiere es que pensemos en cómo ha evolucionado la tecnología en los últimos 100 años y lo proyectemos al futuro: la evolución continúa y se acelera, así que hay que estar listo para lo que se viene.

"Piense en nuestra inteligencia emocional, que es realmente la más avanzada -el humor, el afecto, el amor-: esas son las cosas más complicadas de todo lo que hacemos.

Estamos estudiándola y aún no hemos llegado a eso pero cuando yo digo que una computadora llegará a ser indistinguible en términos de inteligencia y que luego se fusionará con nosotros, para hacernos más capaces, estoy hablando de ese tipo de cualidades.

Vamos a añadirle inteligencia no biológica a nuestro cerebro, así que seremos un híbrido de pensamiento biológico y no biológico. Eventualmente, dentro de varias décadas, la parte no biológica será lo suficientemente lista como para modelar la parte biológica.


Ese es el escenario que yo imagino".

Lo Que Vale Una Persona


Cuando una persona pasa en una continua charla negativa, esto afecta su valía personal, puede ocurrir de forma externa o interna, con expresiones como las siguientes: “mi situación es pésima, estoy sin trabajo”, “tengo mala suerte”, “siento que no valgo nada”, etc. Si se continúa con este tipo de expresiones, cada vez se va seguir afectando la autoestima y las posibilidades de un cambio positivo se reducen.

Hacer comparaciones todo el tiempo:
La gente negativa a menudo está haciendo comparaciones que le llevan a la frustración, pero no usan esas historias como modelo de inspiración. Quejas típicas son: “Juan tiene un excelente trabajo y yo no”, “esa familia está progresando y la nuestra está estancada”, “yo miro a deportistas que están ganando millones”, etc. Si todo el tiempo te estás comparando nunca encontrarás el camino de la felicidad

Cada persona ha pasado su propia historia para llegar a una buena posición. Tú puedes imitar los buenos ejemplos y mejorar tu vida.

Pensar en un ideal de perfección que no existe:
Alguna gente quiere alcanzar un ideal de perfección que realmente no existe. 

Desean tener un físico perfecto, mentes brillantes, encontrar ideas geniales para el éxito en poco tiempo, ser los mejores líderes, figurar, etc. Por supuesto que hay que trabajar en el máximo desarrollo personal, un error sería caer en un ideal de perfección que nadie en el mundo puede cumplir.


La Sustentabilidad


En la actualidad, la sustentabilidad es un tema muy popular en los diálogos y acuerdos entre países y gobiernos; sin embargo, pocos conocen con claridad cuál es su significado e importancia.

La sustentabilidad es en realidad “un proceso” que tiene por objetivo encontrar el equilibrio entre el medio ambiente y el uso de los recursos naturales. La humanidad en su paso por el planeta ha degradado los recursos naturales de tal forma que actualmente es necesario procurar y planear concienzudamente el consumo de los mismos para garantizar su existencia en las generaciones futuras.

Este concepto surge en el año de 1987, cuando la World Commission on Environment and Development de las Naciones Unidades publicó el informe “Our common future” (Nuestro futuro en común), que está centrado en la idea del desarrollo sustentable o sostenible. Sin embargo, este concepto fue realmente adoptado hasta 1992 por 180 Jefes de Estado, en Río de Janeiro, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el medio ambiente y el desarrollo. 

En dicha conferencia se acuerdan 27 principios relacionados con la Sustentabilidad que se materializan en un programa mundial conocido como Agenda 21.

Existen diferentes enfoques para definir la sustentabilidad, la definición adoptada por la World Commission on Environment and Development y formulada en 1987 en el mismo informe Brundtland, “Our Common Future” es la siguiente:

“El desarrollo sustentable hace referencia a la capacidad que haya desarrollado el sistema humano para satisfacer las necesidades de las generaciones actuales sin comprometer los recursos y oportunidades para el crecimiento y desarrollo de las generaciones futuras.”

En el estudio “El concepto moderno de sustentabilidad” realizado por el Ing. Arturo M. Calvente de la Universidad Abierta Interamericana, se hace mención de una definición sueca más integral al definir una sociedad sustentable como aquella en la cual:

“el desarrollo económico, el bienestar social y la integración están unidos con un medioambiente de calidad. 

Esta sociedad tiene la capacidad de satisfacer sus necesidades actuales sin perjudicar la habilidad de que las generaciones futuras puedan satisfacer las suyas”.

En el mismo estudio, se plantea una definición más desde el punto de vista económico:
“Sustentabilidad es la habilidad de lograr una prosperidad económica sostenida en el tiempo protegiendo al mismo tiempo los sistemas naturales del planeta y proveyendo una alta calidad de vida para las personas”.


Todas estas definiciones, desde sus diferentes enfoques, tienen en común el bienestar ambiental para lograr una correcta relación entre la naturaleza y sus recursos con la raza humana y sus necesidades biológicas, económicas y sociales.

Conocer Nuestra Valía


 Los chinos lo dicen de una manera hermosa: “Cuando el ojo no está obstruido, el resultado es la visión; cuando el oído no está obstruido, el resultado es la audición…” Y yo agrego: “Cuando la mente no está obstruida, el resultado es la verdad; y cuando el corazón no está obstruido, el resultado es la dicha…”Anthony de Mello
Dejaría aquí escrito si, por ejemplo, supiera de antemano que es el último artículo que pensaba realizar cuál es el mensaje más valioso que tengo para compartir, qué voy a publicar.

¿Y por qué no compartir entonces esa idea ahora mismo?
Bueno, aquí va…

La verdadera felicidad que tanto anhelamos está disponible para nosotros ahora mismo, no es necesario que alcancemos antes ninguna meta ni que se produzca primero ningún cambio en nuestras vidas. El logro de cualquier meta sólo nos provocará un bienestar pasajero, aunque nuestro “sentido común” nos asegure normalmente otra cosa: que la felicidad depende del cumplimiento de nuestros deseos.

Siempre que no nos sentimos plenamente felices estamos esperando que alguna situación se resuelva “favorablemente”, que algo cambie, que se solucione cierto problema, que se cumpla alguno de nuestros deseos. Pero a largo plazo, aun cuando alcancemos algunas de estas metas, el cuadro general parece ser siempre el mismo y la felicidad permanece como un estado ideal e inalcanzable.

No hay nada de malo en tratar de cumplir nuestros deseos… ¡al contrario! Los deseos son esenciales para darle sentido a nuestras vidas, nos señalan el camino que queremos recorrer. Pero si sentimos que sólo cuando se cumplan podremos ser felices entonces pasan a convertirse en “apegos”, y se transforman precisamente en los obstáculos que nos impiden alcanzar la felicidad.

Y, paradójicamente, tal como predice la Ley de Atracción, sentirnos bien ahora y experimentar ya la plenitud y la alegría que anhelamos, es la clave para hacer realidad nuestros deseos.


La Tercera Edad


Un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS), indica que la proporción de adultos mayores aumenta rápidamente. En la actualidad, casi 700 millones de personas son mayores de 60 años. Para 2050, las personas de 60 años o más serán 2.000 millones, esto es, más del 20% de la población mundial.

Esto significa que el número de personas de 60 años o más será superior al de niños menores de cinco años. El envejecimiento de la población conlleva aspectos positivos y negativos. La OMS asegura que puede considerarse un éxito desde el punto de vista de las políticas de salud pública y desarrollo socioeconómico, pero a la vez implica un reto para la sociedad que debe adaptarse a ello para mejorar la salud y la capacidad funcional de las personas mayores.

Marcela Colace, licenciada en gerontología y asesora en Siempre, servicio de acompañantes de salud en Argentina explicó que "si las personas mayores pueden vivir esos años adicionales de vida en buena salud y en un entorno propicio, podrán hacer lo que más valoran de forma muy similar a una persona joven".

"Las personas hoy no se preparan para envejecer, no planifican mucho, más allá de la jubilación y actividades para un posible sustento económico. Es importante entender que la vejez no es sinónimo de enfermedad Sin embargo, hay que aceptar que nuestras capacidades físicas y a veces mentales pueden llegar a sufrir limitaciones".

Elvira (71 años), docente jubilada y socia de Siempre contó: "Si bien yo no sentía que mi vida era el trabajo, porque siempre hice otro montón de cosas, es verdad que el trabajo estructura una rutina y, hasta el momento de la jubilación no había pensado en esa rutina cotidiana que seguía a esta nueva etapa".


"Prepararse para envejecer trae beneficios en la calidad de vida y la salud, por ello es importante planificar y prevenir, hoy en día contamos con novedosas ventajas desde la tecnología y los sistemas de salud para poder prever y acompañar nuestra transición por el período de la vejez" aseguró Colace.

lunes, 7 de mayo de 2018

Asumir Responsabilidades


Es muy frecuente hablar de libertad, de defender esta capacidad del hombre de ser libre, sin embargo no se habla tanto de responsabilidad. Ser responsable supone asumir las consecuencias de los propios actos, de nuestras decisiones.
La responsabilidad no significa sólo responder ante uno mismo, hemos de responder también ante los demás.

Podemos definir a la persona responsable como aquella que asume las consecuencias de sus actos intencionados, resultado de las decisiones que tome o acepte; y también de sus actos no intencionados, de tal modo que los demás queden beneficiados lo más posible o, por lo menos, no perjudicados; preocupándose a la vez de que las otras personas en quienes puede influir hagan lo mismo.

Una persona responsable toma decisiones conscientemente y acepta las consecuencias de sus actos, dispuesto a rendir cuenta de ellos. La responsabilidad es la virtud o disposición habitual de asumir las consecuencias de las propias decisiones, respondiendo de ellas ante alguien. Responsabilidad es la capacidad de dar respuesta de los propios actos.

Para que pueda darse alguna responsabilidad son necesarios dos requisitos:

Libertad. Para que exista responsabilidad, las acciones han de ser realizadas libremente. En este sentido, ni los animales, ni los locos, ni los niños pequeños son responsables de sus actos pues carecen de uso de razón (y el uso de razón es imprescindible para la libertad).

Ley. Debe existir una norma desde la que se puedan juzgar los hechos realizados. La responsabilidad implica rendir cuenta de los propios actos ante alguien que ha regulado un comportamiento.

El hombre responde de sus actos ante sí mismo (juicio de conciencia) y otros hombres. A su vez, la responsabilidad ante los demás puede ser de varios tipos: responsabilidad jurídica (ante las leyes civiles), familiar-doméstica (ante la familia), laboral, etc.

Sí. Hay exceso de responsabilidad cuando se piden cuentas -a sí mismo o a otros- de comportamientos que no estaban regulados o que no era preciso regular. Suele darse cuando falta amor a la libertad; por ejemplo, si se pretende regular y controlar todo y al detalle, atenazando diversidad e iniciativas. Pero es más frecuente la irresponsabilidad.

Disminuye la responsabilidad lo que disminuye la libertad, es decir, lo que entorpece la voluntad y el entendimiento, que son las facultades necesarias para realizar acciones libres. Por ejemplo, la violencia, la ignorancia y el miedo.

Es preferible ser hombres libres, dueños de sus actos, capaces de tomar decisiones y de asumir sus consecuencias. Da gusto tener en el propio equipo a alguien que cumple los compromisos con responsabilidad.

La palabra responsabilidad trae malos recuerdos a la imaginación por varios motivos: Normalmente sólo se relaciona con errores o castigos, pues cuando la consecuencia de una acción es un premio no suele hablarse de responsabilidad sino de mérito.

Responder ante otros parece ir contra la propia libertad. Ambas cosas van unidas: sin libertad no hay responsabilidad, sólo quien es dueño de sus actos puede responder de ellos.

La responsabilidad se ve como opuesta a la diversión. En realidad sólo se opone al tipo de diversión sin medida; pues una persona responsable sabe divertirse en los momentos y modos razonables.

Ya hemos dicho también que no vivimos solos en el mundo y que nuestros actos repercuten para bien o para mal en los demás, en este sentido tenemos un compromiso de comportarnos como personas ante la sociedad. 

No podemos concebir nuestras vidas fuera de todo compromiso. Esto ocurre cuando pensamos únicamente en nosotros mismos y no consideramos al resto del mundo, buscando exclusivamente pasarlo bien.


Ser responsable significa obedecer. Obedecer a la propia conciencia, obedecer a las autoridades, obedecer a mis superiores, sabiendo que esa obediencia no se refiere a un acto pasivo, de esclavo, sino a un acto operativo de compromiso, de deber.

El Riesgo De Que La Tecnología Tome El Comando

El ensayista norteamericano Nicholas Carr ha publicado recientemente un libro titulado “Atrapados: cómo las máquinas se apoderan de nuestras vidas” (editorial Taurus), en el que reflexiona y describe múltiples ejemplos de hasta qué punto hemos depositado nuestra fe en las nuevas tecnologías, olvidando que no siempre resultan infalibles.

Sin querer pecar de tecnófobo, pues también alaba las inmensas posibilidades que la Red ofrece para acceder a información o comunicarse,  sí advierte sobre si el exceso de tecnología nos está llevando a perder algo de nuestra esencia humana. 

Permitimos y asumimos que el software lleve a cabo muchas tareas para las que antes utilizábamos nuestro cerebro. Un ejemplo muy ilustrativo es que confiamos en una voz artificial, la del GPS, que nos guía paso a paso hasta nuestro destino cuando vamos conduciendo, incluso aunque percibamos que circulamos por el camino equivocado.  Gracias a los correctores automáticos, cada vez escribimos peor y con más faltas de ortografía.

El señor Carr destaca que a medida que empresas como Facebook, Google, Twitter y Apple compiten entre ellas para ganarse nuestra lealtad, sus aplicaciones y su software tienden a minar el esfuerzo que supone conseguir cualquier cosa y consecuentemente tendemos a perder talentos y capacidades.

Las máquinas están diseñadas por tecnólogos que sólo están preocupados por saber hasta dónde es capaz de llegar la máquina, y no de qué modo puede esta expandir nuestras capacidades. Según palabras del propio autor, “Las innovaciones tecnológicas no se pueden parar, pero podemos pedir que se diseñen dando prioridad al ser humano, ayudándonos a tener una vida plena en vez de apoderarse de nuestras capacidades”.

 Es como si al poner el GPS hubiéramos ido perdiendo el rumbo o la capacidad de orientación. Y esto no es un juego de palabras. Es muy interesante el capítulo del libro que dedica a los esquimales y que resumo a continuación.

La pequeña isla de Igloolik, en la costa de la península de Melville, perteneciente al territorio Nunavut del norte de Canadá, es un lugar desconcertante en invierno.

La temperatura media se aproxima a los veinte grados bajo cero. Capas gruesas de hielo marino cubren las aguas aledañas. No hay sol. A pesar de las espantosas condiciones, los cazadores inuits se han aventurado fuera de sus casas durante unos 4.000 años atravesando miles de kilómetros de hielo y tundra en busca de caribús y otras presas. 

La capacidad de los cazadores para recorrer vastas extensiones de terreno ártico árido, en el que hay pocas marcas, las formaciones de nieve están en continuo movimiento y los rastros han desaparecido a la mañana siguiente, ha fascinado a viajeros y científicos desde que, en 1822, el explorador inglés William Edward Parry anotase en su diario la “precisión asombrosa” del conocimiento geográfico de su guía inuit.

La extraordinaria pericia para orientarse de los inuits no surge de la destreza tecnológica —han evitado los mapas, las brújulas y otros instrumentos—, sino de una comprensión profunda de los vientos, las formas de las ventiscas, el comportamiento animal, las estrellas, las mareas y las corrientes. Los inuits son maestros de la percepción.

O al menos lo eran. Algo cambió en la cultura inuit con el cambio de milenio. En el año 2000 el Gobierno estadounidense levantó muchas de las restricciones del uso civil del sistema de posicionamiento global. La precisión de los dispositivos GPS mejoraba incluso aunque cayeran sus precios. 

Los cazadores de Igloolik, que habían intercambiado sus trineos por motos de nieve, empezaron a confiar en mapas e instrucciones generados por ordenador para desplazarse. Los inuits más jóvenes tenían especiales ganas de usar la nueva tecnología.

En el pasado, un cazador joven tenía que soportar un aprendizaje largo y arduo con los mayores. Al comprar un receptor barato GPS, podía saltarse el entrenamiento y descargar la responsabilidad de la navegación sobre el dispositivo. 

También podía viajar en algunas condiciones, como una niebla densa, que solían imposibilitar las salidas de caza. La facilidad, comodidad y precisión de la navegación automatizada hacían que las técnicas tradicionales inuits pareciesen anticuadas.

Pero a medida que los GPS proliferaron en Igloolik, empezaron a circular noticias sobre graves accidentes de caza con heridos e incluso muertos. Con frecuencia la causa fue rastreada hasta topar con la confianza excesiva en los satélites. Si un receptor se rompe o sus baterías se congelan, un cazador que no ha desarrollado un buen sentido de la orientación puede perderse fácilmente en una extensión sin ningún distintivo y verse expuesto a peligros.

Incluso si los aparatos funcionan adecuadamente, presentan riesgos. Al seguir las instrucciones GPS, atravesarán hielo peligrosamente delgado, se acercarán a acantilados y se meterán en otros peligros que un navegante formado hubiese evitado por sentido común y precaución.


El antropólogo Claudio Aporta, de la Universidad de Carleton en Ottawa, ha estado estudiando a los cazadores inuits durante años. Afirma que, si bien la navegación por satélite ofrece ventajas atractivas, su adopción ya ha producido un deterioro de la capacidad de orientación. El cazador que se traslada en una moto de nieve con GPS dedica su atención a las instrucciones del ordenador y pierde de vista su entorno. Viaja “con los ojos vendados”, como dice Aporta. 

Un talento singular que ha definido y distinguido a un pueblo durante miles de años puede evaporarse en una generación o dos.

Convivir Y Compartir


“La idea de convivir con las y los demás es un instrumento entre varios para combatir los prejuicios que impiden la concertación. De esta manera, parecería adecuado que la educación se diera a dos niveles; en un primer nivel, en el descubrimiento gradual del otro; en un segundo nivel, en la participación de trabajos en común, con un método de solución de conflictos presentes. Descubrir al otro u otra tiene una doble misión, una que es enseñar la diversidad de la especie humana, la otra contribuir a una toma de conciencia de las semejanzas y la interdependencia entre todos los seres humanos; ello teniendo en cuenta que el descubrimiento del otro pasa forzosamente por el descubrimiento de uno mismo o una misma”.

Esto quiere decir que hay que aprender a vivir junto con los demás en una cultura de paz, respetando los derechos de los demás y, sobre todo, respetando todas las formas de vida sobre el planeta.

Para poder tener una convivencia pacífica, para interactuar y conocer a los demás y para lograr trabajar por objetivos comunes, es importante desarrollar una serie de valores y actitudes como los que se señalan a continuación:

Desarrollo del autoconocimiento y la autoestima. Tarea que niños y niñas deben emprender desde la primera infancia.
Desarrollar la empatía, es decir, la capacidad de ponerse en el lugar del otro. Aquí es importante que niños y niñas tengan la oportunidad de iniciarse en la empatía, aunque esta no se adquiera en esta etapa, pero sí se sientan las bases para su desarrollo.
Resolución de conflictos sin violencia. Los niños y las niñas se ejercitan en la resolución de conflictos haciendo uso del diálogo y el respeto al otro.
Cooperación. Aprenden a compartir y trabajar en equipo por un bien común, disfrutando de las metas alcanzadas en grupo.
Tolerancia a las diferencias. Los niños y las niñas se pueden reconocer como diferentes a nivel personal pero iguales en derechos.

Los niños y niñas deben aprender que cuidar el medio ambiente es cuidar la vida humana. Es importante, pues, que aprendan que el ser humano tiene la responsabilidad de utilizar los recursos con sabiduría, de vivir, no de destruir.

Si destruimos el ambiente, estaremos perjudicándonos a nosotros mismos y a los demás, incluso a las generaciones futuras. Cuidar el mundo es cuidarnos. Los niños y niñas tienen que aprender que sus acciones tienen repercusiones y que, en la medida en que protejamos nuestro ambiente inmediato, podemos conservar nuestro país y nuestro planeta y garantizar un legado de supervivencia para las futuras generaciones.


La escuela es un lugar idóneo para que niños y niñas desarrollen su conciencia sobre el medio ambiente. Tener conciencia ambiental implica que los niños y las niñas conozcan el ambiente, lo cuiden, lo protejan y conserven. 

Es importante recordar que para que ellos puedan asimilar estos conceptos y desarrollar esa conciencia se requiere que puedan vivirlos a través de experiencias significativas y cotidianas.

Mejor...Mañana

 “Mañana prometo que lo hago”. Piensa en cuántas veces has dicho esta frase y el mañana se te ha convertido en una semana, un mes, un año, o incluso en nunca. 
El mal hábito de postergar lo que puedes hacer ahora viene de satisfacer nuestra comodidad inmediata (ver televisión, dormir, hablar por teléfono por horas) y esperar hasta el último momento para hacer las cosas que debes hacer ya sea trabajar, estudiar, ir al gimnasio, comer sano, entregar un proyecto, etc.
Algunas de las razones por las cuales postergamos actividades es porque las percibimos como aburridas (lavar la ropa u organizar el cuarto), difíciles porque demandan mucho tiempo o esfuerzo (buscar trabajo, terminar el proyecto, estudiar para el examen), o porque creemos que funcionamos mejor bajo presión. Nuestras percepciones muchas veces son erradas.
 Trabajar bajo presión no nos hace mejores trabajadores, por el contrario nos lleva a cometer más errores y no nos permite dar el 100% de nuestro potencial. El reto que debemos afrontar es que el “dejarlo para mañana“ se nos convirtió en un hábito inconsciente del cual perdimos control.

Siempre Enfocados


El enfoque consiste en estar presente, y ser consciente de lo que se está haciendo. Ser conscientes de la actividad, o tarea que estamos desarrollando en ese preciso instante, sin distracciones o pensamientos dispersos que interfieran en su realización.

El enfoque y concentración, son la capacidad que tenemos para prestar atención, y por consiguiente, para que nuestra actividad, trabajo o estudio, sean de calidad.
Si nos desenfocamos durante la realización de una tarea o actividad, si nos desconcentramos, es más que probable, que cometamos algún error, y lo que es peor, se estima que la mente humana necesita en torno a 10 minutos para volver a conseguir el estado de concentración anterior. ¿Lo imaginas? ¿Imaginas que por dos interrupciones de 5 minutos, necesites 20 minutos para recobrar tu enfoque y concentración?

Por desgracia, no siempre podemos conseguir un estado de enfoque y concentración suficientes, nuestro entorno es agresivo, bullicioso, con múltiples distracciones, ocasionadas por otros o por nosotros mismos. 

Un entorno hostil, con interrupciones acústicas, nos dificultará mucho conseguir el enfoque y concentración deseados.

Algunos ejemplos de distracciones más comunes son:

Nuestra propia mente
Nuestra propia mente es un foco de distracciones, durante la realización de una tarea o actividad, nuestra mente está pensando en otra cosa, o incluso hace que tengamos diálogos internos con nosotros mismos, con lo cual, físicamente estamos desarrollando una actividad o tarea, pero mentalmente estamos pensando en otra cosa, incluso podemos estar discutiendo internamente con nosotros mismos, que haremos el fin de semana, o en las próximas vacaciones.

El resultado será una tarea o actividad desarrolladas de forma mediocre, porque no hemos puesto todo nuestro enfoque y concentración sobre lo que estábamos haciendo.

Este es a mi entender, uno de los peores motivos de perdida de atención, ya que de nosotros depende no perder la atención, en este caso no interviene ninguna interrupción ‘externa’, somos nosotros mismos y nuestra mente quienes generamos la interrupción.


La Buena Disposición


Una buena disposición del ánimo facilita la relación armónica y afectuosa con las personas, al igual que padecer de una mala disposición del ánimo dificulta las relaciones con los demás. 

Y siendo ambas disposiciones del ánimo tan excepcionalmente importantes para bien o para mal, ¿cuál es la razón de no trabajar por la primera y por extinguir la segunda? Simplemente, porque no se nos ha dicho cómo hacerlo.

Una buena disposición del ánimo impacta en las funciones fisiológicas y mecánicas de nuestro cuerpo: nos sentimos ligeros, nos levantamos y sentamos con facilidad, sentimos gusto por el movimiento corporal, nuestros desplazamientos físicos denotan energía. 

En cambio, si nos encontramos en una mala disposición del ánimo, nuestro cuerpo lo sentimos pesado, no hay ligereza ni soltura en nuestros movimientos físicos, se nos impone una fuerte rigidez; sentimos incomodidad con nuestras reacciones físicas.

Nuestra mala disposición del ánimo se manifiesta en una languidez de nuestro espíritu. "La pereza, que es una languidez del alma, constituye un manantial inagotable del tedio", escribió Fenelón. 

La mala disposición del ánimo irremediablemente nos conduce al mal humor, la irritabilidad, y a una visión pesimista de la vida y del mundo. 

Sobre esto, Goethe escribió una reflexión apropiada al caso: "Sucede con el mal humor lo que con la pereza. Hay una especie de pereza a la cual propende nuestro cuerpo, lo que no impide que trabajemos con ardor y encontremos un verdadero placer en la actividad si conseguimos una vez hacernos superiores a esa propensión" (la propensión al mal humor).

La buena disposición de nuestro ánimo es hermana de la jovialidad, entendida como alegría y una apacibilidad de nuestro ánimo. Estamos joviales cuando vemos que nuestro mundo interior encaja con el mundo exterior, cuando no necesitamos de nada extraordinario para sentir elevado nuestro corazón. Nuestra jovialidad es como un imán que atrae hacia nosotros a muchas personas.

La mala disposición de ánimo es hermana de la tristeza y hermano del pesimismo. De hecho, cuando una persona padece ya de una crónica mala disposición de ánimo, al saludarla con la mano o con un abrazo, sentimos que nuestra energía se vacía. Y en cambio, cuando saludamos a una persona con una buena disposición de ánimo, conservamos nuestra energía, o bien, la incrementamos.

Es absolutamente cierto que un ánimo triste y abatido entorpece las funciones fisiológicas del cuerpo, y es cierto también que la actividad física ligera modifica increíblemente, para bien, el ánimo abatido de una persona.


La persona triste y pesimista tiene estropeada la visión de sí misma y del mundo. 

Por lo general, se mete en su coraza y no quiere salir de ella. El mundo le parece difícil y siente que no encaja en él. Todo lo ve negro, complicado, y no se siente capaz de hacer lo que quiere. Se esconde en la resignación y renuncia a los placeres de la vida, los que le parecen inalcanzables. 

Uno de los rasgos dominantes de estas personas consiste en que se sienten depositarias del dolor, como si fueran las únicas que sufrieran en el mundo; por ello, no son solidarias con nadie, pues nada tiene que compartir, y sí en cambio sienten que son los demás quienes deben acudir en su ayuda.

La Concentración

¿Te cuesta concentrarte?

Esto es un problema, pues si queremos ser productivos necesitamos ser capaces de concentrarnos por largos períodos de tiempo en aquellas tareas que nos llevarán a completar nuestros proyectos.Solo los proyectos terminados dan frutos, y es difícil terminar proyectos sin concentración en el trabajo y sin atención en lo importante.

Pero esto va más allá de la productividad. Mejorar nuestra capacidad de concentración y de atención tendrá efectos positivos en otros aspectos también importantes de nuestras vidas, como en el aprendizaje, en las relaciones personales e incluso en nuestro estado psicológico y emocional, por sentir que retomamos el control de las cosas, pasando de un modo de vida reactivo a uno más proactivo.