No creo que seamos
irreverentes, menos porque digamos que lo somos – tampoco porque digan que lo
somos -creo que es por naturaleza. La gente piensa que ser irreverente tiene
algo que ver con valores negativos.
Creo todo lo contrario, la irreverencia se
basa en desafiar – intelectualmente – al status quo. Significa hacer que algo
suceda cuando todos te dicen que no lo conseguirás, significa defender tus
principios y valores delante de cualquier situación y significa buscar nuevos
caminos -donde parece no haberlos – para poder ayudar a la gente de tu
alrededor, caminos lejos de los que normalmente recorremos, precisamente porque
hay mucha gente que no le interesa que esos caminos se exploren y sean
descubiertos por gente ordinaria.
Los irreverentes
quizá no están bien mirados, porque crean cambio y el cambio hace que los demás
reaccionen, eso no gusta a la gente que se encuentra en un posición
privilegiada y a salvo, malas noticias para ellos, ahora están en peligro.
Pido disculpas por
adelantado – no en realidad no las pido, olvídalo – pero la revolución ha
empezado y estoy seguro que vamos a molestar a mucha gente ¡Genial! Eso
significará que estamos cambiando algo.
Me parece que los
nuevos héroes son esa gente ordinaria que pasan a ser irreverentes. Ir a contracorriente
no es malo, sólo que no es lo lógico, pero…
¿Qué es lo lógico? ¿Es lógico seguir
las instrucciones de otros? ¿Es lógico que nos digan lo que tenemos que hacer?
¿Caminar por donde todo el mundo ya lo ha hecho?
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