La interculturalidad desde un enfoque integral y de derechos
humanos, se refiere a la construcción de relaciones equitativas entre personas,
comunidades, países y culturas. Para ello es necesario un abordaje sistémico
del tema, es decir, trabajar la interculturalidad desde una perspectiva que
incluya elementos históricos, sociales, culturales, políticos, económicos,
educativos, antropológicos, ambientales, entre otros.
En el caso específico del tratamiento del tema en el ámbito
educativo, se refiere no únicamente a la Educación Intercultural Bilingüe,
que ha tenido un importante desarrollo en nuestros países, sino también a la
interculturalización de la educación, en temas fundamentales como leyes de
educación, proyectos educativos, objetivos, políticas, planes y programas,
currículo, formación docente, textos escolares, cultura escolar y el
intercambio con la comunidad y el contexto.
Una propuesta de educación e interculturalidad plantea un
diálogo entre iguales y en igualdad de condiciones, el encuentro entre personas
y culturas, el intercambio de saberes, hacia una educación intercultural,
inclusiva y diversa.
La riqueza de los saberes y conocimientos de cada cultura
es uno de los objetivos fundamentales de la educación contemporánea. Es
necesario que este objetivo se concrete no únicamente en contenidos o materias,
sino en los mismos principios, enfoques y programas nacionales educativos, así
como en la misma institucionalidad educativa.
Permite además el fortalecimiento de la identidad, el
intercambio de saberes pertinentes y contextualizados, de relaciones
democráticas y armónicas, el conocimiento articulado a la vida, el desarrollo
de capacidades prácticas para actuar en el mundo, y la construcción de un
modelo propio de desarrollo humano y sostenible, en el cual la educación cumple
un papel preponderante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario