miércoles, 27 de abril de 2016

Solidaridad



Estos días pasados hemos sido testigos de algunos desastres climáticos que han golpeado fuertemente en nuestra región, en algunos casos como el ocurrido en la ciudad de Dolores, dpto. de Soriano, Uruguay, donde un tornado, algo inusual para este país, destruyó casi totalmente toda la infraestructura de esta ciudad donde afortunadamente no hubo que lamentar la pérdida de vidas humanas.

También han ocurrido precipitaciones muy copiosas que han superado largamente las previsiones para esta época del año y muchas poblaciones del  interior, incluyendo grupos urbanos y zonas rurales que han quedado prácticamente aisladas del resto del país con la pérdida total o parcial de la totalidad de sus pertenencias, situación que aún persiste y que ha causado enormes daños en hogares, plantaciones, caminería, etc.

Cabe agregar el terremoto de Ecuador con su terrible saldo de muertes y heridos y la situación en las provincias argentinas de Corrientes y Entre Ríos, situaciones éstas que nos han sacudido por sus repercusiones en la economía y por la pérdida de bienes en las poblaciones más carenciadas que han sido impedidas de regresar a sus hogares por las persistentes lluvias y el mal estado de sus caminos.

Es en estas situaciones límites en las que surge espontáneamente el enorme sentido de la solidaridad del resto de la sociedad la cual ha respondido con premura a los pedidos de ayuda recibidos brindándose con su tradicional generosidad en gestos dignos de ser destacados.

La solidaridad es el apoyo o la adhesión circunstancial a una causa o al interés de otros, por ejemplo, en situaciones difíciles. La palabra solidaridad es de origen latín “solidus” que significa “solidario”.
Cuando dos o más personas se unen y colaboran mutuamente para conseguir un fin común, se habla de solidaridad. La solidaridad es compartir con otros tanto lo material como lo sentimental, es ofrecer ayuda a los demás y una colaboración mutua entre las personas.
En este sentido, se puede citar como ejemplo a La Cruz Roja como símbolo de solidaridad, ya que es una organización imparcial con una misión humanitaria basada en el principio de solidaridad que consiste en proteger la vida y dignidad de las víctimas de guerra y de violencia, así como prestarle asistencia.
La solidaridad es sinónimo de apoyo, respaldo, ayuda, protección, que cuando persigue una causa justa cambia el mundo, lo hace mejor, más habitable y más digno.  

La solidaridad es un valor por excelencia que se caracteriza por la colaboración mutua que existe entre los individuos, lo que sin duda permite lograr la superación de los más terribles desastres, como guerras, pestes, enfermedades, entre otros, aplicarlo también con nuestros familiares, amigos y/o conocidos que se encuentren en situaciones difíciles y con la ayuda recibida permita salir adelante y mejorar en cierto modo la situación.
La solidaridad entre los seres vivos permite resistir las adversidades que se presenta a lo largo de la vida. La persona solidaria no duda en colaborar y apoyar a todos aquellos individuos que se encuentran en situaciones desfavorecidas, lo que permite distinguirse de las personas indiferentes, egoístas ante sus compañeros. 
Es importante fomentar la solidaridad desde la infancia ya que puede ser vista como la base de otros valores humanos que logra desarrollar valiosas relaciones de amistad, familiares y/o sociales basadas en la ayuda, apoyo, respeto y tolerancia.    

Hugo W Arostegui


No hay comentarios:

Publicar un comentario