Incrementar
verbo transitivo
Hacer que algo sea mayor en cantidad, tamaño,
intensidad, importancia, etc.
Los países que atraviesan un bienestar económico los cuales
comienzan a tener un aumento en sus recursos, incrementan sus partidas
presupuestarias para las diferentes áreas del estado, como pueden ser salud,
educación y obras públicas.
En materia de dinero es frecuente encontrarse con esta palabra,
por ejemplo, si un bien o servicio experimenta una suba en su valor de cambio
se hablará que tal bien o servicio incrementó su precio. O cuando una
persona recibe un aumento en su salario como consecuencia de un incentivo por
su buen desempeño o bien porque se ha dado una discusión salarial y entonces se
estipula por ley un incremento del salario básico.
Cuando existe una mejora en lo que respecta al nivel económico o
social de una persona, es decir, alguien que pasa de pertenecer a la clase
social baja a la clase alta, sin dudas, lo hace porque su nivel económico
se ha incrementado favorablemente y ello le permitió tal movilidad social.
El
cociente intelectual, también denominado coeficiente intelectual o CI, consiste
en una puntuación, que se
obtiene al efectuar a una persona unas serie de test especialmente diseñados
para medir su inteligencia, y en los que se adjudica 100 como valor central de
una inteligencia media. Quienes puntúen por encima de 100 se hallan por encima
de la media, y los que puntúen menos, no llegan a la media de inteligencia.
Como dato curioso, se sabe que el CI medido o estimado de algunos
personajes famosos del mundo de la política, la ciencia y las artes, al menos
duplica la inteligencia media, como el genio renacentista Leonardo da Vinci, el
científico Gottfried Wilhelm von Leibniz o el político y religioso inglés
Thomas Wolsey.
Por
su parte, Beethoven, Darwin, Einstein, Cervantes y Mozart, rondaban la inferior
pero nada despreciable puntuación de 160.
Hasta ahora se consideraba que la capacidad intelectual es estable
a lo largo de la existencia, pero investigadores británicos han descubierto que
el CI puede elevarse o reducirse de forma significativa a lo largo de la
vida adulta de una persona, aunque todavía no se encontrado la razón
fisiológica de este fenómeno.
El estudio, realizado por investigadores del Centro Wellcome Trust de Neuroimagen de la Universidad Londres, UCL, y el Centro para la Neurociencia Educacional, ambos en el Reino Unido, muestra por primera vez que el CI no es constante.
El estudio, realizado por investigadores del Centro Wellcome Trust de Neuroimagen de la Universidad Londres, UCL, y el Centro para la Neurociencia Educacional, ambos en el Reino Unido, muestra por primera vez que el CI no es constante.
Recuerda
Colom que "el científico catalán Josep María Lluis i Font, que en 1970
obtuvo las puntuaciones de un grupo de niños en un test de inteligencia
aplicado en Barcelona, administró 30 años después el mismo test a un grupo
equivalente de niños, revelándose una ganancia de inteligencia equivalente a
tres puntos de cociente intelectual (CI ) por década, precisamente el
incremento promedio observado internacionalmente".
"Recientemente, Jonathan Wai y Martha Putallaz han publicado
un artículo explorando casi dos millones de casos y encontrando que entre los
individuos más inteligentes también se aprecia un efecto Flynn. Por tanto, el
incremento generacional de inteligencia se produce entre los más y los menos
inteligentes", señala Colom en un artículo publicado en ‘El País’.
Otro estudio de la Universidad de Pensilvania en Filadelfia
(EE.UU.) ha concluido que un CI elevado es producto de una gran inteligencia y
una gran motivación, mientras que un CI bajo puede deberse a la deficiencia en
alguno de esos dos factores.
Los expertos observaron que algunas personas se motivan más que
otras cuando no hay nada en juego y que el coeficiente intelectual que arrojan
las pruebas de inteligencia es menor en aquellos que no hallan ningún incentivo
en realizarla.
“La falta de motivación al hacer un test de inteligencia afecta
significativamente al resultado”, han señalado los autores del trabajo basado
en el seguimiento de 250 personas desde su adolescencia hasta los 20 años de
edad avanzados, y en el
Análisis de cómo habían afectado los incentivos materiales al rendimiento de más de 2.000 participantes en estudios previos.
Análisis de cómo habían afectado los incentivos materiales al rendimiento de más de 2.000 participantes en estudios previos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario