sábado, 22 de agosto de 2020

Habilidades

¿Crees que no tienes ningún talento? Estás muy equivocado. Sin conocernos, puedo asegurarte, insisto, que si piensas que no tienes ningún talento estás muy equivocado. No hay nadie, escúchame bien, nadie en el mundo que no tenga ninguna virtud. ¿Conoces a alguien que no la tenga?

Cualquier persona que podamos imaginar, por muy desagradable que nos parezca, desde el indigente más holgazán hasta el dirigente más engreído, desde el asesino más perverso hasta el ermitaño más huraño, todos tienen alguna virtud. 

Quizás tenga paciencia, quizás tenga don de palabra, quizás tenga inteligencia, quizás sea un superviviente nato. Todos tienen su virtud. ¿Por qué ibas a ser tú diferente? ¿Crees que lo eres? (sigue leyendo...)

No, no eres diferente. Tú también tienes tus virtudes. Igual que yo. Igual que todos. Todo el mundo tiene virtudes, todas las personas tienen talentos. Si tú crees que no los tienes, entonces es que no has buscado lo suficiente. ¿Has mirado dentro de tí? ¿Has mirado a tu alrededor? ¿Has preguntado a los que te rodean?

Debes analizar todas las cosas que haces a lo largo del día. ¿Qué haces bien? ¿En qué eres bueno? ¿Qué se te da bien? No lo dudes, puedes encontrar tus virtudes en tu interior. Aprende a sacar lo mejor de tí mismo, encuentra tus virtudes, se consciente de tu talentos.

Cada persona somos una fuente inagotable de ideas. Sólo tenemos que aprender a sacar esas ideas. No digas que tú no las tienes. No digas qué no tienes ninguna virtud, te estarías engañando. No digas que no tienes ninguna virtud, te estarías ocultando la realidad. No dejes que el pesimismo te confunda.

Repítete a tí mismo: "Yo soy bueno esto", "Se me da bien aquello", "Soy el mejor en lo otro". Repasa a menudo tus virtudes. Encuéntralas y repásalas.

A continuación te dejo una serie de consejos que puedes seguir para ser más consciente de cuales son tus  talentos y tus virtudes


Durante el día observa qué cosas haces bien. Fíjate en que estabas haciendo cada vez que alguien te diga "Gracias". Anota que cosas han tenido el resultado que esperabas..

Durante la noche repasa mentalmente el día anterior. ¿Qué has hecho bien en ese día? ¿De qué te sientes orgulloso? 

Lleva siempre una agenda o libreta de bolsillo en la que apuntar tus logros. 

Escribe todos tus éxitos de la semana, aunque ya estén repetidos (volver a escribirlos te ayudará a fijarlos en tu mente). Al final de la semana pasa esas anotaciones a un libro, de forma ordenada y clasificada. Subraya o marca con X cada vez que se repita una idea, un éxito.

Pregunta a las personas cercanas abiertamente. Consúltales las cosas que más les gustan de ti, en qué eres bueno, que tipo de asuntos te confiarían. Diles que te digan sincera y abiertamente que es lo que les gusta de ti y en qué tipo de actividades creen que podrías destacar.

Observa atentamente que tipo de favores te suele pedir la gente, que tipo de tareas te suelen encargar. Eso te dará una idea de en qué tipo de actividades te ven más preparados los demás.

Fíate de tus gustos, céntrate en las actividades que más te gusten pues es en las que más fácilmente podrás destacar. Todos tendemos a hacer mejor las cosas cuando las hacemos a gusto.

Una vez que tengas claro en que eres bueno, escríbelo, repásalo, métetelo en la cabeza. Deja notas por todas partes recordándotelo. No tengas miedo de repetírtelo. "Soy bueno en tal cosa o en aquel aspecto".

Y por supuesto CRÉETELO

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