Una vez que empieces a considerar que estar solo es agradable, vas
a sentir más confianza en tu habilidad de estar sin nadie. Y eso naturalmente
lleva a que te sientas más independiente.
Ya no vas a experimentar más la ansiedad o ese deseo ardiente de
compañía, una vez que aprendas lo encantador que es estar solo.
La vida está llena de relaciones, y la mayoría de ellas sólo dura cuando
ambas personas están felices. Y eso se puede volver un trabajo
desgastante dependiendo de con quien estás. Ahora, esto no se aplica sólo a las
relaciones personales, sino a todo tipo de relaciones.
Una vez que estás solo, la única felicidad por la que te tienes que
preocupar es por la tuya.
Cuando comienzas a disfrutar de estar solo, muy rápidamente verás que la
soledad significa que no tienes que disculparte por lo que has hecho. Muy
a menudo, hacemos cosas que terminan enojando a otras personas o hiriendo
los sentimientos de alguien más y luego tenemos que disculparnos rápidamente
por eso.
Muy seguido, sentimos la necesidad de que nuestros amigos y familia nos
den el visto bueno antes de hacer algo. Constantemente buscamos el consejo
de otras personas acerca de lo que deberíamos hacer.
Por supuesto, hay algunas veces en las que no sólo es perfectamente
aceptable pedir un consejo, sino que es necesario también. Pero por otro lado,
hay veces en las que somos perfectamente capaces de actuar por nuestra cuenta,
y no necesitamos buscar a los demás para que nos den las respuestas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario