la honradez, la lealtad, la veracidad, el respeto por los demás y por sí
mism@, el autocontrol emocional, la confiabilidad. Una persona íntegra es una
persona digna de nuestra confianza. Es una persona que atrae a los demás. Es
una persona con una mirada clara, limpia, real y honesta. Es una persona
intachable e invencible.
En contraposición, una persona que no es íntegra es una persona
deshonesta, que no respeta a los demás, desleal, no confiable y además, en su
vida, suele entrar muy a menudo en juego la mentira. Suelen ser personas con
dos caras. Su pasatiempo preferido suele ser hablar mal de los demás, aunque
nunca lo reconocerán.
Por desgracia, las personas íntegras no son las que más abundan. ¿Por
qué? Porque ser íntegro no suele ser el camino más fácil. Ser íntegro implica
esfuerzo constante y diario por ser mejor persona. Es evidente que no todo el
mundo está dispuesto a pagar el precio que requiere la integridad.
Destaquemos las ventajas que te ofrece ser una
persona íntegra:
1.- Serás una persona confiable para los demás,
porque los demás, saben que no vas a tomar el atajo de utilizar mentiras para
salir airos@ de una situación incómoda.
2.- Siempre podrás dormir satisfecho con una conciencia
tranquila.
3.- Atraerás a los demás hacia tu persona, por
tus cualidades personales (si te mueves en el mundo del networking, esta
atracción también te servirá para atraer a más socios a tu negocio, aunque
lógicamente es una consecuencia, y no la razón para ser íntegro).
4.- Avanzarás hacia tus objetivos y metas en la
vida de una manera mucho más rápida y segura.
5.- Serás una persona con la tranquilidad mental que
te da el no tener un pasado o presente oscuro que temas que en cualquier
momento pueda salir a la luz y romper tu credibilidad.
6.- Tendrás una excelente reputación personal,
laboral, profesional, familiar, lo que hará ampliar tu círculo de influencia y
amistades.
Por contra, destaquemos las desventajas de ser
una persona sin integridad:
Se suele decir que “la mentira tiene las patas muy cortas”. Y creo que
es un post donde podemos aplicar este dicho popular. Hay personas que se han
acostumbrado a mentir, y mienten en todo momento, circunstancia y
lugar. ¿Crees que una persona que habitúa a mentir es una persona digna de
confianza para los demás? Evidentemente NO.
Así que, mi recomendación es la siguiente: si quieres ser una persona
íntegra acostúmbrate a no recurrir a la mentira, ni siquiera, para tratar de
salir de una situación incómoda. No merece la pena perder tu credibilidad y
confianza ante los demás (ni ante ti mism@ que es más importante) por optar por
la opción cómoda.
Piensa bien en esto, si tienes la fama y reputación de ser una persona
falta de integridad y que además, suele mentir, ¿crees que podrás atraer muchas
personas a tu negocio para trabajar codo a codo con ell@s? ¿Crees que los demás
querrán un líder con esas características?
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