Es posible apelar a la noción de opuesto en ámbitos muy
diversos. Así, suele decirse que el blanco y el negro son colores opuestos, por citar un caso.
También es posible afirmar que el concepto de juventud se opone al de vejez;
que alto es lo opuesto a bajo; y chico se contrapone a grande.
Es importante señalar que dado que los términos contrapuestos son absolutamente
diferentes no existe la posibilidad de que se acerquen. Esto significa que lo
que es blanco no puede ser negro, al igual que quien es joven no puede ser
viejo. Es decir, son nociones o cosas que se encuentran absolutamente
separadas.
La oposición puede resultar concreta o simbólica. Dos columnas son opuestas cuando están enfrentadas
entre sí, lo que revela una oposición física. En cambio, un hombre puede asegurar que es el opuesto de
otro cuando sus pensamientos y sus maneras de actuar suelen ser contrarias.
Dentro de las figuras literarias hay una que se conoce como antítesis
que sirve para expresar la oposición. Este concepto proviene, de hecho, de una
traducción de un término griego que podría traducirse como ‘oposición o
contraposición’.
Este recurso se
utiliza en poesía para comparar dos sintagmas y
dejar en evidencia sus opuestos significados; en este caso se dice que es una
antítesis propiamente dicha. O también puede utilizarse para hablar de
impresiones poco precisas pero claramente diferentes entre sí; en este caso es
una antítesis de contraste.
Este recurso fue muy utilizado en el siglo de oro Español
por poetas como Luis de Góngora, Lope de Vega y el propio Francisco de Quevedo,
quienes utilizaban la oposición para plasmar ironía y humor a sus creaciones.
Actualmente también se utiliza puesto que permite establecer una línea clara
para la idea de un poema: permite proponer lo que no es la idea al nombrar
aquello que se encuentra en el extremo opuesto.
Este mismo término también se utiliza en la filosofía con
sentido semejante. De este modo existe la negación que también recibe el nombre
de contra-afirmación y la tesis que es una proposición previa. Se utiliza la
antítesis para plasmar una incógnita y poder refutar una premisa. “Sin
embargo”, “por el contrario” y “pero” suelen ser frases que encabezan estas
oposiciones.
Por otra parte el concepto aparece cuando se habla del idealismo alemán,
sobre todo de la dialéctica de Georg Wilhelm Friedrich Hegel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario