lunes, 1 de julio de 2019

Simbiosis




“Existen tres tipos de relaciones simbióticas: mutualismo, en donde las dos partes reciben un beneficio, comensalismo, en donde uno de los individuos se beneficia y el otro no recibe ningún beneficio pero no es perjudicado, y finalmente el parasitismo, en este tipo de relación uno de los individuos se beneficia, y el otro individuo resulta perjudicado”

Encontramos un término muy controvertido en las relaciones humanas que bien merece ser analizado en detalle, nos referimos a la simbiosis que suele manifestarse tanto en lo individual en la relación de dos o más personas como también en lo colectivo, como pueden ser grupos humanos tales como: cooperativas, asociaciones laborales, gremiales, políticas, etc.

Notamos de que existe una clara tendencia a que la simbiosis incida en nuestras reacciones en una forma tal que crezcamos y  nos consolidemos actuando en función de una forma de pensar o reconocerse, como si se fuese solo una parte de un todo, donde pareciera de que falta algo que nos complemente para entonces sí, sentirnos parte de todo lo que hacemos.

Esta simbiosis tiende a despersonalizarnos, a desplazar el pensamiento individual subyugándolo al accionar del grupo, a las decisiones grupales o a los intereses de terceras personas que se han apropiado por simbiosis de nuestra personalidad.

Las características de la simbiosis no se agotan en este abordaje del tema, cuando hablamos de personas debemos tener muy en cuenta el derecho natural que posee para decidir por sí misma el grado e intensidad de las relaciones que cultive.

La simbiosis tiende a manifestarse en nuestras relaciones humanas, es por esta circunstancia que mencionamos este tema el cual es innegable que mantiene su vigencia en este intrincado mundo en el cual nos movemos y expresamos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario