Muy simplificadamente
para conocer el comportamiento futuro de un sistema determinista complejo
necesitas dos cosas:
Conocer el estado
actual del sistema.
Conocer como
dependen los estados futuros del sistema del actual y de las circunstancias
sobrevenidas (además de las propias circunstancias sobrevenidas).
En el caso de los
seres humanos el “estado actual del sistema” es algo enormemente complejo
porque los seres humanos tenemos una memoria muy amplia, muchas cosas en
nuestro pasado modelan qué pensamos ahora, qué expectativas tenemos ahora, etc.
Eso dificulta enormemente tener un conocimiento preciso de (1). El componente
(2) es posiblemente tan complejo o más que el anterior, y la cantidad de
estados mentales y micro-detalles en nuestro estado mental que hacen que decidamos
hacer una u otra cosa es tan enorme que no parece que podamos formular de
manera clara ecuaciones de evolución (como sí podemos hacer con sistemas
físicos, químicos o biológicos con un puñado de grados de libertad, mientras
que en el caso de los humanos el número de grados de libertad que caracterizan
las posibilidades es enorme).
Resumen: Los
seres humanos son impredictibles, en gran medida, porque no podemos conocer
exactamente su estado mental en cada momento (posiblemente ni ellos mismos, ya
que pueden tener motivaciones inconscientes). En segundo lugar nadie se ha
acercado siquiera a estudiar cómo es la dinámica de evolución psicológica de un
ser humano prototípico, porque de hecho es muy difícil empíricamente
caracterizar su estado, medirlo o conocerlo por completo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario