Abriendo Caminos

Una de las cosas que más tiempo nos ocupan (y que más nos preocupan) es nuestra vida laboral. Si no fuera imprescindible ganarse la vida de alguna manera, nuestra vida sería muy, muy diferente. Si no tuvieras que ir a trabajar, seguro que dedicarías tu tiempo a hacer muchas otras cosas, ¿verdad?

Es importante, sin embargo, tener bien claro por qué vamos a trabajar. ¿Por qué tenemos que “ganarnos la vida?” Pues por dos razones básicas: para comprar comida y para pagar algunas comodidades extra.

Es evidente que algo tenemos que hacer para cubrir estas necesidades, pero es curioso que creamos que trabajar es prácticamente la única manera de hacerlo. La verdad es que no lo es, hay muchas alternativas.

Hoy me gustaría compartir contigo algunas de estas alternativas. Algunas de ellas seguramente ya las conocerás y te parecerán normales. Otros quizás te parecerán un disparate enorme.

Pienses lo que pienses, te animo a mirártelas con la mente abierta. Es verdad que algunas de estas propuestas parecen ciencia ficción, y que ahora mismo es muy difícil ponerlas en práctica. Pero vale la pena empezar a tenerlas en cuenta. Dentro de un tiempo serán la norma y no la excepción.

La primera alternativa a vivir como un asalariado normal y corriente es bien conocida por todos: montar un negocio propio.

No es lo mismo, pero, conocer una alternativa que tenerla en cuenta. Desafortunadamente, la mayoría de la gente sabe que podría montar negocio, pero en el fondo de su corazón piensa que no lo hará nunca.

Es muy importante que cambiemos esta actitud. No es necesario que todos nos pongamos a montar negocios a la vez, pero sí es importante que nos sintamos capaces de hacerlo y que tengamos siempre presente que esta opción existe. Nuestra libertad queda muy reducida si no tenemos siempre en cuenta todas las opciones.

Otra alternativa, algo más atrevida, es aprender a vivir sin dinero. ¿Quién ha dicho que la única vía para conseguir lo que necesitamos para vivir es el dinero? Tal y como está montado todo actualmente, es difícil, claro, pero no imposible. En Alemania, por ejemplo, hay una mujer que lleva 16 años viviendo sin dinero. Y no vive en la calle.

Ganarse la vida no es sinónimo de ganar dinero, sino de ser capaz de lograr lo que necesitamos para vivir y algunas comodidades más. Y esto se puede hacer sin dinero. Y cuanta más gente lo haga, más fácil será cada vez.

Por último, la propuesta más aparentemente rocambolesca de todas: ¿qué te parece la idea de manipular la materia con tu mente para conseguir todo lo que necesitas en un abrir y cerrar de ojos? Parece ciencia ficción, pero no lo es. Es el futuro que nos espera.

Lo que sí que parece mentira es que sigamos pensando que la materia es algo sólido, macizo y prácticamente inmutable. Hace más de un siglo que la ciencia ha demostrado que no es así. ¡Más de un siglo!

Y lo que es más importante: reacciona a nuestra mente. El comportamiento de las partículas que forman la materia depende de la mente de la persona que las está observando. Es un hecho científicamente probado.

Es decir, podemos modificar la materia con la mente. Otra cosa es que no sabemos cómo hacerlo, pero se puede. Sólo nos falta aprender a hacerlo.

Así que una manera de aprender ganarse la vida puede ser aprender a modificar la materia para obtener alimentos, ropa o cualquier otra cosa. Si alguien te dice que quiere hacer esto, no pienses que está loco: está abriendo caminos.

Hay muchas maneras de ganarse la vida en este mundo, y está bien que sea así, porque cada persona es diferente. Cada persona tiene unas necesidades y un camino diferente.

Tú también tienes un camino diferente. Un camino único.