Uno de los cambios en los hábitos de lectura más evidentes
que se han dado con el uso de la tecnología es que obtener la
concentración es cada vez más difícil en determinados dispositivos.
Con el libro en papel, siempre se pueden silenciar otros
dispositivos y concentrarse únicamente en la hoja que se tiene delante. Sin
embargo, al leer en los teléfonos celulares es cada vez más difícil evitar las
distracciones.
Las constantes notificaciones que llegan, el cambio en la
iluminación de la pantalla y la simple tentación de acceder a alguna de las
tantas aplicaciones disponibles pueden causar que el foco de atención cambie, y por lo tanto
se originen problemas de concentración.
¿Qué es mejor? ¿Qué conviene elegir? Dependerá de las
necesidades de cada individuo, pero lo cierto es que la tecnología está cambiando la forma en que
leemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario